Está en la página 1de 2

*** Sanando Nuestro Niño Interior ***

Nuestro niño interior es nuestro subconsciente, aquella parte donde quedaron registradas todas
las situaciones de dolor, traumas, creencias y emociones como también las experiencias
agradables...

Una parte de nosotros quedó congelada en ese estado, en esas experiencias mientras fuimos
creciendo y aprendiendo a sobrevivir. Todos tenemos un niño herido, unos más que otros, que
fue lastimado en algún momento de su desarrollo. Estas heridas se manifiestan constantemente
en nuestra vida adulta.

Esa parte nuestra quedó olvidada y abandonada. Esa es la parte que aprendió a protegernos
reaccionando a las situaciones similares o a cualquier eventualidad que pueda causarnos
nuevamente daño. A nuestro niño lo ignoramos totalmente, desconociendo el origen de las
decisiones que fueron tomadas tempranamente y que hoy en día ya no nos resultan útiles y
más bien nos causan problemas. Olvidamos las causas que dieron origen a nuestros patrones
de conducta y de qué manera remediarlo.

Hoy en día necesitamos desaprender aquello que perpetuamos en conductas negativas una y
otra vez o aquello que nos hace atraer relaciones nocivas a nuestra vida para poder fluir
libremente.

¿Qué necesita nuestro niño interno para colaborar con nosotros y soltar esos patrones de
conducta, esos programas y reacciones? Aquello que andamos buscando en el mundo, es
justamente aquello que necesitamos de nosotros mismos, la aceptación, la seguridad, sentirnos
valiosos, la compañía, la confianza, pero sobre todo amor.

No podemos sentir amor verdadero hacia el mundo si no se lo damos primero a nuestro niño
interno. No podemos dar lo que no poseemos. Entonces sin saber andamos por la vida como
seres necesitados buscando ser rescatados o buscando relaciones donde rescatemos a otros
para sentirnos importantes y valiosos. Pero ocurre que no podemos obtener aquello que
necesitamos tampoco de quién no lo puede dar; porque somos nosotros quienes tenemos que
completarnos. No somos la media naranja buscando la otra mitad. Siendo seres completos
podemos disfrutar del amor sin condiciones, sin necesitar que otros nos den aquello que nos
falta.

Las relaciones no se basan en conseguir quien nos complete sino en quién nos acompañe. Al
relacionarnos nuevamente con nuestro niño interno, tenemos que ganarnos su confianza, darle
todo aquello que necesita para sanar sus heridas y dejar ir aquello que lo hirió. Así nos
liberamos del resentimiento, del temor, y de la tristeza, también de memorias de abandono o
abuso. Es allí cuando realizamos el verdadero perdón, dejando ir, soltando lo que nos amarraba
a un recuerdo.

Cuando en el ahora, sanamos nuestro niño interior, no solo estamos cambiando nuestro futuro,
también nuestro pasado se transforma.

Nuestro niño interior vuelve a ser un niño sano, alegre, curioso, seguro confiado y juguetón. Y
así experimentaremos la vida nuevamente.

*** Oración *** 

Divinidad, que hay en mi, amado Padre, Madre Dios, te pido por favor que borres las memorias
tóxicas, dolorosas que hay en mi, en mis células que son las que impiden que yo sea libre. Ya
que el dolor es tan grande por no poder verme como tu me ves, como tu me creaste, una alma
pura y libre.

Te pido con todo mi amor, que vuelva a sonreír, a ser espontáneo (a), que la frescura de mi
sonrisa vuelva para que de esta manera se manifieste en mis acciones. 

Se que al recuperarme a mi mismo (a) recupero la alegría por la vida. Se que me he


fragmentado en miles de versiones que no soy, para agradar a los demás, para sentirme
aceptado (a), valorado (a), reconocido (a), amado (a).

Te pido que abras mi corazón para que mi Yo adulto, sepa cuidar a mi Yo mas joven, a mi niño
(a) que necesita de ser escuchado, cuidado, amado, protegido, respetado, valorado.

Se que con la fuerza que TI ,Mi amada Divinidad que me provee será posible que por fin me
pueda integrar con dulzura y suavidad para siempre.

Se que todos tenemos un niño (a) que está buscando desesperadamente cubrir sus
necesidades para manifestar en este plano la felicidad y sobre todo la libertad.

Gracias por haber escuchado mi plegaría que se que con convicción que ha sido escuchada, y
todo esta dado y concedido.
Amen!!!!!! 

Lo Siento... Perdóname... Gracias... Te Amo

También podría gustarte