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MONOGRAFÍA
TEMA:
EL FIDEICOMISO SUS ALCANCES Y PERSPECTIVAS
PRESENTADO POR:
GLORIA ESPERANZA ESCOBAR MOLINA
LUIS ARNOLDO HERRERA MARTÍNEZ
JOSÉ MAUDIEL GARAY VELÁSQUEZ
ASESOR:
LIC. JOSE SALOMÓN BENITEZ REYES
OCTUBRE DE 2005
AUTORIDADES
RECTOR
ING. MARIO ANTONIO RUIZ RAMÍREZ
SECRETARIA GENERAL
LIC. TERESA DE JESÚS GÓNZALEZ DE MENDOZA
No. Págs.
Introducción............................................................................................................... i
Capítulo I
1. Distinción entre figuras acerca del Fideicomiso.................................................... 1
1.1 Los autores distinguen cuatro etapas en la vida del trust ................................ 2
1.1.1 Derecho Romano .................................................................................... 3
1.1.2 Dos formas principales revistió el pactum fiduciae................................ 4
Capítulo II
2. Generalidades del Fideicomiso.............................................................................. 5
2.1 Concepto.......................................................................................................... 5
2.1.1 Constitución del Fideicomiso ................................................................. 5
2.2 Retrospectiva Constitucional........................................................................... 6
2.2.1 Análisis Constitucional Vigente ............................................................. 8
2.3 Análisis de la Legislación Secundaria Relacionada al Fideicomiso................ 10
2.3.1 El Fideicomiso en el Código de Comercio............................................. 11
Capítulo III
3. Operaciones Fiduciarias en general, y los fideicomisos en particular................... 13
3.1 Elementos ........................................................................................................ 13
3.2 Relación entre ambos elementos ..................................................................... 14
3.3 Caracteres Jurídicos......................................................................................... 15
Capítulo IV
4. Personas que intervienen en el fideicomiso........................................................... 17
4.1 Elementos del Fideicomiso ............................................................................. 17
4.2 Propiedad ......................................................................................................... 18
4.3 Objeto o Patrimonio ........................................................................................ 18
4.4 Los Fideicomisos Permitidos .......................................................................... 18
4.5 Limitaciones .................................................................................................... 19
4.6 Finalidad .......................................................................................................... 19
Capítulo V
5. Clasificación de los Fideicomisos ......................................................................... 20
5.1 Fideicomiso de Inversión ................................................................................ 20
5.2 Fideicomiso de Garantía.................................................................................. 23
5.3 Fideicomiso de Administración....................................................................... 24
5.4 Certificación Fiduciarios de Participación ...................................................... 25
Objetivos.................................................................................................................... 28
Conclusiones.............................................................................................................. 29
Referencias Bibliografías .......................................................................................... 31
Anexo ........................................................................................................................ 33
INTRODUCCIÓN
Con la aparición del hombre sobre la paz de la tierra, se inició un proceso de desarrollo en el
trato social y económico, situación que trajo consigo algunas acciones que provocaron
conflictos y fracciones entre personas, debido a esto, los diferentes grupos sociales
comenzaron a idear algunas formas que ayudaran a resolver tales conflictos e ir ubicándolos
dentro de las reglas a cumplir (costumbre) luego después con la creación y avance del
comercio tanto local como exterior, a dichas costumbres se les dio un mayor uso, creando en
si, la necesidad de tener dentro de su ámbito, normativas prescritos que pudieran ayudar a
resolver situaciones conflictuales, que en el caminar social y comercial se van desarrollando.
Dentro de estas situaciones encontramos: de carácter personal, familiar y económico y de otro
tipo de intereses; los que sino se solucionan a tiempo pudieran ocasionar el estancamiento de
personas y de sociedades. Es por ello y en base a esa necesidad como el hombre ideó dichas
normativas, pensando siempre en el desarrollo a través de reglas y como una forma principal
el trato igualitario.
Así dentro de esa historia del mundo, de conflictos y tensiones, fue como dio inicio el
surgimiento del sentir jurídico basado primero en costumbres y posteriormente en pequeños
escritos (normativos) esto como fruto legítimo de ciertas fricciones entre los primeros grupos
sociales; posteriormente sobrevino el surgimiento rudimentario del Derecho en la rama Penal,
luego el Derecho Civil y sucesivamente de acuerdo a nuevas necesidades, otras ramas del
derecho.
Modernamente, pero como resultado de una larga evolución histórica, se iniciaron una serie de
institutos de Derecho que prometen un buen futuro, las cuales surgieron o se desarrollaron a
través de ciertos conflictos de intereses que fueron la causa de su nacimiento; dentro de estas
instituciones encontramos la del fideicomiso, la que se ha desarrollado como producto de
serios conflictos de intereses.
i
Del fideicomiso como tal iniciaremos a partir de estos escritos un conocimiento en forma
amplia y detallada de dicha institución, comenzando con su origen y evolución a través del
tiempo, suceso que se desarrolla a partir de conflictos de intereses, pudiendo afirmar que la
historia del fideicomiso es la historia de un conflicto de una lucha de grupos sociales entre sí.
Sobre este tema, existe una diversidad de criterios, sobre y donde debe ubicarse el verdadero
nacimiento de lo que hoy es modernamente dicha institución en el campo del negocio jurídico.
Donde muchos autores opinan que éste (fideicomiso), nació en Roma y que de ahí se difundió
e influyó al resto del Derecho Occidental; de lo anterior se afirma que constituye la base
etimológica de ésta palabra (fideicomiso) que en América Latina se usa, puesto que según
dichos autores, dicho concepto proviene del latín “FIDEICOMMISSUM”, que al
descomponerla, FIDES: significa fe, confianza y COMMISSUM: encargo, comisión;
proveniente del Derecho Romano.
ii
De ahí que comentaron algunos autores que el fideicommissum, se inició como un encargo
dado a una persona para transmitir parte o la totalidad de los bienes que se encuentran dentro
de la sucesión del testador, a favor de un tercero (fideicomissarius) cuyo cumplimiento
dependía únicamente de la buena voluntad de la persona que recibía la sucesión gravada por el
fideicomiso (fiduciarius); dicha formula fue desarrollada con esplendor en el derecho romano,
conocido en la figura de “Mortis causa” donde el fideicomitente era el autor de la herencia, el
fiduciario, el heredero o legatario y el fideicomisario un tercero. Este acto por estar basado
exclusivamente en la buena Fé del amigo se sustentaba en una forma estrictamente moral;
dicha forma dejó sin falta de protección jurídica, lo que a la postre podría ser una desventaja
muy grande para el fideicomitente y al fideicomisario, aunque no obstante, esa desventaja la
práctica del fideicommissum fue cada vez mayor; luego después de las guerras púnicas la
mentalidad de los romanos cambio, donde el dinero y los bienes se tomaron como valores de
mayor respeto, más aun que el prestigio y la buena reputación, lo que causó que los
fideicomisos se quedaran a menudo sin cumplimiento.
Es así, como después de un período de desarrollo, el fideicomiso como tal, sufrió una serie de
restricciones, hasta que desapareció en la edad media, esto como una figura pura y simple,
después se dio una figura que subsistió como una modalidad de fideicomiso gradual, al cual se
le llamó sucesivo, permitiendo al testador establecer de manera prolongada una determinada
sucesión sobre bienes de familia, se permitió la sustitución fideicomisaria por una generación
en la época clásica en tiempos de Justiniano, la mayor conocida fue: El Mayorazgo.
En este mismo período histórico, se puede señalar otra figura que existió en Roma, con alguna
afinidad, la cual se llamó: Fiducia, tratándose de una figura que servía de garantía real a los
acreedores. Esta operaba a través de los siguientes actos:
iii
1. Transmisión de propiedad al acreedor, a través de la Mancipatio o de la In Iure
Cessio (modos de adquirir en Roma).
2. Un pacto denominado Pactum Fiduciae, como una cláusula donde el acreedor se
comprometía a restituir la cosa después de haberla utilizado; en este caso la fiducia se
llamaba “Fiducia cum creditore” o garantía de crédito.
Se debe hacer constar también que (fideicommissum, y fiducia) son figuras romanas distintas
de acuerdo a las circunstancias, el primero se aplicó en la sucesión por causa de muerte y el
segundo por acto entre vivos.
Haciendo una síntesis podemos decir que el origen y desarrollo del Fideicomiso se dio en el
Derecho Romano presentando numerosos casos o modalidades de negocios de confianza entre
estos tenemos, entre estos tenemos: A) EL FIDEICOMMISSUM, tuvo sus orígenes en las
múltiples incapacidades de heredar que consagraba el Derecho Romano y en ella la voluntar
del testador, a través de una figura donde se pudiera hacer efectiva el traspaso de bienes por
vía testamentaria; el Fideicommissum revisté distintas formas las cuales podemos mencionar:
Fideicommissum Puro y Simple, Condicional, Particular ó Universal, y el Gradual. B)
PACTUM FIDUCIAE, como una forma de transmisión por Causa de Muerte, el cual implicó
un acuerdo entre vivos, donde el adquirente contraía la obligación de retransmitir los bienes en
determinadas circunstancias.
iv
B) Elemento Personal u obligacional; aquí el Fiduciario limita su potestad al propietario en
orden al cumplimiento de lo previsto por las partes, se tratará de establecer una relación entre
ambos, entre los elementos Personales tenemos: el fideicomitente, el fiduciario, y
fideicomisario; en el elemento material encontramos, el patrimonio y los bienes.
Además se hará también una clasificación de los Fideicomisos tomando en cuenta los fines
que persiguen entre estos: a) De Inversión, b) De Garantía, c) De Administración d)
Emisión de Certificados Fiduciarios de Participación.
v
CAPITULO I
1. Distinción entre figuras acerca del Fideicomiso.
1
Como una manifestación de los negocios de confianza, inspirados en el derecho romano,
podemos mencionar una manera de limitar la propiedad como lo es:
¾ La propiedad fiduciaria, se entiende por ello aquella propiedad que está sujeta a la
carga de pasar a otra persona por el hecho de verificarse una condición resolutoria.
Puede constituirse por acto entre vivos o por testamento.
¾ Trust.
El Trust corresponde a una estructura peculiar evolución del Derecho Inglés en el cual el
acreedor del Trust (Settler) transfiere derechos al fiduciario (Trustee) sobre los bienes que
constituyen el objeto del Trust; se explica y opera dentro de una estructura peculiar no
existente en los sistemas latinos, según la cual puede predicarse en relación de un mismo bien
la existencia de dos propietarios, uno legal y otro beneficiario.2
1
Rodríguez Azuero, Sergio. “Contratos Bancarios”, editorial Felaban, 1990. Bogota-Colombia, Pág. 605-606
2
Osorio Manuel. “Diccionario de Ciencias Jurídicas y Políticas”
1
1.1 Los autores distinguen cuatro etapas en la vida del trust. A continuación las
señaladas por Batiza.
3
Rodríguez Azucero, Sergio. “Contratos Bancarios”, Editorial Felaban, 1990. Bogota-Colombia, Pág. 612
2
1.1.1. Derecho Romano. Presentó numerosos casos o modalidades de negocios de confianza
en un proceso cambiante, todos los países pasaron de los que llamemos negocios fiduciarios
puros o los conocidos como negocios fiduciarios impuros, reglamentados por la Ley o
tutelados por ella; existen 2 ejemplos más destacados.
a) Fideicommisum.
El fideicommisum, tuvo sus orígenes en las múltiples incapacidades de heredar que
consagraba el Derecho Romano y en la necesidad de poder realizar la voluntad del testador a
través de una figura que pudiese hacer efectiva en que una persona transfería a otra, por vía
testamentaria, uno o más bienes con el objeto de que ésta figurando externamente como
propietario, los empleará en beneficio de otra u otras terceras personas, a las cuales mas
adelante si fuese posible, debían serles transmitidos los bienes, pues el adquiriente por vía
testamentaria, propietario para todos los efectos, podía abusar de su posición negándose a
transmitir los bienes al beneficiario, guardándolos por sí los frutos producidos por ellos e
incluso enajenándolos a un tercero, frustrando en esta forma la voluntad del causante. Por esa
razón en esta etapa puede hablarse de un negocio fiduciario puro, en donde la confianza es
absoluta y se traduce en la posibilidad de abuso por parte del fiduciario.
Para lograr el debido cumplimiento del encargo, se conoció la figura del pretor encargado de
llevar a cabo esta tarea.
El Derecho Romano conoció distintas formas de fideicommissum como la pura o simple, la
condicional, la particular o universal y la gradual.
En la época de Justiniano se limitó el derecho del testador para imponer la obligación solo
hasta el cuarto grado.
Esta última forma fue antecedente directo de las llamadas “sustituciones fideicomisarias”
utilizadas para conservar los bienes vinculados a una sola familia, produciendo una clara
concentración de la riqueza. Por ello vinieron a desaparecer, en la práctica, con la Revolución
Francesa.
3
b) Pactum fiduciae.
Consistía en una transmisión por causa de muerte, el pactum fiduciae implicó un acuerdo entre
vivos con la obligación para el adquirente de retransmitir los bienes en determinadas
circunstancias.
1.1.2. Dos formas principales revistió el pactum fiduciae: la llamada fiduciae cum
creditore y la denominada cum amico.
El pactum fiduciae cum creditore cumplió un destacado papel antes de conocerse las formas
modernas de contratos de garantía, en lo esencial presentó dos serias desventajas.
4
Título Precario según el Diccionario Jurídico de Manual Osorio es: Lo dado o poseído, ejemplo: una promesa
de venta; un derecho que lo faculta a tener esa posición. Rodríguez Azucero, Sergio. “Contratos Bancarios”,
Editorial Felaban, 1990. Bogota-Colombia, Pág. 608-610
4
CAPITULO II
2. GENERALIDADES DEL FIDEICOMISO
2.1 Concepto.
La palabra fideicomiso se deriva de dos voces latinas: Fides, que quiere decir fe o confianza;
comisio, que significa encargo, comisión, encomienda. Por lo tanto el fideicomiso
sencillamente es un encargo, una comisión de confianza.
Los fideicomisos permitidos según el artículo 1234 del Código de Comercio son de tres clases:
a) Por acto entre vivos
b) Por testamento
c) Mixto
5
Víctor, Gerber Antonio, Jorge Armando. “Tesis Planificación de la Auditoria Interna”, San Salvador. UES, Pág. 6
6
Lara Velado, Roberto. “Introducción al Estudio del Derecho Mercantil”. San Salvador. UES, Pág. 189-190
5
porcentaje que le corresponde como honorarios; sus facultades y forma de actuación están
determinadas en el acto constitutivo del fideicomiso; en consecuencia, solamente puede
efectuar aquellos actos de disponibilidad que han sido contemplados en el acto constitutivo del
fideicomiso, o para los cuales sea debidamente autorizado en forma legal.
Un acto fiduciario es el fideicomiso, ya que para obtener los fines que se propone la
institución, no sería transmitir la propiedad al fiduciario; sino que bastaría con conferirle un
poder suficiente de administración y las facultades respectivas. No obstante es un acto
fiduciario que obedece a regulaciones precisas fijadas en la Ley y condiciones propias
señaladas en el acto constitutivo; por eso conserva su nombre de acto fiduciario, podemos
decir que la confianza en la práctica queda bastante reducida.
7
Figueroa Alvarez, José Ernesto. “El Fideicomiso en materia mercantil”. San Salvador. UES. 1977, Pág. 80-85
6
10. Constitución de 1939 ------------------Prohíbe las vinculaciones pero establece como
excepciones: a) los fideicomisos a favor del Estado, Instituciones de beneficencia o
culturales, de personas inhábiles conforme a la ley y de personas que estén por nacer;
b) el bien de familia.
11. Constitución de 1944 -------------------Agregó a lo anterior un nuevo fideicomiso
permitido: El Judicial.
12. Constitución de 1945 -------------------Suprime el fideicomiso judicial. Vuelve a ser
idéntico a lo establecido en 1939.
13. Constitución de 1950 --------------------Prohíbe las vinculaciones; conserva las
excepciones anteriores y agrega los fideicomisos en favor de cualquier persona
siempre que el plazo no sea mayor de veinticinco años y que el manejo esté a cargo de
Bancos o Instituciones Financieras de Crédito autorizadas.
14. Constitución de 1962 ---------------------ídem
De la anterior, podemos observar distintas conductas respecto de las vinculaciones, entre estas
las primeras tres constituciones abarcan los primeros cincuenta años de vida independiente,
donde aún no enfoca en absoluto el problema de las vinculaciones y de alguna forma
permitiendo que estos se realicen.
7
2.2.1 Análisis Constitucional Vigente.
La Constitución Política de El Salvador permite este tipo de vinculación como una excepción
a las de su clase se dice que el Fideicomiso es una vinculación desde luego que los bienes
fideicomitidos quedan fuera del comercio durante todo el plazo del fideicomiso. Las reglas
constitucionales que rigen el fideicomiso en cuanto al plazo del mismo se establecen en el
Artículo 107 Cn. El cual prohíbe toda clase de Vinculación excepto:
a. Los Fideicomisos constituidos a favor del Estado, de los Municipios, de las Entidades
Públicas, de las Instituciones de Beneficencia o de Cultura, y de las legalmente
incapaces; estos fideicomisos pueden convertirse en permanentes pues no tienen límite
de plazo señalado, ni están sujetos a circunstancias
b. Los Fideicomisos constituidos en un plazo que no exceda de veinticinco años, cuyo
manejo esté a cargo de Bancos o Instituciones de Crédito Legalmente autorizadas; no
obstante de no tener plazo fijado, quedan limitados por las circunstancias a favor de los
legalmente incapaces; en esta segunda clase es denotar que no podrán exceder del
tiempo necesario para que los menores fideicomisarios lleguen a la mayor edad o para
que los incapaces concluyan su vida.
c. El Bien de familia: Este consiste en que un determinado bien que pertenezca a un
grupo familiar, no puede ser vendido, regalado, hipotecado, ni alquilado mientras el
miembro menor del grupo familiar no alcance la mayoría de edad; con el bien de
familia se evita que el grupo familiar pierda bienes tan importantes como su vivienda,
por causa del capricho o la irresponsabilidad de alguno de sus miembros.8
8
Lara Velado, Roberto. “Introducción al Estudio del Derecho Mercantil”. San Salvador. UES, Pág. 190
8
Adaptándose a las necesidades de la época se prohibieron las vinculaciones, estableciendo
excepciones que analizaremos a continuación.
Son permitidos los fideicomisos que podríamos llamar: públicos o aquellos donde se
pretenda causar un beneficio a la colectividad, esto a través del Estado del Municipio
de las Entidades Públicas o de Instituciones de Beneficencia; éstas como son a través
de Instituciones que podríamos llamar de “vida perpetua”, no estableciendo un plazo
para su duración, sino sujetando para siempre una propiedad, manifestándose como el
positivo interés público.
Con relación a las Limitaciones que se establecen al respecto del manejo de los Fideicomisos
y el plazo, estos constituyen una garantía a favor de los sujetos que intervienen, estos
marcando el tiempo y la responsabilidad que caracteriza a las Instituciones Bancarias,
redundando esto en beneficio del Régimen Económico de carácter liberal. Concluyendo que
en esta disposición se toma a bien un sentimiento popular que luego se hizo Ley de la
República y que como tal se dio un impulso definitivo a la Institución del Fideicomiso y al
desarrollo bancario dentro del campo fiduciario.
9
2.3 Análisis de la Legislación Secundaria Relacionada al Fideicomiso.
Hace más de cuatro décadas que marcan en nuestro país, el inicio legal de la Institución del
Fideicomiso en El Salvador, lo cual se debe a una necesidad sentida en la práctica del Derecho
Nacional, para salvaguardar los intereses de la Sociedad; dándose así la exposición de motivos
que sería la primera de las Leyes del Fideicomiso en nuestro país.
Ley del Fideicomiso de 1937; Se considera como la primera Ley que reguló el Fideicomiso en
El Salvador, la cual se desarrolló en virtud de dos proyectos de Ley que se presentaron en
1937, a consideración de la Asamblea Legislativa, agregándose un estudio efectuado por la
Honorable Corte Suprema de Justicia, analizando la Constitucionalidad de la Institución a
desarrollar.
Otra exposición de motivos que estudiaron los magistrados se encontraba en los fideicomisos
a desarrollar los cuales se establecen en el Art. 1234 C. de Comercio.
10
2.3.1 El Fideicomiso en el Código de Comercio.
9
Art. 1233 C. de Com.
El Fideicomiso se constituye mediante declaración de voluntad, por la cual el fideicomitente
transmite sobre determinados bienes a favor del fideicomisario, el usufructo, uso o habitación,
en todo o parte, o establece una renta o pensión determinada, confiando su cumplimiento al
fiduciario, a quien se transmiten los bienes a favor del fideicomisario, el usufructo, uso, o
habitación, en todo o parte, pero sin la facultad de disponer de ellos sino de conformidad a las
instrucciones precisas dadas por el fideicomitente, en el instrumento de Constitución. De
acuerdo a este Artículo el Fideicomiso es un acto jurídico, una manifestación de voluntad
encaminada a producir efectos jurídicos; siendo así este acto, puede consistir en la
manifestación de una sola voluntad o en el resultado de un acuerdo de voluntades, lo cual
encuadra en nuestra legislación con relación al fideicomiso; se dice que la mayoría de las
opiniones recibidas estima que la naturaleza del Fideicomiso Salvadoreño es contractual,
apoyándose en el Art. 1247 C. de Com. el cual establece que con la aceptación del fiduciario
se perfecciona la existencia del fideicomiso.
Dentro del Art. 1360 C. de Com. se entabla una disposición exclusiva de los contratos, en
virtud del cual en los contratos bilaterales va envuelta la condición resolutoria en caso de no
cumplirse por uno de los contratantes. Esta situación opera solamente en los contratos
bilaterales, con cierta semejanza a la aplicable a los fideicomisos, para el caso del
incumplimiento, se determina que si el fiduciario no rinde cuentas al ser requerido, así es
declarado judicialmente culpable por las pérdidas que sufran los bienes dados en Fideicomiso,
el Fideicomitente, el Fideicomisario ó el Ministerio Público podrán pedir la remoción del
Fiduciario; podrá también el fiduciario renunciar a su cargo, si el fideicomitente, sus
causahabientes o el fideicomisario, se negare a pagar las compensaciones estipuladas a su
favor, esto en relación a los derechos recíprocos de las partes; Artículos 1262, 1257, 1252 y
9
Lic. Vásquez López, Luis. Código de Comercio, pág. 189-194
11
1244 N°2, todos del C. de Com., siendo esto exclusivo de poscontratos bilaterales los cuales
llevan consigo una condición resolutoria de no cumplirse lo pactado por una de las partes.
Otro de los aspectos que encierra el Art. 1233 C. de Com. es el Patrimonio, el que
analizaremos a continuación:
El Patrimonio como los bienes o derechos fideicomitidos y que son transmitidos en propiedad
fiduciaria de la que únicamente podrá disponer de ellos de conformidad a las reglas dadas por
el fideicomitente.
El Artículo 1235 Com. Faculta al Fiduciario de acuerdo con las cláusulas del acto
constitutivo y sus modalidades:
a. En función del fin que se deba realizar y no en interés del fiduciario, donde el
beneficio económico recaiga sobre el fideicomisario.
b. Posibilidad del fideicomisario para impugnar los actos del fiduciario, que exceda
los límites funcionales del acto constitutivo del fideicomiso.
Art. 1236 Com. En este se consigna el plazo de duración del fideicomiso, el cual es de
Veinticinco años, salvo el caso de que el fideicomiso fuera en beneficio de las Instituciones
Públicas expresadas o de los incapaces.
Art. 1237 Com. Este precepto encierra una autorización y una prohibición. Autoriza al
Fideicomitente poder establecer fideicomiso a si mismo como beneficiario; y prohíbe al
fiduciario ser fideicomisario o beneficiario.
12
CAPITULO III
3. Operaciones Fiduciarias en general, y los Fideicomisos en particular.
El nombre fiduciario se deriva de la palabra latina “fiducia” que significa confianza; en efecto
una operación fiduciaria es una operación en cuya estructura, pesa en gran medida, la
confianza de una de las partes tiene por la otra. El nombre de operación fiduciaria se aplica, en
derecho, a las operaciones en que una de las partes hace algo más de lo que jurídicamente es
necesario, siempre que el exceso se realice en virtud de que la persona (fiduciario), que recibe
el bien dado en fideicomiso se obligue a conservarlo y restituirlo de acuerdo a las cláusulas del
acto constitutivo, Art. 1235 Com.
Ejemplo: Si una persona encarga a otra el cobro de un título valor, (una letra de cambio), basta
con que le otorgue un poder suficiente al efecto; si en vez de eso, el dueño del título valor
endosa el título a favor de la persona que acepto encargarse de cobrarlo, existe una operación
fiduciaria; porque el endoso no era necesario, desde luego que bastaba con un poder; y porque
el hecho de transferir el título a quien va a cobrarlo, en vez de facultarlo simplemente para
hacerse efectivo, implica una prueba de confianza del endosante en el endosamiento, desde
luego lo convierte ante el público en propietario del título.
10
3.1 Elementos.
El negocio fiduciario presenta como elementos estructurales, una transmisión plena de
derechos (elemento real) limitada, en la práctica, por las obligaciones consagradas a cargo del
fiduciario (elemento personal).
a) Real.
Radica en la transmisión plena de derechos, como la propiedad, o personales, como la
titularidad de un crédito por parte del fiduciante al fiduciario, en forma de constituirlo frente a
terceros como dueño o titular sin limitación alguna y frente a si mismos.
10
Rodríguez Azucero, Sergio. “Contratos Bancarios”, Editorial Felaban, 1990. Bogota-Colombia, Pág. 614-615
13
b) Personal u obligacional.
Consiste en el acuerdo mediante el cual el fiduciario limita su potestad de propietario, en
orden al cumplimiento de la finalidad prevista entre las partes.
Ejemplo de negocio fiduciario: “Si con el objeto de darle garantía al acreedor, se inscribe a
su nombre, en el registro, una casa, propiedad del deudor o de un tercero, tendremos un
negocio fiduciario porque en virtud de la inscripción en el registro, el acreedor aparece como
dueño del inmueble para todos los efectos legales y no como titular de un simple derecho de
garantía.
En base a las circunstancias mencionadas muchos juristas ven el fideicomiso con los mismos
caracteres que el negocio fiduciario ya que en ambas figuras intervienen 2 sujetos.
No puede afirmarse, que exista una desproporción entre el medio utilizado y la finalidad que
se busca porque en cuanto se trate de figuras tipificadas, como sucede en nuestro caso, la
finalidad que se busca debe conseguirse precisamente a través del expediente de la
transmisión. Además, debe observarse que no se trataría, por ello, de un negocio fiduciario
puro por cuanto él no radica en forma exclusiva en la confianza, sino que los deseos y
obligaciones de las partes están cuidadosamente regulados por la ley sin que quepa entonces
posibilidad de abuso, en el sentido de traición a la voluntad del constituyente que quedase
impune por no existir control distinto sobre el cumplimiento de la misma que la propia
conciencia del fiduciario, como sucedía en las manifestaciones primitivas de estos negocios.
14
Por ello, y por este aspecto, tendría que decirse que es una especie de negocio fiduciario
impuro.
Los bienes recibidos en Fiducia no se acrecientan o disminuyen porque tal les ocurra a los
bienes del fiduciario, sino como consecuencia exclusiva del buen suceso en su administración
o de las dificultades y pérdidas que en ella se soporten.
Se trata, pues, de una transmisión de propiedad para la consecución de un fin determinado que
explica por ello el que las facultades normales del propietario se subordinen a los términos
obligatorios previstos en el contrato, todo lo cual constituye una especie de negocio fiduciario
impuro.
11
3.3 Caracteres jurídicos.
El fideicomiso o fiducia mercantil es un contrato principal, oneroso y conmutativo, de
ejecución instantánea o de tracto sucesivo, según el caso, tipificado en algunas legislaciones,
como ya lo indicamos y atípico o innominado en los cuales debemos detenernos un poco más
para hacer las explicaciones pertinentes. Nos referimos a que además es bilateral y solemne.
El fideicomiso como negocio jurídico puede ser unilateral o bilateral, según se trate de un
fideicomiso constituido por testamento o de un acto entre vivos. Dentro de la legislación la no
designación de fiduciario o su no aceptación no invalidan el fideicomiso sino que es posible al
juez proceder a nombrarlo, en el primer caso, o designar un sustituto, en el segundo, podría
11
Rodríguez Azucero, Sergio. “Contratos Bancarios”, Editorial Felaban, 1990. Bogota-Colombia, Pág. 631-633
15
afirmarse que el fideicomiso sería un acto jurídico unilateral, productos de efectos jurídicos
por la sola manifestación de voluntad del fiduciario.
Lo cierto es que en nuestra legislación parece clara la propensión mayoritaria a regularlo como
un negocio jurídico bilateral, perfeccionable por el “acuerdo de voluntades” entre
fideicomitente y fiduciario, cuando se trata de un fideicomiso constituido por acto entre vivos.
Ni como negocio jurídico ni como contrato puede decirse que sea plurilateral porque, en el
primer caso, la voluntad del fideicomisario no suele concurrir al acto constitutivo.
Sobre el formalismo y las solemnidades podemos afirmar que existe una amplia gama de
posibilidades que oscila entre la perfección del contrato, por simple manifestación verbal,
hasta la existencia de requisitos solemnes como constar en escrito auténtico o en escritura
pública, pasando por el escrito como simple medio de prueba cuando se trata de fideicomiso
constituido por acto entre vivos. El fideicomiso testamentario debe someterse en cada país a
las solemnidades propias de este acto de última voluntad.
16
CAPITULO IV
4. Personas que intervienen en el fideicomiso.
12
Fideicomitente: Persona natural o jurídica que entrega los bienes o derechos objeto del
fideicomiso y determina el fin que debe ser cumplido.
4.1 Elementos.
Esencialmente puede distinguirse en el fideicomiso los siguientes elementos:
Fideicomitente
Persona Fiduciario
Elementos Fideicomisario
12
Velasco Alemán Jorge Armando, Bombero Velasco, Gerberth Antonio. “Planificación de la Auditoria Interna
en la Cartera Fiduciaria de los Banco y Financieros de El Salvador”. Págs. 7-10
17
4.2 Propiedad.
La propiedad de los bienes o la titularidad de los derechos sobre el cual versa el fideicomiso
deben transmitirse temporalmente del fideicomitente al fiduciario, mientras dure la vigencia
del fideicomiso lo cual constituye la esencia de éste, que es indispensable para el logro del fin
establecido.
Los fideicomisos a favor del Estado, de los municipios, de las entidades públicas de las
instituciones de beneficencia o de cultura y de los legalmente incapaces, no se estarán sujetos
a plazo determinado y continuarán funcionando mientras los fines para los cuales fueron
constituidos lo justifiquen.
I. Fideicomiso entre vivos, cuya constitución se hará por escritura pública, con las
formalidades de las donaciones entre vivos. Si se constituye para fines comerciales y a
favor de un fideicomisario colectivo y futuro, sirve de base para la emisión de
certificados fiduciarios de participación.
II. Fideicomiso por causa de muerte, cuya constitución se hará por acto testamentario.
III. Fideicomiso mixto, que comienza a ejercerse en vida del fideicomitente y continua
después de su muerte, se constituirán por escritura pública, con las formalidades de los
fideicomisos entre vivos, pero deberá confirmarse en el testamento del fideicomitente,
18
teniéndose como incorporadas en él, con valor de cláusulas testamentarias, las
disposiciones fideicomisarias, ya sea consignándolas íntegramente o haciendo clara y
preciosa referencia a la escritura que las contenga.
4.5 13Limitaciones.
Artículo 1252 Código de Comercio.
El fiduciario no podrá enajenar ni gravar los bienes fideicomitidos si para ello no ha sido
autorizado en el acto constitutivo. Cuando la ejecución del fideicomiso exija necesariamente
enajenar o gravar los bienes, el juez, a solicitud del fiduciario y con intervención del
fideicomisario y del Ministerio Público, deberá autorizarlo.
Sin perjuicio de lo expuesto existen diversas restricciones al ejercicio del poder de disposición
jurídica que, por actos entre vivos, le asiste al dueño fiduciario. Es menester aclarar que sólo
puede disponer voluntariamente por actos entre vivos, pues si muere la cosa no pasa a sus
herederos forzosos o testamentarios pero según el artículo 1242 del Código de Comercio, que
Reza no se podrá establecer fideicomiso en el que el beneficio pase a otra persona después de
fallecido el primer fideicomisario, pero si el fideicomiso se constituye originalmente en
beneficio de dos o más personas, y el fideicomiso al o a los supervivientes. Este artículo no se
aplica a los certificados fiduciarios de participación.
4.6 Finalidad.
Es la meta o resultado que se persigue con el establecimiento de un fideicomiso en cuyo acto
constitutivo el fideicomitente expresa lo que el fiduciario (persona natural o jurídico) debe
hacer para lograr esa meta o resultado.
13
Figueroa Alvarez, José Ernesto. Tesis “El Fideicomiso en Materia Mercantil”. San Salvador. UES, 1977. Págs. 18-24
19
CAPITULO V
5. Clasificación de los fideicomisos.
14
Atendiendo a los fines que persiguen.
1. Fideicomiso de inversión
2. Fideicomiso de garantía
3. Fideicomiso de administración
4. Fideicomiso de base para emisión de certificados fiduciarios de participación.
5. Fideicomiso de seguro de vida.
6. Fideicomiso de voto.
7. otros Fideicomisos:
- De beneficencia
- De hospitalización
- De educación
- De planes
- De pensión y ahorro
¾ El fideicomiso en la práctica.
Clases de fideicomisos. Campo de aplicación.
Dependiendo de los diversos criterios de operación, los fideicomisos pueden ser clasificados
en distintas formas:
14
Figueroa Alvarez, José Ernesto. “Tesis El Fideicomiso en Materia Mercantil”, San Salvador. UES. 1977. pág. 57-65
20
¾ Por su origen (fideicomisos)
a) Por Ministerio de Ley
b) Expresos
1- Por acto entre vivos
2- Por testamento
3- Mixto
b) Fideicomisos expresos.
Definición: Conocido como aquellos que resultan de la exteriorización de la voluntad de una
persona, ya sea que ésta se manifieste por acto entre vivos o por testamento.
Estos tipos de fideicomisos son los que se aceptan en los sistemas de tradición romántica, visto
como una fuente exclusiva del surgimiento de las categorías existentes de fideicomisos. El
autor Lepaulle, dice que el “expres trust” es el normal, el que se crea voluntariamente con un
propósito determinado en un acto regular, pudiendo ser entre vivos o mortis causa.
Los medios a través de los cuales se manifiestan los fideicomisos expresos se dan tres clases:
Generalidades: Por regla general se constituye mediante escritura pública, haciéndose constar
la manifestación de voluntad del fideicomitente que afecta ciertos bienes a un fin determinado,
confiando su cumplimiento a una institución fiduciaria (Banco), para que se perfeccione la
aceptación de este fideicomiso es necesaria la aceptación del fiduciario, lo cual queda
aceptado en la misma escritura constitutiva o en otra separada.
21
Por testamento.
Definición: Es aquel fideicomiso que se constituye mediante la declaración unilateral que con
las formalidades establecidas por la ley hace una persona de su última voluntad, disponiendo
tanto de la constitución del fideicomiso mismo como de las bases de su funcionamiento.
Con relación a la situación de los sujetos que intervienen en el fideicomiso, hacemos énfasis
únicamente a las incapacidades e indignidad para suceder, las cuales son plenamente
aplicables a los fideicomisarios de este tipo de fideicomiso.
Según el Dr. Barrientos “en el fideicomiso testamentario, se establecen las normas según las
cuales se desea que rija el fideicomiso, donde la técnica del contrato se inicia con la aperturas
y tramitación de la sucesión; continuando con la adjudicación de los bienes a favor del
fiduciario, para que siga instrucciones de administraciones, inversión y vigilancia de los
fondos provenientes de la herencia y concluye con la distribución de los fondos entre los
herederos o beneficiarios de acuerdo a normas dadas por el testador. En éste tipo de
fideicomisos se nombran comités consultivos de carácter técnico integrados por personas de
confianza del testador, teniendo el objeto de asegurar el buen funcionamiento del fideicomiso.
22
Fideicomiso Mixto
Este tipo de fideicomiso comienza a ejercerse en vida del fideicomitente y continúa después de
su muerte. Art. 1234 N°3 Com.
Generalidades
El fideicomiso mixto se constituye por Escritura Pública, con las formalidades de los contratos
y se confirma en el testamento por el fideicomitente. Por constituir una mezcla de los dos
primeros fideicomisos, aclarando que se considera como entre vivos en cuanto a los efectos de
deben producirse en vida del fideicomitente. En caso que el fideicomitente falleciera el
fideicomiso continúa su existencia hasta que se cumpla el plazo o fin para el que fue creado.
Todos los autores son de la opinión que tiene la característica de asemejarse a las operaciones
bancarias, propiamente dichas ya que mediante su constitución y ejecución la institución
fiduciaria capta sumas de dinero de los fideicomitentes y las destina a inversiones lucrativas.
Por regla general y como antes se dijo, el objeto de este fideicomiso está constituido por la
entrega material de una cantidad de dinero, aunque excepcionalmente puede serlo un mueble o
inmueble afectados a ser convertidos en efectivo e inmediatamente invertirse de conformidad
con lo establecido en la escritura constitutiva.
23
que están obligadas a invertir en el más corto tiempo posible a efecto de hacer productiva la
inversión.
24
GENERALIDADES: Según se deduce del concepto anterior, nos encontramos ante una
figura (fideicomiso) verdaderamente simple y con muy pocas implicaciones prácticas. Sin
embargo, son dos aspectos íntimamente relacionados los que definitivamente han marcado el
gran desarrollo que este fideicomiso ha tenido, y ello son: Por una parte las causas o
circunstancias muy diversas que a menudo imposibilitan el simple manejo de determinado
patrimonio, ya no se diga la efectiva administración del mismo, como pueden ser una
enfermedad o incapacidad manifiesta para los negocios, o bien la minoría de edad, y en fin,
tantas circunstancias personales que a diario se presentan. Por otra parte existe un aspecto
bastante importante en la vida del fideicomiso el cual imprime un sello de garantía a cualquier
finalidad que se pretenda conseguir, ello es la alta capacidad técnica que caracteriza a las
instituciones fiduciarias, lo que definitivamente, les permite atender con la eficiencia deuda
toda clase de negocio que se les encomiende.
Esos dos aspectos ligados en relación a las necesidades provecho, ha permitido la expansión
del fideicomiso de administración, el cual a estas alturas incluye el manejo de muebles,
especialmente de carácter mercantil, como son las acciones.
25
15
¾ Los certificados fiduciarios adoptan lo siguiente:
1) El derecho a favor de sus tenedores, a recibir la parte alícuota de los rendimientos que
produzcan los bienes fideicomitidos; 2) El derecho de sus tenedores a que el expirar el
fideicomiso base de la emisión, les sea traspasada la parte alícuota de los bienes
fideicomitidos; 3) El derecho de sus tenedores a que, al expirar el fideicomiso base de la
emisión, les sea entregada la parte alícuota del producto neto de la venta de los bienes
fideicomitidos. El derecho señalado en el ordinal primero, puede combinarse con cualquiera
de los señalados en uno de los otros dos ordinales.
Así como los títulos valores, los certificados fiduciarios de participación son bienes muebles,
por su propia naturaleza; el hecho de que los bienes fiduciarios sean inmuebles, no cambia la
naturaleza de los títulos entre sí.
II. La cuantía de la emisión será fijada por la oficina que ejercerá el control del Estado,
previo dictamen de dos peritos que valuarán los bienes fideicomitidos; tratándose de
los certificados amortizables.
III. Los certificados podrán ser amortizables o no. Son amortizables aquellos cuyo valor
está supuesto a devolverse en ejecutivo, al vencimiento de la emisión, o al evento de
un sorteo, sujetándose a las reglas dadas para la amortización por sorteo de los bonos u
obligaciones negociables; en consecuencia, cuando los certificados son amortizables
solamente pueden incorporar derechos a recibir los rendimientos de los bienes
15
Lara Velado, Roberto. “Introducción al Estudio del Derecho Mercantil”. Editorial Universitaria de El Salvador,
San Salvador, Págs. 191-193
26
fideicomitidos; porque cuando, a la expiración del certificado deba entregarse a los
tenedores los bienes o su valor de venta, no habrá amortización de los mismos.
IV. El negocio fiduciario, por medio de sus representantes legales otorgará la escritura de
emisión de certificados, la cual deberá contener todas las condiciones de la emisión, la
relación del fideicomiso que le sirva de base y el acuerdo de la oficina que ejerce la
vigilancia del Estado en relación con el peritaje practicado en los bienes
fideicomitidos, la determinación de la cuantía, de la emisión y la comprobación del
acto constitutivo del fideicomitidos inmuebles, se procederá a la emisión y colocación
de los certificados fiduciarios entre el público.
V. Los certificados pueden ser emitidos como títulos nominativos o como títulos al
portador. Además podrán emitirse como títulos nominativos con cupones al portador;
cada cupón incorpora el derecho a recibir una cuota periódica de los rendimientos.
VIII. Cuando se trate de bienes fideicomitidos inmuebles, los certificados podrán incorporar
derecho de aprovechamiento directo de tales bienes, con la extensión y modalidades
que señale la Escritura de Constitución.
IX. El Fideicomiso no podrá extinguirse mientras no se cancelen los certificados; salvo que
expire el plazo de 25 años, por ser disposición constitucional; pero en este último caso,
los certificados conservarán sus derechos directamente sobre los bienes, los cuales
sirven de garantía.
27
OBJETIVOS
Objetivo General.
¾ Dar a conocer en una forma amplia y sencilla el fideicomiso como negocio fiduciario,
estableciendo para ello su definición, origen, elementos y partes que lo conforman;
clases del mismo (fideicomiso), su retrospectiva constitucional y la legislación actual
aplicable, logrando con ello un mejor conocimiento del tema en mención.
Objetivos Específicos.
¾ Mostrar a través del presente trabajo el desarrollo del fideicomiso como fiduciario;
explicando cada una de sus facetas.
¾ Lograr a través de la explicación dada, el dar a conocer los elementos, partes y clases
del fideicomiso, de una forma clara, y precisa.
28
CONCLUSIONES
El presente trabajo contiene una información lograda a través de una investigación realizada
con mucho ahínco, sobre un tema que según el trabajo estructurado, existe muy poca
información o conocimiento en nuestro país y es por ello que nosotros como grupo decidimos
trabajar el tema, pero a la vez hacemos las siguientes conclusiones.
Que es necesario que haya cierta difusión sobre un tema contractual que en El Salvador tiene
aplicación y que como tal, en nuestro diario caminar nos pudiéramos encontrar en el mundo de
los negocios fiduciarios; se concluye así mismo, que este tipo de contrato es visto como una
garantía frente a los administradores (fiduciarios), los cuales (fideicomitentes) ponen en manos
de instituciones administradoras (Bancos) sus bienes para el correcto manejo, con la
obligación de cumplir las condiciones contractuales establecidas, donde las garantías
tradicionales (hipoteca, prenda, etc) sirven como un medio para asegurar la rápida satisfacción
de obligaciones incumplidas a favor de un beneficiario que pudiera ser el mismo
fideicomitente o un tercero designado en la convención fiduciaria, donde es así mismo
recomendable que en el contrato contemple una diversidad de aspectos que nos relacionen con
la administración de los bienes y la eventual transmisión a terceros de los frutos de los
mismos, haciéndose necesario establecer en el contrato, el proceso a seguir con relación a los
bienes que conforman la garantía, estableciendo para ello las distintas formalidades para el
remate, venta privada o adjudicación de bienes por dación en pago; se establece que para que
el fiduciario, evite en lo posible no cumplir con sus obligaciones de garantes, solicitando a los
tribunales una medida cautelar que suspenda la realización de la obligación adquirida; donde
acertadamente concluye Dávalos Mejía, “ante el riesgo insoslayable de impugnación,
cualquier precaución en el texto no es ociosa”, en tal sentido es recomendable en todos los
casos el requerimiento de pago y la exhibición de documentos fehacientes, que se puedan
convenir en cada caso concreto; concluimos además que en materia contractual fiduciaria en
nuestro país, como la explicábamos anteriormente nos encontramos con muy poca aplicación,
pues en la investigación realizada hemos podido comprobar dicha situación que nos hace
como poco conocedores y aplicadores de la misma; siendo en ésta situación donde nosotros
29
vemos la importancia misma del desarrollo del tema para su conocimiento mismo y correcta
aplicación.
Que es necesario de que haya constancia de que el acreedor beneficiario conoce todos los
detalles sobre la calidad, estado, clase, cantidad, valuación de mercado con relación al bien
fideicomitido, y objetos del contrato, al respecto de lo que se haga constar dentro del contrato
fiduciario.
Que la importancia misma del conocimiento de su base legal constitucional, es la que abre las
puertas al desarrollo mismo del contrato fiduciario como jurisprudencia orientadora y la cual
nos remite a la ley secundaria (Código de Comercio) que es la que desarrolla el fideicomiso,
estableciéndose dentro de la misma, la normativa correspondiente, en un apartado o capítulo
de la misma, que nos va dictando los pasos a seguir.
Que la importancia misma del fideicomiso radica en la multiplicidad de normas que se pueden
adoptar de acuerdo a las necesidades del fideicomite; pudiendo utilizar esta figura cualquier
persona natural o jurídica que necesita administrar o maximizar sus bienes.
Que estos pueden ser contribuidas únicamente a favor del Estado, los municipios, entidades
públicas, instituciones de beneficencia o de cultura y de los legalmente incapaces, esta
establecido en el Art. 107 Cn., como Ley Primaria de nuestro país; prohibiciones a los demás
toda especie de vinculaciones.
30
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Contratos Bancarios
Autor: Sergio Rodríguez Azuero
Editorial: Felabam. Edición 4ª . Año 1990
Bogotá Colombia
31
“Introducción al Estudio del Derecho Mercantil”
Autor: Roberto Lara velado. 1ª Edición.
Editorial Universitaria de El Salvador. San Salvador.
32
ANEXO
33
Serie “CEPFEAGIN”
No. 0022-15
Por $10,935.85
El “Fondo Fiduciario Especial para Atender a los Afectados de las Operaciones Ilegales realizadas por
el Grupo Financiero INSEPRO” de este domicilio, en adelante denominado Fondo Fiduciario Especial”
como institución emisora, se obliga a pagar incondicionalmente la cantidad de DIEZ MIL
OCHOCIENTOS TREINTA Y NUEVE 70/100 DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA,
contra la entrega de este Certificado.
El plazo del Certificado es de NUEVE años, contados a partir del 31 DE OCTUBRE DE 1997,
pudiéndose redimir en forma proporcional en la medida en que los bienes que sirvieron de base a su
emisión se realicen.
Durante el periodo de vigencia se reconocerán intereses, calculados sobre base del año comercial. La
tasa de interés que devengará el presente Certificado será calculada a partir de la fecha de
colocación, tomando como base la tasa de interés básica de depósitos del Sistema Financiero a 180
días plazo, menos dos y medio punto, que publica el Banco Central de Reserva. El rendimiento de
este Título pagado cada tres meses.
Todos los pagos de capital e interés, se harán en las oficinas del Fondo Fiduciario Especial.
Este Cerificado cuenta con una garantía subsidiaria del Banco Central de Reserva de El Salvador y
forma parte de la emisión por un monto de SEISCIENTOS MILLONES DE COLONES
(600.000,000.00), ahora en su equivalente en dólares, aprobada por la Asamblea Legislativa por
medio del Decreto Número setenta y nueve, de fecha once de septiembre de mil novecientos noventa
y siete; y sus respectivas reformas. Los fondos captados provenientes de esta emisión fueron
utilizadas para cancelar a los afectados del Grupo Financiero INSEPRO.
Este título forma parte de una emisión global de OCHENTA Y CINCO MILLONES SEISCIENTOS
CATORCE MIL DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA; según escritura de emisión
otorgada en esta Ciudad el 20 de diciembre del 2001, e inscrita en el número 44, tomo 846 de otros
contratos mercantiles del Registro de Comercio.
34