Está en la página 1de 5

DIPLOMADO EN INDICADORES DE GESTIÓN Y BALANCED SCORECARD 

LA NATURALEZA DE LA GESTIÓN ESTRATÉGICA 


NIVELES DE LA ESTRATEGIA 

 
 

Índice 2

Niveles de estrategia 3
a) Estrategia corporativa o de empresa 3
b) Estrategia competitiva o de negocio 3
c) Estrategias funcionales 4

Referencia Bibliográfica 5

  

 

Niveles de estrategia
Habitualmente, se suelen distinguir ​tres niveles de definición de estrategias​,
correspondientes a distintos niveles jerárquicos en la organización, a cada uno de los cuales se
le asignan diferentes competencias respecto de la toma de decisiones. Estos tres niveles son:
corporativo o de empresa, competitivo o de negocio y funcional.

a) Estrategia corporativa o de empresa


La estrategia corporativa trata de identificar las ​actividades o negocios a los que la empresa
se quiere dedicar​. Implica, por tanto, adoptar una perspectiva de conjunto, en la que son
relevantes la orientación futura –definición de la visión, la misión, los objetivos estratégicos y
los valores–, la búsqueda de oportunidades de creación de valor o la forma en la que la
empresa quiere crecer o desarrollarse en el futuro. Decisiones tales como entrar en nuevos
negocios, comprar una empresa, o apostar por la internacionalización son algunos ejemplos.
La estrategia corporativa tiene una singularidad especial en una empresa diversificada,
constituyendo el plan general de actuación directiva ya que está especialmente referida a las
decisiones para establecer posiciones en industrias diferentes y a las acciones que usa para
dirigir sus negocios diversificados, tales como asignación de recursos o evaluación de los
resultados de los distintos negocios. De especial relevancia es la ​búsqueda de sinergias​, es
decir, la creación de valor por la integración, complementariedad e interrelaciones de las
distintas actividades de la cartera de negocios más allá de los resultados individuales de cada
negocio. Decimos que existen sinergias cuando el todo vale más que la suma de las partes.

b) Estrategia competitiva o de negocio


En este segundo nivel se trata de determinar ​cómo competir mejor en cada uno de los
negocios en los que la empresa actúa. La cuestión principal, por tanto, es cómo construir una
posición competitiva mejor, para lo cual hay que desarrollar los recursos y capacidades
organizativas que la sustenten. La creación y el mantenimiento de una ventaja competitiva y la
creación, mejora y explotación de recursos y capacidades valiosos son los elementos clave en
este nivel. Decisiones tales como mejorar la calidad de nuestros productos, establecer un plan
de reducción de costes o invertir en tecnología para conseguir lanzar al mercado productos
más innovadores que los de la competencia son ejemplos de este nivel.
En una empresa diversificada aparece la necesidad de definir unidades de análisis específicas
distintas de la empresa en su conjunto y de los tradicionales subsistemas funcionales. Éstas
son las llamadas ​«unidades estratégicas de negocio» o «unidades de negocio» (​UEN​) que
representan un conjunto de actividades homogéneo desde el punto de vista estratégico para el
cual es posible formular una estrategia común y a su vez diferente de la estrategia adecuada
para otras actividades y/o unidades estratégicas (Menguzzato y Renau, 1991). Dado que cada
UEN se desarrolla en un entorno competitivo específico, tiene competidores distintos, depende

  

 

de factores de éxito propios y requiere competencias distintas, requerirá una estrategia


competitiva distinta.

c) Estrategias funcionales
En el tercer nivel está la estrategia funcional que se centra en ​cómo utilizar y aplicar los
recursos y habilidades dentro de cada área funcional de cada unidad de negocio, con el fin
de maximizar la productividad de dichos recursos. Algunas áreas funcionales típicas pueden
ser: producción, comercialización, financiación, recursos humanos y tecnología. En este nivel
es en el que los recursos y capacidades se generan y desarrollan para conseguir los objetivos
definidos en el nivel anterior. Las políticas comerciales (promoción, publicidad, etc.), de
producción (renovación de bienes de equipo, mejora de procesos productivos, etc.) o de
recursos humanos (planes de incentivos, de promoción, etc.) constituyen ejemplos claros de
decisiones en este nivel. Las estrategias funcionales, coordinadas y apoyadas mutuamente
entre sí, deben contribuir a que se alcancen los objetivos de la empresa y son esenciales para
que las estrategias de los niveles superiores tengan el máximo impacto.
Los tres niveles de la estrategia descritos forman algo así como una jerarquía de estrategias
cuya responsabilidad corresponde a distintas personas dentro de la organización –presidente o
consejero delegado, gerente de división y director funcional– (Cuervo, 1995: 57). Además, los
distintos niveles no representan problemas diferentes que pueden ser separados para su
análisis y decisión, sino distintos aspectos de un mismo problema estratégico de la empresa.
La anterior idea plantea la necesidad de una interacción estrecha entre los distintos niveles
para el éxito de la estrategia empresarial. Esto supone que las decisiones que se tomen en un
nivel superior condicionan las decisiones en los niveles estratégicos inferiores al definir el
contexto en el que dichas decisiones deben adoptarse. Igualmente, las estrategias funcionales
sirven de soporte para las del nivel competitivo que, a su vez, apoyan el éxito de la estrategia
corporativa (Wheelen y Hunger, 2012: 68). Por ello, se hace necesario el intercambio de
información y la comunicación entre los responsables de los distintos niveles para la
coordinación de las distintas estrategias y asegurar así su coherencia y consistencia con la
misión y los objetivos estratégicos (Cuervo, 1995: 57). La relación entre los distintos niveles de
la estrategia aparece recogida en la figura 1.

  

 

Figura 1​. Los niveles de la estrategia y la jerarquía organizativa

Referencia Bibliográfica
● Cuervo García, A. (1995): «La dirección estratégica de la empresa», en «Dirección de
empresas de los noventa. Homenaje al profesor Marcial-Jesús López Moreno», Civitas,
Madrid, pp. 51-69.
● Guerras Martín, L.A. y Navas López, J. E. (2016): La Dirección Estratégica de la
Empresa. Teoría y Aplicaciones. Thomson-Civitas, Navarra.
● Menguzzato Boulard, M.; Renau Piqueras, J. J. (1991): La dirección estratégica de la
empresa, Ariel, Barcelona.
● Wheelen, T. L.; Hunger, J. D. (2007): Administración Estratégica y Política de Negocios.
Conceptos y Casos. Pearson Educación, México.
● Wheelen, T. L.; Hunger, J. D. (2012): Strategic management and business policy.
Toward global sustainability, Pearson, Boston, 13.ª edición, (edición internacional).

  

También podría gustarte