Está en la página 1de 1

Por Gianfranco Mejía Coronel

Un hombre que no logra mantener una relación estable con una mujer debido a
su timidez y falta de carácter se obsesiona con descifrar los secretos de las
mujeres. Afanoso por hallar la fórmula secreta para tener éxito en las
relaciones de pareja, consultará con amigos y con su madre, mientras devela
todas sus debilidades. Sin embargo, es un hombre inmaduro que se interesa
por el tema de manera superficial, guiado por los dibujos e imágenes que tiene
de las mujeres, las cuales espera que encuadren en sus explicaciones.
La idealización de la mujer y del hombre se sobrepone al entendimiento y
comprensión del ser humano como un conjunto de fuerzas y voluntades
interiores que lo mueven y no una sola como él cree. Carece de firmeza para
sostener su posición, y en el momento que no puede más, simplemente huye.
Un refugio es su psicólogo quien también atraviesa situaciones difíciles con las
mujeres y no será de mucha ayuda.
Las mujeres se presentan en la obra con marcada diferencia de personalidad.
Por ejemplo, se aprecia la efusividad de una novia joven o las histerias de una
mujer madura con malas experiencias en el amor. Él prefiere la soledad, la
calma, no la efervescencia de una relación pasional sino más de compañía
saludable.
Teatralmente esta comedia es conducida por la narración a modo de
confesiones que invitan a las acciones con escenas que pasan del naturalismo
a técnicas circenses de malabares por un clown, además de la música y el
canto en espacios reales, fantásticos y oníricos. Acompañan la historia
pequeñas dosis de realidad nacional que sitúan en un contexto actual la obra.

La obra escrita por Yolanda Dorado fue presentada por el Colectivo Artístico “El


Otro Telón”, bajo la dirección de Vicente de Paul Ruiz Atoche, en el auditorio
del Colegio Nacional San José el 19 y 20 de octubre. 

También podría gustarte