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Unidad 3: Fase 5 - Tomar Decisiones y Concluir

Presentado a:
Tutora Clara Guzmán

Presentado por:
Gumercila Samboni Martinez
Codigo. 36.112.244
Grupo. 403014 – 100

Universidad Nacional Abierta y a Distancia (Unad)


Fecha 15 de Mayo de 2019
Actividad Individual
El estudiante realizará lectura de los textos, Género, educación y convivencia, páginas 139
a 151 y Cultura de paz, diversidad y género.

Conclusión 1.
Hoy nos podemos dar cuenta que La Organización de Naciones Unidas (ONU) desde 1945,
ha trabajado para lograr lograr la igualdad entre hombres y mujeres, ya que la desigualdad
afecta a las mujeres y las niñas, es una preocupación de los organismos internacionales por
las consecuencias que tiene el desarrollo de las personas y de las sociedades. Así como por
la violencia que genera sobre ellas, cuestiones que atentan contra lo derechos humanos.
Dice (Mayor Zaragoza 2001), que la sociedad la reconoce como sujeto, que la mujer sigue
siendo una (Liberta). La Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), afirma
que todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos dotados como
están de razón y conciencia, que deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
La Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (ONU) Ha trabajado para
conseguir el reconocimiento de los derechos de la mujer y la eliminación de todas las
formas de discriminación contra la mujer. (CEDAW), y posteriormente, “La Declaración
sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer (1993)”, que reconoce el derecho de la
mujer a vivir libre de violencia. La asamblea General de la Naciones Unidas creo, en Julio
de 2010, ONU; Mujeres para lograr la igualdad de Género y el Empoderamiento de la
Mujer, (Resolución 64/289).
El Derecho a la Educación es una declaración de los Derechos Humanos, según Ortega Y
Gasset (1930), sostiene que la sociedad necesita buenos profesionales, Jueces, Médicos,
Ingenieros, pero reclama que estos profesionales sean capaces de vivir, influir, vitalmente
en su época, por consiguiente la formación en género en los actuales planes de estudio del
Grado de Educación Social, que cuenta entre objetivos la formación de profesionales para
dar respuestas a las realidades sociales como el caso de la permanencia de discriminación y
violencia sobre las niñas y las mujeres en todo el mundo. Casi la totalidad de los
encuestados (99%) considera que necesita la formación para la igualdad entre hombres y
mujeres; la prevención y detención de la violencia de género y detección precoz de la
violencia en el ámbito familiar, sobre la mujer y los hijos e hijas, como desafío es
platearnos y posicionarnos como profesionales de la educación Social ante cuestiones que
afectan a la vida de las personas, así que es nuestra responsabilidad en la investigación y
formación de profesionales competentes para que podamos incidir en los diferentes campos
de conocimiento y contribuir a la consecución de una sociedad equitativa y justa.
Conclusión 2

Este articulo nos deja que como profesionales en formación de psicología nos debería
cuestionar nuestras acciones en este campo, porque está íntimamente ligado en la defensa
de los derechos humanos y tenemos que dar respuestas educativas a una realidad que afecta
además de la mitad de una población mundial. Según; Tedesco (2000). La educación es un
instrumento para superar, la discriminación en todas las esferas de la vida (social,
económica, legislativa, política) para conseguir la igualdad entre hombres y mujeres,
eliminar los estereotipos, suprimir todas las formas de trata de mujeres y explotación de la
prostitución de la mujer, promover la educación familiar o luchar por el acceso al empleo.
Pues como expresan Caride, Lorenzo y Rodríguez (2012) “la educación es una tarea
cotidiana. Este proceso se ha llevado acabo (en las escuelas, las familias, la infancia, etc.
Ahora bien, se necesita una formación específica para saber cómo aplicar los instrumentos
para conseguir la igualdad real y no sólo la formal, una formación que promueva el interés
individual y colectivo generando un compromiso de corresponsabilidad que dinamice
acciones conjuntas, circulares y coordinadas desde lo local a lo global para que su impacto
alcance a quienes incumplen los derechos humanos. La discriminación respecto a las niñas
y las mujeres sigue siendo una realidad, y constituye el origen de la violencia contra ellas,
tal y como se pone de relieve en el Informe sobre los Objetivos del Milenio (2013). La
Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (Marzo de 2013) al señalar la
necesidad de un compromiso internacional para poner fin a la “lacra mundial de la
violencia contra las mujeres” Por consiguiente, es preciso una educación que promueva el
pensamiento, la autonomía, la aceptación y el respeto a las diferencias, la imaginación y la
creatividad para buscar alternativas orientadas a resolver las dificultades que surgen en la
convivencia personal y grupal, según Gadamer (2000) la “educación es educarse” y cada
persona se educa a sí misma con su esfuerzo personal, educación que lleve a fundamentar
las posiciones sin dogmatismos, a comprender los conflictos, que promueva la acción
reflexiva, el crecimiento como seres humanos y miembros de una sociedad basada en los
derechos humanos. Una educación que dinamice la capacidad de analizar, de contrastar, de
pensar y de tomar decisiones de acuerdo con los principios recogidos en la Declaración
Universal delos Derechos Humanos.

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