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Pablo
Presentado A:
Ing. Leonardo Cely Illera
Facultad De Ingeniería
Electiva Cerámicos II
2019
1. SECADEROS ARTIFICIALES
El secado de un cuerpo arcilloso crudo es el mecanismo por el cual se elimina el
agua que lo humedece. El secado es necesario para que la cocción del cuerpo cerámico se
realice adecuadamente. El mecanismo de secado es muy similar para los distintos cuerpos
arcillosos. No obstante, a una determinada velocidad de secado, los efectos que se generan
sobre cada cuerpo, pueden ser muy diferentes entre cada uno de ellos, dependiendo de su
naturaleza química y cristalográfica, de su granulometría y de su historia previa antes de
llegar al secadero.
Los secaderos son imprescindibles para trabajos cerámicos ya que, si introducimos
las piezas en los hornos directamente sin un previo secado, estaremos creando un ambiente
muy húmedo en el interior del horno con su consecuente deterioro.
El secado utilizado en la industria y derivados de arcilla puede ser natural o
artificial, en el secado natural se dejan los productos cerámicos en grandes áreas, bajo
cubierta o al aire libre. Cuando se introduce a un secadero artificial, en el cual circula aire
caliente, se establece un flujo de calor hasta el interior de este, obligando a salir la humedad
del sólido. El aire seco al estar en contacto con el material húmedo transfiere calor a su
superficie, evaporando su humedad libre. Si se mantiene constante la temperatura y la
velocidad del aire, el agua se elimina a velocidad constante, hasta alcanzar el sólido su
humedad critica, momento en el cual aparecen las primeras manchas secas. Si el secado es
brusco se establece un anormal gradiente de eliminación de humedad, el cual va
acompañado de agrietamiento, deformaciones y contracciones del material.
La instalación de secaderos artificiales supone gastos supletorios elevados, otra
razón económica desfavorable, estriba en el hecho en que se necesitan igual número de
calorías para secarlo, como para cocerlo. Sin embargo, con el fin de incrementar la
producción y disminuir las pérdidas de rotura, un cálculo adecuado de secado puede llegar
a garantizar consumos de carbón bastantes reducidos, en función de los calores recuperados
en la evacuación de los humos del horno.
Este tipo de solución puede involucrar el secado estático (en cámaras), el secado
semi-continuo o el secado continuo, según el tipo de equipamiento de secado empleado.
Los tres procesos son empleados en las industrias del ladrillo.
El secador está constituido por un ambiente cerrado con capacidad variable, que
puede ser ajustado según la carga a procesar. Funciona con temperaturas que pueden llegar
a 200°C, pero que, en general, están en el rango usual de 60 a 90°C, utilizando el aire
calentado por una fuente propia de generación de calor (cámara de combustión) o calor
proveniente del enfriamiento de los hornos.
Aunque tengan características técnicas y operativas diversas, presentan buenos
valores de eficiencia operativa y energética (térmica y eléctrica). Pueden citarse como
criterios de elección de los tipos referidos: la velocidad necesaria para los ventiladores, la
cantidad de ventiladores, la demanda de aire caliente del proceso, el tipo de arcilla
procesada, tipos de producto (densidad y geometría), escala de producción, posibilidades de
almacenamiento de producto húmedo y producto seco, tipo de ventiladores (fijos o
móviles), velocidad de secado (rápida o lenta).
En los secadores estáticos se dan variaciones de temperatura y humedad sobre el
material detenido. En los continuos, tales variaciones se estabilizan en el espacio e influyen
en el material durante su movimiento, sin embargo, son equipamientos más caros y
sofisticados. Otra característica de los secadores está asociada con el tipo de circuito que
los alimenta: circuito abierto –el aire se renueva continuamente por un tiro natural
(chimenea) o forzado (extractores); circuito cerrado –el aire pasa más veces sobre el
material con tiro forzado.
La elección entre los tipos de secadores depende del grado de productividad de la
industria. Frente a una carga importante de alimentación de piezas, se recurre a los
secadores continuos, en vez de los intermitentes, considerándose una reducción notable en
los tiempos muertos y la adopción de ciclos altamente mecanizados. Los secadores
continuos rápidos son de reciente introducción en el mercado, creados por las exigencias de
las industrias de mono-quema en la cerámica blanca. El ciclo de secado es reducido, menor
de una hora. En estos tipos de secadores, las piezas son tratadas de forma individual,
creándose una situación de equilibrio y homogeneidad en el proceso. El secado rápido tiene
los mismos conceptos de los secadores túnel con una mayor rapidez del proceso que
permite un tratamiento en condiciones óptimas para cada pieza procesada.
Secado forzado
Secadores combinados: En ellos, el secado se realiza por dos o más de las formas de
transferencia de calor antes citadas.
Secadores de vacío: Reducen la temperatura de evaporación del agua mediante la
operación a presión reducida (vacío).
Los secadores industriales son los encargados de eliminar o reducir la humedad de
un producto, por medio del calor. En el secadero o cámara de secado, se realiza el proceso
de secado, el cual obtiene el aire caliente por medio de los ventiladores.
Secadores estáticos
La longitud del túnel debe adecuarse al diagrama de secado específico para cada
tipo de producto. Las mejores condiciones se darán si en cada punto del túnel la
temperatura y el estado higrométrico correspondiesen a aquel representado en el diagrama
previsto para el secado; sin embargo, las frecuentes maniobras de las puertas para el ingreso
y salida de vagonetas hace que los valores de las características fisicas de la atmósfera
interna del secador sufran cambios que pueden desestabilizar el proceso de secado.
Además de eso, el sistema de contracorriente provoca la salida del aire casi saturado
en el punto de ingreso de la carga. Las condensaciones del vapor de agua son inevitables,
causadas por la condición higrométrica del aire debido a la humedad absorbida del
producto que entra. La entrada del secador debe tener una humedad del orden de 85%. Este
ambiente saturado acelera el proceso de la retirada de agua del producto. Para que se haga
un secado rápido y eficiente, es necesario bajar la viscosidad del agua contenida en el
producto. Cuanto más eficiente sea ésta retirada, mayor será la velocidad de secado.
El ciclo de secado o tiempo de efectiva permanencia del producto en el interior del
secador, desde el comienzo de la evaporación hasta el secado final, debe considerar un
margen de seguridad en términos de previsión de producción que considere el descarte de
piezas (roturas, deformaciones, falta de uniformidad etc.), lo que dependerá de la materia
prima y sus condiciones fisico-químicas, de la geometría de la pieza (espesor de tabiques y
cantidad de perforaciones), soportes y alejamiento de las piezas, longitud del recorrido del
aire de ventilación, eficacia de las máquinas de ventilación etc. Todas esas condiciones
también interferirán en la velocidad de secado.
Así, para productos leves y materia prima delgada, puede ocurrir un ciclo de secado
de 10 a 20 horas, mientras que, en un mismo secador, para procesar productos espesos de
materia prima gruesa puede llevar de 40 a 50 horas. Con estos datos se define la capacidad
del secador, considerando que el número de carritos contenidos en el mismo es igual al
número de carritos producidos por hora, multiplicado por el número de horas del ciclo. El
secador continuo presupone la existencia en la empresa de un depósito (productos secos)
cuja capacidad depende del número máximo de carritos en convoy (productos verdes). La
suma de los carritos contenidos dentro del secador y en el depósito (verdes + secos)
constituye un parámetro importante en la evaluación del costo de los carritos y de la
superficie necesaria de producción. Hay que resaltar que los productos secos deben
mantenerse en un lugar distinto al de los productos verdes para evitar la reabsorción de
humedad.
Consumo de energía térmica en secadores continuos
Los equipos continuos de secado suelen ser de menor demanda térmica porque:
La descarga de aire húmedo ocurre siempre a la mínima temperatura posible
y a la máxima humedad relativa posible;
Considerando que las condiciones higrométricas internas permanecen fijas
en el tiempo y en el espacio, los perfiles de temperatura en el interior de las
paredes del secador continuo tampoco cambian, salvo en eventuales
operaciones de inicio o apagado del equipo.
A continuación, un ejemplo de balance térmico de un secador continuo en tres
condiciones diferentes de operación relativas a la variación de las condiciones climáticas
del aire ambiente (Condición A: 5°C con humedad relativa (HR) de 100%; Condición B:
10°C y HR de 80% y Condición C: 20°C con HR de 60%). Características operativas del
secador continuo:
Relación superficie externa / agua evaporada por hora: 1.650 m²/2.800 kg/h
= 0,59 m²/kg/h;
Relación peso de soporte / peso seco: 0,8.
Humedad evaporada (kg) sobre lo seco (kg): 0,225 kg/kg;
Descarga del secador: 90% de humedad
Consumo de energía eléctrica en secadores continuos
El consumo de energía eléctrica en secadores continuos es la suma de los consumos
de los motores eléctricos que funcionan en el equipo, accionando los sistemas de
recuperación del horno y alimentación del secador, la recirculación interna, la extracción de
aire húmedo y el movimiento de los carritos y regulaciones diversas. La mayor
participación en el consumo eléctrico se debe a las máquinas de recirculación interna y a las
de alimentación, como puede verse en los datos a continuación:
Fuente:
Facincani (2002).
Con los
datos de la tabla
anterior, se
observa que en
promedio
el 75% de la
demanda eléctrica
en un secador
continuo se debe a
la
Los secadores rápidos aún no están muy difundidos en el Brasil, pero presentan
buenas perspectivas de aumentar su participación en el mercado por la posibilidad de
procesar de manera eficaz tanto productos planos como tejas y ladrillos con perforación
vertical. Además de esto, presentan una simplicidad técnica razonable, facilidad de
operación con velocidades de aire regulables en función del producto y buena confiabilidad,
además de un bajo costo de operación (automatismo simple con solo un motor de
accionamiento). mantenimiento (ausencia de motores eléctricos en la parte interna) y
capacidades de producción usualmente en el rango de 250 a 1000t/día.
Tipos de secadores rápidos:
3.4.1 - Secadores a rodillos
Están formados por una única galería de un nivel, en la cual los productos avanzan
por la rotación de sucesivos rodillos distribuidos en grupos de motorización separada,
rodando de forma continua desde la entrada hasta la salida de la galería. El producto se
deposita en grupos de piezas sobre los rodillos en la entrada y son retomados sobre ella a la
salida. La longitud efectiva de secado es por lo general de 100 metros y el ancho varía con
la capacidad productiva. Las capacidades de producción son del orden de 7 la 10t/h para un
ancho del orden de 4 metros. Los anchos máximos están limitados por el volumen de
ingreso y por la flexión de los rodillos, debido a las distancias de apoyo.
Los ciclos de secado son del orden de 1 hora y la temperatura en el ingreso es
superior a 160°C; la de descarga medida antes de la mezcla con el aire aspirado al lado de
la puerta de ingreso alcanza de 60 a 70°C. Diferencias psicrométricas así de elevadas se
deben a una superficie restringida para el intercambio de calor entre el aire y el producto.
Debido a las altas velocidades de flujo (cerca de 10 mm/s), las pérdidas de carga en el
secador son del orden de 100 a 120 mmCA. Las cantidades de aire empleadas varían, en
general, entre 27 y 33 kg/kg de agua evaporada. Para la aspiración se identifican cantidades
mayores (20 a 35%) debidas al aire parásito o al aire procedente de la abertura para la
salida del producto, mantenida en depresión.
3.4.2 - Secadores de balanza
Son construidos con varias galerías paralelas y superpuestas, por las cuales las
balanzas al final de cada galería giran alrededor de las ruedas dentadas de reenvío para
entrar en la galería siguiente. El aire hace un recorrido inverso. Para no interferir entre ellas
durante la rotación, las balanzas deben estar distanciadas a intervalos. Los ciclos con
secadores de balanzas pueden variar de 2,5 a 5,0 horas. Las temperaturas a la entrada
permanecen entre 100 y 120°C y a la salida entre 35 y 40°C, con velocidades del aire en el
rango usual de 5 a 8 m/s.
Los ciclos más largos permiten un mejor desempeño térmico por incorporar la
pérdida de calor con menos impacto en la estructura. Las cantidades de aire empleadas
varían, en general, entre 25 y 28 kg de aire/kg de agua evaporada. Las pérdidas de carga
varían entre 0,4 y 0,5 mm de columna de agua (mmCA) por balanza, con velocidad de 5 a 6
m/s y hasta 0,9 a 1,0 mmCA por balanza para velocidades entre 8 y 9 m/s. Las cantidades
de aire en la descarga, con relación a aquellas introducidas, son mayores en un 15 a 20%.
3.4.3 - Secador tipo Talisca o estera
Originario de Europa en los años 50, llegó a Brasil hace apenas pocos años. El
primer secador de este tipo en el país fue construido en Flores (CE), en la región de Russas.
Algunos ladrilleros lo eligieron para la producción de ladrillos huecos, tejas extrudidas,
piezas de pandereta y otros prensados, pudiendo operar con fuente de calor propia (cámara
de combustión) o por recuperación de calor del horno. Funciona como un túnel, donde se
colocan las piezas que serán secadas en un plano único y transportadas a través de esteras
en contracorriente en relación al flujo de aire caliente insuflado a partir de la salida del
secador.
Este tipo de secador cuenta en su parte superior (techo) con tubos de distribución
del calor por toda el área de secado donde, a través de registros, se hacen las regulaciones
de volumen de aire caliente y, por lo tanto, de la cantidad de calor a lo largo de la longitud
del equipamiento, buscando cumplir el perfil de secado exigido, ajuste que puede refinarse
con la regulación de los alerones externos que ayudan a dirigir mejor el calor hacia las
piezas. Presenta un secado rápido, elimina el uso de vagonetas y del automatismo de carga
y descarga, reduce la mano de obra, presentando un bajo mantenimiento y bajo consumo de
energía térmica, operando con temperaturas de trabajo en el extractor de 160 a 220°C y
presiones internas de 10 a 17 mmCA.
En cuanto a sus dimensiones principales, presenta longitudes de hasta 120 m,
anchos de 4 a 6 m y altura de 0,4 m, entre la estera y el techo. La capacidad de producción
puede variar de 10 a 20 t/h dependiendo de la calidad de la arcilla, humedad de entrada (1 a
4 %), humedad de salida (20 a 24%) y de la longitud del secador, con ciclos de 45 minutos
(tejas extrudidas leves) a 3 horas (ladrillos pandereta), según datos de algunos fabricantes
nacionales. Las potencias eléctricas totales involucradas en los secadores tipo estera suelen
variar entre 110 y 140 CV, de acuerdo a la escala de producción, al tipo de producto y de
arcilla. Presenta como inconveniente el espacio requerido en la planta de producción y
demanda de un estudio riguroso de la arcilla empleada pues se trata de un ciclo rápido de
secado, exigiendo algunos importantes ensayos de laboratorio, como la Curva de Bigot.
3.4.4. Otros tipos de secadores rápidos
El secador rápido a carritos está bajo el mismo principio del secador de balanzas,
pero aquí los carritos se deslizan sobre rieles y siguen su recorrido en galerías paralelas
situadas en el mismo plano. Secadores con galerías a dos carritos unidos llegan a una
producción de 40 a 45 t/h de producto seco. Existe también el secador rápido con una
galería y varios planos, donde el transporte del producto se da en marcos con cuatro ruedas,
que ruedan sobre guías laterales y son cargados y descargados por medio de un ascensor de
cadena.
Consumo de energía térmica en secadores rápidos
Los consumos térmicos más elevados entre los secadores rápidos ocurren en los
secadores a rodillos debido a la elevada pérdida en la chimenea y a la acumulación térmica
en el material, aun considerando que no haya pérdida en los soportes. Los consumos
específicos de calor quedan alrededor de 1 200 kcal/kg de agua evaporada, pero hay casos
frecuentes que llegan a 1 600 kcal/kg. Una adecuada recirculación de aire húmedo,
observando la posibilidad de mayores condensaciones sobre el producto húmedo, podría
reducir el consumo.
Por otro lado, el secador a rodillos permite una alimentación directa a gas. Los
menores consumos se obtienen con secadores que operan en ciclos de 3 a 4 horas, con
integración de gases muy calientes, siendo bastante frecuentes consumos específicos entre
900 y 970 kcal/kg de agua evaporada. En los dos casos referidos, las pérdidas en las
paredes son bajas, considerando que la extensión superficial es pequeña en relación al agua
evaporada por hora.
En los secadores rápidos a rodillos los ciclos son de 50 minutos y una hora y, en ese
caso, los tiempos de parada (10 a 20 minutos) pueden ser de importancia por su influencia
en el desempeño y consumo térmico. Con el empleo de secadores rápidos se hace necesario
prever la operación de la producción en tres turnos durante el día y de parar el horno o
reducir el ritmo al mínimo durante los fines de semana.
Consumo de energía eléctrica en secadores rápidos
En ese tipo de secador, las cantidades necesarias de aire para ventilación son
menores que en los equipos tradicionales. Los consumos de energía eléctrica pueden ser
divididos de la siguiente forma:
F u n c ió n d e l s is te m a Rango de consumo específico de electricidad (kWh/kg de agua)
0,008 a 0,013
Circulación interna
0,007 a 0,009
Alimentación
0,004 a 0,006
Recuperación
0,004 a 0,005
Extracción
0,002 a 0,003
Diversos
0,025 a 0,036
TOTAL
El secador está constituido por un ambiente cerrado con capacidad variable, que
puede ser ajustado según la carga a procesar. Funciona con temperaturas que pueden llegar
a 200°C, pero que, en general, están en el rango usual de 60 a 90°C, utilizando el aire
calentado por una fuente propia de generación de calor (cámara de combustión) o calor
proveniente del enfriamiento de los hornos.
Aunque tengan características técnicas y operativas diversas, presentan buenos
valores de eficiencia operativa y energética (térmica y eléctrica). Pueden citarse como
criterios de elección de los pos referidos: la velocidad necesaria para los ventiladores, la
candad de ventiladores, la demanda de aire caliente del proceso, el po de arcilla procesada,
pos de producto (densidad y geometría), escala de producción, posibilidades de
almacenamiento de producto húmedo y producto seco, tipo de ventiladores (fijos o
móviles), velocidad de secado (rápida o lenta).
CONSEJOS PARA UN SECADO EFICIENTE:
Mantener las puertas siempre cerradas, evitando disturbios en la circulación del aire,
alterando la curva de secado
Mantener la humedad relava del aire en la entrada del secador (zona húmeda) en
85% de humedad relava y temperatura alrededor de 45°C
Mantener un orden para el retiro de las vagonetas, bajo pena de interferir en la curva
de secado, pudiendo causar grietas o deficiencia de secado
Controlar el retiro de aire húmedo por el extractor o chimenea, recordando que la
humedad inicial es responsable por la calidad y productividad del secado;
A mayor volumen de aire suministrado por los ventiladores, mayor productividad de
secado;
A falta de humedad inicial, usar aspersores o tambores con agua en la entrada del
secador;
Presencia de goteras de agua en la entrada del secador en períodos calientes
(verano) es una señal de entrada de aire frío en la zona húmeda;
Mantener la altura de la vagoneta cercana a la altura interna del secador, evitando
espacios entre la vagoneta y el techo. Vagonetas muy bajas en relación a la altura
del secador provocan un bolsón de aire caliente en el techo.
PARAMETROS DE INGRESO DE MATERIAL
El secado al igual que el horneo es el paso más importante de la producción de
cerámica, debido a que la pieza y su acabado final depende de la cantidad de agua que
pierda antes de entrar al horno, ya que si la pieza aún posee gran cantidad de agua esta
pieza estallará dentro del horno debido a las altas temperaturas que se manejan en ese
proceso. El objetivo principal del secado es la reducción del contenido de agua de las piezas
antes del horneo, es una operación compleja en la que influyen muchos factores:
Naturaleza de la arcilla
Preparación y homogenización de la pasta.
Manejo de la pasta en el proceso de moldeo.
Diseño y estructura de la pieza, uniformidad o des
Uniformidad de secado, etc.
En la industria cerámica moderna es preciso optimizar el proceso de secado en
cuanto a la velocidad, eficiencia térmica y desgaste mínimo. Excepto en los procesos de
secado lento y suave, es necesario mantener un control exhaustivo de las velocidades de
calentamiento, la circulación de aire, la temperatura y la humedad. El calor para el aire de
secado suele proceder de quemadores de gas y del aire caliente recuperado de la zona de
refrigeración de los hornos. El calor del aire de secado también puede suministrarse
mediante cogeneración u otro combustible, como el carbón, biomasa, biogás o coque de
petróleo.
TEMPERATURAS DE TRABAJO
Para el secado artificial los productos se secan en hornos especiales a temperaturas de 85 a
96ºC, con aire que tenga gran humedad que evita el secado excesivo en la superficie. La
humedad del aire de secado y la temperatura para ese fin se adecuan de tal modo que la
rapidez de evaporación del agua en la superficie sea casi igual a la difusión de agua desde
la parte interior a la superficie del cuerpo; lo que permite el secado relativamente rápido,
sin deterioro, agrietamiento y combaduras del material.
Luego, conociendo la masa de producto que se va a secar, por partida (mp), el peso
específico global del producto (pp) y el espesor de la capa de producto (H), se calcula el
área de la cámara de secado (A) con la ecuación:
El flujo de aire de secado (Q) se puede calcular en función del flujo de aire
(Qa), dado en m³/s . m, y del área de la cámara de secado:
La estructura para soportar las planchas de metal perforadas y la masa del producto
pueden ser de distintos materiales, como albañilería y madera, fierros de construcción y
perfiles metálicos. La cámara de secado deberá contar con aberturas laterales para la
descarga manual o mecánica del producto y un sistema de boquilla para facilitar el
ensacado, en caso necesario.
Partes:
A.Cámara de secado
B. Cámara de información de la temperatura del aire caliente de secado
C. Quemador intercambiados de calor
E. Chimenea para el escape de gases de combustión
F. Entrada de aire
G. Base de sustentación del piso perforado
H. Piso perforado (malla de alambre galvanizado 1,5 mmx15 m.)
I. Puerta de entraba de la cámara de combustión
En este modelo, el quemador-intercambiador de calor se construye con tambores de
0.87 m. de altura por 0,58 m. de diámetro (tambores de 200 litros), sin fondo ni tapa y
unidos entre sí.