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VICARIA DE PASTORAL
1
DIÓCESIS DE MATAMOROS
VICARIA DE PASTORAL
CONTENIDO
2
Carta Pastoral
3
Índice
Presentación
Capítulo I
Por sobre todas las cosas, adquiere discernimiento (Prov 4,7)
1. 1. Discernir para elegir bien
1. 2. Recordando y discerniendo el pasado
1. 3. Mirando y discerniendo el presente
1. 4. Discerniendo y proyectando el futuro
Capítulo II
Echen la red y encontrarán (Jn 21,1-19)
Encuentro, comunión, testimonio transformador
2. 1. Aprendan de mí (Mt 11, 29)
2. 2. Encuentro
2. 3. Comunión
2. 4. Testimonio transformador
Capítulo III
Permanezcan en mi amor (Jn 15, 4)
Formación y liturgia
3. 1. Yo soy la vid y ustedes los sarmientos (cf. Jn 15, 5)
3. 2. No tienen más que un Maestro (Mt 23, 8)
3. 3. Celebrar al Señor es nuestra fuerza (Neh 8, 10)
3. 4. Quien cultiva su tierra se saciará de pan (Prov 12,11)
Conclusión
4
Presentación
“Hasta que Cristo sea formado en nosotros” (Gál 4,19). Esa es la meta. Sólo uniéndonos a Jesús y dejando
que el Espíritu Santo nos ayude a amar como él, podemos llegar a Dios, realizarnos, construir un mundo
mejor y participar de su vida por siempre feliz.
Esto es posible gracias a que el Padre, creador de todas las cosas, lo envió para rescatarnos del
pecado, reunirnos en su Iglesia, injertarnos a él, darnos su Espíritu, hacernos hijos suyos y mostrarnos
cómo debemos ser y qué debemos hacer para compartir su vida plena y eterna1.
Jesús, siendo Dios, se hizo uno de nosotros al encarnarse de la Virgen María, y unido al Padre y
ungido por el Espíritu Santo pasó amando y haciendo el bien, predicando y realizando grandes obras, hasta
el extremo de aceptar morir crucificado y resucitar para convocarnos en la unidad con Dios y entre nosotros,
y dar vida plena y eterna a los que lo reconocen y viven como enseña (cf. Hch 2, 22-38).
Él nos muestra que el camino es el amor, que es comprender, actuar con justicia, ser pacientes,
solidarios y serviciales, perdonar y pedir perdón (cf. 1 Cor 13, 4-7). Un amor que incluye a todos (cf. Mt 5,
44), especialmente a quien más lo necesita (cf. Lc 10, 29-37). Un amor que nos impulsa a custodiar y
cultivar la vida y la creación (cf. Gn 2,15) .
Sólo encontrándonos con Jesús (cf. Jn 20, 20), permaneciendo en su amor (cf. Jn 15, 9) y
compartiendo con todos la dicha de ser amigos de aquél que nos lleva al Padre, que hace nuevas todas
las cosas (cf. Mc 16, 9-15; Ap 21, 5), podemos realizarnos, construir una familia y un mundo mejor, y
alcanzar la eternidad.
Esta convicción fue la que impulsó a los misioneros que en el siglo XVI llegaron a tierra tamaulipeca
a sembrar el Evangelio, que fructificó hasta convertirnos en Diócesis en 1959, la que, con el correr del
tiempo, comenzó en 2012 a elaborar un Plan Diocesano de Pastoral siguiendo la metodología Ver, Juzgar
y Actuar a través de asambleas pastorales parroquiales, decanales y diocesanas, y mediante consultas a
diversas instancias eclesiales.
Así tomamos conciencia de lo mucho que el Señor nos ha bendecido a través de los misioneros
que nos evangelizaron; de los obispos que nos han guiado: Mons. Estanislao Alcaráz y Figueroa, Mons.
Sabás Magaña García, Mons. Francisco Javier Chavolla Ramos, Mons. Faustino Armendáriz Jiménez,
Mons. Ruy Rendón Leal; y de muchos sacerdotes, diáconos, consagradas, consagrados, seminaristas y
laicos.
También nos adentramos en la realidad social y eclesial de nuestra Diócesis y procuramos
interpretarla a la luz de la fe para establecer algunas prioridades, que se organizaron de acuerdo a las
cuatro tareas fundamentales de la Iglesia: Testimonio, Comunión, Liturgia y Servicio (Martyria, Koinonía
Liturgia, Diaconía).
Después, al tiempo de reflexionar en las seis opciones pastorales del Proyecto Global de Pastoral
del Episcopado Mexicano 2031-2033, nos preguntamos cuál es la Iglesia que Dios quiere y nosotros
soñamos, y propusimos caminos para hacerlo realidad. La novedad fue que en esta ocasión las consultas
se abrieron a organizaciones de la sociedad civil.
Ahora, recogiendo este proceso, con la guía de la Palabra de Dios –contenida en la Sagrada
Escritura y en la Sagrada Tradición–, del Magisterio y del Proyecto Global de Pastoral de la Conferencia
del Episcopado Mexicano 2031-2033, después de un serio discernimiento hecho en oración, al cumplirse
el 60 aniversario de nuestra Diócesis, presento estas líneas estratégicas para el Plan Diocesano de
Pastoral 2019-2023, teniendo en el horizonte la celebración del Acontecimiento Redentor de Nuestro Señor
Jesucristo (2033) y del Encuentro de Santa María de Guadalupe (2031).
Pido a Dios que, por intercesión de Nuestra Madre, Refugio de los pecadores, y de todos los santos,
nos ayude a cumplir su voluntad, llevando a cabo la parte que nos corresponde en su plan de salvación,
teniendo presente cada día el gran consejo de san Ambrosio: “Por el camino, háblate a ti mismo, habla a
Cristo... habla también de él” 2.
1
Cf. Jn 3,16; Catecismo de la Iglesia Católica, 458-460; Proyecto Global de Pastoral de la CEM, 105-130.
2
Comentarios sobre los salmos, Sal 36, 65-66.
5
Capítulo I
Por sobre todas las cosas, adquiere discernimiento (Prov 4,7)
En la vida siempre estamos tomando decisiones respecto de nosotros mismos, de otras personas, de las
cosas y del medioambiente. Y es muy importante decidir bien, sobre todo en aquello que tiene impacto
relevante en nuestra existencia y en la de los demás. Para eso es necesario dejarnos iluminar por la fe,
que hace posible distinguir con mayor claridad. A esto se le llama discernimiento.
“Cuando falta la luz –recuerda el Papa–, todo se vuelve confuso, es imposible distinguir… la
senda que lleva a la meta de aquella otra que nos hace dar vueltas sin una dirección fija… La fe…
aporta la visión completa de todo el recorrido y nos permite situamos en el gran proyecto de Dios; sin
esa visión, tendríamos solamente fragmentos aislados de un todo desconocido” 3.
El discernimiento nos permite vernos a nosotros mismos y ver a cada persona, cada cosa y cada
acontecimiento en todas sus dimensiones y en todas sus relaciones, y tener presente la meta: llegar a la
casa del Padre. Así es posible mantener el rumbo y seguir a Jesús por el camino del amor a Dios y al
prójimo en medio de las alegrías, las penas, las oportunidades y los problemas de la vida, descubriendo el
proyecto único e irrepetible que Dios tiene para cada uno, el verdadero para qué de nuestra existencia que
nadie conoce mejor que él, así como los medios concretos que nos brinda para llevarlo a cabo4.
El discernimiento nos capacita también para descubrir y vencer las tentaciones que enfrentamos en
la vida, incluso aquellas que tienen apariencia de bien, dándonos luz para revisar el proceso de nuestros
pensamientos y ayudándonos a comprender que, como explica san Ignacio de Loyola, si principio, medio
y fin es todo bueno, señal es que viene de Dios; pero si acaba en cosa mala, confusa, distractiva, menos
buena de la que teníamos propuesta hacer o nos deja inquietos, clara señal es que procede del demonio5.
Como podemos ver, el discernimiento es vital. Por eso el Señor nos invita a adquirir este don (cf.
Prov 4, 7), pidiéndoselo en la oración y desarrollándolo en la reflexión, la lectura y el buen consejo, como
señala el Papa6. De esta manera podremos descubrir que todo tiene sentido; las experiencias del pasado,
las situaciones del presente, y el futuro, que, aún en medio de las incertidumbres, podemos proyectar con
esperanza, fiados en la promesa de Jesús: “yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin del mundo”
(Mt 28, 19-20).
El Señor dijo a su pueblo: “Recuerden lo que sucedió antiguamente; porque yo soy Dios, no hay otro (Is
46,9). “No podemos hallar, si no reconocemos –comenta san Agustín–; no podemos reconocer, si no nos
acordamos”7. Este recordar, para que sea completo, debe hacerse a la luz de la fe. Así descubriremos que,
como dice el Papa, el Señor nos tiene en su memoria y nunca nos olvida8.
Los primeros asentamientos humanos en Tamaulipas, que significa “lugar donde se reza mucho”,
datan del 2,000 a.C. Así, cuando los españoles llegaron en el siglo XVI encontraron distintos grupos tribales
nómadas, principalmente chichimecas9, que se opusieron a los intentos colonizadores de Juan de Grijalva.
Pero en 1544 fray Andrés de Olmos logró fundar el pueblo de Tamaulipas10, donde fue significativa
la obra de fray Antonio Margil, que en el siglo XVIII realizó una gran labor misionando a pie desde Texas y
Luisiana hasta Nicaragua y Panamá. Al mismo tiempo, sacerdotes del clero secular establecieron custodias
en el centro-sur del Seno mexicano.
3
Lumen fidei, 3 y 29.
4
Cf. Gaudete et exsultate, 169, 170.
5
Cf. Ejercicios Espirituales, 332-333.
6
Gaudete et exsultate, 166.
7
Confesiones X, 18-19; 27-28.
8
Gaudete et exsultate, 147.
9
Cf. SANTA MARÍA Vicente de, Relación Histórica de la Colonia del Nuevo Santander, introducción y notas de Ernesto de la Torre Villar, Ed.
UNAM, México 1978, p. 96.
10
Cf. GONZÁLEZ SALAS Carlos, La Evangelización en Tamaulipas. Las misiones novohispanas en la costa del Seno Mexicano (1530 – 1831),
Instituto de Investigaciones Históricas, Universidad Autónoma de Tamaulipas, 1998, Tomo I, p. 17; OSANTE Patricia, Orígenes del Nuevo
Santander. 1748-1772, Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Históricas, 1997, p. 47; SOSA ESQUIVEL Juan,
La Real Historia de México, Instituto de Investigaciones Históricas, Universidad Autónoma de Tamaulipas, Departamento de Fomento Editorial,
2002, Tomo I, p. 396; PIÑERA RAMÍREZ David, Visión histórica de la Frontera Norte de México, Centro de Investigaciones Históricas UNAM-
UABC, Ed. UABC, 1994, p. 113.
6
Sin embargo, las rebeliones de los grupos indígenas dificultaban estos trabajos, hasta que en 1732
José de Escandón desarrolló un programa de colonización y pacificación, trayendo familias de San Luis
Potosí, Querétaro y del Nuevo Reino de León, y promoviendo la evangelización por parte de los misioneros
del Colegio de Propaganda Fide, en Guadalupe, Zacatecas.
En 1746 Tamaulipas fue incorporada como provincia de la Nueva España con el nombre de Nuevo
Santander. Poco después se crearon las villa de Camargo, Reynosa y San Fernando, y más tarde las villas
de Mier y Laredo.
A finales del siglo XVIII, fray Francisco de Puelles y fray Manuel Julio de Silva establecieron una
capilla en “San Juan de los esteros”, hoy Matamoros, y propusieron un nuevo nombre para la comunidad:
“Congregación Nuestra Señora del Refugio de los Esteros”, en honor a la patrona de los misioneros
franciscanos.
Tras la consumación de la Independencia, en 1824 Tamaulipas fue erigido como estado libre y
soberano de la Federación. En 1861, mediante la Bula Ad futuram rei memoriam, el beato Pío IX creó el
Vicariato Apostólico de Tamaulipas, que en 1870 elevó a Diócesis con la Bula Apostolicam in universas,
designando como Obispo a Mons. Ignacio Montes de Oca y Obregón. La sede se estableció en Ciudad
Victoria, que en 1922 fue trasladada a Tampico.
El 16 de febrero de 1958, mediante la Bula Haud Inani, el Papa Pío XII creó la Diócesis
Matamorense, desmembrándola de la entonces Diócesis de Tamaulipas. La ejecución tuvo lugar el 11 de
abril de 1959, cuando inició su ministerio Mons. Estanislao Alcaraz y Figueroa, nombrado por san Juan
XXIII como su primer obispo.
El 10 de enero de 1990 fue erigida la Diócesis de Nuevo Laredo, desmembrándose de la Diócesis
de Matamoros, que entonces quedó conformada por ocho municipios: Camargo, Gustavo Díaz Ordaz,
Matamoros, Méndez, Reynosa, Río Bravo, San Fernando y Valle Hermoso, que componen una superficie
de 19,457.63 km², con aproximadamente 1,485,460 habitantes11, de los cuales 73% se declaran católicos12,
es decir, 1,084,385.8. Actualmente, nuestra Diócesis forma parte de la Provincia Eclesiástica de Monterrey.
Entre las principales actividades económicas se encuentran el empleo informal, diferentes servicios,
la industria manufacturera, el comercio, las actividades agropecuarias y la construcción, que se ven
vigorizadas por los cruces fronterizos con Estados Unidos de América. Tal es el caso de Matamoros y de
Reynosa, zona petrolera y gasera que cuenta con el parque de energía eólica más grande de América
Latina. En Méndez, Río Bravo, San Fernando y Valle Hermoso destacan la ganadería, la agricultura (sorgo,
maíz, algodón y sandia) y la pesca. La Ribereña, región donde se encuentran Camargo y Gustavo Díaz
Ordaz, se caracteriza también por estas actividades.
La cercanía con poblaciones norteamericanas ha influenciado la vida de Tamaulipas. Existen
fuertes vínculos familiares, sociales, económicos, culturales y religiosos que unen a las ciudades en ambos
lados de la frontera, lo que se expresa en las Fiestas Mexicanas o las Fiestas del Charro entre Matamoros
y Brownsville (finales de febrero) y el Border Fest entre Reynosa e Hidalgo y McAllen (primera semana de
marzo).
La polka, la redova, el chotis, los ritmos europeos, la fusión de la música norteña con otros ritmos
modernos como la cumbia, la música de banda y el corrido, que se conoce como música grupera y texmex,
forman parte de la cultura tamaulipeca.
En 1970, los católicos en Tamaulipas eran el 95%, en 2000 el 82.9% y en 2010 el 72.9%. La alta
migración hacia Estados Unidos en las décadas de 1970 y 1980 impulsó el desarrollo de grupos
pentecostales, adventistas, testigos de Jehová, de la Luz del mundo, mormones; y en la década de 1990,
el de los neopentecostales y otros grupos. De esta manera, la población con religión diferente a la católica
es del 11.3%. Del total nacional de bautistas (196,587) que hay en México, Tamaulipas ocupa el tercer
lugar con 16,420 (8.4%). Está entre las 5 entidades federativas con mayor importancia relativa de
protestantes y evangélicos. No obstante, sólo en Tamaulipas, los habitantes sin religión superan en número
a los que pertenecen a las religiones protestantes históricas o reformadas13.
Esta zona, que ha sufrido el embate de huracanes, como el Beulah en 1967, y de batallas durante
la Guerra de Independencia, la Revolución mexicana, la Revolución Tejana, la Guerra Civil
estadounidense, la Guerra con Estados Unidos y la Intervención francesa, en los últimos años ha
enfrentado el crecimiento del fenómeno migratorio y la violencia provocada por el crimen organizado. Sin
embargo, la fe nos permite descubrir que, como dice el Cardenal Ratzinger: “a través de todos los fracasos
y de todas las discordias humanas, se va cumpliendo la meta de la historia: la transformación del “caos”...
en la ciudad eterna... en la cual Dios... habita para siempre entre los hombres”14.
11
Cf. CONEVAL, Medición de la pobreza en Tamaulipas, actualizado a 2017.
12
Cf. INEGI, Censo General de Población y Vivienda 2010.
13
Cf. INEGI, La diversidad religiosa en México. XII Censo General de Población y Vivienda 2000. INEGI, Estadística a propósito de la diversidad
religiosa en México 2012; INEGI, Panorama sociodemográfico de México. Censo de Población y Vivienda 2010.
14
Fe, verdad y tolerancia, Ed. Sígueme, Salamanca, 2005, p. 39.
7
1. 3. Mirando y discerniendo el presente
San Pablo aconseja: “Examínenlo todo y quédense con lo bueno” (1 Ts 5,21). Esto requiere una visión
profunda y completa de la realidad, que es posible a la luz de la fe. De lo contrario, podemos quedarnos
en una mirada superficial, parcial y negativa, que termina haciéndonos caer en una tentación de la que el
Papa nos ha prevenido: la resignación15.
De los cerca de 1,485,460 habitantes de los ocho municipios que forman la Diócesis, 50.8% son
mujeres y 49.2% hombres. La edad media de la población es de 25 años. La tasa anual de natalidad es de
2.56%. La esperanza de vida es de 75.5 años; 78.5 para las mujeres y 73.6 para los hombres. 77% de los
hogares tiene jefatura masculina y 23% femenina. 87.3% de la población vive en áreas urbanas y 12.7%
en zonas rurales16.
La calificación de los índices de satisfacción de la población es de 8.3 (arriba de la nacional); de
vida familiar es de 9.1, de vida afectiva es de 8.7, de actividades que realiza es de 8.6, de logros personales
es de 8.4, de vivienda es de 8.4, de vida social es de 8.3, de perspectivas es de 8.3, de nivel de vida es de
8.1, de seguridad es de 5.3 (debajo de la nacional), de vecindario es de 8.1, de ciudad es de 7.1 y de país
es de 6.917.
El promedio de emociones positivas es de 8.7 y de emociones negativas es de 2.1. En sentirse bien
consigo mismo es de 9.0, de ser optimista respecto del futuro de uno es de 8.9, de gusto por aprender
cosas nuevas es de 9.4, de sentir que tiene una misión en la vida es de 9.1. Pero la calificación respecto a
sentirse feliz es de 6.3, de haber alcanzado sus metas es de 5.7 y de estar satisfecho con su vida es de
6.218.
Según algunas encuestas, las tres instituciones con alta confianza en México son: las universidades
(7.4), la Iglesia (7.2) y el ejército (7.4) 19. Otras señalan que 94.2% confía en la familia mucho o algo y 5.8%
poco o nada; 61% confía en el Ejército mucho o algo y 38.8% poco o nada; 54.6% confía en la Iglesia
mucho o algo y 45.5% poco o nada; 53.9% confía mucho o algo en el gobierno y 46.1% algo o nada20.
El 7% de la población en Tamaulipas participa en alguna organización social (a nivel nacional es el
5%); 44% lo hace en alguna obra de la Iglesia (a nivel nacional es el 37%); 17% en asociaciones de padres
de familia, 14% en grupos vecinales, 11% en desarrollo social, 2% en cuidado del medioambiente21.
83.66% de los hogares en Tamaulipas cuenta con regadera, 39.30% con aire acondicionado,
34.33% con tinaco, 33.02% con boiler o calentador de agua, 8.7% con bomba de agua, 5.03 con cisterna
o aljibe, 0.8% con calentador solar de agua, 0.52% con panel solar, 92.57% con refrigerador y 53.34% con
automóvil22.
La riqueza natural y las oportunidades laborales y comerciales que brinda nuestra ubicación
fronteriza sigue favoreciendo un vigoroso intercambio social, cultural y económico que impulsa el flujo
migratorio; unos para laborar aquí, otros para cruzar hacia Estados Unidos y otros que son repatriados.
Ante esto, la Iglesia está respondiendo a través de dos casas del migrante, una en Matamoros y otra en
Reynosa (Casa del Migrante “Nuestra Señora de Guadalupe”, A.C. y Casa del Migrante “San Juan Diego
y San Francisco de Asís”, A.C.), así como el Módulo de Atención a Migrantes y Deportados en la Central
de Autobuses de Matamoros.
La tasa de participación laboral es de 61.5% (la nacional es de 59.5%). 61% de la población
económicamente activa es masculina y 39% femenina. 44.5% labora en la informalidad, 32% en diferentes
servicios, 22% en la industria manufacturera, 18% en el sector comercio, 8% en actividades agropecuarias,
7% en la construcción, 7% en transportes y comunicaciones, 4% en gobierno y organismos internacionales
y 1% en la industria extractiva y electricidad23.
73% son trabajadores asalariados, 19% trabajan por su cuenta, 5% son empleadores y 3% son
trabajadores sin pago. 56.7% de los trabajadores están asegurados al IMSS (el nivel nacional es de 55%).
El ingreso mensual promedio de la población ocupada es de 6,500 pesos (a nivel nacional es de 6,307).
La tasa de desocupación es de 3.6% (la nacional es de 3.4%), de los cuales 57% son hombres y 43%
mujeres, el 40% tiene entre 30 y 49 años y el 38% entre 20 y 29 años de edad24.
15
Santa Misa con sacerdotes, consagrados, religiosas y seminaristas, Morelia, 16 de febrero de 2016.
16
Cf. INEGI, Censo General de Población y Vivienda 2010, actualización 2016.
17
Cf. Anuario estadístico y geográfico de Tamaulipas 2017.
18
Idem.
19
Cf. Consulta Mitofsky, México: confianza en las instituciones 2018.
20
Cf. Encuesta de El Universal, 13 de marzo de 2019.
21
Cf. IMDOSOC-IPSOS, Encuesta Nacional de Cultura y Práctica Religiosa en México, 2014.
22
Cf. Anuario estadístico y geográfico de Tamaulipas 2017.
23
Cf. Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaría de Empleo y Productividad Laboral, Tamaulipas, Información Laboral, junio de 2019.
24
Idem.
8
La situación de pobreza y de pobreza extrema es preocupante. A nivel nacional, de los 123.5
millones de habitantes, 53.4 millones padecen pobreza (43.6%) y 9.4 millones pobreza extrema (7.6%)25.
El índice de pobreza en Tamaulipas es de 5.5% (Tlaxcala es de 9.9%, en Veracruz es de 18.8% y Puebla
de 17.0%) 26. En Camargo, de sus 16,684 habitantes, 6,526 padecen pobreza (39.1%) y 320 pobreza
extrema (1.9%). En Gustavo Díaz Ordaz, de sus 15,719 habitantes, 6,585 padecen pobreza (41.9%) y 512
pobreza extrema (3.3%). En Matamoros, de sus 527,584 habitantes, 209,612 padecen pobreza (39.7%) y
22,325 pobreza extrema (4.2%). En Méndez, de sus 4,261 habitantes, 2,352 padecen pobreza (55.2%) y
349 pobreza extrema (8.2%). En Reynosa, de sus 666,261 habitantes, 231,903 padecen pobreza (34.8%)
y 19,863 pobreza extrema (3.0%). En Río Bravo, de sus 131,198 habitantes, 59,266 padecen pobreza
(45.2%) y 7,126 pobreza extrema (5.4%). En San Fernando, de sus 54,989 habitantes, 36,594 padecen
pobreza (66.5%) y 7,044 pobreza extrema (12.8%). En Valle Hermoso, de sus 68,769 habitantes, 32,921
padecen pobreza (47.9%) y 2,466 pobreza extrema (3.6%)27.
Al servicio de los más necesitados, la Diócesis cuenta con la Casa del Indigente “Nuestra Señora
del Refugio”, A.C.; dos comedores: “Manos Unidas”, A.C. y “San Juan Pablo II”; el centro de atención
sanitaria “Fundación Misericordia de Reynosa”, A.C.; tres asilos de ancianos: “Hogar Quietud”, A.C., “Pan
de Vida”, A.C. y “Casa de la Misericordia del Corazón de Jesús”, A.C.; y dos hogares para niñas y niños:
“Casa Amparo de Reynosa”, A.C. y Casa Hogar “Por un Hogar Digno para el Niño Desamparado”, A.C..
Además, existen diversas iniciativas de solidaridad por parte de las parroquias y de diversos movimientos,
asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos. También cabe destacar la atención material y
espiritual a los enfermos, a los discapacitados y a los presos.
La familia es la institución más apreciada por los tamaulipecos28. En general, la mayoría de ellas
están unidas. En muchas se conservan y se transmiten la fe y los valores. En esto ha sido de gran ayuda
la misión permanente que se ha desarrollado en la Diócesis, y que ha favorecido procesos y estructuras
que consolidan en la fe y los valores a padres e hijos, así como su participación activa y generosa en la
vida parroquial y diocesana.
Sin embargo, las familias enfrentan una cultura hedonista, materialista, relativista e individualista;
ideologías, estilos de vida y leyes que atentan contra la vida, la naturaleza del matrimonio y el derecho de
los niños a un hogar adecuado; falta de preparación prematrimonial; desinterés en la formación humana y
cristiana de los hijos; la difusión de la narco-cultura; pobreza, hacinamiento, desintegración y violencia.
La explotación laboral, fruto del imperante sistema económico que privilegia la ganancia sobre las
personas, provoca que los padres descuiden a sus hijos, quienes muchas veces se refugian en malas
amistades, adicciones o sumándose al crimen organizado, lo que genera inseguridad y violencia que tanto
sufrimiento ha causado en numerosos hogares, marcados por la extorsión, el secuestro y la desaparición
o asesinato de algún familiar, lo que además ha ocasionado que muchos emigren, dejando prácticamente
despobladas algunas zonas.
Esto, aunado al egoísmo de algunos políticos, empresarios y líderes, y a que por muchos años las
autoridades se han visto rebasadas o han estado involucradas en casos de corrupción y complicidad con
el crimen organizado, ha provocado abusos, impunidad y ausencia del Estado de Derecho, generando una
sensación de desamparo, desorden, desánimo y desinterés. No obstante, ha ido creciendo la participación
cívica y política, aunque con cierta inconsistencia.
La Diócesis ofrece un servicio a las familias y a la sociedad a través de sus comisiones y
dimensiones, de las parroquias y de diversos movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles
laicos. Como un signo de solidaridad y acompañamiento, en 2019 quedó instituida la Jornada Diocesana
de Oración por los Desaparecidos, el 3 de marzo, día de Nuestro Señor del Rescate. Además, con el deseo
de promover una cultura de respeto a la dignidad y derechos de todas las personas y a la seguridad, se
han establecido el Programa “Iglesia segura para todos” y el Consejo Operativo de Protección a Niñas,
Niños, Adolescentes y Adultos Vulnerables, en 2017 y en 2018 respectivamente.
En el territorio diocesano se cuenta con centros hospitalarios públicos y privados de vanguardia.
Una buena parte de la población tiene acceso a servicios médicos que ofrecen las instituciones del sector
público de salud, sobre todo el IMSS y el ISSSTE. Sin embargo, aún falta la cultura del cuidado preventivo
y superar rezagos por la insuficiencia de presupuesto, la corrupción, la postergación de atención médica
provocada por la sobresaturación y la dificultad de que médicos especializados acepten laborar en zonas
azotadas por la violencia.
Para auxiliar a quienes padecen alguna enfermedad y carecen de recursos, la Diócesis cuenta con
la “Fundación Misericordia de Reynosa”, A.C., que brinda consultas generales y dentales, así como
medicamentos. Además, para apoyar a quienes tienen algún familiar internado en uno de los sistemas
25
Cf. CONEVAL, Resultados de pobreza en México 2016 a nivel nacional.
26
Cf. INEGI, Anuario estadístico y geográfico por entidad federativa 2013.
27
Cf. CONEVAL, Medición de la pobreza en Tamaulipas, actualizado a 2017.
28
Cf. Anuario estadístico y geográfico de Tamaulipas 2017.
9
públicos de salud, la diócesis ofrece dos albergues temporales: “Nuestra Señora de San Juan”, A.C. y “El
Buen Samaritano”, A.C.
El grado promedio de escolaridad de la población de 15 años y más es de 9.5, lo que significa poco
más de la secundaria concluida (a nivel nacional es de 9.2) 29. El porcentaje de habitantes sin instrucción
es de 4.2% (en Veracruz es de 10.6%, en Puebla de 9.3% en Hidalgo de 9.0%, San Luis Potosí de 7.8, en
Tlaxcala de 5.0)30. La oferta educativa pública y privada es amplia. No obstante, además de faltar mayor
calidad, la necesidad económica y la inseguridad provocan deserción escolar. La Iglesia brinda su
contribución a través de la Universidad del Noreste de México (UNM), con sus cuatro campus: Matamoros,
Rio Bravo, Valle Hermoso y Reynosa, y de los 8 colegios católicos vinculados a la Diócesis, a institutos de
Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, y a laicos comprometidos. Estas instituciones ofrecen
generosas becas, sin embargo, el ingreso de los alumnos suele estar condicionado a los recursos de las
familias. Sólo 3% de la población ha estudiado en colegios católicos, y en general califica positiva la
experiencia31.
Si bien las autoridades han favorecido la creación de espacios de convivencia, esparcimiento y
deporte que contribuyen al bien de las personas y a la restauración del tejido social, se requiere mejorarlos
y garantizar la seguridad de quienes acuden a ellos. Además, prevalece una marcada inequidad, que, como
afirma el Papa: “es raíz de los males sociales”32.
En lo tocante a las comunicaciones, 82.6% de los hogares cuenta con estos servicios. 81% de la
población tiene acceso a telefonía móvil (a nivel nacional es el 89%), 53% tiene acceso a internet móvil (a
nivel nacional es el 53%). 63.9% usa internet y 58% de los hogares disponen de conexión (el promedio
nacional es de 50.9%). 84.1% lo usa para comunicarse, 76.6% para acceder a contenidos audiovisuales y
71.5% para acceder a las redes sociales. Quienes más se conectan son mujeres de entre 25 y 44 años
(38%)33. Clérigos y laicos anuncian la Buena Nueva a través de los medios de comunicación y las redes
sociales. Además, se han impartido talleres para formar en este campo. Sin embargo, falta una estrategia
comunicativa, compartir eventos de las comisiones, contar con recursos, llegar a más personas, y
evangelizar creativamente a los jóvenes mediante las redes sociales.
92% de la población cree en Dios, 7% no y 1% no sabe. 88% de los mayores de 18 años pertenece
a algún credo religioso. De ellos, en nuestra Diócesis, 73% se declaran católicos. 63% señala que en su
vida de fe ha influido su familia y los amigos34.
62% dice sentirse muy feliz con la fe católica, 36% medianamente feliz y 1% nada feliz. 70% dice
que jamás dejaría de ser católico, 22% no lo haría, y 5% señala que sí. 65% señala que los sacerdotes
hacen muy buen trabajo y 17% lo desaprueba. 69% dice que es fácil acceder a los sacerdotes y 23% que
es difícil. 65% ha asistido a catecismo. 4% ha sido catequista; 40% entre 6 y 10 años; 36% un año, y 4%
más de 10 años. 5% ha sido misionero; 42% por un año y 5% por más de 10 años. 34% ha ayudado a
construir o reparar algún templo35.
Para el 65% es muy importante ir a Misa los domingos y para el 62% confesarse al menos una vez
al año, para el 31%-30% es sólo importante, y para 3-7% no es importante. Para el 74% es importante
adorar al Santísimo Sacramento y para el 65% el rezo del Rosario. En el año, 41% acude a la Iglesia entre
una y 10 ocasiones, 25% acude más de 30 ocasiones, 18% no acude ninguna vez al año, 16% acude entre
11 y 30 ocasiones. 83% opina que las homilías de los sacerdotes están actualizadas y 7% que son
anticuadas. 32% se confesó hace más de 5 años, 22% hace más de un año pero menos de 3, 15% hace
3 años pero menos de 5, 13% hace menos de 3 meses, 10% hace más de 6 meses pero menos de un año,
8% hace más de 3 meses pero menos de 6. 70% señala que los sacerdotes son accesibles para confesar
y 22% que no los son36.
Es de destacar que un buen porcentaje practica alguna forma de piedad popular y considera buena
su relación con la Iglesia. Sin embargo, muchos asisten esporádicamente, otros, aunque son bautizados,
no participan en ella, otros más no han vivido un encuentro personal con Jesucristo, y aumentan los que
no practican la fe y no muestran interés por ella.
La Diócesis, organizada en 3 zonas pastorales, 12 decanatos 68 parroquias y 6 rectorías, cuenta
con estructuras diocesanas y parroquiales, así como con 45 organismos laicales. La presencia de la Vida
Consagrada y su participación en la vida diocesana es significativa.
29
Cf. INEGI, Censo General de Población y Vivienda 2010, actualizado al 2017.
30
INEGI, Panorama sociodemográfico de México 2010.
31
Cf. IMDOSOC-IPSOS, Encuesta Nacional de Cultura y Práctica Religiosa en México, 2014.
32
Evangelii gaudium, 202.
33
Cf. Instituto Federal de Telecomunicaciones, Anuario Estadístico 2015; INEGI, Censo General de Población y Vivienda 2010, actualizado al
2017.
34
Cf. IMDOSOC-IPSOS, Encuesta Nacional de Cultura y Práctica Religiosa en México, 2014.
35
Idem.
36
Idem.
10
En general, hay buena disposición de sacerdotes, diáconos, consagrados, seminaristas y laicos
para trabajar en equipo. Algunas parroquias están sectorizadas y tienen pequeñas comunidades
coordinadas entre sí. Un buen número de fieles trabaja con entusiasmo en la misión permanente y participa
en eventos parroquiales, decanales y diocesanos, y muchos son activos en los diferentes movimientos,
asociaciones y grupos de apostolado que, conforme a su carisma, enriquecen la vida pastoral y misionera.
No obstante, todavía algunas parroquias no han conformado los consejos parroquiales de Pastoral
y de Asuntos Económicos; no respetan, integran ni promueven la diversidad de carismas, y carecen de
planeación y evaluación. Lo mismo sucede con algunas comisiones y dimensiones, que se limitan a
organizar eventos sin procesos, o en otros casos su labor no llega a las parroquias o éstas no participan.
La transmisión de los contenidos esenciales de la fe se da generalmente en familia. Existe interés
en la evangelización y formación por parte de clérigos, consagrados y laicos, especialmente de los agentes
de pastoral. Hay valiosos esfuerzos de evangelización y estudio sistemático de la Palabra de Dios, como
el que ofrecen el Instituto Diocesano de Teología y Pastoral (IDITEP), la Escuela Bíblica, la Escuela de
Evangelización, las Comisiones y dimensiones, y la UNM.
Sin embargo, aún se requiere un mejor acompañamiento y una formación más profunda, integral y
permanente de los laicos comprometidos, de los consagrados, de los seminaristas, de los diáconos, de los
sacerdotes, de los padres de familia y padrinos, de los niños, adolescentes y jóvenes. Es urgente renovar
los contenidos y la pedagogía de las pláticas presacramentales, de la catequesis y del Catecumenado, y
formar al laicado en su vocación y misión propias, así como en la Doctrina Social de la Iglesia, a fin de
lograr una verdadera transformación de la sociedad.
Un rasgo característico del momento que nos está tocando vivir es el cambio de época, en el que
los puntos de referencia emocionales, racionales, históricos, culturales, educativos, laborales, jurídicos,
sociales, éticos y religiosos cambian profunda y rápidamente, lo que influye en la manera de percibir la
realidad, de sentir, de pensar, de elegir, de actuar, de relacionarse y de vivir.
La desintegración familiar, los fracasos de algunos sistemas e instituciones, la rectificación de datos
históricos y de principios científicos, la rapidez con la que muchos conocimientos, maneras de hacer y
productos se vuelven obsoletos y desechables, las decepciones por los errores de jefes de familia y líderes
políticos, sociales y religiosos, ha provocado la sensación de que se están derrumbado imparablemente
todos los puntos de referencia que antes parecían sólidos, volviendo al presente inestable y al futuro tan
incierto que parece inútil proyectar. Entonces, lo que queda es disfrutar el momento presente,
preocupándose únicamente por uno mismo.
Esto, como señala el Proyecto Global de Pastoral de la CEM, está llevando a una seria dificultad
para comprender qué es el ser humano, su dignidad, sus derechos y sus deberes, y al rompimiento de los
vínculos familiares y comunitarios 37 . “Una vida tan fragmentada –afirma Zygmunt Bauman– estimula
orientaciones laterales antes que verticales… Un mundo donde casi nadie cree que cambiar la vida de los
otros sea importante para la propia vida” 38.
Ciertamente, el momento actual es complejo. Pero como decía san Agustín: “Los mismos
sufrimientos que soportamos nosotros tuvieron que soportarlos también nuestros padres… El tiempo
pasado lo juzgamos mejor, sencillamente porque no es el nuestro… Por esto, más que murmurar de
nuestro tiempo, lo que debemos hacer es congratularnos de él”39.
Si miramos iluminados por la fe, nos daremos cuenta que no todo está mal; que hay muchos
elementos positivos. “No se trata sólo y simplemente de acoger los factores positivos y constatar
abiertamente los negativos –decía san Juan Pablo II–. Se trata de someter los mismos factores positivos a
un cuidadoso discernimiento, para que no se aíslen el uno del otro ni estén en contraste entre sí,
absolutizándose y oponiéndose recíprocamente. Lo mismo puede decirse de los factores negativos: no hay
que rechazarlos en bloque y sin distinción, porque en cada uno de ellos puede esconderse algún valor, que
espera ser descubierto y reconducido a su plena verdad” 40.
Así seremos capaces de descubrir, reconocer, valorar y agradecer la generosidad de muchos laicos,
seminaristas, consagrados, diáconos y sacerdotes que, animados por el amor de Dios, se entregan
generosamente a servir a sus hermanos, anunciando el evangelio, celebrando la fe, apoyando a las familias
y tendiendo la mano a los más necesitados: los pobres, los enfermos, los discapacitados, los migrantes,
los presos.
El testimonio de muchos niños, adolescentes, jóvenes y adultos que procuran vivir su fe y se
esfuerzan por impregnar de los valores del Evangelio su familia y sus ambientes de vecinos, de estudio,
de trabajo y la sociedad, es edificante y alentador. Su amor a Dios y la Iglesia, su cercanía a sus parroquias,
37
Cf. Proyecto Global de Pastoral, CEM, 29.
38
Tiempos líquidos, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Ed. Tusquets, México, 2007, pp. 10 y 39.
39
Sermón Caillau-Saint-Yves 2, 92.
40
Pastores dabo vobis, 10.
11
su participación en los diferentes movimientos, asociaciones y grupos de apostolado, así como su cariño
al Seminario, son un don con el que el Señor enriquece a la Diócesis y a la sociedad entera.
Todo esto nos ayuda a ver las muchas oportunidades que tenemos para fortalecer nuestra identidad
y celebrarla mejor; para crecer en la unidad y evangelizar la cultura, para mejorar el acompañamiento y
formación integral y permanente de los novios, de los esposos, de los niños, de los adolescentes, de los
jóvenes, de los adultos, de los agentes de pastoral, de los seminaristas, de los consagrados, de los
diáconos y de los sacerdotes, por medio de procesos coordinados entre las comisiones, las dimensiones y
las parroquias, en las que, al tiempo de dar un lugar central a la liturgia y de acompañar y purificar la piedad
popular, se han de establecer consejos parroquiales y dar mayor participación a los laicos y a los
movimientos, asociaciones y grupos de apostolado.
De esta manera, unidos y haciendo de los espacios y eventos eclesiales auténticos oasis de
misericordia41, podremos ir a todos, especialmente a las familias, a los jóvenes, a los adolescentes, a los
pobres, a los enfermos, a los discapacitados, a los presos, a los migrantes, a las víctimas de las violencias
y a los alejados, a través de misiones y retiros evangelizadores y actividades educativas, culturales,
deportivas y recreativas que fomenten la convivencia, ayuden a sanar el tejido social, a formar en el respeto
a la dignidad y derechos de toda persona, y a contribuir a la justicia, a una mejor distribución de la riqueza,
al cuidado del medioambiente y a la paz, privilegiando, como dice el Papa, “acciones que generan
dinamismos nuevos en la sociedad e involucran a otras personas y grupos que las desarrollarán, hasta que
fructifiquen en importantes acontecimientos históricos”42.
“Hemos de asumir con realismo –dice Benedicto XVI–, confianza y esperanza las nuevas
responsabilidades que nos reclama un mundo que necesita una profunda renovación cultural y el
redescubrimiento de valores de fondo sobre los cuales construir un futuro mejor… De este modo, la crisis
se convierte en ocasión de discernir y proyectar de un modo nuevo. Conviene afrontar las dificultades del
presente… de manera confiada más que resignada”43.
Con esta convicción y escuchando la invitación del Papa Francisco a atrevernos a soñar en
grande 44, en las asambleas de pastoral a nivel parroquial y diocesano, la comunidad oró, discernió y
compartió cuál es la Iglesia que Dios quiere y nosotros soñamos.
Así, en cuanto al encuentro con Cristo y la misión de evangelizar y catequizar, soñamos con una
Iglesia coherente, unida en la fe, misericordiosa, valiente, alegre, activa, cercana, en salida y abierta a
todos, con mayor presencia para evangelizar y formar en Cristo, cumpliendo así con la misión permanente.
Para ello proponemos, a nivel personal: compromiso, coherencia, vida de oración, y formación integral y
permanente; a nivel familiar: compromiso, convivencia fraterna e impulsar la pastoral familiar; a nivel
parroquial: ser parroquias “en salida”, en misión permanente, de puertas abiertas, con apertura a los
movimientos; a nivel Diocesano: diseñar un plan para el acompañamiento permanente de los
evangelizados, aterrizar lo que haya sido planeado, y que los sacerdotes participen activamente.
En lo tocante a la comunión, soñamos una Iglesia que, partiendo del deseo de Jesús de formar un
solo rebaño bajo un solo pastor, viva en fraternidad, como la primera comunidad cristiana. Para ello
proponemos, a nivel familiar: promover la reconciliación y la unidad familiar, así como la comunión diaria
en familia; a nivel parroquial: promover la unión de pequeñas comunidades, asociaciones y movimientos,
y efectuar asambleas parroquiales para impulsar la comunión; a nivel diocesano: unificar criterios para la
conformación de pequeñas comunidades en cada parroquia y para la recepción de los sacramentos; a nivel
Iglesia universal: conocer el Magisterio.
En lo que atañe al testimonio transformador, soñamos una Iglesia protagonista en todas las
instancias que la sociedad nos demande. Para ello proponemos dar testimonio de fe en las dificultades que
vive nuestra sociedad, coherencia de vida en sacerdotes y laicos, reactivar las comisiones y dimensiones
diocesanas, y aprovechar nuestras estructuras de formación.
En lo que se refiere a la celebración litúrgica, especialmente la Misa, la oración y la piedad popular,
soñamos una Iglesia que valore la Eucaristía, en la que haya una participación consciente y activa, y así
se celebre y se viva con mayor dignidad y fruto los actos litúrgicos. Para ello proponemos formar a los
laicos en la liturgia, impulsar el sacramento de la Reconciliación en las parroquias, conocer y valorar los
documentos del Magisterio sobre la piedad popular, y rescatar las devociones populares para hacer de
ellas instrumentos que lleven al encuentro con Cristo y a una vida congruente, sin supersticiones, llena de
amor a Dios y al prójimo, contagiando a los alejados y generando conversión.
41
Cf. Misericordiae vultus, 12.
42
Evangelii Gaudium, 222-223.
43
Caritas in veritate, 21.
44
Cf. Discurso a los jóvenes desde el balcón cardenalicio en la Plaza Simón Bolívar, Bogotá, Colombia, 7 de septiembre de 2017.
12
En cuanto a cómo tendría que ser la formación de los sacerdotes y de los laicos para lograr lo
anterior, sugerimos tener una mejor formación y acompañamiento de clérigos y laicos para implementar el
Reino de Dios, formando en la humildad, la caridad y el servicio.
Ante las necesidades de la gente, Jesús nos repite: “Denles ustedes de comer” (Mt 14, 16).
“También nosotros hoy –decía san Juan Pablo II–, como entonces los Apóstoles, disponemos de medios
ciertamente insuficientes... ¿Qué hacer entonces? ¿Dejar las cosas como están?... La muchedumbre de
hambrientos... eleva hacia nosotros su grito de dolor… Todos podemos hacer algo por ellos... Ciertamente
esto exige renuncias... oponerse a la indiferencia”45.
El Señor nos pide poner todo de nuestra parte, fiados en él, que puede multiplicar lo que tenemos
para satisfacer el hambre material y espiritual de la gente. Él, que hace nuevas todas las cosas (cf. Ap 21,
5), nos invita a colaborar en su plan de salvación. Y aunque la tarea no sea fácil y los resultados no sean
inmediatos, tengamos siempre presente lo que Jesús nos ha dicho: “En el mundo tendrán que sufrir, pero
tengan valor: yo he vencido al mundo” (Jn 16, 33) ¡Esa es nuestra confianza!
Capítulo II
Echen la red y encontrarán (Jn 21,1-19)
Encuentro, comunión, testimonio transformador
Jesús, nuestro modelo, nos enseña que ante todo debemos ponernos en manos de Dios y dejarnos guiar
por él para llevar a cabo la parte que nos toca en su amoroso plan de salvación. Por eso, san Juan Pablo
II pedía que la pastoral tenga siempre presente un principio esencial de la visión cristiana de la vida: la
primacía de la gracia. Así daremos prioridad a la escucha de la Palabra de Dios y la oración, personal y
comunitaria.
El mismo Papa advertía de una tentación en la vida espiritual y en la acción pastoral: “pensar que
los resultados dependen de nuestra capacidad de hacer y programar… Dios nos pide una colaboración
real a su gracia y, por tanto, nos invita a utilizar todos los recursos de nuestra inteligencia y capacidad
operativa… Pero no se ha de olvidar que, sin Cristo, «no podemos hacer nada» (cf. Jn 15,5)” 46
Jesús nos da ejemplo; antes de iniciar su vida pública, se retira al desierto para orar y hacer
penitencia (cf. Lc 4, 1-2). Antes de elegir a los suyos, sube al monte a hacer oración (cf. Lc 6, 12-13). Antes
de predicar, hace oración (cf. Lc 4, 42). Antes de su Pasión, ora en el monte de los Olivos (cf. Lc 22, 39-
42). En la cruz se dirige al Padre para interceder por todos y poner en sus manos su espíritu (cf. Lc 23, 33.
46).
¿Y qué hace Jesús después de orar? Va a la gente (cf. Mt 9, 35), llama a los que elige para que
estén con él, y los envía a predicar (cf. Mc 3, 13-15). Iluminados por su ejemplo, proponemos que nuestro
Plan Diocesano de Pastoral esté articulado en tres dimensiones o etapas: Encuentro, Comunión y
Testimonio transformador.
Estas tres dimensiones o etapas, inspiradas también en la visión conciliar de la Iglesia como
misterio, comunión y misión47, buscan cumplir la misión propia de la Iglesia: Evangelizar48, lo que, como
explica san Paulo VI, “es llevar la Buena Nueva a todos los ambientes de la humanidad y, con su influjo,
transformar desde dentro, renovar a la misma humanidad”49.
Precedidas por un tiempo de preparación –que tratamos en el número 3.4 de este documento–, en
las tres dimensiones o etapas del Plan Diocesano de Pastoral estarán presentes la formación y la liturgia.
Y aunque un tiempo esté destinado a destacar una de las dimensiones o etapas, las otras no se excluirán.
No son compartimientos cerrados, sino como un sistema de vasos comunicantes que se alimentan unos a
otros.
2. 2. Encuentro
Dios siempre viene a nuestro encuentro. A través de su creación nos acaricia, como señala el Papa 50. Y
en Jesús nos abraza con el amor del Espíritu Santo; nos habla y nos comunica su vida por medio de su
45
Mensaje para la Cuaresma de 1996.
46
Novo millennio ineunte, 38.
47
Cf. Lumen gentium, 6; Christifideles laici, 8 ; Pastores dabo vobis 12.
48
Evangelii nuntiandi, 14.
49
Ibíd., 18.
50
Laudato Si, 84.
13
Palabra –contenida en la Sagrada Escritura y en la Sagrada Tradición 51 –, de la liturgia 52 , de los
sacramentos53, de la oración, y del prójimo, especialmente los pobres (cf. Mt 25, 40).
Jesús vino a llevarnos al Padre. A eso se refiere cuando habla del Reino de Dios, que en él se hace
realidad. Por eso nos dice: “Vengan a mí” (Mt 11,28). Encontrándolo y uniéndonos a él nos hacemos hijos
de Dios y hermanos de todos, y compartimos su misión: “vayan y hagan discípulos de todas las naciones”
(Mt 28, 19).
Este encuentro es posible gracias a la fe. “Por la fe –dice santo Tomás Aquino–, el alma se une a
Dios… Por la fe se incoa en nosotros la vida eterna: pues la vida eterna no es otra cosa que conocer a
Dios (cf. Jn 17,3)... La fe dirige la vida presente… Con la fe venceremos las tentaciones” 54.
Encontrando a Jesús nos encontramos con nosotros mismos, como reconoce san Agustín: “…entré
en mi interior guiado por ti… lo que sé de mí lo sé porque tú me iluminas, y lo que de mí ignoro no lo sabré
hasta tanto que mis tinieblas se conviertan en mediodía ante tu presencia”55. Sólo con la guía del Señor
podemos conocernos y alcanzar la plenitud de su madurez, haciendo del amor el centro de nuestra
existencia56.
Quien ama se siente impulsado a ir a los demás para ayudarles a encontrar al Señor, compartiendo
con ellos el Primer anuncio o Kerigma, a fin de suscitar la conversión; acompañándolos en un proceso
catecumenal que les ayude a ser verdaderos discípulos misioneros; y completando junto con ellos su
formación, hasta alcanzar la meta: la santidad del discípulo misionero que, como miembro de la Iglesia, se
ha convertido en evangelizador57.
Ciertamente no partimos de cero; en las parroquias de nuestra Diócesis contamos con fieles
evangelizados. A estos es preciso acompañarlos en su camino de permanente encuentro con Cristo y
consigo mismos, y brindarles los elementos para encontrarse con los demás y evangelizarlos. “La Iglesia
–recuerda san Paulo VI– siempre tiene necesidad de ser evangelizada, si quiere conservar su frescor, su
impulso y su fuerza para anunciar el Evangelio”58.
Además, en nuestras comunidades hay muchas personas que, aunque no participen de la vida
eclesial, parecen idóneas para la misión. Como hizo Jesús con Mateo (cf. Mt 9, 9), es necesario acercarnos
a ellas e invitarlas a formarse y a participar como discípulos misioneros, capacitándolas para el anuncio del
Kerigma, la catequesis, la liturgia, la comunión y la pastoral social.
De esta manera será posible conformar o consolidar los consejos parroquiales de Pastoral y de
Asuntos Económicos, así como equipos de servicios parroquiales, en los que han de estar integrados los
miembros de Vida Consagrada y de los diferentes movimientos, asociaciones y grupos de apostolado
laicales. Estos equipos deberán contar con una clara estructura y liderazgos debidamente formados.
Para una mejor evangelización y atención pastoral permanente es conveniente conocer la realidad
de la comunidad; tener claros los límites parroquiales, la población y su situación social, religiosa, cultural
y económica. Para ello puede ser de utilidad la información que brinda el INEGI. Así será posible sectorizar
el territorio parroquial y conformar pequeñas comunidades, designando responsables que las sirvan.
Una vez integrados los equipos, habrá que organizar misiones evangelizadoras periódicas en cada
sector, visitando domicilios, hospitales y lugares donde la gente se reúne, para saludarla, anunciarle el
Kerigma, escucharla, compartirle lo mucho que vale, animarla a mejorar en el ámbito personal, familiar y
social, e invitarla a integrarse en la comunidad parroquial.
Para esto es conveniente programar retiros de Evangelización a nivel parroquial, decanal, zonal y
diocesano; integrar a quienes han recibido y acepado el Kerigma en pequeñas comunidades vinculadas a
la comunidad parroquial; ofrecer una Catequesis adecuada a niños, adolescentes, jóvenes y adultos; y
procurar que la parroquia, además de estar abierta y recibir con amor a todos, tenga una vigorosa vida
sacramental, especialmente en la celebración de la Eucaristía, que haga posible una experiencia de
encuentro con Cristo y un compromiso real de amor y servicio a los hermanos (cf. Jn 13, 15).
Debemos tener presente, además, que, como ha señalado el Papa Francisco: “la evangelización
también implica un camino de diálogo… con los Estados, con la sociedad… las culturas… las ciencias…
con otros creyentes que no forman parte de la Iglesia católica… Todo para proclamar «el evangelio de la
paz» (Ef 6,15)”59.
51
Cf. Dei Verbum, 10.
52
Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 1068-1069.
53
Ibid., 1131.
54
Exposicion del simbolo de los apostoles, Prólogo §1, 1-4.
55
Confesiones, Libro VII, Cap. 10, 16; Libro X, Cap. 5, 7.
56
Cf. Pastores dabo vobis, 44.
57
Cf. Directorio para la vida y el ministerio de los presbíteros, 18.
58
Evangelii nuntiandi, 8.
59
Evangelii gaudium, 238 y 239.
14
De esta manera queremos asumir la opción propuesta por el Proyecto Global de Pastoral de la CEM
de ser Iglesia misionera y evangelizadora, compasiva, testigo de la redención (180-183; 184-186), y de ser
Iglesia cercana y abierta a todos, como pidió la comunidad en las asambleas diocesanas de Pastoral.
2. 3. Comunión
“Como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú
me has enviado” (Jn 17, 21). En esta oración, Jesús revela que, como dice el Papa: “Dios es una «familia»
de tres Personas que se aman tanto que forman una sola cosa”60. Una familia que nos invita a formar parte
de ella.
Por eso Jesús nos pide: “Permanezcan en mi amor” (Jn 15, 4) ¡Eso es la santidad!61. Permanecer
en Jesús es posible gracias a que él, dándonos su Espíritu, nos ha injertado a su Cuerpo, haciéndonos así
hijos del Padre (cf. Col 1, 18). “Nuestro Redentor –señala san Gregorio Magno– muestra que forma una
sola persona con la Iglesia que Él asumió”62.
Por eso san Juan Pablo II afirma: “Creer en Cristo significa querer la unidad; querer la unidad
significa querer la Iglesia” 63. La unidad con Cristo es inseparable de la unidad con la Iglesia; unidad en la
profesión de la fe, los sacramentos, la misión y la disciplina eclesiástica, y por ello, unidad con el Papa, con
el propio Obispo, con los Obispos, con el clero, con la vida consagrada y con los laicos.
Al servicio de esta unidad están los consejos parroquiales, decanatos, zonas pastorales, Seminario,
Equipo Animador de la Vida Consagrada, Equipo Diocesano de Laicos, Curia Administrativa, de Justicia,
Consultiva y Pastoral, Conferencia del Episcopado Mexicano, Sede Apostólica. Por eso, al tiempo de
fortalecerlos, hemos de impulsar el trabajo pastoral a través de ellos.
El primer lugar donde los fieles tienen una experiencia concreta de Cristo y de la comunión eclesial
es la parroquia64. Esta “comunidad de comunidades”65, que hace presente a la Diócesis y a toda la Iglesia,
debe ser una casa paterna en la que todos tienen lugar, con su vida a cuestas66. Los Institutos de Vida
Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, los diferentes grupos, asociaciones y movimientos laicales,
deben sentirse parte de ella, con su identidad y misión propias67.
En la parroquia todos han de experimentarse amados, seguros, conocidos, aceptados, escuchados,
comprendidos, respetados y acompañados mediante una formación integral y permanente68, que haga
posible desarrollar el don del discernimiento para decidir y actuar conforme a la voluntad divina,
descubriendo y viviendo la propia vocación y misión69.
Para esto es preciso convocar pequeñas comunidades, unidas a la gran comunidad de la parroquia,
del decanato, de la zona pastoral, de la Diócesis, de la Provincia, de la Iglesia que peregrina en México y
de la Iglesia universal. Dichas comunidades deben ser un espacio para la oración, la comunión fraterna, el
acompañamiento, la evangelización, la formación integral y permanente, y la acción de los discípulos
misioneros.
En este sentido, será muy importante que exista un grupo para los adolescentes que culminan la
catequesis y también para los jóvenes que terminan el catecumenado, teniendo presente que, como ha
señalado el Papa: “los mismos jóvenes son agentes de la pastoral juvenil, acompañados y guiados, pero
libres para encontrar caminos siempre nuevos con creatividad y audacia… La pastoral juvenil sólo puede
ser sinodal, es decir, conformando un caminar juntos” 70.
En las pequeñas comunidades y en la gran comunidad parroquial y diocesana se debe procurar
que la evangelización, la catequesis, el catecumenado, las pláticas presacramentales, la celebración
litúrgica –especialmente la Eucaristía y la Reconciliación–, la oración y la piedad popular sean experiencias
de unión con Dios y con los hermanos.
De esta a unidad, que nos convierte en “signo e instrumento de la unión íntima con Dios y de la
unidad de todo el género humano” 71, brota un ímpetu caritativo y misionero para que todos seamos uno,
según la voluntad del Señor, que quiere la unidad de toda la humanidad. Por eso san Juan Pablo II afirma
60
Ángelus, 22 de mayo de 2016.
61
Cf. Gaudete et exsultate, 20.
62
Moralia in Job, Praefatio 6, 14
63
Ut unum sint, 9
64
Aparecida, 170.
65
Idem.
66
Cf. Evangelii gaudium, 47.
67
Cf. Aparecida, 170.
68
Cf. Christifideles laici, 57.
69
Ibíd., 58.
70
Christus vivit, 203 y 206.
71
Lumen gentium, 15.
15
que, como Iglesia, estamos “llamados a revivir la comunión misma de Dios y a manifestarla y comunicarla
en la historia”72.
En el cumplimiento de esta misión debemos tener presente que la Santísima Trinidad es el modelo
perfecto de comunión, y que ella, al ser familia de tres personas distintas unidas en el amor, nos revela
que, como decía san Juan Pablo II, unidad no significa uniformidad73.
¿Acaso son iguales todos los colores con los que se pinta un cuadro? ¿Son idénticos todos los
ingredientes para elaborar un platillo? ¿Juegan todos los futbolistas en la misma posición? Precisamente,
la diversidad hace posible la belleza, el sabor y que un equipo pueda coordinarse para alcanzar la victoria.
Por eso, la unidad que estamos llamados a construir en casa y en nuestros ambientes, no consiste
en que todos sintamos, pensemos, hablemos y actuemos de la misma manera, sino en armonizar las
diferencias a través del amor, que nos hace comprender, actuar con justicia, ser solidarios, pacientes y
serviciales, perdonar y pedir perdón (cf. 1 Cor 13, 4-5)
De esta manera asumimos la opción propuesta por el Proyecto Global de Pastoral de la CEM de
ser Iglesia pueblo (177-179), y el “sueño” manifestado por la comunidad en las asambleas diocesanas de
Pastoral: ser Iglesia unida en la fe, alegre, valiente y misericordiosa, que conozca y viva la liturgia y haga
de la piedad popular un instrumento que lleve al encuentro con Cristo y a una vida llena de amor a Dios y
al prójimo, contagiando a los alejados y generando conversión.
2. 4. Testimonio transformador
A la luz del mandato del Señor: “Vayan por todo el mundo y anuncien el Evangelio” (Mc 16, 15), nos
sentimos impulsados a un testimonio que haga posible mejorar nuestra vida y nuestro entorno. “La Iglesia
evangeliza –señala san Paulo VI– cuando, por la sola fuerza divina del Mensaje que proclama, trata de
convertir al mismo tiempo la conciencia personal y colectiva de los hombres, la actividad en la que ellos
están comprometidos, su vida y ambiente concretos… Se trata de alcanzar y transformar con la fuerza del
Evangelio los criterios de juicio, los valores determinantes, los puntos de interés, las líneas de pensamiento,
las fuentes inspiradoras y los modelos de vida de la humanidad, que están en contraste con la Palabra de
Dios y con el designio de salvación”74.
Todo esto con la conciencia de que, “no hay humanidad nueva si no hay en primer lugar hombres
nuevos con la novedad del bautismo y de la vida según el Evangelio. La finalidad de la evangelización es
por consiguiente este cambio interior” 75. Benedicto XVI advertía que el bienestar moral del mundo no puede
garantizarse únicamente a través de estructuras, porque éstas sólo pueden funcionar si en una comunidad
existen convicciones vivas capaces de motivar a una adhesión libre al ordenamiento comunitario76.
Por eso, la comunidad eclesial, especialmente la parroquia, debe ofrecer un acompañamiento y
una formación que ayuden a la persona a una verdadera transformación como mejora integral y
permanente en vistas a su vocación a la santidad.
Para ello es necesario fomentar la vida de oración y el discernimiento, que hacen posible mirar la
vida en su profundidad, “percibiendo –como enseña san Juan Pablo II– sus dimensiones de gratuidad,
belleza, invitación a la libertad y a la responsabilidad… descubriendo en cada cosa el reflejo del Creador y
en cada persona su imagen viviente (cf. Gn 1, 27; Sal 8, 6)”77.
Sólo mirando con profundidad podemos asumir la responsabilidad que tenemos de cuidar nuestra
propia vida y de llevarla a su perfección en el amor78. Sólo mirando con profundidad podemos ver en cada
persona la imagen de Dios, y comprometernos a amar, reconocer, respetar, promover y defender su vida,
su dignidad, sus derechos y sus deberes, en todas las etapas de su existencia y en todas las
circunstancias79. Sólo mirando con profundidad podemos descubrir que la creación es un don que Dios nos
ha confiado y que el medioambiente es un bien colectivo y responsabilidad de todos80.
Con esa mirada profunda que nos da la fe, podemos vivir la libertad de los hijos de Dios (cf. Rm 8,
14-17) y superar el individualismo. Entonces, como señala el Papa Francisco, “realmente se puede
desarrollar un estilo de vida alternativo y se vuelve posible un cambio importante en la sociedad”81.
72
Christifideles laici, 8.
73
Cf. Audiencia, Miércoles 14 de diciembre de 1994.
74
Evangelii nuntiandi, 18 y 19.
75
Ibíd., 18.
76
Cf. Spe salvi, 24a.
77
Evangelium vitae, 83.
78
Ibíd., 2.
79
Ibíd., 42.
80
Cf. Laudato Si´, 95.
81
Ibíd., 208.
16
Por eso necesitamos una seria formación integral que nos haga cristianos convencidos del
Evangelio; verdaderos discípulos misioneros de Cristo, que, aún en medio de nuestras caídas, procuremos
vivir coherentemente nuestra fe, con la ayuda del Espíritu Santo, confiando en que, como dice el Papa
Francisco, el Señor cumplirá nuestra misión también en medio de nuestros errores y malos momentos, con
tal que no abandonemos el camino del amor y estemos siempre abiertos a su acción82.
Y esa acción tiene por meta la santidad, es decir, nuestra identificación con Cristo y sus deseos, lo
que “implica el empeño por construir, con él, ese reino de amor, justicia y paz para todos” 83. Por eso el
Santo Padre afirma: “La tarea evangelizadora implica y exige una promoción integral de cada ser humano…
Todos los cristianos, también los Pastores, están llamados a preocuparse por la construcción de un mundo
mejor… a ser instrumentos de Dios para la liberación y promoción de los pobres, de manera que puedan
integrarse plenamente en la sociedad”84.
En esta tarea, la Doctrina Social de la Iglesia ofrece una invaluable ayuda. Por eso es necesario
formarnos en ella, con la ayuda del Compendio de la Doctrina Social, a fin de que, conociéndola, la
hagamos vida y la difundamos en nuestros ambientes, promoviendo así el cumplimiento de los propios
deberes, la participación ciudadana en la construcción de una sociedad que reconozca, respete, promueva
y defienda la vida, la dignidad y los derechos de toda persona; el apoyo solidario a las personas vulnerables,
a los pobres, a los migrantes, a las víctimas de las violencias, y el cuidado del medioambiente.
Para ello es preciso hacer llegar la luz del Evangelio a lo que nos da identidad y rumbo: la cultura,
modo específico del existir y del ser que abarca a la persona entera, espíritu y cuerpo, y que crea lazos
que la unen con los demás, determinando así el carácter social de la existencia. Por eso, como señala san
Juan Pablo II, una dimensión fundamental de la cultura es la sana moralidad, que permite impregnar de
honestidad y ética la ciencia, la tecnología, el trabajo y la vida política y social85.
Esta moralidad requiere que tengamos presente que sólo somos nosotros mismos mediante la
verdad, y que llegamos a ser más en el conocimiento de nosotros mismos a través del conocimiento cada
vez más perfecto de la verdad86. De ahí que una tarea esencial de la cultura sea la educación, que hace a
la persona más plena. Esta tarea educativa se desarrolla, sobre todo, en la familia, donde se nos comunican
valores y se nos enseña a ser miembros de la comunidad, que es la familia y la nación87.
Otros actores también influyen en la tarea educativa; la escuela, la universidad, el Estado, la Iglesia,
el ambiente de vecinos, de escuela, de trabajo y de convivencia social, los medios de comunicación y las
redes sociales. Todos ellos brotan de la cultura y la crean.
Dado que la cultura marca la vida de la persona y de la comunidad, san Paulo VI insistía en la
importancia de evangelizarla en sus raíces, y advertía que “la ruptura entre Evangelio y cultura es sin duda
alguna el drama de nuestro tiempo” 88 . Por eso, san Juan Pablo II decía: “¡Hay que movilizar las
conciencias!”89. Es preciso que el Evangelio se encarne en la cultura y que esto se manifieste en un estilo
de vida que refleje que: “El respeto de los derechos inalienables de la persona humana es el fundamento
de todo”90.
De esta manera, como propone el Proyecto Global de Pastoral de la CEM, queremos ser una Iglesia
comprometida con la paz y las causa sociales (174-176), que anuncia y construye dignidad humana (172-
173), compartiendo con los adolescentes y jóvenes la tarea de hacer un país lleno de esperanza, alegría y
vida plena (187-188). Una Iglesia que ofrezca una formación integral y permanente que nos ayude a vivir
con coherencia nuestro compromiso cristiano, como pidió la comunidad en las asambleas diocesanas de
Pastoral.
82
Cf. Gaudete et exsultate, 24.
83
Ibíd., 25.
84
Evangelii gaudium, 182-187.
85
Cf. Discurso a la UNESCO, París, 2 de junio de 1980, 6, 8, 12, 20.
86
Ibid., 17.
87
Ibid., 11, 12, 14.
88
Evangelii nuntiandi, 20.
89
Discurso a la UNESCO, París, 2 de junio de 1980, 22.
90
Ibid, 4; Discurso ONU, 2 octubre 1979, 7 y 13.
17
Capítulo III
Permanezcan en mi amor (Jn 15, 4)
Formación y liturgia
Jesús provee a nuestro crecimiento, hasta que alcancemos su plenitud (cf. Col 2, 19; Ef 4, 11-16). Por eso
nos invita a permanecer unidos a él, como los sarmientos a la vid (cf. Jn 15, 5). San Juan Pablo II afirma
que este pasaje del Evangelio revela un aspecto fundamental de nuestra vida y nuestra misión: la llamada
a crecer, a madurar continuamente, a dar siempre más fruto. Aquí se sitúa la necesidad de una formación
integral y permanente91.
Esta formación requiere, ante todo, de la acción divina; dejar que el viñador actué en nosotros para
que demos más fruto (cf. Jn 15, 2). Meditando esta parábola, san Agustín comenta: “Damos nosotros culto
a Dios, y Dios nos lo da a nosotros… cuando él nos cultiva nos hace mejores” 92 . Y esto sucede
particularmente en la liturgia.
Por eso, formación y liturgia han de acompañar todas y cada una de las dimensiones o etapas del
Plan Diocesano de Pastoral, teniendo presente que, como advierte Alcuino: “Todo fruto de buena obra
procede de aquella raíz que nos salvó con su gracia, que nos hace progresar con su auxilio para que
podamos dar más fruto”93. Fruto que debe manifestarse en nuestras obras, como señala san Agustín94.
Dios es el primer y gran educador de su Pueblo (cf. Dt 32, 10-12). Él nos educa plenamente en Jesús, el
Maestro, a través del Espíritu Santo, que actúa particularmente en la Iglesia95, por medio de los sacerdotes,
diáconos, consagrados y laicos96, que, como señala el Proyecto Global de Pastoral de la CEM, debemos
empeñarnos en vivir y ofrecer procesos de acompañamiento y formación97.
Estos procesos han de ayudarnos a descubrir la propia vocación, a madurar en la disponibilidad
para vivirla en el cumplimiento de la propia misión, a procurar la unidad de vida, y a dar fruto en cada sector
de nuestra actividad y de nuestra existencia, comprendiendo que Dios nos llama a trabajar para el
advenimiento de su Reino en la historia98.
Dado su contacto más inmediato con los fieles, corresponde a la parroquia esta tarea 99 ,
educándolos en la recepción de la Palabra, en el diálogo litúrgico y personal con Dios, en la vida de caridad
fraterna, haciendo palpar de modo directo y concreto el sentido de la comunión eclesial y de la
responsabilidad misionera. En esta tarea, las pequeñas comunidades pueden ser de gran ayuda, así como
el catecumenado100. Las comisiones y dimensiones diocesanas, la zona pastoral y el decanato han de
apoyar a la parroquia en este esfuerzo.
La familia, en cuanto “Iglesia doméstica”, es la primera y fundamental escuela para la formación
humana y cristiana 101 . También son lugares importantes de formación las escuelas y universidades
católicas, los grupos, las asociaciones y los movimientos 102 . Por eso debemos estar cerca de ellos y
contribuir a su misión.
San Juan Pablo II, al tiempo de recordar que la formación es un derecho y un deber de todos,
destaca que para que se dé una pastoral verdaderamente incisiva y eficaz hay que formar a los
formadores103, quienes deben tener presente que sólo unidos al Maestro podrán enseñar a otros, como
91
Cf. Christifideles laici, 57.
92
Cf. De verb. Dom. serm., 59.
93
Catena Aurea, 13501.
94
Ídem.
95
Cf. PGP, 71.
96
Cf. Christifideles laici, 61.
97
Ídem.
98
Ibíd., 58-60.
99
Cf. Aparecida, 305.
100
Cf. Christifideles laici, 61.
101
Cf. Código de Derecho Canónico, c. 793 § 1.
102
Cf. Christifideles laici, 61-62.
103
Ibíd., 63.
18
advierte san Jerónimo104.
Sólo hay formación si cada uno la asume con responsabilidad. Entonces, al formarnos, al tiempo
de sentir la exigencia de seguir profundizando en ella, nos hacemos capaces de formar a los demás105.
Como se trata de formar a la persona en orden a su fin último y al bien común de la sociedad, todos,
particularmente los niños, los adolescentes y los jóvenes han de recibir la orientación y el apoyo para
desarrollar armónicamente sus dotes físicas, afectivas, morales e intelectuales, y adquirir un sentido cada
vez más perfecto de la responsabilidad y de la libertad, así como de la activa participación en la vida
social106.
Por eso, en el acompañamiento y en el proceso formativo, personal y comunitario, hay que tener
en cuenta las cuatro dimensiones con las que se pretende abarcar a la persona entera, de manera gradual
y progresiva, a través de etapas y modalidades adecuadas a cada edad y condición: humana, espiritual,
intelectual y apostólica.
La formación humana ayuda al desarrollo integral de la persona, desde el punto de vista físico,
psicológico, moral y relacional, promoviendo la salud física, psíquica, sexual y moral.
La formación espiritual, obra del Espíritu Santo, nos lleva a la filiación divina en Cristo, promoviendo
el amor y escucha de la Palabra de Dios, la vida litúrgica y sacramental, la oración, el amor y devoción a
María, la comunión de los santos, la comunión y el servicio misionero, el discernimiento, la dirección
espiritual, la piedad popular y la ascesis.
La formación intelectual ayuda a conocer y vivir aquello que creemos, celebramos, vivimos y
oramos, y a introducirnos en la totalidad de lo real107, a través de la Doctrina cristiana, la Palabra de Dios,
la Doctrina social de la Iglesia, la eclesiología, la historia de la Iglesia, la educación en el uso de los medios
de comunicación y las redes sociales, la cultura general.
La formación apostólica ofrece los elementos para que cada bautizado pueda vivir la vocación y la
misión que le son propias, en comunión y participación. Para ello es necesario promover la formación de
los formadores y dirigentes, de los agentes de evangelización, de los equipos de liturgia y celebradores,
de los agentes de pastoral.
Ciertamente, en la hora actual, marcada por problemas, penas, incertidumbres, temores y
desalientos, resulta indispensable acompañarnos y formarnos en la esperanza, virtud teologal que nos da
la fuerza para seguir adelante.
Benedicto XVI recordaba que todos necesitamos esperanzas –grandes o pequeñas–, que día a día
nos mantengan en camino; pero que sin la gran esperanza, que ha de superar todo lo demás, aquellas no
bastan. “Esta gran esperanza sólo puede ser Dios, que abraza el universo y que nos puede proponer y dar
lo que nosotros por sí solos no podemos alcanzar… Sólo su amor nos da la posibilidad de perseverar día
a día con toda sobriedad, sin perder el impulso de la esperanza, en un mundo que por su naturaleza es
imperfecto”108.
¿Dónde aprender y ejercitar la esperanza? Responde Benedicto XVI: Primero, en la oración.
“Cuando ya nadie me escucha, Dios todavía me escucha”109. Al orar, además de poner mis inquietudes en
manos de Dios, que me ama y se interesa por mí (cf. 1 Pe 5, 7), recibo su ayuda para liberarme de los
deseos equivocados y de las falsas esperanzas. Santa Teresa, que lo comprendió, oraba así: “¡Oh Amor,
que me amas más de lo que yo me puedo amar...! ¿Para que quiero, Señor, desear más de lo que Vos
quisiereis darme?”110.
Benedicto XVI señala también que todo lo que hacemos y sufrimos por buscar soluciones, a fin de
mejorar y colaborar a que el mundo sea un poco más humano, es “lugar” de aprendizaje y ejercicio de la
esperanza, si, a pesar de que parezca que ya no hay nada que esperar, encuentro ánimo para seguir
adelante recordando que mi vida y la historia están custodiadas por el poder indestructible del Amor y que,
gracias a él, todo tiene sentido e importancia111.
Finalmente, Benedicto XVI comenta que la perspectiva del Juicio también es un “lugar” de
aprendizaje y ejercicio de la esperanza, ya que, al tiempo de ser una llamada a nuestra conciencia, nos
hace ver que, en medio de un mundo plagado de injusticia, al final, Dios responderá a nuestro anhelo
haciendo justicia. Porque “la gracia no excluye la justicia. No convierte la injusticia en derecho”112.
104
Cf. Catena Aurea, 5305.
105
Cf. Christifideles laici, 63.
106
Cf. Código de Derecho Canónico, c. 795.
107
Cf. Educar para una nueva sociedad, Ed. CEM, A.R., México, 2012, n. 43, p. 81.
108
Spe salvi, 30.
109
Ibid., 32.
110
Exclamaciones del alma a su Dios, Ed. Aguilar, colección crisol, Madrid, 1957.
111
Spe salvi, 35.
112
Ibid., 41-44.
19
“El mal –señala el Papa Francisco– no tiene la última palabra” 113. Así nos lo hace saber el Espíritu
Santo, que nos anuncia las cosas que van a suceder (cf. Jn 16, 13): los gozos de la patria celestial, como
señala san Beda114. De esta manera, llenándonos de esperanza, nos anima y nos lleva hacia delante.
Mediante la liturgia, por acción del Espíritu Santo, actualizamos la obra de nuestra redención, que Cristo
continúa en su Iglesia115; participamos de su alabanza y adoración al Padre, somos fortalecidos en la
unidad, nos llenamos del poder transformador de su amor para ser signo e instrumento de salvación para
toda la humanidad, y participamos de lo que será la liturgia celestial116.
Gracias a que por el Bautismo nos hemos unido a Cristo, con la ayuda de su Espíritu podemos
ofrecernos a Dios juntamente con Jesús, presente y actuante en su Iglesia y en toda celebración litúrgica117.
Esto se llama sacerdocio común de los fieles, en el que “no todos los miembros tienen la misma función”
(Rm 12,4); de entre ellos, Dios llama a algunos para que, por el sacramento del Orden representen a Cristo
como Cabeza del Cuerpo, anunciando su Palabra, guiando a la comunidad y presidiendo la liturgia.
San Agustín decía que a Dios “se accede por vía del amor”118; guiados por el amor, comprendemos
que en la liturgia, como señala el Cardenal Ratzinger, “se ventilan cuestiones tan importantes como nuestra
comprensión de Dios y del mundo, nuestra relación con Cristo, con la Iglesia y con nosotros mismos”119.
El cuidado del templo, de los ornamentos, de los vasos sagrados, de los libros litúrgicos, del sonido;
la observancia de las normas litúrgicas, así como la preparación espiritual y la manera misma de celebrar,
todo esto es una confesión de lo que significa Dios para nosotros; es una confesión de fe. Por eso, el beato
Juan de Palafox, decía: “Sucio el templo, sucia el alma... los vasos y los corporales sin limpieza, no deben
andar muy limpios los pensamientos120.
En la liturgia sobresalen los siete sacramentos, que nos comunican la vida divina121: Bautismo,
Confirmación, Eucaristía, Penitencia, Unción de los enfermos, Orden sacerdotal y Matrimonio122. En ellos
descubrimos nuestra identidad y el sentido de todas las cosas, y recibimos la gracia para trabajar, en la
Iglesia y desde la Iglesia, en la mutua edificación (cf. Rm 14,19). “Una liturgia bien entendida –señala el
Cardenal Ratzinger– va siempre más allá del recinto eclesial, hasta alcanzar la vida activa”123.
Entre los sacramentos destaca la Eucaristía, “fuente y culmen de toda la vida cristiana” 124, ya que
“contiene todo el bien espiritual de la Iglesia, es decir, Cristo mismo, nuestra Pascua”125. “El que come Mi
carne y bebe Mi sangre –dice el Señor–, tiene vida eterna, y yo le resucitaré el último día” (Jn 6, 54). De
ahí que san Ignacio de Antioquia defina a la Eucaristía como: “medicina de inmortalidad, antídoto contra la
muerte”126.
“En la Eucaristía –señala Benedicto XVI–, Jesús no da « algo », sino a sí mismo” 127. Por eso, al
tomar el pan, dijo: “Esto es mi cuerpo, que se entrega por ustedes”. Y luego hizo lo mismo con una copa
de vino, diciendo: “Esta copa es la nueva alianza sellada con mi sangre, que se derrama por ustedes” (cf.
Lc 22, 14-20). Así, como dice san Juan Crisóstomo, se ofrece para ser reconocido, tocado, consumido,
abrazado por todos los que lo deseen128.
Dándosenos en alimento, Jesús nos une a sí mismo y nos hace participar de su unión con el Padre
en el Espíritu Santo, comunicándonos “la misma vida divina” 129. De esta manera nos da la fuerza para
cumplir su mandato: “Hagan esto en memoria mía”. Él nos pide recibir este inigualable regalo del
sacramento de su cuerpo y de su sangre celebrándolo con amor e implicándonos en la dinámica de su
entrega130.
Así como Jesús se nos da, debemos darnos a Dios y a los demás. Darnos a Dios es dejarnos amar
por él, amarlo, confiar en él, estar unidos a él a través de su Palabra, sus sacramentos –especialmente la
113
Christus vivit, 126.
114
Cf. Catena Aurea, 13612.
115
Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 1068-1069.
116
Ibíd., 1111, 1112, 1187.
117
Cfr. Mt 18,20; Catecismo de la Iglesia Católica, 1088.
118
Sermo 131.
119
Un canto nuevo para el Señor, Ed. Sígueme, Salamanca, 2005, pp. 7 y 59.
120
Dictámenes a curas de almas, p. 413
121
Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 1131.
122
Ibíd., 1113.
123
Un canto nuevo para el Señor, Op. Cit., pp. 7 y 8.
124
Lumen gentium, 11.
125
Presbyterorum ordinis, 5.
126
Carta a los Efesios, 20.
127
Sacramentum caritatis, 7.
128
Catena Aurea, 11219.
129
Sacramentum caritatis, 8.
130
Ibid., 11.
20
Eucaristía– y la oración, y hacer su voluntad, que es que amemos a los demás y nos demos a ellos, siendo
comprensivos, justos, pacientes, solidarios, serviciales, perdonando y pidiendo perdón.
“Las cosas santas se tratan santamente”. En nuestras parroquias y comunidades debemos hacer
vida esta exhortación, a fin de dar una digna alabanza a Dios, disponernos a recibir las gracias que quiere
comunicarnos, y ayudar a los demás a hacer lo mismo.
De igual manera, conscientes de que el Señor resucitado confió a los que eligió el servicio de
perdonar los pecados (cf. Jn 20, 22-23; 2 Cor 5, 18), debemos procurar que quien se acerque al
Sacramento de la Reconciliación experimente cómo, a través del sacerdote, el Padre “corre” hacia él para
comunicarle su amor, y que la Iglesia se alegra por la vuelta de aquel hermano “que estaba muerto y ha
vuelto a la vida; estaba perdido, y ha sido hallado” (Lc 15, 32).
La confesión individual e íntegra y la absolución son el único modo ordinario para reconciliarnos con
Dios y la Iglesia, a no ser que una imposibilidad física o moral excuse de este modo de confesión131. Por
eso, todos tenemos derecho a acercarnos a este sacramento132.
Aunque en casos de necesidad grave se puede recurrir a la celebración comunitaria de la
reconciliación con confesión general y absolución general, queda el compromiso de confesar
individualmente los propios pecados graves, en el tiempo debido. El juicio sobre las condiciones requeridas
corresponde al Obispo, teniendo en cuenta los criterios acordados por la Conferencia Episcopal133.
A los sacerdotes, el Papa Francisco les recuerda: “…sin disminuir el valor del ideal evangélico hay
que acompañar con misericordia y paciencia las etapas posibles de crecimiento… el confesionario… debe
ser… el lugar de la misericordia del Señor que nos estimula a hacer el bien posible”134.
Al ejercer este ministerio, el sacerdote actúa “in persona Christi”; por eso, debe vivir en comunión
eclesial, y atenerse a los criterios de la Iglesia sobre la doctrina moral, comportarse como servidor justo y
misericordioso 135 , y educar las conciencias de manera positiva y verdadera, ayudándoles con amor y
paciencia en su camino a la santidad.
En cuanto a las manifestaciones de la piedad popular, entre las que se encuentran el rosario, la
coronilla, las fiestas patronales, las novenas, el Vía Crucis, las procesiones, las danzas, los cantos, la
devoción a María, a los ángeles y los santos, las promesas, oraciones y peregrinaciones 136 , hay que
recordar que son un punto de partida para que la fe del pueblo madure y se haga más fecunda137.
El Magisterio considera la piedad popular como un “verdadero tesoro del pueblo de Dios”138, ya que
manifiesta la sed de Dios de los sencillos y los pobres. Expresa los atributos de Dios, especialmente la
paternidad y la providencia. Hace crecer en la paciencia, el sentido de la cruz en la vida cotidiana, el
desprendimiento, la apretura a los demás, la generosidad y el sacrificio. Su fuente es el Espíritu Santo, que
actúa en la Iglesia; su punto de referencia es el misterio de Cristo Salvador; su objetivo es la gloria de Dios
y la salvación de la gente; su ocasión histórica es el “feliz encuentro entre la obra de evangelización y la
cultura” 139.
En sus manifestaciones más auténticas, la piedad popular, favoreciendo la fe del pueblo, predispone
a la celebración de los Sagrados misterios. Para ello, es importante tener presente que, ante todo, la liturgia
es el centro de la vida de la Iglesia y ninguna otra expresión religiosa puede sustituirla o ser considerada a
su nivel140. De ahí que los ejercicios piadosos han de organizarse de modo que vayan de acuerdo con la
sagrada liturgia, en cierto modo deriven de ella y a ella conduzcan141.
“Quien cultiva su tierra se saciará de pan” (Prov 12,11). Esta exhortación nos anima a “preparar el terreno”,
para poder iniciar las dimensiones o etapas del Plan Diocesano de Pastoral. “El orden –comenta san
Agustín– es el que, guardándolo, nos lleva a Dios; y si no lo guardamos en la vida, no lograremos elevarnos
hasta él” 142.
131
Cf. CONGREGACIÓN PARA EL CLERO, El sacerdote, confesor y director espiritual, ministro de la misericordia divina, 43.
132
Cf. Código de Derecho Canónico, cc. 986 y 991.
133
Ibid., c. 961.
134
Evangelii Gaudium, 44.
135
Cf. Código de Derecho Canónico, c. 978.
136
Cf. Aparecida, 259.
137
Cf. Directorio sobre la piedad popular y la liturgia, 64.
138
Ibíd., 9.
139
Ibíd., 61.
140
JUAN PABLO II, Mensaje a la Asamblea Plenaria de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, 21 de
septiembre del 2001, 4 y 5.
141
Cf. Sacrosanctum Concilium, 13.
142
El Orden, Libro I, Disputa II, Cap. 9, 27.
21
El objetivo de esta preparación será revisar y actualizar la Diócesis, las parroquias y las pastorales
para adecuarlas a las necesidades de modo que respondan mejor a su naturaleza evangelizadora y
misionera143.
Para ello proponemos tres objetivos específicos: reestructurar y mejorar los servicios de la Curia
(Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral), del Seminario, de las zonas pastorales, de los
decanatos y de las parroquias; ponerlos al día en cuestiones legales, civiles, laborales, fiscales y eclesiales;
y hacer de los espacios y eventos eclesiales lugares seguros para todos.
El primer objetivo requerirá estudiar los límites parroquiales a fin de confirmar o rectificar los
territorios, unir parroquias o establecer nuevas. Lo mismo se hará en cuanto a los servicios que brindan la
Curia (Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral) y otras instituciones diocesanas, entre ellas el
Seminario, que deberá revisar y actualizar los objetivos, tiempos, medios y actividades de acuerdo a su
misión formativa144.
El segundo objetivo requerirá la revisión de los aspectos mencionados con la guía de la Economía
Diocesana y del Departamento de Asociaciones Religiosas, contando con el apoyo de los consejos
parroquiales de Pastoral y de Asuntos Económicos. El tercer objetivo se desarrollará con la orientación del
Equipo del Programa “Iglesia segura para todos” y del Consejo Operativo de Protección a Niñas, Niños,
Adolescentes y Adultos Vulnerables, así como de las comisiones, dimensiones y departamentos que
correspondan.
En todo esto, es indispensable que, como ha pedido el Papa Francisco, caminemos con los jóvenes
y les ofrezcamos lugares “donde no sólo reciban una formación, sino que también les permitan compartir
la vida, celebrar, cantar, escuchar testimonios reales y experimentar el encuentro comunitario con el Dios
vivo” 145.
Conclusión
Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de todos, especialmente de los pobres y de
cuantos sufren, “son a la vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo” 146.
La Diócesis de Matamoros hace suya esta expresión conciliar. Por eso quiere ir a todos para
llevarles la luz del Evangelio y el amor de Dios, a fin de renovar a la sociedad y ayudar a cada uno a
salvarse, con la convicción de que Cristo nos descubre lo que somos y lo que podemos llegar a ser147 ¡Él
es el camino, la verdad y la vida! (cf. Jn 14, 6).
Como María, la más perfecta discípula misionera de Cristo, deseamos encaminarnos presurosos a
compartir con todos lo más grande que tenemos: a Jesús, para, como dice el Papa Francisco, levantar la
vida de nuestros hermanos 148 . Hagámoslo, conscientes de que, ante los retos que nos esperan, la
Virgencita nos repite aquello que dijo a san Juan Diego: “¿No estoy yo aquí, que soy tu madre?”149.
Que ella, Refugio de los pecadores, nos conduzca a Jesús y nos obtenga de él la fuerza de su
Espíritu para que, confiando en la primacía de la gracia, pongamos todo de nuestra parte, teniendo presente
aquella exhortación de san Gregorio Magno: “Que ninguna adversidad nos prive del gozo de esta fiesta
interior, porque al que tiene la firme decisión de llegar a término ningún obstáculo del camino puede frenarlo
en su propósito. No nos dejemos seducir por la prosperidad, ya que sería un caminante insensato el que,
contemplando la amenidad del paisaje, se olvidara del término de su camino”150.
¡A echarle ganas!
En la Sede episcopal de Matamoros, Tam., a 16 de junio 2019, Solemnidad de la Santísima Trinidad, Año
Jubilar Diocesano.
143
Cf. Evangelii gaudium, 27.
144
Cf. El don de la vocación presbiteral, 11.
145
Christus vivit, 204.
146
Gaudium et spes, 1.
147
Ibíd., 22.
148
Cf. Santa Misa en la Basílica de Guadalupe, 13 de febrero de 2016.
149
VALERIANO Antonio, Nican Mopohua, Ed. Fundación La Peregrinación, México 1998.
150
Sobre los evangelios, homilía 14, 6.
22
MANUAL OPERATIVO DEL
PLAN DIOCESANO DE PASTORAL 2019-2023
Hasta que Cristo sea formado en nosotros
(cf. Gál 4,19)
OBJETIVO GENERAL
Ofrecer un programa integral de formación, celebración y acción para vivir un encuentro con Dios, con
nosotros mismos y con los demás que nos lleve a la comunión y nos haga capaces de un testimonio
transformador a nivel personal, familiar, eclesial y social.
Inspiración
También asume las propuestas de las asambleas diocesanas de pastoral: Iglesia unida en la fe,
misericordiosa, cercana, alegre, valiente, activa, evangelizadora y abierta a todos, que ofrezca una
formación integral y permanente que ayude vivir con coherencia el compromiso cristiano. Una Iglesia que
conozca y viva la Liturgia, y haga de la piedad popular un instrumento de encuentro con Cristo y de una
vida llena de amor a Dios y al prójimo, contagiando a los alejados y generando conversión.
Estructura
La estructura del PDP se basa en el método que siguió Jesús: llamó a los que él quiso, para que estuvieran
con él, y para enviarlos a predicar (cf. Mc 3, 13-15). También considera la visión conciliar de la Iglesia, que
san Juan Pablo II sintetiza así: misterio de comunión en misión. Todo buscando que nuestra Diócesis
cumpla la misión que Jesús nos ha confiado: evangelizar.
Desarrollo
Precedidas por un tiempo de preparación (2019-2020), las etapas del PDP serán tres: Encuentro,
Comunión y Testimonio transformador. En todas ellas estarán presentes la Formación y la Liturgia. Aunque
un tiempo esté destinado a destacar uno de los elementos del Objetivo general, los otros no se excluirán.
Cada etapa tendrá tres objetivos específicos, tres acciones, los medios, los responsables y los tiempos en
que habrá de desarrollarse, así como una evaluación intermedia y final que permita tomar decisiones a
tiempo a fin de logar una mejora que permita alcanzar los objetivos trazados. Dichas evaluaciones
consistirán en ver si se han alcanzado los objetivos en los tiempos establecidos.
23
PREPARAR EL TERRENO (2019-2020)
Quien cultiva su tierra se saciará de pan (Prov 12,11)
OBJETIVO GENERAL:
Actualizar la Diócesis, las parroquias y las pastorales para adecuarlas a las necesidades de
modo que respondan mejor a su naturaleza evangelizadora y misionera.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Reestructurar y mejorar los servicios de la Curia (Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral), del
Seminario, de las zonas pastorales, de los decanatos y de las parroquias.
b. Poner al día en cuestiones legales, civiles, laborales, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa, de
Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los bienes de los
movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
c. Hacer de los espacios y eventos eclesiales lugares seguros para todos.
ENCUENTRO (2020-2021)
Por el camino, háblate a ti mismo, habla a Cristo... habla también de él
(San Ambrosio, Comentarios sobre los salmos, Salmo 36, 65-66: CSEL 64, 123-125)
OBJETIVO GENERAL:
Favorecer el encuentro con Dios, con nosotros mismos, con los demás,
y compartir la alegría del Evangelio.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Convocar a los agentes activos, invitar nuevos agentes idóneos, y fomentar su encuentro con Cristo.
b. Favorecer el encuentro de los agentes consigo mismos a la luz de Cristo, camino de conversión.
c. Impulsar en los agentes el encuentro con los demás y capacitarlos para anunciar el Kerigma.
COMUNIÓN (2021-2022)
Que todos sean uno (Jn 17, 21)
OBJETIVO GENERAL:
Incrementar la comunión con Dios, con la Iglesia y con los demás.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Fortalecer la comunión con Dios en su Iglesia.
b. Fortalecer a los órganos de comunión y a las pequeñas comunidades.
c. Construir unidad en la familia y en la sociedad.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Procurar la mejora personal, integral y continua, basada en la contemplación y el discernimiento.
b. Fortalecer las obras sociales de la Iglesia, particularmente aquellas destinadas a los pobres, los jóvenes,
los migrantes, las víctimas de las violencias y la construcción de la paz.
c. Conocer, vivir y difundir la Doctrina Social de la Iglesia para evangelizar la cultura e impulsar el compromiso
y la participación en la construcción de una sociedad que respete, promueva y defienda la vida y los
derechos de todos, así como el cuidado del medioambiente.
24
PREPARAR EL TERRENO (2019-2020)
Quien cultiva su tierra se saciará de pan (Prov 12,11)
OBJETIVO GENERAL:
Actualizar la Diócesis, las parroquias y las pastorales para adecuarlas a las necesidades de
modo que respondan mejor a su naturaleza evangelizadora y misionera.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Reestructurar y mejorar los servicios de la Curia (Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral), del
Seminario, de las zonas pastorales, de los decanatos y de las parroquias.
b. Poner al día en cuestiones legales, civiles, laborales, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa, de
Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los bienes de los
movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
c. Hacer de los espacios y eventos eclesiales lugares seguros para todos.
ACCIONES:
LUGAR
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE Y EVALUACIÓN
TIEMPO
A nivel parroquial:
1. Precisar el territorio, - Apoyo: - Párroco (y vicario)
población y situación Formato Intermedia
socio-religiosa y lo que diocesano - Diáconos
se encuentra en él para conocer
(rectorías, capillas, la realidad - Consejo Parroquial de
hospitales, escuelas, parroquial Pastoral
mercados, Institutos
de Vida Consagrada, - Apoyo: INEGI. - Consejo Parroquial de
organismos laicales, CONAPO, Asuntos Económicos
etc). Catastro
municipal, etc. - Agentes de pastoral
2. Sectorizar el territorio Final
y designar *Podría crearse un - Vida Consagrada
responsables. equipo, incluso
contratado, para - Organismos laicales
apoyar
3. Revisar las pastorales
y grupos parroquiales
para mejorarlos.
A nivel Zona Pastoral y decanatos
1. Compartir la - Sacerdotes
información sobre cada
Parroquia. - Diáconos
3. Discernir la
conveniencia de
proponer la
rectificación de la Zona
25
Pastoral y los
decanatos, así como la
creación de nuevos.
A nivel diocesano
1. Elaborar el Formato - Vicaría de Pastoral
diocesano para
conocer la realidad - Comisión Diocesana de
parroquial y Pastoral Social
diocesana, y
Intermedia
acompañar los
procesos para brindar
asesoría
b) Poner al día en cuestiones legales, laborales, civiles, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa,
de Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los
bienes de los movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
A nivel parroquial y diocesano
26
1. Revisar y ordenar los - Subsidio: A nivel parroquial:
bienes propiedad de la Orientaciones - Párroco y vicario Intermedia
Nación en custodia de para el - Consejo Parroquial de
la AR ( o su derivada), aseguramiento Asuntos Económicos
así como los bienes legal de los
propios, garantizando bienes A nivel Zona Pastoral y
su posesión y Decanato (animan y
eclesiásticos
aseguramiento por los supervisan)
medios legales. - Vicario Episcopal de
Zona
- Conocer e - Decanos
implementar las
2. Estar al día en el disposiciones A nivel Diocesano
cumplimiento de las laborales, - Curia de Justicia
obligaciones laborales, fiscales, de - Departamento de
civiles, fiscales y protección civil Asociaciones
eclesiales, y contar con y la Ley de Religiosas
la debida Protección de - Economía diocesana
documentación datos (elaboración del subsidio
personales en Orientaciones para el
poder de aseguramiento legal de Final
particulares los bienes eclesiásticos)
3. Actualizar el inventario
de los bienes muebles - Presentar al
y de los activos y Obispado los
pasivos, y tener al día informes
los libros parroquiales anuales
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
A nivel parroquial y Subsidios:
diocesano: - Orientaciones A nivel parroquial: Intermedia
1. Revisar los inmuebles para hacer de -Párroco (y vicario)
y adecuarlos a fin de los espacios -Consejo Parroquial de
que sean seguros eclesiales Pastoral
(rutas de salida, lugares seguros -Consejo Parroquial de
botiquín, extintores, para todos Asuntos Económicos
etc.) - -Protocolos de -Agentes de pastoral
seguridad para
las actividades
2. Establecer eclesiales A nivel Diocesano:
reglamentos de uso -Equipo Programa
de las instalaciones - Orientaciones Iglesia Segura
para la -Consejo Operativo de
protección de protección a niñas,
Final
Niñas, Niños,
27
3. Contar con protocolos adolescentes y niños, adolescentes y
para las actividades Adultos adultos vulnerables
eclesiales y formar a Vulnerables -Dimensión Diocesana
los agentes de de Bienes Culturales
pastoral a fin de - Ley General de A) Elaboración de los
garantizar la Asociaciones subsidios: Orientaciones
seguridad de todos Religiosas y para hacer de los
culto público espacios eclesiales
- Líneas Guía lugares seguros para
para la todos y Protocolo de
protección de seguridad para las
menores de la actividades eclesiales
CEM B) Implementación de
- Protocolos de la cursos y talleres
CEM C) Acompañamiento y
asesoría
*Apoyo de laicos
especializados
ENCUENTRO (2020-2021)
Por el camino, háblate a ti mismo, habla a Cristo... habla también de él
(San Ambrosio, Comentarios sobre los salmos, Salmo 36, 65-66: CSEL 64, 123-125)
OBJETIVO GENERAL:
Favorecer el encuentro con Dios, con nosotros mismos, con los demás,
y compartir la alegría del Evangelio.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Convocar a los agentes activos, invitar nuevos agentes idóneos, y fomentar su encuentro con Cristo.
b. Favorecer el encuentro de los agentes consigo mismos a la luz de Cristo, camino de conversión.
c. Impulsar en los agentes el encuentro con los demás y capacitarlos para anunciar el Kerigma.
ACCIONES:
a. Convocar a los agentes activos, invitar nuevos agentes que sean idóneos, y fomentar su encuentro
con Cristo.
28
2. Detectar e invitar a invitarlos a - Comisiones y
potenciales nuevos participar Dimensiones Final
agentes que - Párrocos y vicarios
parezcan idóneos - Invitar en misas - Diáconos
y redes sociales - Agentes
- Organismos
- Invitación laicales
3. Integrar a los
personal - Vida Consagrada
agentes activos con
los potenciales
- Realizar algún
nuevos agentes y
evento abierto
favorecer una
de
experiencia de
evagelización
encuentro con
(Kerigma)
Cristo
b. Favorecer el encuentro de los agentes consigo mismos a la luz de Cristo, camino de conversión.
LUGAR
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
Y TIEMPO
1. Reforzar la Subsidios: A nivel parroquial:
experiencia de - Guía para la - Párrocos y vicarios
encuentro con formación - Consejos de
Cristo y el básica Pastoral Intermedia
conocimiento de lo - Diáconos
que la Iglesia cree, - Agentes
celebra, vive y ora - Cursos, - Organismos laicales
retiros y - Vida Consagrada
talleres
A nivel de zona y
decanato (animan,
- Catecismo de acompañan y apoyan)
2. Orientar y la Iglesia - Vicario Episcopal de
desarrollar la Católica, Zona
capacidad de Compendio - Decanos
autoconocimiento y - Sacerdotes y
aceptación, con diáconos
apertura a la mejora - Equipo decanal
(laicos)
- Vida Consagrada
29
c. Impulsar en los agentes el encuentro con los demás y capacitarlos para anunciar el Kerigma.
LUGAR
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
YTIEMPO
A nivel parroquial A nivel Parroquial: A nivel parroquial: Intermedia
1. Formar a los - Párrocos y vicarios
agentes de la Subsidios: - Consejos de
capacidad de - Guía para la Pastoral
apertura a los formación básica - Agentes de Pastoral
demás y de sanas - Guía para el - Organismos laicales
relaciones visiteo - Diáconos
- Visitas a hogares, - Vida Consagrada
interpersonales.
escuelas, A nivel diocesano:
hospitales, - Vicaría de Pastoral
orfanatos, casas - Equipo Diocesano
del migrantes, de Pastoral
casas del - Equipo Diocesano
indigente, centros de Laicos
de Ejecución de - Comisión Diocesana
2. Formar a los Sanciones, de Pastoral Social
agentes en el centros de - Comisión Diocesana
anuncio del Kerigma trabajo, plazas de Comunicación
con nuevo ardor, comerciales, Social
nuevos métodos y parques, - Comisión Diocesana
nuevas expresiones mercados, etc. de Pastoral Profética
- Redes sociales - Comisión Diocesana Final
3. Formar a los - Eventos masivos de Familia,
agentes para el con sentido Juventud, Laicos y
visiteo y el kerigmático Vida
encuentro con el - -Mejorar los - Equipo Programa
otro (incluidas las contenido y la Iglesia Segura
redes sociales) y experiencia del - Consejo Operativo
distribuirlos a fin de catecismo, del de Protección a
llegar a la gente, ahí catecumenado y Niñas, Niños,
donde se encuentra, de las pláticas Adolescentes y
para: presacramentales Adultos Vulnerables
saludarla, para novios, - Comisión Diocesana
escucharla, padres de familia de Diálogo
conocer su realidad, y padrinos Interreligioso y
animarla, - Hacer de la - Comunión
compartir el Parroquia un - Cursillos de
Kerigma, lugar en el que Cristiandad
invitarla a participar todos se sientan - Jornadas de Vida
en la vida parroquial en casa, Cristiana
procurando la - Renovación
limpieza, el Carismática Católica
orden, la en el Espíritu Santo
disponibilidad, el - Apostolado de la
buen trato y Nueva
horarios Evangelización
accesibles - Caballeros de Colón
A nivel Diocesano: - ACTS-ADAM
- Encuentros con
autoridades,
instituciones,
sindicatos, medios
de comunicación y
30
organismos de la
sociedad civil
- Visitas a
universidades y
centros de estudio
técnico y superior
- Encuentros con
Medios de
Comunicación
- Encuentros con
otras
denominaciones
religiosas
COMUNIÓN (2021-2022)
Que todos sean uno (Jn 17, 21)
OBJETIVO GENERAL:
Incrementar la comunión con Dios, con la Iglesia y con los demás.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Fortalecer la comunión con Dios en su Iglesia.
b. Fortalecer a los órganos de comunión y a las pequeñas comunidades.
c. Construir unidad en la familia y en la sociedad.
ACCIONES:
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
1. Formación en la - Catecismo de la - Comisión Intermedia
escucha y Iglesia Católica Diocesana de
conocimiento de la - Cursos y talleres Pastoral Profética
Palabra de Dios y en bíblicos - IDITEP
la fe de la Iglesia - El Tesoro de mi fe - Cursos UNM-
Católica católica UPM Final
- Catecumenado - Apóstoles de la
Palabra
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
A nivel Parroquial:
1. Crear o fortalecer los - Estatutos del - Párroco y vicarios Intermedia
consejos Consejo Parroquial
parroquiales de de Pastoral - Consejo Parroquial
Pastoral y de de Pastoral
Asuntos Económicos, - Estatutos del
así como pequeñas Consejo Parroquial
comunidades, de Asuntos - Consejo Parroquial
vinculadas siempre a Económicos de Asuntos
la Parroquia Económicos
- Establecimiento de
pequeñas
comunidades y
atención frecuente
2. Favorecer el - Reuniones y
conocimiento, la eventos Final
fraternidad y la parroquiales
vinculación entre los
las pastorales, los
representantes y
miembros de
rectorías y capillas,
los organismos
laicales e Institutos
de Vida Consagrada
presentes en la
Parroquia.
32
3. Formar en la - Cursos de -
eclesiología de eclesiología de
comunión, orar por comunión, historia
ella, conocer el de la Iglesia, de la
Magisterio y Diócesis
participar en las
actividades del
decanato, de la Zona
Pastoral, de la
Diócesis, de la
Provincia y de la
Iglesia en México
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
A nivel Decanato y Zona Pastoral
1. Formar en la - Preparar - Vicarios Intermedia
eclesiología de adecuadamente Episcopales de
comunión, orar por las reuniones y Zona
ella, conocer el eventos
Magisterio y decanales y de - Decanos
participar en las zona, y hacer de
actividades del ellos momentos - Equipos decanales
decanato, de la Zona de comunión,
Pastoral, de la fraternidad,
Diócesis, de la formación,
Provincia y de la información y
Iglesia en México descanso
Final
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
A nivel Diocesano
1. Unificar criterios para - Ofrecer - Vicaría de Pastoral Intermedia
la creación y orientaciones para - Vicaría del Clero
funcionamiento de las pequeñas - Consejo
las pequeñas comunidades y Diocesano de
comunidades y para disposiciones sobre Pastoral
la recepción de la recepción de - Equipo Animador
sacramentos sacramentos de la Vida
Consagrada
2. Fortalecer la relación - Favorecer - Seminario
del clero, el encuentros entre - Equipo Diocesano
Seminario, el Equipo los equipos del de Laicos
Animador de la Vida clero, Seminarios, - Curia
Consagrada, el Vida Consagrada, Administrativa, de
Equipo Diocesano de laicos y Curia Justicia, Consultiva
Laicos, y la Curia y Pastoral
Administrativa, de - Mantener Final
Justicia, Consultiva y información y
Pastoral comunicación a
través de internet,
la página Web y las
redes sociales
33
c. Construir unidad en la familia y en la sociedad
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
1. Formación de niños, - Catecismo - Párrocos y Intermedia
adolescentes y - Catecumenado vicarios
jóvenes - Creación o - Consejo
fortalecimiento de Parroquial de
grupos y Pastoral
movimientos de - Comisión
niños, Diocesana de
adolescentes y Pastoral
jóvenes Profética
- Comisión
Diocesana de
Familia,
Juventud, Laicos
y Vida
- Pandillas de la
Amistad Final
- Apóstoles de la
Palabra
2. Formación y - Comisión
acompañamiento Diocesana de
para matrimonios, Familia,
novios y familia, y Juventud, Laicos
atención a familias y Vida
con problemas - Comisión
Diocesana de
Pastoral
Vocacional
- MFC
- Familias en
Alianza
- Encuentro de
Novios
- Encuentro
Matrimonial
Mundial
- A.M.A.
3. Participación en - Comisión
actividades de la Diocesana de
sociedad para Pastoral Social
ayudar a la - UNM
construcción de la - Caballeros de
unidad Colón
- VOCEMA
- Damas Católicas
34
TESTIMONIO TRANSFORMADOR
Yo hago nuevas todas las cosas (Ap 21, 5)
OBJETIVO GENERAL
Anunciar el Evangelio y testimoniar su poder transformador para una mejora continua
a nivel personal, familiar y social.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Procurar la mejora personal, integral y continua, basada en la contemplación y el discernimiento.
b. Fortalecer las obras sociales de la Iglesia, particularmente aquellas destinadas a los pobres, los jóvenes,
los migrantes, las víctimas de las violencias y la construcción de la paz.
c. Conocer, vivir y difundir la Doctrina Social de la Iglesia para evangelizar la cultura e impulsar el compromiso
y la participación en la construcción de una sociedad que respete, promueva y defienda la vida y los
derechos de todos, así como el cuidado del medioambiente.
ACCIONES:
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
1. Fomentar el cuidado - Textos - Párrocos y Intermedia
de la salud integral vicarios
(física, emocional, - Consejo
sexual, moral, - Talleres Parroquial de
espiritual y Pastoral
patrimonial), en - Comisiones y
vistas a nuestra - Conferencias dimensiones
vocación a la - Diáconos Final
santidad. - Vida Consagrada
2. Animar en la - Retiros - Organismos
búsqueda de la laicales
verdad en todos los
campos y en una
conducta coherente
con la vida cristiana
3. Orientar en la
contemplación y el
discernimiento
b. Fortalecer las obras sociales de la Iglesia, particularmente aquellas destinadas a los pobres, los
jóvenes, los migrantes, las víctimas de las violencias y la construcción de la paz.
35
2. Dar a conocer las - Difusión en - Consejo
obras sociales de la parroquias Parroquial de Final
Iglesia y fomentar el Pastoral
involucramiento y - Difusión en
participación de las medios de - Comisión
parroquias, de los comunicación y Diocesana de
organismos laicales redes sociales Pastoral Social
y de la sociedad, así
como la generación - Investigar acerca - Comisiones y
de vínculos con de instituciones y dimensiones
otras instituciones y organismos afines
organismos para la - Establecer - Diáconos
colaboración convenios
- Vida Consagrada
3. Crear las obras
sociales que se - Organismos
requieran para laicales
atender a los pobres,
a los migrantes, a
las víctimas de las
violencias y
favorecer la
construcción de la
paz.
c. Conocer, vivir y difundir la Doctrina Social de la Iglesia para evangelizar la cultura e impulsar el
compromiso y la participación en la construcción de una sociedad que respete, promueva y
defienda la vida y los derechos de todos, así como el cuidado del medioambiente.
LUGAR Y
ACTIVIDAD MEDIOS RESPONSABLE EVALUACIÓN
TIEMPO
1. Promover el - Compendio de - Párrocos y Intermedia
conocimiento, Doctrina Social de vicarios
difusión y vivencia la Iglesia - Consejo
de la Doctrina Social - Laudato Sí Parroquial de
de la Iglesia - Cursos y talleres Pastoral
sobre Doctrina - Comisión Final
2. Incentivar la Social de la Diocesana de
participación Iglesia; Pastoral Social
ciudadana y la participación y - Vida Consagrada
inculturación del democracia; - Diáconos
Evangelio para cuidado del - Comisiones y
construir una medioambiente dimensiones
sociedad que - Organismos
respete, promueva y laicales
defienda la vida y los
derechos de todos
3. Concientizar acerca
del cuidado del
medioambiente y
difundir medidas
concretas para
hacerlo
36
1ª. ETAPA
PREPARAR EL TERRENO
2019-2020
37
PREPARAR EL TERRENO (2019-2020)
Quien cultiva su tierra se saciará de pan (Prov 12,11)
OBJETIVO GENERAL:
Actualizar la Diócesis, las parroquias y las pastorales para adecuarlas a las necesidades de
modo que respondan mejor a su naturaleza evangelizadora y misionera.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Reestructurar y mejorar los servicios de la Curia (Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral), del
Seminario, de las zonas pastorales, de los decanatos y de las parroquias.
b. Poner al día en cuestiones legales, civiles, laborales, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa, de
Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los bienes de los
movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
c. Hacer de los espacios y eventos eclesiales lugares seguros para todos.
ACCIONES:
a) Revisar la Curia (Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las zonas pastorales, los
decanatos y las parroquias a fin de realizar una adecuada reestructuración.
LUGAR Y
ACTIVIDAD RESPONSABLE MEDIOS
TIEMPO
A nivel diocesano
1. Elaborar el Formato - Vicaría de Entregar en - Apoyo: Formato
diocesano para conocer Pastoral noviembre diocesano para
la realidad parroquial y Pbro. José I. Charles conocer la realidad
diocesana, y acompañar - Comisión parroquial
los procesos para Diocesana de
brindar asesoría Pastoral Social - Apoyo: INEGI.
Pbro. Francisco CONAPO,
Gallardo Catastro municipal,
etc.
2. Entregar información - Dimensión para - 28 y 29 Información de la
sobre los límites de los la creación de de Dimensión para la
territorios parroquiales nuevas noviembre creación de
existentes para revisión parroquias en la nuevas parroquias
en parroquias, Mons. Ignacio Loth Asamblea
decanatos y zonas Vaquera Diocesana
de
pastorales
Pastoral
3. Recibir las propuestas - Párrocos abril-junio Información por
de rectificación de - Dimensión para la consultas a párrocos,
territorios y creación de creación de decanos y Zona
nuevas parroquias, nuevas parroquias pastoral
zonas pastorales o - Consejo
decanatos. Presbiteral
38
4. Entregan proyecto para - Curia - 28 y 29 de Proyectos elaborados
actualizar la Curia Administrativa Noviembre en orden al Plan
(Administrativa, de Justicia, Asamblea Diocesano de Pastoral,
- Curia de Justicia Diocesana Año de Preparar el
Consultiva y Pastoral),
- Curia Consultiva terreno
previa consulta al clero y a
los fieles, y rediseñar los - Curia Pastoral
procesos administrativos (Comisiones,
canónicos Dimensiones y
Departamentos)
- Vicaría de
Pastoral
- Consejo
Diocesano de
Pastoral
- Equipo Diocesano
de Laicos
- Colegio de
Consultores
- Consejo
Presbiteral
5. Comisiones, Dimensiones y - Comisiones, 29 de octubre, - Comisiones,
Departamentos presentan Dimensiones y Salón San José Dimensiones y
proyectos como subsidios Departamentos
Departamentos
para preparar el terreno.
- Equipos decanales
(laicos)
- Decanos
- Vicarios episcopales
- Apoyo: INEGI.
CONAPO,
Catastro
municipal, etc.
A nivel parroquial
14. Organizar y/o Fortalecer - Párroco (y Octubre-marzo Estatutos
los Consejos vicario-Diáconos) diocesanos
Parroquiales de Pastoral - Agentes de
pastoral
40
- Consejo
Parroquial de
Pastoral
- Consejo
Parroquial de
Asuntos
Económicos
- Agentes de
pastoral
- Agentes de
pastoral
- Vida Consagrada
- Organismos
laicales
- Dimensión para
la misión-Depto.
De Acción
misionera
17. Organizar y capacitar - Párroco (y Enero-mayo Talleres de la
Equipos Parroquiales vicario-Diáconos) Dimensión
para la Misión para la misión-
- Consejo Depto. De
Parroquial de Acción
Pastoral misionera, Ad-
gentes y
- Agentes de comunidades
pastoral
- Vida Consagrada
- Organismos
laicales
- Dimensión para
la misión-Depto.
De Acción
misionera, Ad-
gentes y
comunidades
41
18. Sectorizar el territorio y - Párroco (y vicario- Enero - junio Subsidios de la
designar responsables. Diáconos) Dimensión para la
Misión
- Consejo Parroquial de
Pastoral
Dimensión para la
misión parroquial
19. Revisar y capacitar las - Párroco (y vicario- Enero-mayo - Subsidios la
pastorales, grupos y Diáconos) Comisiones,
movimientos Dimensiones y
parroquiales para - Consejo Parroquial de Departamentos
mejorarlos. Pastoral
- Comisiones,
Dimensiones y
Departamentos
SEMINARIO
Revisar y actualizar los - Formadores Julio-agosto Seminario
objetivos, medios y
tiempos de las - Seminaristas
dimensiones, los
horarios y las Consejo Presbiteral
actividades
c) Poner al día en cuestiones legales, laborales, civiles, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa,
de Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los
bienes de los movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
- Consejo Parroquial
de Pastoral
- Consejo Parroquial
de Asuntos
Económicos
LUGAR Y
ACTIVIDAD RESPONSABLE MEDIOS
TIEMPO
A nivel diocesano
4. Revisar los inmuebles y A nivel Diocesano: Enero-abril -Información del
adecuarlos a fin de que -Equipo Programa Iglesia Equipo Programa
sean seguros (rutas de Segura Iglesia Segura
salida, botiquín, -Consejo Operativo de
extintores, etc.) protección a niñas, niños,
adolescentes y adultos
vulnerables
-Dimensión Diocesana de
Bienes Culturales
Elaboración de los subsidios: -Equipo Programa Iglesia Octubre - -Información del
Orientaciones para hacer de los Segura diciembre Equipo Programa
espacios eclesiales lugares -Consejo Operativo de Iglesia Segura
seguros para todos y Protocolo protección a niñas, niños,
de seguridad para las adolescentes y adultos
actividades eclesiales vulnerables
-Dimensión Diocesana de
Bienes Culturales
- Implementación de -Equipo Programa Iglesia Enero-mayo
cursos y talleres Segura -Información del
-Consejo Operativo de Equipo Programa
protección a niñas, niños, Iglesia Segura
43
adolescentes y adultos
vulnerables
-Dimensión Diocesana de
Bienes Culturales
- Acompañamiento y Equipo Programa Iglesia Enero-mayo -Información del
asesoría Segura Equipo Programa
-Consejo Operativo de Iglesia Segura
protección a niñas, niños,
adolescentes y adultos
vulnerables
-Dimensión Diocesana de
Bienes Culturales
-Párroco (y vicario)
-Consejo Parroquial de
Pastoral
1. Revisar los inmuebles y A nivel parroquial: Octubre-abril
adecuarlos a fin de que -Párroco (y vicario) - Protocolos
sean seguros (rutas de -Consejo Parroquial de de seguridad
salida, botiquín, Pastoral para las
extintores, etc.) -Consejo Parroquial de actividades
eclesiales
Asuntos Económicos
-Agentes de pastoral
-Párroco (y vicario)
-Consejo Parroquial de
Pastoral
Equipo Programa Iglesia Octubre - abril - Ley general
3. Contar con protocolos Segura de
para las actividades -Consejo Operativo de asociaciones
eclesiales y formar a los protección a niñas, niños, religiosas y
culto
agentes de pastoral a fin adolescentes y adultos
público.
de garantizar la seguridad vulnerables - Líneas guía
de todos -Dimensión Diocesana de para la
Bienes Culturales protección
de menores
-Párroco (y vicario) de la CEM.
-Consejo Parroquial de - Protocolos
Pastoral de la CEM
e) Promover eventos que nos ayuden a organizar, dar seguimiento y evaluar el proceso del
Plan Diocesano de Pastoral.
45
PROYECTOS
ZONAS PASTORALES
MATAMOROS, REYNOSA Y VALLE HERMOSO
PREPARAR EL TERRENO (2019-2020)
Quien cultiva su tierra se saciará de pan (Prov 12,11)
OBJETIVO GENERAL:
Actualizar las zonas pastorales, los decanatos, las parroquias y las pastorales para adecuarlas a las
necesidades de modo que respondan mejor a su naturaleza evangelizadora y misionera.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
d. Reestructurar y mejorar los servicios de la Curia (Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral), del
Seminario, de las zonas pastorales, de los decanatos y de las parroquias.
e. Poner al día en cuestiones legales, civiles, laborales, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa, de
Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los bienes de los
movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
f. Hacer de los espacios y eventos eclesiales lugares seguros para todos.
46
Retomar retiros y encuentros Equipo Decanal Parroquias
designadas y fechas
que propongan Decanato
A nivel parroquial
Dar realce a las diferentes Padres, Diáconos, Enero-Mayo Parroquiales
pastorales Coordinadores de
Pastorales
d) Poner al día en cuestiones legales, laborales, civiles, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa, de
Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los bienes de los
movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
48
g) Promover eventos que nos ayuden a organizar, dar seguimiento y evaluar el proceso del Plan
Diocesano de Pastoral.
ACCIONES:
a) Revisar la Curia (Administrativa, de Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las zonas
pastorales, los decanatos y las parroquias a fin de realizar una adecuada reestructuración.
49
e) Poner al día en cuestiones legales, laborales, civiles, fiscales y eclesiales a la Curia (Administrativa, de
Justicia, Consultiva y Pastoral), el Seminario, las parroquias, las asociaciones civiles, y los bienes de los
movimientos, asociaciones y grupos de apostolado de fieles laicos.
50
Mejorar Instalaciones de Decanos, Párrocos y Cada Parroquia y Medios
servicios básicos (Sanitarios, Consejos de Asuntos Espacios de Económicos
bardas alumbrados, salones etc) Económicos reunión
Junio 2020
Adecuar los espacios de acuerdo Párrocos y Vicarios 2020 Manuales de
con la norma de protección civil protección civil y
Talleres de
capacitación
Crear reglamentos y Protocolos Equipo Programa Iglesia Cada Parroquia y Información de
de seguridad para los espacios Segura, Consejo Espacios de Equipo de
Eclesiales y hacer de ellos lugares Operativo de Protección a reunión Programa Iglesia
seguros para todos. niñas, niños, adolescentes Junio 2020 Segura
y adultos vulnerables,
Dimensión de bienes
Culturales
i) Promover eventos que nos ayuden a organizar, dar seguimiento y evaluar el proceso del Plan
Diocesano de Pastoral.
OBJETIVO GENERAL:
Supervisar y motivar para que nuestros decanatos, sus parroquias y las demás estructuras pastorales,
respondan a sus necesidades y a su naturaleza evangelizadora y misionera.
51
1. Objetivo específico:
Promover una adecuada reestructuración de nuestros decanatos, parroquias y demás estructuras
pastorales para mejorar sus servicios.
Actividad Responsables Lugar y Tiempo: Medios:
2. Objetivo específico:
Supervisar que en cada decanato y parroquia se asegure la puesta al día en cuestiones legales, civiles,
laborales, fiscales y eclesiales, de nuestras parroquias, movimientos, grupos y capillas.
52
Motivar a los decanos y Vicario Episcopal de Hasta Junio/20 Asesorías legales y
párrocos para que revisen las zona y Decanos contables
parroquias y aseguren que
todas estén debidamente
legalizadas con sus bienes
inmuebles.
Revisar que los decanos Vicario Episcopal de Hasta Junio/20 Medios electrónicos,
tengan los inventarios zona y Decanos asesorías contables.
actualizados de sus parroquias.
3. Objetivo específico:
Promover la elaboración de un plan de formación para los decanatos y parroquias sobre los distintos
aspectos de seguridad que propone la Iglesia diocesana en su proyecto “Iglesia Segura”.
53
4. Objetivo específico:
Promover eventos que nos ayuden a organizar, dar seguimiento y evaluar el proceso del Plan Diocesano de
Pastoral.
Vigilar que se realicen reuniones (Vicario de Zona y (Hasta Junio/20) (Un programa de
periódicas del Equipo Piloto para Decanos) reuniones)
dar seguimiento y evaluar la
realización del Plan.
Asegurar que se dé información (Vicario de Zona y (Hasta Junio/20) (Retiros de decanato y
oportuna sobre los resultados Decanos) de Zona)
de las evaluaciones
COMISIONES
DIMENSIONES Y DEPARTAMENTOS
OBJETIVO GENERAL
Revitalizar la misión profética dentro de nuestra Diócesis, desde la alegría de la proclamación del evangelio, para
iluminar las distintas realidades de nuestras zonas pastorales, decanatos y parroquias con la fuerza transformadora
de la palabra de Dios.
1. Objetivo: Tener una interrelación e interacción de las dimensiones que integran la comisión.
54
2. Objetivo: Que los programas de cada dimensión logren realizarse en comunión con todas las
acciones diocesanas.
DIMENSIÓN DOCTRINA DE LA FE
PROPUESTA DE SUBSIDIOS
Desde la Dimensión de la doctrina de la fe, se proponen tres subsidios que serán presentados en la
Asamblea Diocesana de Pastoral en el mes de noviembre de 2019 con la intención de informar, promover
e interpretar a la luz de la fe, este año de trabajo diocesano.
SUBSIDIO 1
Proponemos un resumen a través de infografía y sinópticos de la Carta Pastoral “Hasta que Cristo sea
formado en nosotros (Gal.4,19)”, con la intención de promover su contenido a través de los diferentes
medios con los que se cuenta, logrando así presentar su contenido a todos los miembros de la Diócesis de
Matamoros.
SUBSIDIO 2
Proponemos un esquema de espiritualidad que incluya las riquezas de las parábolas de Jesús sobre “la
semilla”, “el tesoro”, “la tierra”, “el cultivo” sobre la preparación del terreno, logrando así el talante
espiritual y la interpretación a la luz de la fe del trabajo de este año 2019-2020.
55
SUBSIDIO 3
Proponemos desde la Pastoral Universitaria, la preparación y desarrollo de una serie de Programas de
radio y televisión por internet a través de un Centro de Fe y Razón sobre temáticas propias del trabajo de
preparar el terreno
OBJETIVO GENERAL
Fortalecer el Departamento de Acción misionera y preparar el terreno al Plan Diocesano de Pastoral
mediante actividades misioneras que sirvan de subsidios a las comunidades parroquiales para que
respondan mejor a su naturaleza evangelizadora y misionera.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
1. Crear y/o Fortalecer estructuras de animación misionera en Parroquias y Decanatos de la Diócesis para preparar
el terreno a un proceso de evangelización misionera.
ACTIVIDAD RESPONSABLE TIEMPO Y LUGAR MEDIOS
Convocatoria Agentes de Acción misionera Zonas pastorales Departamento de
pastoral que sirven en las Pbro. José I. Charles REY-01 feb. Acción Misionera,
parroquias en o para Párrocos, Consejo MAT-08 Equipos
(sectorización, casas de Parroquial de Pastoral VHSO-15 feb parroquiales
reunión, Equipos
Evangelizadores, visitadores,
maestros de pequeñas
comunidades, etc)
Sensibilización de todo Acción misionera, Enero-mayo Documento de
bautizado, toda familia Equipos de Aparecida,
evangelización Espiritualidad del
Discípulo misionero,
Evangelii Gaudium,
Creación de Equipos Acción Misionera, Zonas pastorales, Departamento de
parroquiales de animación Coordinadores de parroquias Acción Misionera,
misionera Equipos de Febrero-Marzo Equipos
Evangelización parroquiales
2. Formación de Agentes para facilitar la tarea de la evangelización y misión.
56
Elaboración de material Departamento de Zonas pastorales Departamento de
uniforme para la Sectorización, Acción Misionera Enero - junio Acción misionera,
casas de reunión, misión… SINE central Equipos Misioneros
Parroquiales
3. Impulsar la comunión en la Dimensión para la Misión y suscitar la solidaridad y fuerza en los subsidios comunes.
4. Promover eventos que nos ayuden a organizar, dar seguimiento y evaluar el proyecto del Plan Diocesano de
Pastoral.
DEPARTAMENTOS
Catequesis Escolarizada
Catequesis Presacramental
Catequesis Especial
Catequesis para sordos
Catecumenado
OBJETIVO GENERAL
Es promover, animar e iluminar el caminar del proceso evangelizador y catequético en comunión y
participación, uniendo esfuerzos para formar y vivir como verdaderos discípulos y misioneros de Jesucristo
y así transformar nuestra realidad.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
❖ Impulsar la formación integral y procesual de los catequistas como verdaderos discípulos y misioneros de
Jesucristo para que respondan a los nuevos tiempos desde una fe adulta.
❖ Promover la comunión y reflexión de la tarea catequética con los diversos departamentos, a través de
reuniones mensuales.
57
❖ Asumir la realidad como contenido clave de la catequesis, para formar cristianos comprometidos en la
búsqueda de una nueva sociedad fundamentada en la justicia y la paz.
ACCIONES
ACTIVIDAD RESPONSABLE LUGAR Y TIEMPO MEDIOS
Unificar criterios Coordinador diocesano Zonas Pastorales Derecho canónico,
Pastorales de Pbro. Rafael Hernández Mayo 2020 Apoyarnos en los
formación para los Perea, equipo diocesano lineamientos,
sacramentos en la y párrocos. nacionales, provincial y
diócesis diocesano.
Hacer conciencia que Coordinador diocesano Reynosa Encuentro Diocesano
somos promotores Pbro. Rafael Hernández Agosto 2020
de la formación como Perea y Equipo
verdaderos Diocesano
cristianos, para
transformar una
nueva sociedad en la
justicia y la paz.
Suscitar y fortalecer Coordinador diocesano Zonas Pastorales Suscitar y fortalecer la
la espiritualidad de Pbro. Rafael Hernández espiritualidad de los
los catequistas Perea, párrocos y catequistas
equipo diocesano.
ACCIONES
58
❑ Se proveen cursos por zona pastoral y a nivel parroquial
◦ El texto de Catequesis escolarizada (El tesoro de mi fe católica)
◦ Ser y quehacer del Catequista, Espiritualidad del Catequista
OBJETIVO GENERAL:
Actualizar la Animación Bíblica en la Diócesis para adecuarla a las necesidades de las zonas pastorales
parroquias y movimientos, de modo que responda mejor a su naturaleza evangelizadora y misionera.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Reestructurar el servicio del equipo de Animación Bíblica de las zonas pastorales, de los decanatos y de las
parroquias.
ACCIONES:
a) Revisar el equipo diocesano de Animación Bíblica, las zonas pastorales, los decanatos y las
parroquias a fin de realizar una adecuada reestructuración.
A nivel diocesano
1. Recuperar la estructura de las Pbro. Lic. Esteban Enero-Febrero 2020 Proporcionar material
escuelas bíblicas en la Zona Pastoral Ramírez Rodríguez de apoyo.
de Matamoros.
Elegir un Asesor en la
Zona.
A nivel parroquial
59
1. Promover para que cada Pbro. Esteban Ramírez Enero-Febrero 2020 Proporcionar
parroquia pueda tener equipos Rodríguez material de apoyo
Equipos zonales
de animación bíblica.
OBJETIVO GENERAL
Anunciar el Evangelio de la vida y de la paz mediante la Pastoral Educativa y Cultura para que ilumine,
difunda y aliente la esperanza y responsabilidad emergente que tenemos en nuestro contexto diocesano
logrando ser testigos de la verdad en el mundo.
OBJETIVO GENERAL:
Actualizar la Comisión Litúrgica de modo que responda mejor a su naturaleza de la Obra Salvífica de Cristo.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
a. Reestructurar la Comisión de Liturgia, a fin de realizar un enlace de comunión entre las dimensiones y
departamentos al servicio de las Zonas Pastorales, Decanatos y Parroquias.
b. Establecer enlaces entre las distintas dimensiones para servicio de las Zonas Pastorales, Decanatos y
Parroquias.
c. Poner al día las Normas litúrgicas vigentes y eventuales actualizaciones y orientaciones de la Santa Sede,
Conferencia Episcopal y la Arquidiócesis de Monterrey para las celebraciones litúrgicas en la Diócesis.
60
ACCIONES:
A nivel Dimensiones
2. Recopilar Reuniones del Coordinador de Durante el 1er. Diciembre 2019
acciones coordinador la Comisión y Semestre
concretas de con cada responsable de Preparando el
cada Dimensión Dimensión y la Dimensión Terreno
de Pastoral su equipo
A nivel Comisión y Dimensión
3. Identificar Documento Equipo de la 1er Semestre Diciembre 2019
Ministerios y que describa Comisión de
Oficios las funciones Liturgia
necesarios para que debe
las Dimensiones realizar cada
Ministerio y
Oficio
b) Establecer enlaces entre las distintas dimensiones y departamentos para servicio de las Zonas Pastorales,
Decanatos y Parroquias
c) Poner al día las Normas litúrgicas vigentes y eventuales actualizaciones y orientaciones de la Santa
Sede, Conferencia Episcopal y la Arquidiócesis de Monterrey para mantener informados a quienes
participan en las celebraciones litúrgicas.
61
1. Inscripción a LObservatore nombrará al
medios Romano responsable para
informativos CELAM la actividad
litúrgicos. PHASE
2. Elegir los Intermedio
responsables
para mantener
la actualización Página Oficial
en cada de la Administradores
dimensión Comisión, Oficiales de cada
3. Difusión de nuestro dimensión de la
información en Seminario, página de la
los distintos Diócesis de Comisión
medios de Matamoros,
comunicación. Facebook,
Instagram,
etc.
OBJETIVO GENERAL:
Promover la dignidad y belleza de los elementos destinados al culto divino, para favorecer la participación,
activa y fructuosa de los fieles en las celebraciones litúrgicas.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
Brindar asesoría en la creación, mantenimiento o remodelación de los templos y sus espacios celebrativos,
así como la conservación de los bienes eclesiásticos.
62
Promover la limpieza y Párrocos y dimensión Todo el año Parroquiales
armonía de los lugares diocesana
celebrativos.
Fomentar la dignidad y Párrocos y dimensión Todo el año parroquiales
belleza de los objetos diocesana
sagrados.
63
Fomentar la preparación de los integrantes de la comisión, así como la representación en las diversas
reuniones provinciales y nacionales.
ACTIVIDAD DONDE RESPONSABLE TIEMPO RECURSOS
Asistir a la reunión Pendiente DIBEAS PROVINCIAL Pendiente Propios
provincial de la
dimensión de los bienes
eclesiásticos y Arte
Sacro
Asistir al XI Taller Guadalajara DIBEAS NACIONAL Ultima Propios
nacional de la Jalisco semana de
dimensión de los bienes Septiembre
eclesiásticos y Arte
Sacro.
A MODO DE JUSTIFICACIÓN
• Podríamos decir que esta pastoral aún no existe como tal, pues a un que está presente en todas nuestras
comunidades parroquiales, en realidad es poco atendida, valorada y acompañada.
• Esta pastoral está ubicada dentro de la dimensión de la pastoral litúrgica y abarca un sin número de
expresiones de la fe sencilla de nuestra gente, que es muy profunda y está arraigada en las costumbres
piadosas de nuestra gente, sin ser por ello menos valiosas.
• En la Diócesis no contamos con una pastoral bien desarrollada como tal, pues se ha sujetado solo a la danza
de matlachines, pero esta expresión piadosa no agota todo el concepto de lo que sería una pastoral de piedad
popular y aun esta expresión carece de objetivos y dirección, pues solo se han limitado a reunirse una vez al
mes, pase de lista y avisos.
• La peregrinación de todos los cuadros de danza a la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe al inicio de
las fiestas patronales.
• Está presidida por un asesor de la pastoral y un comité más o menos organizado, cabe aclarar que no tiene
un objetivo general como tal ni objetivos específicos solo una agenda de actividades.
Quizás lo más valioso sea que se ha brindado atención a algunos integrantes que carecen de sacramentos
proporcionándole la oportunidad de acceder a ellos así que por el momento podemos decir que, aunque no
estamos en cero, también podemos decir que aún no hemos arrancado en esta pastoral en la diócesis. Creo que
tenemos que empezar por el principio es decir comenzar a gestar la pastoral completa dentro de la vida diocesana.
64
COMISIÓN DIOCESANA DE PASTORAL SOCIAL
OBJETIVO DE LA COMISIÓN:
Actualizar las dimensiones de la Pastoral Social, para que respondan de modo adecuado a la realidad social
que vivimos y se de testimonio vivificador.
ACCIONES:
a) Revisar las Comisión Diocesana y sus dimensiones.
b) Poner al día las asociaciones civiles católicas, referente al trabajo pastoral y asistencial.
65
c) Hacer de los espacios lugares seguros para todos.
ACTIVIDAD RESPONSABLE LUGAR Y TIEMPO MEDIOS
Revisar que los Centros de Directores de Centros Enero Propios en
Asistencia Social tengan la y Patronatos relación con lo
debida seguridad, rutas de que marque la
salida, extinguidores, ley
botiquín, etc.
Elaboración de subsidios. Directores de Casas y Enero Protección Civil
Manuales, protocolos, etc. Patronatos
Objetivo General: Ser presencia de Jesús, Buen Samaritano, junto a los enfermos y a los que sufren en las
familias, en las comunidades y en las instituciones de salud, para que con nuestra participación
construyamos una sociedad justa y solidaria al servicio de la vida.
Objetivos específicos:
1. Organizar la Pastoral de la Salud en las tres zonas pastorales que forman nuestra Diócesis de
Matamoros.
2. Despertar la conciencia de que todos somos responsables de la presencia de la Iglesia en el mundo
de la salud.
3. Llegar a todas las personas, instituciones y asociaciones que se ocupan de los enfermos en
cualquiera de las circunstancias en que se encuentren, especialmente los más necesitados u
olvidados.
66
ACCIONES
Organizar la Pastoral de la Salud en las tres zonas pastorales que forman nuestra Diócesis de Matamoros.
Llegar a todas las personas, instituciones y asociaciones que se ocupan de los enfermos en cualquiera de
las circunstancias en que se encuentren, especialmente los más necesitados u olvidados.
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3. Celebrar el día del enfermo P. Tiburcio 11 de febrero en Diocesanos
P. Roberto cada parroquia de la
P. Mauricio Diócesis Mensaje del papa
Equipo diocesano
4.Motivar al Encuentro Equipo Diocesano 15 de febrero Humanos
Diocesano de agentes de
Pastoral de la Salud
5.Asistir al Encuentro Nacional Equipo Diocesano Octubre Comisión Nacional
de Agentes de Pastoral de la
Salud
OBJETIVO GENERAL:
Que nuestros hermanos privados de la libertad y sus familias, por medio de retiros espirituales, ayuda
psicológica y psiquiátrica, además de jurídica, aprendan a discernir el pasado, entiendan y acepten sus
errores y a la luz del Evangelio, puedan cambiar su futuro. Una vez que Cristo transforme sus corazones y
que esto le sea suficiente para caminar por la senda de la esperanza y la fe y así puedan llevar estabilidad,
felicidad y paz a sus familias.
OBJETIVO ESPECIFICO:
Líneas de Acción:
1. Llevar la Eucaristía por medio de la Santa Misa a nuestros hermanos, promoviendo la palabra de Dios, para
aumentar su espiritualidad.
68
2. Fomentar el conocimiento espiritual de nuestros hermanos privados de la libertad, por medio de la
Palabra, para que Dios nazca en sus corazones.
ACTIVIDAD RESPONSABLE LUGAR TIEMPO
Formación y preparación de Equipo de pastoral Área femenil Domingos de
lectores Área varonil 10:00 a 11:00 am
Evangelización Sacerdote asesor Área femenil Febrero, Julio y
Vicario sacerdotal Área varonil Octubre 2020
Equipo de pastoral
Retiro de Evangelización Pastoral Social Área varonil Abril 2020
Caritas Parroquial
3. Apoyar el crecimiento interior de nuestros hermanos privados de su libertad, por medio de los
Sacramentos.
Actividad Responsable Lugar Tiempo
4. Fomentar el conocimiento de la Palabra de Dios en nuestros hermanos internos, para que Dios
transforme sus corazones.
69
Buscar donadores de Biblias Equipo de pastoral Parroquias y Junio y Julio
bienhechores
Semanas Bíblicas Equipo de pastoral Capilla Junio y Julio
Apóstoles de la CEDES
palabra
Visitas área psiquiátrica y Equipo de pastoral Área varonil Domingo 1º y 3º
celdas de castigo Todo el año
5. Que nuestros hermanos privados de su libertad, al haber discernido su pasado, con Dios en su corazón,
puedan con la ayuda de la Pastoral Penitenciaria Católica, reinsertarse en la sociedad y logren ser útiles a la
misma.
70
Promoción de la Pastoral Sacerdote asesor
Penitenciaria en todas las Equipo de pastoral
parroquias de nuestra
Diócesis
Reuniones de equipo para Sacerdote asesor Casa San Martin Viernes 7:00 pm
revisión e información de Equipo de pastoral
trabajo.
Reuniones de Equipo para Sacerdote asesor Casa San Martin Viernes 7:00 pm
formación humana y Equipo de pastoral
espiritual.
IDITEP Equipo de pastoral Salón San José Septiembre - Julio
7. Fortalecer la unidad y la formación del Equipo de Pastoral Penitenciaria para dar fiel testimonio de Cristo
en todas nuestras acciones.
71
DIMENSIÓN PASTORAL DE LA MOVILIDAD HUMANA
OBJETIVO DE LA DIMENSIÓN:
Actualizar la dimensión diocesana de Pastoral de la Movilidad Humana, para acoger, proteger, promover e
integrar al Migrante.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
- Fortalecer la dimensión de Pastoral de Migrantes
- Poner al día las Casas del Migrante en cuestiones legales.
- Fortalecer los centros de atención Pastoral con las medidas cautelares que requiere la dimensión.
ACCIONES:
a) Revisar y poner al día la Dimensión
b) Poner al día todas las cuestiones legales de las Casas del Migrante y Módulo de Atención al Migrante.
72
Estar al día en el Representante Legal y Febrero Propios
cumplimiento en las Presidentes de
obligaciones laborales, civiles, Patronatos
fiscales y eclesiales.
Inventario de las Casas del Representante Legal y Febrero Propios
Migrante Presidentes de
Patronatos
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Las líneas de acción propuestas por a la Dimensión de la Pastoral laboral de la CEM
Para este año, en el que, como parte del plan pastoral, debemos y es necesario, “Preparar el Terreno”, en
toda nuestra Diócesis; de parte de la Dimensión Diocesana de la Pastoral del Trabajo, propongo:
1) Primera etapa, promover información, por medio de bolates, trípticos y algunos posters, que
enseñe a la feligresía en general ¿Qué es y a en que se enfoca la dicha pastoral? (Enero y febrero)
2) Segunda etapa, por los medios antes mencionados, informar a los trabajadores sobre derechos y
obligaciones laborales, así como datos concretos sobre lugares a los que se pueden acudir en caso
de abusos o aclaración de dudas. (Marzo y abril)
3) En un tercer momento, pretendo retomar los talleres de Pastoral del Trabajo que comencé a
impertir hace algunos años, pero que su poca asistencia, preferí dejar para otra ocasión. (Mayo y
junio)
Como una expectativa, en razón a la transversalidad eclesial, se pudiera tomar en cuenta a esta dimensión
para participar en algunos eventos que ya tienen cierta asistencia garantizada, pues ayudaría a difundir la
existencia y función de esta parte de la Pastoral Social Diocesana.
74
COMISIÓN DE VOCACIONES Y MINISTERIOS
DIMENSIÓN VOCACIONAL
OBJETIVO:
La dimensión de la Pastoral Vocacional busca que todos los bautizados, preferencialmente los jóvenes por
estar en una etapa privilegiada para una opción vocacional, crezcan a la luz de la fe en su vocación humana
y cristiana y conozcan las distintas vocaciones que hay en la Iglesia, para que opten por la mejor forma de
respuesta a su compromiso bautismal, en un estilo definido de vida al servicio de la Iglesia y del mundo.
OBJETIVO:
Ofrecer un momento privilegiado, que acompañe la formación integral de los seminaristas-diáconos que
han iniciado su síntesis vocacional a fin de entregar pastores conscientes para la Iglesia Diocesana de
Matamoros
Objetivos Específicos:
1. El seminaristas-diácono tome conciencia de la importancia de la transición entre la formación inicial
y permanente y, de su pertenencia a un presbiterio (Iglesia Local).
2. El seminarista-diácono conozca y asuma responsablemente los criterios comunes de la formación.
3. El Seminarista-diácono adquiera y aplique correctamente las herramientas formativas a su alcance
y las que se le ofrecen en esta etapa pastoral.
75
ACTIVIDAD RESPONSABLE TIEMPO LUGAR MEDIOS
Encuentros fraternos para Pbro. Felipe Las fechas y Propios
compartir experiencias Manuel Arteaga lugar se
Becerra definen cada
año al inicio
del ciclo
escolar
Mesa común: compartiendo Pbro. Felipe Propios
para seguir madurar Manuel Arteaga
conocerse, escucharse y Becerra
apreciarse entre sí.
OBJETIVO:
Proporcionar al presbiterio elementos de formación humana, espiritual, doctrinal y pastoral, en orden a
renovar el carisma recibido en la ordenación sacerdotal, para que continúe configurándose con Cristo
pastor, cabeza esposo y siervo de la Iglesia, mediante la vivencia de la caridad pastoral en la Iglesia
particular (PDV 70.71).
76
presbíteros en semanas de por los Teotepec.
estudio ejercicios espirituales sacerdotes Coah.,
retiros de Zona reuniones de San Juan Tx.
decanatos y otros (El Refugio
NL).
Promover la educación Dimensión del En los tiempos De la dimensión
permanente del clero en el Clero y cada que cada
área Humana, Espiritual sacerdote sacerdote
Intelectual y defina
Pastoral
Reuniones por generación Dimensión del Dos reuniones Casa De la Dimensión
Clero y cada por año Sacerdotal,
coordinador Casa
Episcopal
(área de
alberca), u
otros lugares
“ad hoc”
OBJETIVO:
Conocer las directrices y etapas del plan diocesano de pastoral para que las comunidades de vida
consagrada, según sus carismas, se involucren de tal manera en la vida pastoral diocesana de modo que
respondan mejor a su naturaleza evangelizadora y misionera.
77
DIMENSIÓN DEL DIACONADO PERMANENTE
Objetivo:
OBJETIVO GENERAL:
Supervisar y motivar para que nuestros decanatos, sus parroquias y las demás estructuras pastorales,
respondan a sus necesidades y a su naturaleza evangelizadora y misionera.
1. OBJETIVO ESPECIFICO: Promover una adecuada reestructuración de nuestros decanatos, parroquias y demás
estructuras pastorales para mejorar sus servicios.
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2. OBJETIVO ESPECIFICO: Supervisar que en cada decanato y parroquia se asegure la puesta al día en cuestiones
legales, civiles, laborales, fiscales y eclesiales, de nuestras parroquias, movimientos, grupos y capillas.
3. OBJETIVO ESPECÍFICO: Promover la elaboración de un plan de formación para los decanatos y parroquias sobre
los distintos aspectos de seguridad que propone la Iglesia diocesana en su proyecto “Iglesia Segura”.
4. OBJETIVO ESPECÍFICO: Promover eventos que nos ayuden a organizar, dar seguimiento y evaluar el proceso del
Plan Diocesano de Pastoral.
2. LÍNEAS DE ACCIÓN:
• Organizar reuniones para desarrollar el plan de trabajo de la comisión.
79
• Propiciar oportunidades para compartir experiencias que ayuden a las Dimensiones a trabajar en
sinodalidad.
• Promover y motivar la participación de las diferentes dimensiones en las reuniones de la provincia y
nacionales.
3. CALENDARIZACIÓN
Actividades Responsable Lugar y Tiempo Medios
El propósito de este documento es para desarrollar un trabajo de pastoral juvenil en una etapa (2019-2021)
invitando a los jóvenes de toda la diócesis a convocarlos hacer lio con alegría de nuestra iglesia, así teniendo
una comunión y trabajo presenta en tres etapas que ayudaran como meta de cada ciclo.
OBJETIVO GENERAL:
Buscar la unión de nuestros jóvenes atreves de diferentes actividades, para que así puedan tener una mejor
visión y se identifiquen en nuestra Diócesis en un trabajo de tres años teniendo en cuenta una preparación
de terreno, encuentro, una comunión y un testimonio transformador. Configurándonos con Cristo.
80
Trabajando en primer lugar en nuestra área humana, apostólica y espiritual, y poder ser un verdadero
discípulo de Jesús.
Objetivo: Lograr que el joven comprenda la realidad de la diócesis, empezando a conocer en su grupo o
movimiento, la importancia del joven en la actualidad logrando concientizar nuestro lado cristiano.
ACCIONES: Los jóvenes tienen estas sugerencias de acciones para empezar a dar conocer su inquietud en
el pueblo de Dios.
Todo sirviendo en esta primera etapa como inicio de este presente año y hasta el siguiente ciclo como
trabajo de pastoral juvenil.
FECHA ACTIVIDAD
19 de Octubre de 2019 Asamblea Diocesana de Pastoral Juvenil
31 de Octubre de 2019 Noche Blanca (Decanato/Parroquia)
23 de Noviembre de 2019 Retiro de Adviento (Zona/Decanato)
7 de Diciembre de 2019 Peregrinación Juvenil Guadalupana (Zona/Ciudad)
23-26 de Enero de 2020 Peregrinación Juvenil al Cerro del Cubilete
22-23 de Febrero de 2020 Pre-Pascua Diocesana
5 de Abril de 2020 Marcha Juvenil de Ramos (Zona/Ciudad)
9 de Mayo de 2020 Encuentro con Cristo Vivo (Diocesano)
30 de Mayo de 2020 Velada de Pentecostés (Parroquial)
18 de Julio de 2020 Olimpiadas Juveniles (Zona)
16 de Agosto de 2020 Día Nacional del Joven Católico
29 de Agosto de 2020 Asamblea Diocesana de Pastoral Juvenil
a. Dar a conocer el Plan de Pastoral para 2019-2022 y el PGP (2031-2033) en los movimientos y
asociaciones.
81
b. Incrementar la participación de los de los movimientos y asociaciones en la Asamblea Diocesana en
un veinte porciento (20%).
c. Incrementar la participación de los presidentes de los movimientos y asociaciones en las reuniones
de trabajo de la dimensión de laicos en un veinte porciento (20%).
d. Incrementar la asistencia de los movimientos y asociaciones al encuentro anual de la dimensión un
veinte porciento (20%).
e. Integrar un patrón de los movimientos y asociaciones con información de membresía, estatutos,
asistente diocesano y estado legal de los bienes.
2. DESAFÍOS:
3. LÍNEAS DE ACCIÓN:
• Distribuir el Plan de Pastoral a los movimientos y asociaciones que todavía no lo tengan y dar a
conocer la liga de internet para el Plan de Pastoral y el PGP (2031-2033).
• Organizar el Encuentro Diocesano de los Movimientos y Asociaciones Laicales
• Participar en las reuniones nivel provincia y nacionales.
• Recopilar información de cada movimiento y asociación: membresía, estatutos, asistente diocesano
y estado legal de los bienes.
• Motivar y apoyar a los movimientos y asociaciones a poner al día los bienes que tengan.
4. CALENDARIZACIÓN
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Reunión de la Dimensión de Coordinadores Marzo 2020, Morelia
Laicos (DELAI) Michoacán
OBJETIVO GENERAL:
Reintegrar mejor los diferentes grupos que son afines a nuestro que hacer pastoral, afín de vivir la
eclesialidad en diferentes aspectos de esta Comisión de Diálogo y Comunión con una perspectiva
evangelizadora y misionera.
1.- Buscar entre las parroquias y movimientos quienes están realizando este tipo de actividades para
integrarlos a la pastoral de conjunto.
2.- Realizar encuentros que permita conocer a los diferentes equipos que se encuentran realizando alguna
tarea que tiene que ver con nuestro que hacer pastoral.
3.- Promover la semana de la unidad de los cristianos, en los diferentes espacios y plataformas por medios
electrónicos y redes sociales.
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ACTIVIDAD RESPONSABLE LUGAR Y TIEMPO MEDIOS
A nivel diocesano
Evaluación y revisión de P. Benjamín Barajas C. 6 de noviembre Propios del
los diferentes acuerdos de Domingo Martínez Reyes 2019 en casa San equipo
las actividades anuales. Feliz Domínguez, Manasés Martín,
Preparación a la Asamblea López, Misioneros
Diocesana. Apóstoles de la Palabra
Programación de las P. Benjamín Barajas C. 1 de diciembre 2019 Propios del
actividades del año 2020 Domingo Martínez Reyes en casa San Martín, equipo
Feliz Domínguez, Manasés
López,
OBJETIVO GENERAL
Conocer a Jesucristo, a la Iglesia y su misión a través de los medios de comunicación, para propagar el
evangelio a toda creatura.
a) Dimensión Prensa
Objetivo: Que seamos un lugar de encuentro, para generar diálogo entre los comunicadores y generar
contenidos.
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a) Dimensión Prensa
ACTIVIDAD RESPONSABLE TIEMPOS MEDIOS
Capacitar a los laicos, Coordinador y equipo Enero 2020 a junio Por decanato,
sacerdotes, religiosas en las 2020 mediante clases
nuevas tecnologías. prácticas.
Crear espacios/segmentos/ Coordinador, miembros Enero 2020 a junio Equipo técnico del
para redes sociales sobre de actual equipo, 2020. equipo.
eventos, temas, y lo que se profesionales de cada
vive en nuestra área, capacitores,
sociedad/cultura alianzas con
universidades.
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COMISIÓN DE LA SOLIDARIDAD INTRAECLESIAL
OBJETIVO:
Reactivar (roturar) nuestra identidad cristiana que, inscrita en la caridad evangélica, tienda realmente a
cultivar lazos de encuentro y comunión, testimoniados en el abono de la solidaridad.
OBJETIVO:
Impulsar y consolidar el espíritu de solidaridad y caridad cristiana con nuestra familia sacerdotal.
LUGAR Y
ACTIVIDAD RESPONSABLE MEDIOS
TIEMPO
OBJETIVO:
Orientar e instaurar orgánicamente las líneas de acción pastoral, fortaleciendo un espíritu de
corresponsabilidad en la tarea discipular y misionera de la familia intraparroquial.
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LUGAR Y
ACTIVIDAD RESPONSABLE MEDIOS
TIEMPO
OBJETIVO:
Despertar un encuentro con la misericordia divina, aunado a fomentar y acrecentar la acción evangélica
mediante la promoción de nuevas comunidades que continúen suscitando y fortaleciendo la fe.
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DIMENSIÓN ATENCIÓN A PARROQUIAS MÁS NECESITADAS
OBJETIVO:
Construir un fondo común, orientado a subsidiar materialmente a las Comunidades que menos tienen, en
beneficio de la promoción integral de los Fieles cristianos y de su seguridad.
Desde los primeros momentos en que los obispos organizaron el gobierno de la diócesis, recurrieron a la
ayuda de personas para compartir con ellas las tareas de dirección. Así en cada época histórica esta ayuda ha
asumido formas adecuadas a su momento. Actualmente es la curia diocesana el órgano encargado de ayudar
al Obispo en el gobierno de la diócesis.
Y, por otro lado, se debe a una razón práctica, pues en la Iglesia es grande la variedad de circunstancias en
que se desenvuelven las diócesis, por lo que seguramente sería una imprudencia dar demasiadas
disposiciones en el CIC, pues algunas serían inaplicables en las distintas diócesis debidas a sus circunstancias
particulares.
La colaboración en el servicio administrativo supone un servicio pastoral. Se tratan de principios básicos de
conducta cristiana, el Papa Francisco en Evangelii Gaudium:
1. Hace falta un espacio interior que otorgue sentido cristiano al compromiso y a la actividad, no somos
simples burócratas, debemos darle sentido cristiano a lo que tenemos, 262
2. Se requiere saber mirar la grandeza sagrada del prójimo en cada ser humano, descubrir a Dios en él. 92,
3. Es necesario que el único camino es encontrarse con los demás con la actitud adecuada, sin resistencias
internas, es un compañero de camino, 91.
4. Debemos ejercitarnos en el arte del Escuchar, esto hace posible la proximidad, 171.
5. Se debe resistir a la presión del relativismo practico que lleva a actuar como si Dios no existiera, ser
como autómatas, 80.
En este contexto, la Curia diocesana busca evitar un mero formalismo o caer en una simple tramitomanía,
es decir, un empleo exagerado de trámites, sino más bien eficientar, perfeccionar o facilitar las cosas por
medio de los trámites.
Todo esto facilita:
• El derecho de petición de los fieles
• La objetividad en los procedimientos
• La obtención de todos los datos necesarios
• La síntesis
• Constancia de la información recibida
PROYECTO
OBJETIVO GENERAL
Agilizar y dar seguridad, por medio de los diversos procesos curiales, a cada uno de los trámites que, por
medio de la Cancillería, se brindan a la diócesis, a las zonas pastorales, a los decanatos, a las parroquias y a
los fieles en general.
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Objetivo específico 1
Brindar las herramientas y unificar los criterios y formatos necesarios para que los trámites curiales tengan
agilidad en su proceso.
Objetivo específico 2
Dar a conocer el manual de trámites curiales aprovechando los espacios establecidos de formación del
presbiterio y por medio de encuentros de actualización para las y los secretarios de las parroquias.
Objetivos específicos
• Poner al día en cuestiones legales, laborales, civiles, fiscales y eclesiales a la Curia, el Seminario, las
Parroquias, las asociaciones civiles y los bienes de los movimientos, asociaciones y grupos de
apostolado de fieles laicos.
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Secretaría de Gobernación
INDAABIN
(Instituto Nacional de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales)
91
Propiedades de la Diócesis de Matamoros y Parroquias
Capillas propias
• Son 242
• 50 tienen algunos documentos como el acta de Cabildo, planos y fotografías
• De 192 hace falta reunir los documentos
• 67 se encuentran en ejidos
• Hace falta reunir los documentos y realizar todos los trámites para obtener las escrituras.
OBJETIVO GENERAL:
Promover la dignidad y belleza de los elementos destinados al culto divino, para favorecer la participación
activa y fructuosa de los fieles en las celebraciones litúrgicas.
92
ECONOMIA DIOCESANA
SINODALIDAD
De la rendición de cuentas a que están obligados los administradores (cf. cann. 1284; 1287)
§ 1. Quedando reprobada la costumbre contraria, los administradores, tanto clérigos como laicos, de
cualesquiera bienes eclesiásticos que no estén legítimamente exentos de la potestad de régimen del Obispo
diocesano, deben rendir cuentas cada año al Ordinario del lugar que encargará de su revisión al consejo de
asuntos económicos.
§ 2. Los administradores rindan cuentas a los fieles acerca de los bienes que éstos entregan a la Iglesia, según las
normas que determine el derecho particular.
El can. 116 §1 nos muestra el elemento material, formal y teleológico que configura la personalidad jurídica: «Son
personas jurídicas públicas las corporaciones y fundaciones constituidas por la autoridad eclesiástica competente
para que, dentro de los límites que se les señalan, cumplan en nombre de la Iglesia, a tenor de las prescripciones
del derecho, la misión que se les confía mirando al bien público…». Atendiendo a los elementos de esta
prescripción jurídica, podemos elencar –al menos en nuestra Diócesis- las siguientes Personas jurídicas públicas.
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INSTANCIA PARA CONOCER LA REALIDAD PARROQUIAL
1. El párroco a de convocar a una o más personas que colaboren con él en la etapa de sectorización.
2. La Oficina de Vicaria de Pastoral ofrecerá capacitación para las parroquias que soliciten apoyo en sus
equipos de sectorización.
4. Nos apoyaremos con la dirección de acceso al sistema de consulta Espacio y Datos de México que nos
proporciona el INEGI.
https://www.inegi.org.mx/app/mapa/espacioydatos/
Se recomienda cambiar el mapa base en el icono del lado inferior derecho. Después en el índice del lado
izquierdo elegir la información del Inventario Nacional de viviendas, donde puede elegir los indicadores de
su interés, podrá ir generando consultas con una distribución de la información por manzana.
También puede revisar los indicadores pero de una área en particular para esto deberá marcar el área con
el menú de herramientas del lado superior derecho y oprimir el botón consultar, esta información puede
ser descargada en el reporte de que aparece con la consulta en la pestaña que dice capas.
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• ¿Existen albergues temporales?
• ¿Cuántos parques deportivos, plazas están en tu territorio parroquial?
• ¿Cuáles son las enfermedades más comunes que hay en tu territorio parroquial?
• Factores de riesgo en la salud,
• Servicios de salud existentes
• Hospitales o clínicas existentes
• ¿Cuántas guarderías existen?
• ¿Cuántas escuelas de nivel kínder?
• ¿Cuántas escuelas de secundaria hay?
• ¿Cuántas escuelas de preparatoria hay?
• ¿Cuántos centros de nivel superior hay?
• ¿Actividades culturales?
• ¿Cuántos y cuáles son los centros culturales?
• ¿Cuáles son las actividades recreativas o de integración familiar en su tiempo libre?
• ¿Cuáles son los espacios de recreación de los jóvenes?
• ¿Cuál es la importancia que se le da a la política?
• ¿Cuál es la importancia que se le da al matrimonio?
• ¿Cuáles son los principales medios de comunicación que utilizan?
• ¿Cuáles son los principales problemas sociales?
• ¿Cuántas personas profesan la fe católica?
• ¿Cuántos y cuáles son las comunidades y denominaciones religiosas no católicas?
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• ¿Cuáles son los eventos donde promueven la Comunión, la Fraternidad, la unidad en tu
parroquia?
• ¿Cómo ejercitas la espiritualidad en tu parroquia: retiros, ejercicios, etc? ¿Cuáles?
• Los agentes de pastoral y el personal que labora en la parroquia, ¿Están evangelizados, dan
testimonio de su fe?
• ¿Cuál es la integración de tu parroquia en la dinámica pastoral del Decanato, Zona y Diócesis?
• ¿Existen espacios pastorales de encuentro: para atender, para celebrar, para reunirse, para vivir?
¿Cuáles?
• ¿Han promovido la Iglesia Segura en tu parroquia? ¿Cuáles han sido los medios o acciones?
• ¿Cuáles son los signos de celebrar una Liturgia viva en tu comunidad parroquial?
• ¿Alcanzas a llegar a la atención en los sectores de la población más vulnerables y alejados de tu
parroquia?
• ¿Cuáles son los principales desafíos que se te presentan en la comunidad parroquial?
• ¿Qué subsidios solicitarías a la Vicaría de Pastoral desde las Comisiones, Dimensiones y
Departamentos?
IGLESIA
AMBIENTE SEGURO PARA TODOS
SEGURIDAD FÍSICA
Objetivo:
Garantizar un conjunto de normas y procedimientos con la finalidad de proteger la integridad física y mental
de los fieles a través de actividades para el mantenimiento de los inmuebles.
PLAN DE CONTINGENCIA
• Incendios
• Huracanes
• Inundaciones
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• Enfermedades
• Inseguridad Social
SEGURIDAD MORAL
Objetivo:
Garantizar la integridad moral de todas las personas en el reconocimiento, respeto, promoción y defensa
de su vida, dignidad, derechos y deberes.
Virtudes Auténticos
Cardinales Cristianos
SEGURIDAD SEXUAL
Objetivo:
Garantizar la integridad sexual de todos, especialmente de los niños, niñas, adolescentes y quienes tienen
uso imperfecto de la razón y/o la voluntad o se encuentran en situación de vulnerabilidad.
PREVENCIÓN DE ABUSOS
Educar
Informar
Respetar
Reportar
SEGURIDAD ESPIRITUAL
Objetivo:
Garantizar que las instalaciones, catequesis, celebraciones litúrgicas, momentos de adoración, oración y
devoción, cursos, talleres, retiros, convivencias, misiones y eventos sean una verdadera experiencia de
encuentro con Dios y los hermanos, en fidelidad y a la Sagrada Escritura, la Tradición y el Magisterio de la
Iglesia.
RESCATAR LA ESPIRITUALIDAD
Fe
Celebración
Formación
Contenidos
Elementos esenciales
SEGURIDAD LEGAL
Objetivo:
Garantizar el cuidado y la recta administración de los bienes de la Nación en custodia o los propios de la
Iglesia Diocesana, observando leyes canónicas o civiles, especialmente laborales, fiscales y sociales.
ADMINISTRAR RECTAMENTE
ASOCIACIÓN RELIGIOSA
ESTATUTOS
REPRESENTANTE LEGAL
APODERADO LEGAL
PODER DE DOMINIO
RESPONSABILIDAD FISCAL
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SEMINARIO DIOCESANO DE MATAMOROS
El Seminario es una comunidad educativa en camino, promovida por el Obispo, que ofrece a quien es
llamado por Dios a participar del sacerdocio ministerial de Cristo, la posibilidad de revivir la experiencia
formativa que el Señor dedicó a los Doce. (Pastores dabo vobis, 60)
“Quien ama se siente impulsado a ir a los demás para ayudarles a encontrar al Señor”
(Mons. Eugenio Andrés Lira Rugarcía)
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En definitiva, a la luz de la Carta Pastoral que nos ha regalado Mons. Eugenio y el anhelo del Papa Francisco,
Nuestro Seminario se ha propuesto ser un seminario en salida, impulsando la comunión, el encuentro y el
testimonio transformador.
Pidamos a nuestro buen Dios, siga suscitando vocaciones a la vida sacerdotal porque como dice nuestro
padre Rector “Las comunidades cristianas crecerán si hay pastores y más, si éstos son santos según el
corazón de Dios.
Hermanos seminaristas ¡seamos seminario en salida! y más aún ¡seamos Iglesia Diocesana de Matamoros
en Salida!... Hasta que Cristo sea formado en nosotros.
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