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I.- SECCION HISTORIA UNIVERSAL ANTIGUA TIEMPO Y ESPACIO /11-12/ 2001-2002 Depto Ciencias Sociales Universiciad de! Bio-Bio Chilkin - Chie El mundo de los etruscos: mito o realidad (Observaciones sobre dos muestras). Alejandro Banealari Molina * “én agosto de 1999, tuvimos Ja ocasién de visitar en Santiago la exposicién: Roma Imperial. El dpice del poder’, en el Instituto Cultural de Providencia. Hacia fines de 2000, nuevamente conocimos otrit sorprendente muestra ~organizada por la Embajada de Italia— en torno al Mundo Etrusco que sé exhibid en el Museo de Bellas Artes de la capital. Sin duda, que dos exposiciones sobre este t6pico cons- tituyen, para nuestro pais, un hecho sin precedente, novedoso, inusual y de gran trascendencia para empaparnos culturalmente de los pueblos que conformaron la Italia antigua. Tanto en la primera exposicién sobre Roma, como en la de los Etruscos se exhibieron, por primera vez, materiales arqueoldgicos provenientes de Ia antigua Roma y de la zona de la Etruria (actual Toscana) que nos muestran Ia realidad histérica y civilizadora de estas dos culturas. La muestra -el mundo Etrusco- contempl6 mas de 350 objetos originales de los museos de Florencia, Siena, Volterra, Arezzo y otros, que nos ilustran sobre su vida material: interesante result6 observar diferentes utensilios que reflejan la vida cotidiana y doméstica, como también, su profundo sentido espiritual y religioso. Impresionantes sareSfagos y urnas muy bien fabricadas y adornadas por el influjo del arte griego, hacen percibir el grado de madurez y desarrollo que alcanzaron los etruscos A propésito de esta exhibicién ~todo un suceso en Chile pretendemos desa- rrollar algunas consideraciones generales que permitan desentrafiar ciertas caracte- risticas esenciales de este pueblo” y, al mismo tiempo. establecer una correlacién Profesor de Historia Antigua del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad de! Bio-Bio y del Departamento de Ciencias Histéricas y Sociales de la Universidad de Concepeisn. 1 Sobre esa exposicién, véase A. BANCALARIL, A piopdsiza de la muestra “Rome linpevial”, en “Revista de Historia”, 9-10 (1999-2000). pp. 373-376. Para una visidn general sobre la-civilizaci6n etrusca son recontendabley los siguicttes estudios: M PALLOTTINO, Etuscologia, Hoepli, Milano 1942. texto esencial y punto de partida para todo tta- bajo y estudio conceriente al puehloctinsco: H. SCULLARD. The Etruscan cities and Rome. London 7 El nando de los etruscos, Alejandro Bancalari Motina con el Progetto Etrusco —realizado en Italia en 1985— actividad central del aio internacional de los etruscos. A lo largo de la historia han surgido muchos mitos y leyendas en torno a los etruscos, en especial, sobre su origen, desarrollo, ciudades. necrépolis y su relacién paralela con la civilizacién romana y del imperio. Estos fueron originarios, ACCS CRUMATTMENAGIEMISIMINBER tesis que sostenia el historiador griego Dionisio de Halicarnaso® y fueron llamados asimismo, rasenna @ fyerhenoi por los helenos; los romanos, por su parte, les otorgaron el calificativo de tesci (de abi viene Toscana) y Etrusci (=Etruscos). Desde suorigen “villanoviano” (siglo XIX a. de C.), comienzan a expandirse por la zona de la antigua Toscana, oeste de Umbria y sur del Lacio y van creando centros urbanos organizados y de gran actividad agricola y comercial. A partir del siglo VIL a. de C. se les reconoce dentro del perfodo “orientalizante” o la sociedad de los “principes’' que se inspira en la cultura oriental. tomando elementos de ella. Sobre (od: GHAACSMCMATEMESOSIEMS como Caere, Tarquinia, Vetulonia y Populonia, desarrollan una activa relaci6n comercial y cultural con la zona del medio oriente. Bs la época del bucchero (675 a. de C.), cerimica de color negro de Cerveteri y el objeto peculiar de exportacidn internacional mas preciado de los etruscos (en la exposicion se observan estos magnificos ejemplos). Los Sigil MirdeC@ssonemomenorn ((URISSEMISCOSIEOMTENZATAMTELACONASECOMUOSMEAS tanto de la hélade como de la magna Grecia; se sienten atraidos por el ambiente, el arte y la cultura de éstos*. No se trata de una imitacién mecdnica, sino que experimentan una reelaboracién de sus obje- tos con errores y producciones propias, en una palabra buscan su identidad como un producto local que toma, obviamente, elementos importados. El momento de @pagemmenmcimilizicioneruscmsiziowvinmde@emcoimecid: con dos hechos y procesos claves: la conquista y dominio de la ciudad de Roma’ por los reves Tarquino el antiouo. Servio Tulio v Tarquino el soberbio y. por la gran ex= (@aNSiGneEOMeNcialyealontamdam de las ciudades maritimas y mineras hacia el Lacio. Ia Tlanura padana y la Campania, conformando una ‘CaaSSSERGEP ® poderosa y contr 1967; M. TORELLL Etruria («Guide areheologiche Laterza». 3), Roma-Bari. 1980; ID. Historia de los etrascas. Critica, Barcelona 1996: R. BLANCHI BANDINELL y A. GIULIANO, Etrusehi e Iralici priiua del dominio di Roma, Milan 1973: M. CRISTOFANI, L'arte degli Etrusehi, Torino. 1978. DIONISIO, |. 28. Hoy en dia esta totalmente CSSA OMe Oe UeNoMOSeaS (cc eA SMENOR (coris sostenida por HERODOTO. 1.94. 4 M.TORELLL, Leruscos (op. cir.), p-276, insiste en affrmar que “seria un error, sin embargo, pensar {que la historia de Etruria, como ta de cualquier otro sitio. se identifica con la de sus clases ditigentes, quienes con su cultura y su ideologia decidieron dejar una determinada imagen de si mismas y sélo 51 CAEN aUMES sino quic cambiaron profuncka- mente a lo largo de los siglos, én funcién de su composicidn, de su poder o dé su ideologia.” J. HEURGON. Le vidla covidiana de los etruscos, ed. Temas de Hoy. Madid L991, p. 362, seiiala que: “Ios etruscos, desde que un prodigioso enriquecimiento hubo ensanchado su horizont virtieron al mundo griego con is ardientes propagandistas de su doctrina: bitharos.a los ojos de los griegos. y en el semido propio del término, puesto que mo hablaban ta lengua de Homero, no por ello dejaron de crear la mas ferviente de las Grecias exteriores que se constituyeron en todas las costas de Occidente y de Oriente”. con- entusiasmo que hizo de ellos. en Malia, los mi 6 DIODORO SICULO. V.40resalta que “los etruseos conquistaron tn gran territorio en el que funda- ron muchas ciudades importantes, Poseian poderosas fuerzts navales y durante mucho tiempo do- 8 EL mundo de los etruscas Alejandro Bancalari Molina lando, pricticamente. toda Ja peninsula itélica. Después de la expulsin de los etruscos de Roma (509 a. de C.). inicidndose e! periodo de Ia Repiblica romana @aeaaaeD (EHUSCASOMIENAAAMESIOISAepeMaIeMe Todavia centros urbanos como Veyes, Caere, Tarquinia, Volsini, Vulci y otros, eran mas importantes que Roma, pero ésta pronto comenzara su polftica expansionista, en la cual cada ciudad etrusca caerd bajo el poder y la égida de Roma. Esl fin del mundo etrusco, de la disolucién de sus nticleos urbarios y el momento de su romanizacién (siglos IV-I a. de C.); se sienten, estén incorporados y asimilados al mundo romano. Por otra parte, hacia fines de la reptiblica y comienzos del imperio comienza a surgir una tendencia de asociar todo lo vinculado con el mundo etrusco (arte, monumentos, textos, abjetos) como Gittiimonicumiguonomdestasade”. Existe una contraposicién, entonces, entre Roma que simboliza lo nuevo y civilizado y lo etrusco que representaba lo arcaico, como también, hubo un mal recuerdode los monarcas etruscos por su tia y los sucesos de violacién y suicidio de la joven romana Lucrecia’. Asi, la historia etrusca cuya duraci6n se extiende por casi @ammmilemi@ inserta- da en un proceso de larga duracién con anterioridad y paralela a Roma y a'su poli- tica expansionista, maduré como una civilizacién propia y formadora de los roma- nos y de occidente. El valor y la deuda que tenemos con los antiguos tusei es enorme, por Ciert0. {CRTCSSAuCAIOTeEShaitAnSMisoresSIArSiaOSicaa ROM, la triada Capitolina: Jupiter (Tinia) Juno (Uni) y Minerva (Menrva) es etrusca. La (PSNTCRTAACISAA. ¢| wazadomunbano y las MHUPANAs como la observacion de las visceras de los animales para predecir el destino @EBSBIBEB) se constituyeron en elementos esenciales de este pueblo. El origen del término Roma deriva entre otras teorias— de la @SUSSESCRRIMM y. [a propia palabra@ae, que podria signifi- car “GHGAGRIEMED", cs asimismo, etrusca como también, @@pMMB (posiblemente del etrusco gal). El legado material dejado en sus tumbas en las necropolis es impresionante: pinturas, objetos ex yoto, armas, utensilios. joyas, urnas, sarcéfagos y muchos otros ejemplos como, la cloaca maxima. el Arco. el retrato, los simbolos de las magistraturas, los procedimientos rituales y, la actividad maritima, manifi tan el grado de desarrollo y civilidad alcanzado por este pueblo. Q@IRGaTSHEP- GUICANESEREAIMTIEMOSMISEW, con sus ritos fundacionales y atributos ceremoniales, sus tres reyes, en especial Servio Tulio, quien se destacé envel desarrollo urbantsti- Ahora bien, desde mediados del siglo VI y, particularmente dei 335 cuando los etruscos derrotan a los focenses en la batalla naval de Alaliao Aleria, se consolida cl 2°00o0D _y presencia maritima sobre Cércega y el mar Titreno. coincidiende con el dominio sabre Roma. 1. hecho, los griegos envidiosos primero del suceso comercial y crucial de la talasoeracia etruse jespue’s por haber perdido su influencia frente a ellos, las calificaron despectivamente de “pirata 7 En cl ambiente romano comenzaba a percibirse una sensacién de! ASTD SAAATAASTAASEAD . con In que comparticron, vagamente, una misma cultura. Cf. CICBRON, De net.deorum, 2. 11: TITO LIVIO, VI, 17,3. Para una profundizacién, W. HARRIS, Rome 1 Etruria and Umbria, 1971, pp. 30-36; TI. CORNELL, Origenes (op. cit.) pp. 204-208. DIONISIO, LY, 66-70. 9 En una (SESE y critica de aceptar a Roma como etrusca, véase T. J. CORNELL. Los urigenes de Roma. C. 1000-264 A.C... Critica, Barcelona 1999. esp. p. 207. quiet serial: Cee COMANATSMATSMNEP. Fra una comunidad latina independiente, con una pobl polita y una cultura bastante refinada. Su vida material era semejance (y a menudo resultaba impo- sible distinguirla de ellay a la de las ciudades euruscas vecinis, y ello no implica ninguna supremacia © prioridad cultural por parte de los etruscos 9 1 cosmo El nundo de tos etruseos Alejandra Bancalari Molina co y en el progreso material de la ciudad: urbs quattour regionum. han sido uno de los testimonios concretos y perennes de la herencia transmitida a los romanos. También, de origen etrusco, es ¢] GESTED Gan OMe ee MeOMOnNCEMMeSOCISAe, de donde surge posteriormente, |0 STM NpAnCaaanaManND : )aenonten (nom- bre propio), nomen (nombre de la familia) y el cognomen (el sobrenombre). Particu- lar mencidn de los préstamos etruscos a Roma constituyen 10s GNQMAHRIED” y Va Games. En tin. la civilizacién etrusca fue una realidad histérica, compleja, activa y viva; parte integrante de Italia antigua y de todo el mundo mediterraineo La exhibicién E] Mundo de los Etruscos. nos presenta, justamente, un reco- trido por su milenaria historia y por su aporte material a la historia de occidente. Su visita fue valorada y recomendada en ese momento para adentrarse en los miste- rios, pero sobre todo, en la verdad y la labor creativa de los antiguos habitantes de Italia. _La muestra estuvo ordenada cronolégicamente y fue muy didactica; tal vez. el dinico aspecto deficiente fue no contar con un catélogo, seleccionando y expli- cando las mejores piezas de ésta. Ahora bien, el cultivo de la historia y cultura etrusca adquiere un interés des- de la época del Renacimiento con una visién nostdlgica y mitica del pasado. Sin embargo, a partir del aio 1726 cuando se funda la Academia Etrusca de Cortona por Onofrio Baldelli, comienza’a estructurarse un grupo de estudiosos en torno al tema. Hacia fines del siglo XVIIL, el abate Luigi Lanzi hizo progresos decisivos en los estudios etruscos, los que se incrementan en el siglo decimonono por la creacién de grandes institutos de investigaciGn, museos. descubrimientos arqueolégicos y publicaciones cientificas. El siglo XX ve surgir en Florencia, en 1927, el centro principal de los estudios etruscolégicos. el Comité permanente para la Etruria con la publicacién de la revista “Studi Etrusehi” y con la fundacisn del Instituto de Estudios Etruscos que llev6 a.cabo en 1929 el ler Congreso Internacional. Confi- gurado un selecto grupo de investigadores a partir de estos hechos, los estudios etruscos comienzan a cimentarse y consolidarse en las Universidades italianas y europeas. Es aqui donde irrumpié la magistral figura de Massimo Pallottino (1910— 10 Lo; CAT TTTGEER s —inicnsos y masivos en el sigh Hd. de C- CATAL TATTOOED. Fiero tm rito funeratio aristocralico cuyo proposito y significado er: TTT oMGOSTMEAGS a través de la sangre derramada por las parejas de combatientes. De un cardicter estrictamente privado, pasaton con el tiempo a ser pabli- cos con neasiGn de los funerales de Junio Bruto el 264.4. de C.. organizados por sus hijos. Ast. ests Juchas, de larga tadicidn, se convirticron y se constituyeron en grandes focos de diversién popular Su nionibre téenico eta maeva. regalo, es decir. especticulos offecidos a la comunidad encargado, dirigido y finaneiado por un editor. Se cetebraban en ocasiones especiales como inau: aniversarios, fiestas religinsas y hechos personales motivados por los emperadores, Em general. véa se R. AUGUET. Los juegos romanos. Aymd, Barcelona 1972. U1 Gracias a las fuentes arqueolégicas encontradas. esencialmente. en sus necropolis con los objetos y sobre todo. las pinturas y frescos de las Lumbas se ha podido reconstruit, fehacientemente, el estilo de vida. las ocupaciones. ta vida efvica y social de los etrusens. El papel de las mujeres: una SSE GEREBD, cla ftura funcisn de ta maver fiamitias es otro de los vincuilos directos en el binomio Etraria-Roma. En general, pata el wma de la vida Cotidiuna, sigue siendo chisico el testo de J HEURGON, Vide coridiana (op. cit.) y, en particular, sobre las mujeres efr. A RALLO (ed.), Le donne in Exruria, Cerma di Bretsehneider, Rome 2001 12 RK. STACCIOLL, Gli Eteusehi. Mite ¢ reat, Newton Compton, Roma 1982: J- P. THULLLIER, Giti Evrusehi. ilinisterio svelar. Electa/Gallimard. Trieste 1993 10 St mundo de los etruscos Alejandro Bancalari Molina 1995). erudito e investigador incansable. el maximo exponente del siglo XX sobre los estudios de etruscologta’’. Un acontecimiento que sirvié para simbolizar la presencia y validez del pue- bloetrusco fue el Progerto Errusco™. realizado en Italia en 1985, conocido como el afio internacional de los etruscos. En ese afio, se realizé en Florencia el 2° Congreso de estudios etruscos, reuniendo a cientificos de todo el mundo. Desde el 16 de marzo hasta el 20 de octubre de 1985, se celebraron conferencias, mesas redondas. exposiciones y actividades académicas diversas que tuvieron como gran objetivo. ademis del desarrollo y cultivo de la disciplina cientifica: la etruscologia, acercar este mundo especializado al hombre medio, a la cultura comin y popular. Gran impacto y cobertura hubo en los medios de comunicacidn, particularmente, en los petiddicos' con fasciculos y suplementos extraordinarios y con programas de tele- visin; publicaciones mas 0 menos generales en revistas de historia, arqueologia y catalogos accesibles a todo hombre comin. En realidad, era el suceso noticioso del momento y se cumplié con el propésito de acercar a la ciudadanfa y al paiblico en general, de sentirse identificados y coparticipes con el proyecto. Colegios, univer- sidades. delegaciones extranjeras, sociedades y todo tipo de gente se empapd culturalmente de la muestra. Fue una forma de acercar “vivamente” y en “concreto” la esencia del pasado histérico etrusco. Permitaseme un breve recuerdo —nostalgico— de aquel proyecto etrusco con diversas muestras “viajando por el mundo de los etruscos”, de mis afios de estu- diante de doctorado en Italia. Era la primavera de 1985, y por intermedio del Departamento de Arqueologia Antigua de la Universidad de Pisa, tuvimos la opor- tunidad de participar en una interesantisima gira de instruccién y de estudio, reco- triendo y visitando en —“el aiio internacional de los Etruscos”— las diversas mues tras-exposiciones, desarrolladas principalmente en la regién de la Toscana. El objetivo preciso y analitico del proyecto fue dar a conocer con toda claridad, la realidad, influencia e importancia del milenario pueblo Etrusco. Nuestro itinerario en busca de la antigua Etruria—, comenz6 en la célebre y rtistica Florencia, visitando la exposicién principal titulada: Civilta degli Erruschi. En ella, se ofrece al piblico una visién general y esquematica del desarrollo hist6- rico de la civilizaciGn etrusca, en todas sus manifestaciones politicas sociales y religiosas: como una cultura dinémica en proceso constante de transfor- econdémicas. 13 El padre de fa Euuscologia en el siglo XX, Massimo Pallottino, profesor de fa Universidad de Roma, encontrs la muerte en febrero de 1995 a los 85 afios de edad. en plena capacidad intelectual productiva, Su deceso causd profimdo dolor y dej un gran vacio en los circulos arqueolégicos, historicos y cn los estudiosos de! pueblo etrusco, tamo de Italia como del mundo entero. Véase. A. BANCALARI. En rectierdd de Massiind Pallottino (1909-1995), eh “Revista de Historia” 5 (1995), pp. 248-252. También, J. BLAZQUEZ y J, MARTINEZ-PINNA, (11 memoria Massimo Pallottina (1909-199: Geri6n”. 13 (1995). pp. 13-16, 14 Entre la gran carttidad de publicaciones y estudios cientiticos surgidos a partir del proyecto, son recomendables tlos textos: M. CRISTOFANI (ed.), Civilra degli erruschi. Blecta Milano 1985: A. CARANDINI, La somanizcacione dell Eruria: it territorio di Vulci. Blecta, Milano 1985. 15 Algunos de los titulares de los diarios italianos que explicaban el “pragero errusehi™. destacamos, entre otros: Aqui los etruscas, espléndidos autepasaudos: adios misterio, adios mito ascuro. avora sabemos leer cau particular, et descubrimiente de la ereuria y de la-cultera por el hombre de hey (Diario. La Naztone, 8-05-1985), El mundo de tos etraseos Alejandro Bancalari Motina macidn y maduracidn, extendiéndose desde sus orfgenes protovillanovianos del siglo XII a. de C. hasta la dominacién romana en el siglo I a. de C. Ademis. se exhibieron los tiltimos descubrimientos arqueolégicos y el estado actual del cono- cimiento e interpretaci6n relativo al mundo Etrusco. De Florencia nos trasladamos a Volterra, para presenciar la muestra sobre: L’Artigianate Artistico. Aqui se docu- menté la formacién de la industria casera (artesania) a través del paso de la época clasica a la helenistica y se analiz6, sobre todo, la produccién m: te del rea; o sea, estatuas fiinebres, de incineracién, sare6fagos, cerdmicas, joyas, utensi~ lios, en fin, objetos diferentes. La tercera etapa se realizo en la ciudad de Arezzo, observando la exposicion: 1 Santuari d’Ezruria. En ésta se ilustra los lugares de culto durante el arco de su historia, destacando su vasta gama de funciones, no solamente religiosas, sino tam- bién politicas, socio-econdmicas y culturales. Mencién especial, para él templo de estilo etrusco, nacido entre los siglos VIL y VI a. C., permaneciendo en la antigite- dad donde absorbe diversos roles en cuanto a su ubicacién: en el centro urbano como cruce de vias de los componentes sociales de la ciudad; en los centros comer- ciales como plaza de intercambios y relaciones internacionales y. como lugar de concentracion de la comunidad rural. De Arezzo nos dirigimos a Siena, a la mues- tra: Case e Palazzi; donde se intenté presentar cémo y donde vivieron los etruscos: de los primeros ejemplos de casas rurales (domus gentilicia) hasta los magnificos palacios aristocraticos de las ciudades. En el fondo, pensamos que es una excelente radiografia de la vivienda etrusca y de su material arquitecténico. En Cortona, la siguiente detencién, contemplamos la exposicién documental: L’Accademia Etrusca; que es una singular recoleccién de material archivistico, de- dicado al estudio y conocimiento del mundo Etrusco desde el siglo del Huminismo hasta nuestros dias. Se destaca, por otra parte, la labor desarrollada por los herma- nos Venuti, como fundadores en 1726 de dicha Academia. Dejando la Toscana nos adentramos a la no menos pintoresca regién de Umbria, a su ciudad mas importante Perusa (Perugia), para examinar la novedosa y atrayente exhibicion: Serivere Etnisce. Aqui se dio una visién de ciertos documentos literarios y se resalt6 la permanenci: y continuidad del idioma etrusco en el latin y, en consecuencia, en las lenguas romances: /iibhTCSIESthbiMiGSCHuscOsinmsAbeHe Abandonamos Perusa y Umbrfa, en direccién al mar Tirreno para llegar a Orbetello (M. Argentario) donde se desarrollé —a nuestro juicio- la mas completa muestra, desde el punto de vista hist6érico propiamente tal, llamada: La Romanizzazione dell Etruria: il territorio dei Vulci. En ella, observamos nitida- Mente cone la afirmacian de Roma en los sighs Vv TV, de ©. va coloeando en. GHSISISUSISIEMNSHEUSEM y como éstos ceden gradualmente a la dominacién roma- na. a través de un proceso de romanizacién mediante fundacién de colonias, incor- poracién de la clase dirigente a Roma. requisicién de tierras, control de las comuni- campafias militares. En caso del territorio de Vulei, es justamente el rele caciones mejor conocido, ya que nos ofrece una documentacidn analitica sobre las ideolo- gias y los medios de la politica expansionista romana y la asimilaci6n de la Etruria: 16 A propésito de Ia lengua etrusca, M. Pallottino a partir de 1978 comenzé un trabajo metddico de, recoleceidn y explicacidn de un shesatirus Hinguae etruscae, Consiste en un repertorio completisimo en voliimenes de todas tas palabras etruscas existentes con sus referencias. contertos y proyevcio nes: surgicndo asi um vocabulario yruna lengua 12 Elnnunde de los etrascos Alejandro Bancatari Molina es decir, su desaparicidn como entidad etnopolitica definida y su asimilacién a Roma. Dentro del proceso de conquista y gradual romanizacién de los etruscos, es necesario resaltar que las diversas guerras desarrolladas entre Roma y el mundo etrusco fueron, fundamentalmente, €HIiHhzIitiniSo On iaiia me Onmoncanciicacetascauinaepen - (@IBHLDy. 11 consecuencia, no conira el estado etrusco. Asf, Roma conquisté y anexiond Veyes (406-396), Tarquinia (358-351), Arezzo (302), Roselle (292), Vulci y Volsini (280), Faleri (241) y muchas otras que prueban que los etruscos no conformaron un estado organizado y unificado politicamente para enfrentar a la emergente Roma. Por consiguiente, para ésta con su maquinaria militar y gubernativa fue, relativamente, facil comenzar a incorporar a través de conflictos armados individuales a las diversas Ciudades etruscas (Semejantesinlaspoleistsnieeus) . AqpantinceNiediaacsaelsi Sica GRASOMGEISEMICMAAAESeuseasindependiontes, todas han caido bajo la fuerza y la égida de Roma. La politica romana inventa un sistema original de dominio y hegemonia basada en una centralizacién que conlleva o consentia alianzas bilaterales de varios centros. exclusivamente, con Roma; colocando al aliado en una posici6n de sustancial inferio- tidad, pero de aparente autonomia, Era el tejido o sistema de alianzas con una serie de anexiones directas y colonias estratégicas. el mecanismo o fenémeno de (artieipa CSNCoPoMcsiaSiiENEpeMeIseE®, En sintesis, Roma utilizd la politica de: @ai@emammp@m'”. A su vez, dos elementos que jugaron roles esenciales en la practica romana de asimilacidn fueron la extensién gradual de la civitas Romana y los vinculos estrechos con las elites locales'*. El proceso de romanizacién significé la corporacion completa de cada una de las ciudades etruscas (entre estas, Veyes, Tarquinia, Arezzo, Roselle. Vulci, Volsini, Faleri, etc.) al mundo romano: y es justa- mente CSAP AEH TTT NM CONC ECUE eRNEMGD (88 a. de C.) cuando tinaliza la historia de ta Malia antigua y la milenaria historia etruses. converti- dos todos desde ese momento en ciudadanos romanos. Finalmente, nuestra excursién de indagacién para desentrafiar la enigmdatica cultura etrusea, se fija en Populonia-Baratti (costa del Tirreno) y en Portoferraio (principal localidad de la isla Elba), asistiendo a la Gltima muestra correspondiente a: L'Etruria Mineraria. En ésta se resalt6 como los recursos minerales llegaron a set uno de los elementos mis signifivativos de la historia y la economia extractiva y manufacturera etrusca y. de sus relaciones e intercambios comerciales con otros mercados del mediterraneo. No podemos finiquitar este somero recuento sin antes precisar con objetivi- dad que el Progetto Etrusco, como se le denominé al conjunio de las educativas exposiciones y programa en general -con objetos Ilegados de los mas selectos mu- seos de Europa y Estados Unidos— en la regidn de la Toscana, fue todo un éxito, tanto para la gigantesca maquinaria organizadora, encabezada por los etruscdlogos italianos conocidos mundialmente. Massimo Pallottino—el homber simbolo-y Mauro Cristofani. Como asimismo, Jacques Heurgon que ha sido definido el “gemelo cien- tifico de Pallottino””’ y, en fin, por la difusién del conocimiento y de los objetos de 17 A. CARANDINL Romanizcazione (op, cit), p. 38 18M. CRISTOFANI, Roma vonguistal Enuria, en Gli Errusehi: ana nuove immagine. Givnti. Firenze 1993, pp, 19 J.P THUILLIBR. Etrusehi fap. cit). p. 42. El profesor Heurgon vo una responsabilidad -fue vicepresidente de la comisitn organizadora~ relevante en todos los eventos del proyecto, El mundo de los etruscos Alejandro Bancalari Molina las muestras, para un ptiblico en general profano o docto en el conocimiento y comprensién del tema. De esta forma, con diversas perspectivas de contenidos, de investigaciones y descubrimientos e interpretaciones, el proyecto etrusco representé un complejo cuadro de la civilizacién etrusca y de la vida de éstos en todas sus manifestaciones y, una puesta al dfa en los conocimientos. Creemos. fehacientemente, que el lapso de 15 anos que separa el gran pro- yecto, realizado en Italia con la muestra de Santiago y guardando las proporciones entre las dos exposiciones por organizacién, especialistas, objetos exhibidos e im- pactos son dos buenos paradigmas, testimonios y forma mentis para adentrarnos cultural y cientificamente en el mundo etrusco. Por otra parte, a través de los restos arqueolégicos presentados y analizados en forma exhaustiva en las muestras co- rresponde a una de las variadas formas de reencontrarnos con su historia y de revalorizurla. pues no existen, practicamente. fuentes escritas primarias y'secunda- G@assobreestepueblo. Asi. la antigua civilizacion etrusca no es ya un mito, ni una leyenda, ni un misterio por resolver, sino por el contrario, es una “realidad histéri- ca”, vigente y documentada, una historia unitaria paralela a los pueblos itdlicos, helenos de la magna Grecia y romanos y son, por ello, parte integrante e incisiva de nuestra historia occidental”, GOMOGRPSMEHOMAAEHANG CLOSING cristianos, sin saberio, etruscos. 20 J, HEURGON. Vida cotidiana (op. cit). p. 363. resalta que “los etruscos fueron herederas de un mundo anterior a los tiempos hist6ricos, imitadores apasionados de los griegos: ae (GGG. ce esa forma, creadores de un futuro, Hemos ilustrado con la mayor precisiéa posible todo lo que. ent dominio de las instituciones y de la religi6n. del ceremonial y de la litu Ja Ciudad debja no s6lo a los que fa habian realmente fundado, sino tambign a los que después habia sometido a su ley y com los que, en cl transcurso de varios siglos de luchas y de intereambios. habia elaborado su propia civilizacién’ 4

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