Una vez que conocemos las sustancias presentes en los lugares de trabajo, su peligrosidad y sus riesgos
es el momento de pensar las propuestas que vamos a plantear a la empresa.
El empresario tiene la obligación de EVITAR los riesgos para la salud y seguridad de los trabajadores ocasionados por las sustancias químicas presentes en la empresa. En el caso de que no se puedan evitar por el tipo de actividad que se realiza, el empresario deberá adoptar las medidas necesarias para reducirlos, controlarlos o proteger a los trabajadores. RD 374/2001, art. 4 y 5. Las medidas a adoptar deben seguir el siguiente orden de prioridad: 1. ELIMINAR los riesgos: mediante cambios en el proceso productivo que eviten la presencia de la sustancia peligrosa o mediante la sustitución de la sustancia peligrosa por otra que no lo sea, o lo sea en menor medida. 2. REDUCIR o CONTROLAR los riesgos: sólo se contemplarán estas medidas cuando no sea posible eliminar los riesgos por el tipo de actividad que se realiza o mientras se adoptan las medidas necesarias para eliminar los riesgos. 3. PROTEGER AL TRABAJADOR: Cuando no sean posibles las opciones anteriores y solo temporalmente, se proporcionarán al trabajador equipos de protección individual EPIs. Además, el empresario debe garantizar la: Evaluación técnica de los riesgos no eliminados y de las medidas de control Formación e información de los trabajadores Vigilancia de la salud de los trabajadores Vigilancia del medio ambiente Elaboración de planes de actuación ante accidentes, derrames, etc.