El tema de las cimentaciones es uno de los más estudiados dentro de la ingeniería
geotécnica y toma mucha importancia cuando se trata de suelos de poca resistencia, ya que se tienen que hacer consideraciones importantes para el diseño y la construcción de la propia cimentación. El principal parámetro para la resistencia de un terreno de cimentación es la capacidad de carga del mismo y las deformaciones que este tendrá durante la construcción y después de esta. Sin embrago, cuando se habla de una cimentación sobre roca, muchas veces el tema llega a perder importancia al saber que la roca es un material sumamente competente y prácticamente indeformable, lo que en ocasiones provoca que los diseños omitan detalles y consideraciones importantes que influyen en las características constructivas de algún proyecto, o peor aún, se llegan a usar medios de diseño poco adecuados debido a la falta de información o el poco interés en conocer las características resistentes de un macizo rocoso. Además, se carece de una metodología de diseño y construcción apropiada para estos casos. A pesar de que el tema ha sido muy poco estudiado en comparación con el avance de la mecánica de suelos, existen métodos que evalúan la capacidad de carga de un macizo rocoso, pero muchos de ellos empíricos o carecen de un análisis propio para su formulación, tanto para cimentaciones superficiales como para profundas, por lo que es importante la investigación de estos y una comparación de los mismos para evaluar el más apropiado actualmente. En este trabajo se hace esta comparación tomando también en cuenta los métodos de diseño utilizados actualmente en México por las diferentes instituciones públicas o privadas con el fin de observar qué tan adecuado están siendo las normas o reglamentos en estos casos. Se plantean dos ejemplos prácticos para la evaluación de las diferencias y disparidades en los métodos existentes para finalmente emitir recomendaciones generales para el diseño y construcción de una cimentación en roca Las cimentaciones en roca no suelen presentar muchos problemas derivados de la capacidad portante puesto que, en general, suelen soportar elevadas cargas con deformaciones mínimas o nulas, pero no todos los tipos de rocas presentan características igualmente favorables. En algunos casos pueden presentarse problemas asociados a la capacidad portante debido a debilidades de las rocas o lo que es más común, se requieran unas tensiones admisibles muy elevadas debido a estructuras muy pesadas. Requieren un estudio especial todas aquellas rocas con problemas de karstificación o presencia de cavidades, rocas solubles (evaporitas), rocas que pueden experimentar cambios de volumen, zonas falladas o rocas volcánicas entre otras. Igualmente, una cimentación en roca puede suponer problemas de ejecución severos ya que al ser terrenos muy resistentes requieren el uso de ripper o voladuras para excavar los cimientos. Como hemos comentado anteriormente, casi todas las rocas suelen admitir tensiones admisibles superiores a los 3 kp/cm2 pero para grandes cargas como grandes puentes, o edificios altos hay que estudiar con detenimiento la resistencia y deformabilidad de la mayor parte de las rocas. Primeramente, deber realizarse un estudio detallado de la roca matriz, macizo rocoso y la red de diaclasado. Es muy importante caracterizar geotécnicamente bien el área rocosa sobre la que se cimentará para poder prevér irregularidades o anomalías. Para ello, debería realizarse cartografías geológicas, estudios fotogeológicos, levantamientos geomecánicos, e incluso sondeos y ensayos in situ como presiómetros o cargas en placa. También es muy importante su ensayo en laboratorio mediante ensayos de compresiones simples, trixiales, brasileños o, por ejemplo, láminas delgadas. Para valorar la capacidad de carga admisible de las rocas se deben tener en cuenta algunos parámetros significativos como las características geológicas, el tipo y calidad de roca, medida con RQD. En la capacidad portante de las rocas se utilizan normalmente factores de seguridad muy altos y legados de todas maneras al valor del coeficiente RQD: por LoadCap 7 ejemplo, para una roca con RQD igual al máximo de 0.75 el factor de seguridad varía entre 6 y 10. Para determinar la capacidad de carga de una roca se pueden usar las fórmulas de Terzaghi, usando ángulo de rozamiento y cohesión de la roca, o las propuestas por Stagg y Zienkiewicz (1968) donde los coeficientes de la fórmula de la capacidad portante valen: Con tales coeficientes se usan los factores de forma utilizados en la fórmula de Terzaghi. La capacidad de carga última calculada es de todas formas función del coeficiente RQD según la siguiente expresión:
Si el sondeo en roca no suministra piezas intactas (RQD tiende a 0), la roca se
trata como un terreno, estimando mejor los parámetros c y
El hundimiento de las cimentaciones puede producirse por:
Rotura a flexión de la costra al asentar los estratos blandos subyacentes (caso g). Rotura por punzonamiento de la costra (caso h).
El segundo caso es el más frecuente y peligroso, y suele ocurrir al apoyar sobre
costras delgadas que se toman como un substrato firme de gran espesor al no haberse realizado un reconocimiento geotécnico apropiado. Conclusiones. La mecánica de rocas como se dijo, es una disciplina joven y su estudio es aún muy limitativo y basado en una gran cantidad de temas, en consideraciones empíricas que hacen que haya muchos niveles de incertidumbre a la hora de realizar un diseño para una obra de ingeniería. Las cimentaciones, en particular, carecen de interés en muchas ocasiones como consecuencia de que la roca es un material muy competente cuando se encuentra en estado más o menos sano y eso hace que los diseños sean simplistas y sin tomar en cuenta muchas consideraciones importantes y de gran relevancia.