Franklin Daniel Latorre Rivera. Cristian David Martínez Román.

Lilia Alejandra Garzón Coral. Andres Felipe Patiño Enríquez.

ENCÍCLICA DE LAUDATO

La carta de Laudato nos habla de muchas formas para comprender que tanto personas,
como animales, objeto son creaciones perfectas, así como los ecosistemas y todo lo que
lleva con ellas, permite descubrir a través de cada cosa alguna enseñanza que Dios nos
quiere transmitir, porque para el creyente contemplar lo creado es también escuchar un
mensaje, oír una voz que internamente a cada persona puede que la llene paradójica la
cual nos sirve como persona para poder cuidar de las creaciones que Dios ha hecho.
Que debemos también con nuestros valores Franciscanos a la ayuda del prójimo a la al
medio ambiente con los compañeros de la academia, hacer de manera conjunta mejoras
tanto personales como colectivas en nuestro interior como en nuestro exterior cuando en
la carta nos dice que “Desde los panoramas más amplios a la forma de vida más ínfima, la
naturaleza es un continuo manantial de maravilla y de temor. Ella es, además, una
continua revelación de lo divino” Lo entiendo como que la naturaleza es una creación
divina que no hay nada mejor que las creaciones hechas por nuestro Dios, que debemos
acatar y promover nuevas normas para que nuestra naturaleza todos nuestros ámbitos se
pueda vivir y cuidar esto de la mejor manera.
La encíclica coloca el tema ecológico en una perspectiva humanista. El Papa Francisco no
solo nos da un llamado de alerta frente al cambio climático actual que está dejando
consecuencias devastadoras, destacando entonces la crisis ecológica y haciendo un
llamado para lograr una conversión ecológica así como a un cambio radical en el
comportamiento de la humanidad con un estilo de vida más solidario y menos
consumista.
También nos hace un llamado a reducir al máximo la utilización de recursos no
renovables, a reutilizar y reciclar.
El papa asegura que las empresas se desesperan por la ganancia monetaria y los políticos
por aumentar su poder y no por preservar el medio ambiente, que las consecuencias y los
efectos ambientales más graves los está sufriendo la gente más pobre.
La Laudato si’ propone que realicemos un examen de conciencia siendo este considerado
como un instrumento religioso utilizado para orientar y dirigir nuestra vida a una relación
más cercana a Dios, este examen de conciencia del que nos habla el papa Francisco
expresa que debe contener una nueva dimensión que considere y se revalore a todas la
creaturas y a la naturaleza.
Creemos que la solución para esta crisis ecológica requiere educación en cuanto a la
responsabilidad ambiental tanto en las escuelas como en los hogares y en los medios de
comunicación, el papa ánima a que nos convirtamos en unos protectores de la obra de
Dios, es decir, que cuidemos la naturaleza porque sin ella no podríamos vivir.