Imágenes de infecciones odontogénicas
Shaza Mardini, DDS, MSa, *, Anita Gohel, BDS, PhD, FICDb
INTRODUCCIÓN
Las infecciones en las mandíbulas tienen diversos
cursos y resultados clínicos, ya que el origen y la
propagación de estas infecciones involucran
diversos tejidos y espacios anatómicos. La infección
en las mandíbulas y las estructuras circundantes
puede ser de origen odontogénico o no
odontogénico. La infección odontogénica es la que
surge del diente o las estructuras que rodean al
diente. Las lesiones inflamatorias son la afección
patológica más común de las mandíbulas. (1) Las
infecciones de los dientes pueden extenderse
directamente a los tejidos óseos y blandos
adyacentes. Las imágenes juegan un papel clave en
la identificación de la fuente de infecciones, la
extensión del proceso de la enfermedad y la
detección de cualquier complicación. (2) Este
artículo explora las diversas infecciones
odontogénicas, incluidas la caries dental, la
enfermedad periodontal, la enfermedad pulpar, la
pericoronitis, la osteomielitis y la imagen apropiada
para sus diagnósticos, así como la extensión de
estas infecciones a los espacios maxilofaciales
circundantes.
El papel de las imágenes de diagnóstico es definir la
ubicación de la infección y explorar la posible
propagación de la enfermedad más allá del sitio de
origen. (3) La radiografía simple sigue siendo un
componente importante del diagnóstico de caries
dental y enfermedad periodontal. La tomografía
computarizada (TC), incluida la TC de haz cónico
(CBCT) desempeña un papel importante en la
detección de cambios óseos y reacciones
periódicas. Sin embargo, la TC es superior a la
CBCT en la evaluación de la propagación de
infecciones en los tejidos blandos. La resonancia
magnética (MR) es el protocolo de imagen ideal
para diagnosticar infecciones de tejidos blandos
debido a la alta resolución espacial y de contraste
proporcionada en estas imágenes. Las imágenes
ponderadas en T1 son ideales para evaluar la
anatomía y la recuperación de la inversión de T
corta (STIR) o las imágenes ponderadas en T2
proporcionan información sobre el edema de tejidos
blandos. (4)
CARIES
Definición
La caries dental ocurre cuando hay pérdida
de minerales en la estructura dental causados por
subproductos bacterianos. La caries dental es una
enfermedad altamente prevalente que afecta hasta
al 92% de los adultos. (5)
Etiología
Las bacterias cariogénicas que inicialmente están
en la superficie del diente crean una
desmineralización de la estructura externa del
diente y a través de esa superficie dañada pueden
ingresar al diente. La caries es un proceso dinámico
con fases alternativas de desmineralización y
remineralización.(6) La lesión de la superficie puede
progresar a una lesión más grande debajo de la
superficie. La caries radicular que no ocurre como
una propagación de la caries coronal puede ser el
resultado de un ambiente oral que carece de saliva
para lavar la placa y los organismos; es decir,
xerostomía inducida por fármacos o por radiación.
La caries que afecta la cámara pulpar del diente
comprometerá los tejidos pulpares y progresará a un
proceso inflamatorio dentro del sistema del
conducto radicular y eventualmente conducirá a la
muerte de los tejidos pulpares.
La caries también puede reaparecer después de
que se hayan colocado restauraciones dentales
donde los márgenes están mal adaptados a la
superficie del diente y las bacterias tienen un camino
para ingresar.
Hallazgos radiográficos
La desmineralización inicial de la superficie del
diente ocurre dentro del esmalte como una
cavitación o zona lúcida comúnmente en las
superficies interproximales de los dientes. La caries
que progresa debajo de la superficie aparece como
una forma de triángulo que muestra la extensión
desde una base más grande cerca de la superficie
del esmalte y se estrecha hasta un punto hacia el
centro del diente.
La unión amelodentinaria o limite amelodentinario
(LAD) es un hito radiográfico importante, ya que
marca dónde entra la caries en la dentina y luego
cambia su forma radiográfica. Si la caries se limita
al esmalte y no ha alcanzado el LAD, se llama
"caries incipiente". A medida que la caries invade la
dentina, se extiende a lo largo del DEJ para crear
otra base ancha que se estrecha hasta un punto en
la pulpa. Las lesiones cariosas más grandes pueden
extenderse en múltiples direcciones, a la pulpa y
más a la raíz, y se denominan "caries severas". La
figura 1 muestra las etapas de la caries desde la
simple desmineralización de la superficie del
esmalte hasta la caries más grande que se extiende
hacia la pulpa. El patrón para la caries de raíz es una
lucencia radiográfica aislada en la raíz del diente
superior al hueso crestal (Fig. 2). La caries dental
recurrente es común y aparecerá como un área
lúcida en el borde de la restauración dental (Fig. 3).

Fig. 3. La radiografía periapical muestra caries

recurrentes (flecha negra) bajo una restauración
previa.

Las imágenes dentales panorámicas pueden

Fig. 1. La radiografía intraoral de mordida muestra
ejemplos de lesiones cariosas. Las flechas amarillas
indican lesiones incipientes que se limitan al
esmalte. Las flechas negras indican caries en el
LAD y la flecha blanca indica caries severa que ha
alcanzado la pulpa.
proporcionar una evaluación general de cualquier
lesión cariosa grande; sin embargo, no se verán
lesiones más pequeñas, ya que tienen una
resolución más baja en comparación con las
radiografías intraorales. La caries se puede ver en
imágenes tridimensionales (3D) de las mandíbulas,
como CBCT; sin embargo, debido a factores como
los artefactos metálicos, la caries recurrente es muy
difícil de diagnosticar en la TC (Fig. 4). Las
imágenes de CBCT pueden ser más precisas para
detectar lesiones dentinales oclusales y profundas,
pero el aumento de la sensibilidad se correlaciona
con una disminución simultánea de la especificidad.
(8)

La radiografía dental intraoral es la modalidad de

imagen más apropiada para el diagnóstico de
caries. Esto incluye radiografías periapicales y de
mordida. La resolución de estas radiografías permite
un análisis detallado de la progresión de la caries,
así como el análisis del hueso que rodea el diente.
Uno de los inconvenientes de la radiografía de
mordida es que no puede diferenciar entre el estado
clínico de la superficie; si está intacto o cavitado. (7)

Fig. 2. La sección
transversal sagital de CBCT Fig. 4. Las imágenes recortadas de CBCT
muestra la caries radicular demuestran las limitaciones del diagnóstico de
en los premolares caries utilizando esta modalidad.
izquierdos mandibulares. (A) Una imagen CBCT de baja resolución con
Estas lesiones aparecen restauraciones metálicas no permite el diagnóstico
excavadas y ubicadas en o de caries debido a artefactos e imágenes de menor
debajo del LAD y calidad.
generalmente están (B) Una imagen CBCT de mayor resolución sin
asociadas con la pérdida de artefactos metálicos muestra una gran caries en la
hueso periodontal.
flecha. El diagnóstico de caries más grandes es
posible en CBCT con imágenes de mayor calidad
con menos artefactos.
Tratamiento
Las cavitaciones pequeñas que se limitan al esmalte
pueden remineralizarse con una variedad de
productos, incluidos los tratamientos con fluoruro y
fosfato de calcio entre muchos.
La caries dental más profunda que llega al LAD
requiere remoción y restauración con la
preservación de la estructura dental sana
circundante. Hay disponible una variedad de
materiales de restauración dental, incluidos
materiales que van desde radiotransparentes hasta
radiopacos. Si la pulpa está comprometida,
entonces la terapia del conducto radicular está
indicada incluso si no hay signos radiográficos de
patología apical.
ENFERMEDAD PERIODONTAL
Definición
La periodontitis es una enfermedad compleja
caracterizada
por infección e inflamación de las estructuras de
soporte de los dientes. Puede haber una
enfermedad localizada del periodonto de un solo
diente o puede estar extendida y generalizada en
toda la dentición. Se caracteriza por la pérdida de
hueso que soporta los dientes.
Etiología
La periodontitis está precedida por gingivitis, que
es la inflamación en los tejidos blandos gingivales
que recubren el hueso. En el caso de la gingivitis, el
hueso no se ve afectado y, por lo tanto, se
diagnostica clínicamente, no radiográficamente. La
gingivitis puede progresar a periodontitis, donde se
forma una bolsa que permite que las bacterias se
muevan más hacia los tejidos y liberen toxinas que
pueden dañar los tejidos, incluidos los huesos, o
pueden causar una reacción inflamatoria local del
huésped que a su vez puede dañar los tejidos
también. La periodontitis se clasifica como crónica
(localizada o generalizada), agresiva (localizada o
generalizada), una manifestación de enfermedad
sistémica, necrosante o como abscesos del
periodonto y lesiones periodoncio-ontológicas
combinadas. Factores extrínsecos e intrínsecos,
como las complejas relaciones entre
microorganismos en la biopelícula dental (placa) y la
respuesta inmunoinflamatoria del huésped. La
influencia de factores genéticos, condiciones
ambientales y / o adquiridas, como fumar y otras
enfermedades sistémicas, contribuyen al proceso
de la enfermedad.
Hay al menos 16 enfermedades que pueden
manifestar periodontitis.
Hallazgos radiográficos
Radiográficamente, se observan niveles normales
de hueso crestal dentro de 1 a 2 mm de la unión
cemento-esmalte (CEJ) de los dientes (Fig. 5). La
forma de la cresta puede variar de redondeada a
plana. Los signos radiográficos de periodontitis
incluyen cambio de forma generalizada en la cresta,
pérdida de hueso crestal (horizontal y / o vertical),
ensanchamiento del espacio del ligamento
periodontal (PDL) y pérdida de hueso en el espacio
de furca. Los factores contribuyentes a la
enfermedad periodontal también pueden
identificarse radiográficamente, como la presencia
de cálculo, restauraciones colgantes, impactaciones
y apiñamiento dentales. Estos pueden causar
retención de placa, lo que crea una situación por la
cual puede ocurrir gingivitis y puede progresar a
periodontitis. Se pueden usar varias modalidades
diferentes para identificar la enfermedad
periodontal. La imagen panorámica puede ser útil
como una herramienta de detección general para
evaluar los niveles generales de hueso con respecto
a la dentición, pero no proporcionará detalles de la
relación alveolar dental. (Fig. 6). Se ha considerado
que las radiografías periapicales y de mordida
juegan un papel importante para el diagnóstico
periodontal y la planificación del tratamiento (Fig. 7).
Las radiografías de aleta de mordida son las
imágenes dentales estándar utilizadas para evaluar
el hueso crestal entre los dientes debido a que la
geometría de la adquisición de imágenes es paralela
al plano oclusal. Esto permite una visión precisa de
la relación de las estructuras de los dientes con el
hueso. La pérdida ósea en el área de la furca de la
raíz es un ejemplo de esa relación. Las imágenes
periapicales ayudan a identificar cualquier
interrupción o ensanchamiento del espacio PDL que
rodea el diente (Fig. 8). Las imágenes
tridimensionales, como CBCT a mayor resolución,
pueden proporcionar tanto niveles óseos como
evaluación del espacio PDL; sin embargo, los
escaneos de baja resolución pueden no ser útiles
para la evaluación de los espacios PDL (Fig. 9). Las
imágenes de CBCT proporcionan un análisis preciso
de la afectación de la furca, la morfología de los
defectos óseos verticales y la morfología de la raíz,
que son importantes en la planificación del
tratamiento y el pronóstico dental.
Fig. 5. La radiografía de mordida muestra el nivel
normal del hueso periodontal, no más de 2 mm del
CEJ
Fig. 6. Las imágenes panorámicas demuestran los
niveles de hueso periodontal en (A) normal y (B) un
paciente con enfermedad periodontal generalizada
con afectación de furcación (pérdida ósea) en los
molares (flechas).
Fig.7.Las imágenes muestran el uso de
radiografías periapicales y de mordida para el
diagnóstico periodontal: (A) una mordida horizontal
que demuestra hueso crestal normal, (B) una
mordida horizontal demuestra enfermedad
periodontal, (C) una mordida vertical puede usarse
si la pérdida ósea es extensa y no se puede incluir
en el campo de visión horizontal de mordida, y (D)
se puede usar una radiografía periapical para
evaluar lesiones moderadas a severas que no se
pueden evaluar completamente en mordidas
verticales.
Fig.8. La radiografía periapical de los dientes
mandibulares anteriores muestra un
ensanchamiento del espacio lateral PDL (flecha).
Este aspecto se puede ver en casos de movimiento
de ortodoncia, pérdida ósea periodontal con
movilidad de los dientes y malignidad que crece
dentro de la PDL.
Fig. 9. La sección transversal sagital CBCT (A) de campo de visión pequeño de alta resolución muestra un
espacio PDL periapical ampliado (flecha), que sugiere inflamación periapical temprana, y (B) la inversión y la
coloración de la imagen en el software ayudan a visualizar el ampliación de PDL apical (flecha)

Tratamiento
La periodontitis es un proceso complejo, la
enfermedad y el tratamiento depende de la
gravedad, la ubicación y el pronóstico de los dientes
dentro del periodonto. El mantenimiento de tejidos
periodontales sanos puede implicar una variedad de
tratamientos, incluyendo limpieza profunda
conocida como escalamiento y alisado radicular,
terapia antibiótica localizada o sistémica, y
procedimientos quirúrgicos, como injerto gingival y
óseo.
ENFERMEDADES PULPARES Y a través del examen histológico, sin embargo,
PERIAPICALES
Definición
Las enfermedades pulpares y periapicales son
entidades múltiples que son una secuela de la
muerte pulpar. La periodontitis apical (osteítis
periapical de enrarecimiento) es una afección
inflamatoria de los tejidos perirradiculares apicales
que es causada por una infestación microbiana del
sistema del conducto radicular del diente. Un
granuloma o quiste apical es el resultado de
periodontitis apical crónica. Un granuloma se
considera una colección de tejido granulomatoso
con una cápsula fibrosa bien desarrollada que se
une a la superficie de la raíz. Un quiste apical o
radicular es un verdadero quiste con revestimiento
epitelial resultante de la periodontitis apical crónica.
La osteítis de condensación, también conocida
como osteítis esclerosante periapical, representa un
aumento en el hueso laminar en respuesta a una
infección persistente de bajo grado
Etiología
La caries dental es la causa más común de
inflamación pulpar. La invasión de microorganismos
en el sistema pulpar causa necrosis de los tejidos
pulpares, que se filtran en los tejidos periapicales a
través del agujero apical, o a través de los canales
dentinales laterales hacia los tejidos perirradiculares
laterales. En las primeras etapas del proceso de la
enfermedad, el diagnóstico se basa en signos y
síntomas clínicos. La periodontitis apical crónica
puede conducir a la formación de un granuloma o
quiste. La diferenciación entre los 2 es más precisa
radiográficamente puede ser muy difícil diferenciar
las 2 entidades.
Hallazgos radiográficos
Los primeros cambios radiográficos ocurren cuando
se produce la colonización bacteriana del sistema
interno del conducto radicular que conduce a la
descomposición de los tejidos que rodean el ápice
de la raíz. El ensanchamiento del espacio del
ligamento periodontal apical (PDL) en una
radiografía periapical marca los cambios
radiográficos iniciales de la inflamación periapical. A
medida que la enfermedad progresa, se produce la
interrupción de la lámina dura, lo que conduce a una
radiolucidez periapical, que puede apreciarse en
una radiografía intraoral y puede denominarse
osteítis rara (fig. 10).

Fig. 10. La radiografía periapical de un molar
mandibular muestra osteítis apical rara /
periodontitis apical en un diente tratado previamente
con endodoncia (flechas).
La periodontitis apical crónica dará como resultado
la formación de un granuloma apical/quiste que
presenta radiolucidez bien definida en el ápice del
diente (Fig. 11).
Fig. 11. radiografía
periapical de un incisivo
lateral superior, que
muestra osteítis sugestiva
de un quiste o granuloma
apical
Puede o no estar su contorno corticalizado. En
algunos casos, la reabsorción radicular puede
ocurrir desde patologías inflamatorias de larga data.
La expansión de la lesión es común, pero el
epicentro permanece en el ápice del diente. En
algunos casos como resultado de una inflamación
crónica, el hueso adyacente puede responder
formando hueso esclerótico que puede ser visto
como osteítis condensante (Fig. 12). La evaluación
radiográfica inicial para enfermedad periapical es
mejor lograda con técnicas dentales de película
simple, como la imagen panorámica o periapical.
Imágenes de dos dimensiones, sin embargo, tienen
limitaciones con respecto a la detección de lesiones
periapicales. Estudios han mostrado (20) que el
hueso cortical debe estar erosionado para detectar
lesión en la radiografía periapical. CBCT ha
demostrado ser muy útil en la detección de cambios
periapicales, y recientemente ha sido citado por ser
más preciso en detectar lesiones apicales que las
radiografías periapicales (21) (Fig. 13). Sin
embargo, la conveniencia de la imagen dental
intraoral y su baja radiación, aún la hacen la
alternativa inicial para el diagnóstico. En casos con
signos clínicos y sin correlación radiográfica, CBCT
es la siguiente alternativa para evaluación adicional.
CBCT puede ser además agregado en la evaluación
del epicentro y extensión de la lesión en hueso,
canal y morfología dentaria; reabsorción radicular; y
fracturas de dientes. La imagen MR no está indicada
en diagnóstico pulpar o de enfermedad periapical.
Fig. 12. CBCT vistas sagital (A) y coronal (B)
muestran osteítis condensante periapical
(esclerosis) relacionada con el primer molar
izquierdo inferior
Tratamiento
El tratamiento de la periodontitis apical es
convencionalmente el tratamiento de conducto
radicular. Completa remoción del tejido pulpar
dentro de la cámara pulpar y canales radiculares, las
cámaras son descontaminadas y rellenadas
con gutapercha. En el caso de que el diente no sea
restaurable, se debe indicar la extracción.
PERICORONARITIS
Definición.
La inflamación ocurrida alrededor de la corona de un
diente parcialmente erupcionado es conocido como
pericoronaritis. Está comúnmente presente en
terceros molares inferiores parcialmente
erupcionados.
Etiología
Atrapamiento de partículas de comida en el tejido
gingival y al sobreponerse al diente parcialmente
erupcionado crea una fuente de inflamación. Esta
inflamación puede ser propagada al hueso que
rodea.
Hallazgos radiográficos
Radiográficamente el área puede o no incluir
cambios en el hueso, pérdida de trabeculación,
Fig.13. Una serie de imágenes de película simple y formateos CBCT muestra la eficacia de estas imágenes
para la evaluación de la misma lesión periapical (A). La radiografía periapical muestra el diente en cuestión
marcado con un punto rojo, no se observa patología visible. (B) Radiografía panorámica del mismo paciente,
no se observa patología significativa asociada con el diente (C) La reconstrucción panorámica CBCT muestra
una pequeña línea opaca en el seno (flecha), que sugiere Periostio elevado. (D – F) Los formateos en sección
transversal y axial muestran claramente un quiste apical asociado con la raíz palatina que no se vio en la imagen
bidimensional.
radiografía periapical o panorámica, puede ser
rarefacción localizada con o sin esclerosis o incluso usada para identificar el origen de la infección. Un
osteomielitis (22). Comúnmente la lesión se CBCT mostrará la lesión en 3 dimensiones, lo que
presentará como una pequeña rarefacción con ayuda a evaluar las características faciolinguales,
bordes escleróticos gruesos distal a la corona de un incluyendo la integridad de las corticales y la
molar impactado (Fig. 14.). Si hay dilatación de la relación de la lesión con estructuras que rodean,
imagen distal del folículo del tercer molar debido a como el canal alveolar inferior en la mandíbula, o el
la infección, es llamado “quiste paradental del tercer seno en maxilar. Imágenes más avanzadas, como
molar”. imágenes de pericoronaritis pueden variar el CT con contraste o RM es útil para evaluar la
desde una simple radiografía intraoral del diente de propagación de la infección en potenciales espacios
imagen más avanzada para evaluar la propagación bordeantes.
de la infección. La imagen dental estándar, como

Fig. 14. El reformateo panorámico recortado CBCT
muestra un tercer molar impactado con una
presentación clínica de pericoronitis La rarefacción
ósea se nota superior a la corona del diente
impactado (flecha blanca), que sugiere inflamación.
Tratamiento
Extracción del diente impactado es indicado en el
caso de pericoronaritis. Terapia antibiótica es
usualmente usado junto a la cirugía.
OSTEOMIELITIS
Definición.
La inflamación de hueso y médula ósea es conocida
como osteomielitis. El proceso puede ocurrir en
cualquier hueso incluyendo el complejo maxilofacial,
pero es más común en mandíbula que maxila.
Etiología
El origen de la infección puede estar dentro del
hueso o en tejido blando adyacente (2). La
osteomielitis es usualmente clasificada por
duración; aguda versus crónica (23). Osteomielitis
usualmente empieza como una infección aguda y se
convierte en una condición crónica. La osteomielitis
de mandíbulas es más a menudo causada por un
foco bacteriano que puede ser originado por una
infección odontogénica, enfermedad periodontal,
sitios de extracción, cuerpos extraños, o sitios de
fractura. Como los organismos piógenos entran a la
médula ósea, se genera una respuesta inflamatoria
y la superficie endostal del hueso cortical es
reabsorbida, lo que puede progresar en una pérdida
de hueso cortical. La osteomielitis es a menudo
descrita como continua. La fase aguda es causada
por la propagación de la infección en médula ósea.
Clínicamente el paciente típicamente mostrará
síntomas como dolor, hinchazón, fiebre y
linfadenopatía. Drenaje purulento puede o no estar
presente.
Hallazgos radiográficos
Radiográficamente en sus etapas más tempranas
puede haber mínimos cambios vistos en el hueso.
Puede haber áreas no definidas de densidad
reducida, apreciadas en imágenes intraorales de
dos dimensiones. Si el proceso progreso al
periostio, la interrupción de la membrana puede
causar que hueso nuevo se establezca, conocido
como “reacción periostal” o “nuevo hueso de
formación periostal” (Fig. 15). Este hallazgo
radiográfico es característico de la osteomielitis,
pero puede que no siempre esté presente. La
característica más patognomónica de la
osteomielitis radiográficamente es la presencia de
hueso secuestrado. Estos son pequeños segmentos
de hueso que se ha aislado debido a la necrosis del
hueso circundante (23). En las últimas etapas de
osteomielitis aguda puede detectarse, esclerosis en
la periferia, así como pequeños secuestros dentro la
región (Fig. 16). La osteomielitis crónica puede
presentarse radiográficamente diferente de la
osteomielitis aguda. Erosión cortical, osteopenia
mixta con esclerosis y reacción perióstica están
entre los hallazgos radiográficos tardíos, junto con
posible hinchazón de los tejidos blandos (23,24).
Aunque el examen inicial puede realizarse con
imágenes dentales bidimensionales, CBCT y TC
multidetector (TCMD) son más apropiadas para un
diagnóstico y evaluación precisos de hueso. CBCT
puede definir el patrón óseo y extensión del área
afectada. Las imágenes de TCMD proporcionan
detalles de hueso fino y pueden identificar fuente de
infección y secuestro. RM es útil y permite la
detección temprana de osteomielitis y puede evaluar
el alcance de la enfermedad. Los primeros hallazgos
de osteomielitis aguda son generalmente imágenes
de baja intensidad de señal en T1 ponderado y una
señal alta en T2 y secuencias STIR (2). Para
osteomielitis crónica, habrá baja señal con ambos
ponderados en T1 e imágenes ponderadas en T2.
Un secuestro tendrá una baja intensidad de señal
con T1 o secuencias STIR, mientras que el tejido
circundante tendrá una señal alta con T2-ponderado
o secuencias STIR. Las imágenes de medicina
nuclear también pueden diagnosticar osteomielitis
temprana y puede detectar enfermedad activa (22).
Gammagrafía ósea trifásica con metil difosfonato
marcado con 99mTc se utiliza principalmente para
detectar osteomielitis. FDG-PET ha demostrado ser
útil en el diagnóstico crónico de osteomielitis (2,23).
La tabla 1 muestra un resumen de las diferentes
modalidades y sus hallazgos con respecto a la
osteomielitis.
Fig. 15. La vista axial CBCT de la mandíbula
muestra osteomielitis que afecta el torus mandibular
derecho (compare la apariencia enrarecida a la
cortical hueso normal del torus izquierdo). Este
hueso denso es más susceptible a desarrollar
osteomielitis debido a su vascularización
disminuida.
Fig. 16. CBCT (A) reformateo panorámico de un
paciente con enfermedad de osteomielitis bilateral
de la mandíbula posterior, muestra tomas de
extracción del tercer molar no curadas. (B) La
sección transversal coronal de la mandíbula
posterior derecha muestra formación periódica de
hueso nuevo (flecha amarilla). (C) La sección
transversal coronal de la mandíbula posterior
izquierda muestra nueva formación ósea perióstica
(flechas amarillas) y secuestro óseo (flecha blanca).
Tratamiento
El tratamiento de la osteomielitis es a menudo con
antibióticos sistémicos a largo plazo, que pueden
ocurrir en combinación con el tratamiento con
oxígeno hiperbárico. La cirugía a menudo está
indicada, particularmente en el caso de osteomielitis
crónica.
Abreviaturas: TCMD, tomografía computarizada
multidetector; STIR, recuperación de inversión de T
corta; T1W, ponderado en T1;
T2W, ponderado en T2
INFECCIONES ESPACIALES
Definición
La propagación de la infección odontogénica en los
espacios vecinos que rodean el complejo
maxilofacial se conoce como infecciones
espaciales. Estas infecciones son de gran
preocupación debido a la proximidad a áreas que
pueden crear complicaciones potencialmente
mortales. El potencial los espacios formados por
planos fasciales dan un camino a áreas como la
orofaringe e hipofaringe, órbitas y seno cavernoso
entre otros.
Etiología
La infección odontogénica conduce a la propagación
de la infección en los espacios circundantes. Esto
puede se originan de un diente en el maxilar o
mandíbula Infecciones espaciales causadas por
odontología, la infección en los molares Eliminación de la fuente de infección por medios
mandibulares tiende a comenzar en el espacio quirúrgicos y antibióticos están indicados.
submandibular debido a la posición de los ápices de Fig. 17. Reformateo panorámico CBCT (A) de un
los molares inferiores. El músculo milohioideo.
Infecciones espaciales causadas por infecciones
dentales en los premolares mandibulares o los
dientes anteriores tienden a comenzar en el espacio
sublingual, ya que estos vértices se encuentran
superiores al músculo milohioideo. Propagación
bacteriana de la fuente odontogénica viaja a través
del espacios formados por los planos faciales. A
pesar de que la terapia antibiótica moderna ha
reducido la aparición de estas "infecciones
espaciales" la morbilidad y la mortalidad persisten.
Complicaciones, como obstrucción respiratoria,
puede ocurrir debido a hinchazón en el piso de la
boca; es decir, angina de Ludwig, trismo, edema y
formación de abscesos. Además, la formación de
abscesos en o alrededor las amígdalas paciente con presentación clínica de pericoronitis en
parafaríngeas, la retrofaríngeo a epiglotis también el tercer molar izquierdo mandibular (flecha). (B) En
puede causar obstrucción de las vías respiratorias. la vista axial, una asimetría de tejidos blandos en
Otra complicación de la infección odontogénica. Es forma de orofaringe la vía aérea debido al espacio
un absceso orbital. Esto es más comúnmente visto submandibular y la infección del espacio
en infecciones odontogénicas maxilares, parafaríngeo causada por la inflamación es célebre.
particularmente aquellas que involucran el seno (C) La vista coronal demuestra aún más la asimetría
maxilar. El peligro de estas infecciones es la posible de la luz de las vías respiratorias. (Cortesía del Dr.
propagación retrógrada en el cerebro que causa Christopher Daniels, Santa Rosa, CA.)
cavernosas. trombosis sinusal, meningitis,
cerebritis, cerebro absceso, o incluso la muerte.
RESUMEN
La infección odontogénica puede aparecer en
Hallazgos radiográficos patrones desde caries dental hasta espacio severo
Imagen inicial con imágenes dentales de película
infecciones Las imágenes dentales abarcan una
simple, como como radiografías periapicales o
amplia variedad de modalidades de imagen para
imágenes panorámicas, puede ayudar a identificar
ayudar en el diagnóstico y determinación del origen
la fuente odontogénica de infección. Estos hallazgos
de la infección. Tabla 2 muestra un resumen de los
han sido discutidos en secciones anteriores CBCT
estudios de imagen utilizados para Los diferentes
puede ayudar a identificar la fuente y el efecto
tipos de infección. El diagnóstico temprano es la
potencial en la vía aérea, como la asimetría, pero no
clave para prevenir complicaciones graves de
es apropiado para Imágenes de tejidos blandos. La
infección dental.
figura 17 muestra un caso de pericoronitis que se
diseminó a la parafaríngea y creó una asimetría de
las vías respiratorias detectado en CBCT. Imagen
integral de infecciones espaciales odontogénicas se
logra mediante TC convencional con ventanas de
tejidos blandos o posiblemente resonancia
magnética para evaluar a fondo el tejidos blandos
involucrados. TC con contraste puede indicar la
ubicación y la relación de infecciones a estructuras
neurovasculares (Fig. 18). Los abscesos aparecen
de baja densidad con un borde mejorado.

Tratamiento
Las infecciones espaciales pueden plantear
situaciones potencialmente mortales si no se
abordan de inmediato. Estableciendo una vía aérea
o evitar su cierre es de suma importancia.
Fig. 18: La TC con contraste muestra infección del espacio submandibular a la izquierda. (A) La ventana de
hueso muestra el área donde se extrajo el diente infectado en la mandíbula (flecha negra) y la desviación de
la vía aérea (blanco flecha). (B) La ventana de tejido blando representa la baja atenuación en el espacio
submandibular que representa el fluido colección. El encallamiento de la grasa en los planos de grasa y en la
capa subcutánea es una apariencia radiográfica típica. (Cortesía del Dr. Andrew Cheung, Oak Ridge, TN.)

Abreviaturas: CBCT, tomografía computarizada de haz cónico; CT, tomografía computarizada; MDCT,
tomografía computarizada multidetector; 3D, tridimensión.