Causas:

Hay ley pero no se cumple.

La falta de cultura y moral y esto lleva a distorcionar los recursos públicos

Colombia como sociedad civil no cuenta con un concepto claro y fuerte de ÉTICA y se refleja en la corrupción,
los altos niveles de criminalidad e intolerancia y desafortunadamente la solución no se dará simplemente
cambiado políticos, hay que exigir que la educación incluya la formación ÉTICA para la vida desde el Pre-
escolar hasta la universidad.

"La creencia en que los problemas se resuelven a las malas creó un clima favorable para la justificación de la
trampa, para la justificación del todo vale" A.Mockus.

¿En qué momento se acabó la ética? Sencillamente no se puede "acabar" algo que NUNCA HA EXISTIDO. La
pregunta debería ser: ¿Alguna vez nuestra clase gobernante ha actuado guiada por la ética? Llevamos 200 años
de gobiernos de derecha y ultraderecha, carentes de cualquier escrúpulo y ética para mantenerse en el poder y
seguir parasitando del erario público. Creen que el poder les pertenece "por mandato divino", y cuando un
movimiento político con una ideología distinta les amenaza el statu quo, entonces simplemente lo "quitan de en
medio" como sea. Recordemos el genocidio contra la Unión Patriótica UP, donde cerca de 5.000 personas
fueron vilmente asesinadas, ante la mirada pasiva del país entero. Tenemos los políticos que nos merecemos, y
aquellos que ungimos e idealizamos con más impetu son precisamente los más implacables a la hora de fungir
como verdugos del pueblo humilde. Y en contraste, cuando llega un mandatario que hace algo bueno, como
Santos, entonces, lo satanizamos a más no poder, y lo hundimos en las encuestas. Definitivamente ESTAMOS
JODIDOS. Ojalá la cosa empiece a cambiar a partir de 2018, hay que seguir apoyando -con todo- el proceso de
paz, pues LA PAZ ES EL MEJOR ANTÍDOTO CONTRA LA CORRUPCIÓN, y lo estamos viendo.

Considero que los valores se rescatan cuando las reglas de juego de la democracia sea clara y contundente... y
que las consecuencias de violar la ley sean altas y ejemplares... es decir.... justos... debemos educar las nuevas
generaciones... reducir el conflicto debe llevarnos a fortalecer la democracia, pero eso dolera a grandes
empresarios... de manera gradual debemos buscar equidad y oportunidades para todos... sacrificando
intereses... una nueva Colombia demorara 20 años... si somos constantes...
La verdad y la política no se llevan bien. La veracidad no anda entre las virtudes políticas. La mentira ha sido
vista como herramienta necesaria y justificable para el oficio no sólo de los políticos y los demagogos sino
también del hombre de Estado. Política devaluada mucho antes del Frente Nacional: oficio de la
falsificación/demagogia: vías para alcanzar el poder, que ya no es político, es decir, humano, sino económico.
Degradante: la apariencia –lo que ven y oyen otros al igual que nosotros– constituye la realidad