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TODO EMPIEZA DESDE CASA

EL ARTE DEL ORDEN ESTILO


JAPONES PARA GENERAR
BIENESTAR

Samantha Ogushi
PREFACIO

Seguramente en algún momento has estado en tu casa y de repente sientes una ansiedad tan

fuerte porque no te sientes cómodo. Al voltear a ver cada extremo de tu casa te das cuenta de que
hay demasiadas cosas y que necesitás de algún modo desastre o guardarlas para no sentir esa
ansiedad, una vez ello lográs tu objetivo, pero con el paso de los días esto vuelve.
Pero ¿Por qué vuelve a suceder? El arte del orden es lo que nos hace falta, se hace referencia a la
forma en como culturas como la japonesa logran tener un espacio tan limpio y ordenado, ¿a que

se debe? La disciplina y la constancia es lo que nos hace falta.

Se dice, que lo que aprendemos en casa es lo que demostramos a la sociedad. Seguramente te ha

pasado que has visto personas que tienen muchas cosas en su escritorio, algunas logran encontrar
entre el desorden lo que tienen, pero no significa que el desorden nos ayude a recordar las cosas,

al contrario, es un modo de activar la ansiedad, por lo que para tener bienestar en nuestras vidas
el arte del orden nos ayudará a permitirnos tener espacios limpios y mente sana.
ÍNDICE:

Capítulo 1 ¿Qué pasa conmigo?


Porque no puedo
tener ordenada la casa
Capítulo 2 Sientes que todo es
importante comienza
a desechar
Capítulo 3 Como no caer en el
efecto de rebote
Capítulo 4 La limpieza es magia

Capítulo 5 Consejos y
conclusión
¿Qué pasa conmigo? Porque no
puedo tener ordenada la casa
Antes que nada, no pienses en negativo, todos somos capaces de aprender
para mejorar. Esa es la clave que nos hace falta para poder tener ordenado
algo. Seguramente te ha sorprendido en algún momento metodologías que
aplican en japón para educar a sus hijos que sean responsables desde muy
pequeños, siendo que desde pequeños les asignan responsabilidades como
cocinar, limpiar y llevar horarios. Así igual, te ha de asombrar como niños
de Estados Unidos son capaces de si pasa un accidente conocen desde muy
pequeños el número 911 para cualquier emergencia y la dirección de su
casa. Todo es parte de una disciplina y enseñanza.

Hace mucho tiempo atrás la educación o enseñanza en casa era estricta,


nos hemos ablandado un poco en esta parte por el estrés laboral, por los
tiempos que por alguna razón se sienten más cortos que antes. Te ha
pasado que por el trabajo dejás actividades del hogar pendientes hasta el
fin de semana, esto es parte de lo que nos hace sentir estrés y no descansar
propiamente el fin de semana. Así como el cuidado de tu salud no es
cuando estás enfermo sino todo el tiempo, pues cuando enfermas es el
resultado de lo que no hiciste; esto mismo, se aplica en el hogar. Si llegas
al desorden y al estrés de todo lo que hay que hacer de la casa, se debe a
que cuando debías hacerlo lo dejaste por algún motivo.

Esto no se trata de que uno sea flojo o que no tenga habilidades, se da por
el hecho de que dejamos las cosas y que no nos damos tiempo para darle el
orden que buscamos. Esto dependerá de tú convicción y como desea vivir.

Nadie sabe cuál es el orden perfecto, pero existe un factor común, ¿te ha
pasado que cuando vez el mar te relaja?, ¿Cuándo vez el cielo con estrellas
te sientes tranquilo?, ¿Cuándo vez una cama hecha te genera bienestar?
Para todo existe un orden, la naturaleza conoce el suyo, es tiempo que
nosotros conozcamos cual es la mejor forma de poder ordenar las cosas.

Por lo que, en resumen, esto se debe a que nos falta aprender a ser
ordenados y tener una disciplina o convicción ante las cosas para que esto
suceda. Así igual si eres casado o tienes hijos, es la enseñanza y la práctica
constante de refuerzo para que no sólo tú seas quien aprenda, sino que
todos colaboren a tener espacios de dicha forma.

La distribución de una casa desde hace años tiene nombres, ¿sabías que
este es un tipo de orden? La sala, el antecomedor, la cocina, las recámaras
todo tiene asignado una nombre o categoría, esto se debe a que cuando se
le nombró hace mucho tiempo a cada espacio un lugar las personas fuimos
capaces de entender que es lo que abarca o se puede encontrar en un
espacio. En la cocina sabés que encontraras todo lo relacionado a
alimentos, mientras que en la recámara sabés que es un lugar de descanso
y donde podrás encontrar la comodidad que necesitás para ello. Esto es
parte del arte de ordenar.

El orden no es una obsesión sino una forma de poder mejorar aquellos


espacios para darte tranquilidad. No te negaré que hay personas que entre
el desorden se logran encontrar las cosas que necesitan. Sin embargo, son
pocas dichas personas y si lo has notado esta normalmente relacionado a
un tema en específico, por ejemplo: herramientas o documentos; no
mezcla de varias cosas.

Seguramente te preguntarás porque hacemos referencia a la cultura


japonesa para el orden. Si has leído o visto videos o películas o has
investigado, la cultura oriental tiene un nivel de disciplina en diversos
ámbitos entre ellos la limpieza. Para ellos, la limpieza forma parte de su
educación desde pequeños se les enseña a los niños a tener sus juguetes
guardados cuando los dejan de usar, a limpiar el espacio donde están
jugando y esto no esta relacionado al género, es decir lo hacen tanto niños
como niñas. El motivo se debe a que desde tiempos históricos en la cultura
japonesa la “impureza” era algo que no estaba bien visto, esto puede
relacionarse a diversos temas como la impureza del alma, para ellos la
limpieza no es un castigo sino un deber. Lo que tu interiorizás y
exteriorizás son parte de tu expresión de como eres, y eso es una
preocupación por la impecabilidad que también está muy relacionada a la
cultura japonesa.

Además, el concepto de limpieza en japón es visto de forma muy distinta.


Mientras que para mucha de la cultura occidental la limpieza se considerar
como una tarea que nadie quiere realizar, como parte de un castigo, en la
cultura oriental está relacionado más como parte de uno, donde la
responsabilidad individual tiene peso.
Sientes que todo es importante.
Comienza a desechar
Tal vez has sentido que en algún momento no necesariamente ahora te
servirá algo, o bien quien de nosotros no ha guardado su ropa preferida
pero que ya no le queda pensando en que en algún momento nos quedará.
Normalmente lo que sucede es que nos comenzamos a comprar ropa más a
la medida y poco a poco está ropa que guardamos pasa a segundo término
y/o bien, la olvidamos. Normalmente cuando pensamos en ordenar es ver
donde le asigno espacio a cada cosa, que prácticamente se refiere a eso,
pero ¿es necesario que todo se quede? Seguramente has pensado si tuviera
una repisa más grande podré poner aquí lo que me falta, si tuviera un
closet más amplio tendría espacio para toda la ropa. Esta forma de pensar
lo único que nos llevará es ser acumuladores y contar con más cosas para
poder acumularlo por lo que realmente llegará un punto en que comiences
a sentir que no tienes espacio y que esto también activará tus niveles de
estrés.

No dudo que en algún momento hayas hojeado una revista de espacios de


interiores y te hayas asombrado de como se ven, ¿lo notaste?
Normalmente dichas revistas no colocan todo lo que claramente tenemos
en nuestra casa, ponen un closet con dos o tres prendas llamativas, una
cama sin tantas almohadas, y un buró con una lámpara. Sin duda esto es
perfección, pero sabemos que nuestro hogar esta mas lleno de cosas que
las que se colocan ahí.
Lo que realmente necesitamos es autocontrol y capacidad de decisión, de
saber que sí nos es útil y que otras cosas lo las desechamos o regalamos o
vendemos y o bien les encontremos otra utilidad, pero realmente que sea
utilidad. El desprenderse de algo también nos genera un bienestar, pues es
el reconocer que ya no es parte de nosotros pero que lo será de alguien
más.

Además, te aseguro que en tu hogar tienes objetos repetidos que incluso


desconocés cuantos tienes, por ejemplo ¿Cuántas tijeras hay en tu casa?,
¿Cuántos juguetes tienen tus hijos? No es que te limites, normalmente el
ser humano le gusta la abundancia y está bien contar con dos o tres cosas
de más. Entre más cosas tengas menos sabés que tienes y donde lo tienes.

Visualiza a donde quieres llegar

Es importante que antes de empezar conozcamos tengamos una


expectativa de cual será el resultado. Ya que si comenzamos y no tenemos
bien visualizado lo que buscamos seguramente fracasaremos. Te ha pasado
que inicias limpiando y te topas con un álbum de fotos y te quedas horas
viendo cada foto. Esto es parte del ordenamiento pon en principio que
buscas si tu búsqueda es el orden y la limpieza, deja el álbum en alguna
parte de tu casa, por ejemplo, la sala para luego verlo pero que esto no se
convierta en tu prioridad en ese momento.

Te invito a ver revistas o buscar en internet espacios que te agraden y que


puedas verlo reflejado en tu casa, ¡detente un momento! No comiences a
comprar cosas, a lo que me refiero es que visualices si puedes lograr con
lo que tienes espacios o una forma parecidos a lo que buscas. Lo
importante es saber que el resultado te generará felicidad, y que no lo
hagas sola si puedes contar con alguien más para apoyarte y que entiendan
juntos este concepto te ayudará a tener resultados más rápidos. Recuerda
que si hay más personas que habitan tu hogar es importante que todos
conozcan que se busca y que el orden es parte de todos, pues podrás
hacerlo solo, pero mantenerlo será difícil.

¿Cómo me deshago de las cosas?

Para ello no comiences con ubicaciones sino con categorías. Aunque


normalmente como llevamos a cabo un orden es comenzar con un espacio,
por ejemplo, la habitación. No obstante, seguramente en la habitación
podrás encontrar un peine y en el baño también y podría ser incluso que en
la sala. Por lo que expertos en el arte del orden aconsejan que al comenzar
con esta misión de orden no lo hagas por espacios sino por categorías.
Aunque podría ser cansado tu al conocer tu espacio sabés que algo puedes
tener repetido busca primeramente todos los objetos que en tu
conocimiento están repetidos y podrás colocarlos en una caja por
categoría, poco a poco comenzarás a notar cuantos objetos tienes repetidos
y comenzar a desechar.
No te preocupes el voltear toda la casa de lado a lado como se diría
coloquialmente no es algo que harás todos los días. Así es, pues recuerda
que es la primera vez que inicias por lo que una vez que hayas logrado
categorizar todo, y haberte desecho de lo que no necesitas y saber qué es lo
que realmente tienes; entonces, sigue la siguiente fase mantenerlo así a
través de la disciplina.

Recuerda que no debes ver la limpieza como un deber aburrido, que quita
tiempo, es decir no lo mires negativamente. Así como los japoneses que
saben que esto es un reflejo de ellos, velo de forma que lo que buscas es un
espacio en donde te genere un descanso y bienestar después de un día de
trabajo o de mucha actividad. Un espacio donde eres tu mismo y que te
genera una tranquilidad saber que está cuidado.

Pon tu mente abierta y en positivo con frases que te apoyen a poder


fortalecer y permearlo en a tus miembros del hogar que no es malo tener
ordenado ni limpiar, sino que forma parte de nosotros el poder contar con
espacios que nos ayuden a sentirnos bien. Repite esto varias veces y poco a
poco verás como el pensamiento del orden será parte de ti.
¿Cuántas veces tengo que organizar mi casa?

Dependerá de que tan bien hagas tuyo este tema del orden. Ten presente
que la limpieza es de todos los días no de un día en específico, el dejar la
ropa sucia por varios días se acumula y se vuelve más tedioso limpiarla un
solo día. El que los niños dejen todos sus juguetes tirados en su habitación
y así amanezca todos los días es un mal hábito, y únicamente le estamos
enseñando el desorden. El dejar los platos sucios porque más tarde volverá
a cocinar no te ayudará.

Una vez que comencemos a ser más limpios, será pocas las ocasiones que
tendrás que ordenar algo. Como no caer en el efecto rebote.

Como lo he mencionado a lo largo de este libro, todo se debe a la


disciplina y al objetivo que te plantes. Para evitar el rebote crea tu método
de organización que cumpla con tus propios estándares.

Busca cual es la forma que más te agradaría tener tu ropa ordenada, tus
zapatos guardados, la cocina limpia. Es importante saber a dónde
queremos llegar como lo mencionamos y esto evitará este efecto de
rebote.

Recuerda que parte de las cosas esta relacionado a la disciplina, si dejamos


las cosas por flojera o porque no tenemos ganas en ese momento de
hacerlas muy seguramente caeremos en un rebote.

Esto no se trata de hacerlo una vez y que tomemos fotos de lo que


logramos, esto se trata de ponerle un nombre y apellido a las cosas y
generar en nosotros bienestar y felicidad.

A veces nos asombra como otras personas tienen acomodada su casa, y/o
bien como casas nuevas se ven tan hermosas y limpias. Ten en claro que
esto se trata de ti y de como es que buscas tener tu propio orden y que tu
familia también lo adopte.

Así como cuando uno hace dieta y la deja porque no ve los resultados en
un corto plazo o bien el esfuerzo es demasiado, cae en el rebote asimismo
sucederá con este tema si no lo tenemos bien colocado como un objetivo y
parte de nosotros. Piensa siempre en la recompensa que te generará tener
organizada y limpia tu casa y como esto se refleja en tu felicidad, esto te
ayudará a no caer en el rebote.
La limpieza es magia

Así como lo estas leyendo la limpieza es un tipo de magia. No se trata de


poderes sino del efecto que generá. El espacio donde vives tiene una
influencia en tu personalidad y tu cuerpo. Te ha pasado que te molestas
con facilidad, los entornos tienen una influencia en nosotros. Imagino que
alguna vez viste que los decoradores de interiores te indicaban sobre el
feng shui. Bueno en esta ocasión no tocaremos el tema de feng shui, sino
que es una referencia a los espacios buenos y malos. Aquellos espacios
desordenados pueden afectarnos en nuestra personalidad y lo dejame salir
a través de las emociones para con otros.

Es por ello, el tener un espacio cómodo y limpio también genera armonía


en el hogar. Recuerda que debes desechar todo aquello que no te inspire
una felicidad o alegría. La verdadera vida comienza cuando ponemos
orden a las cosas y más en la casa. Entre más orden tengamos ante las
cosas nos será más simple saber que buscamos en la vida o prestarle
atención a otras cosas que lo requieren más.

¿Has sentido cuando ves un espacio limpio y ordenado una sensación de


paz? Es porque en nuestra mente genera una tranquilidad de saber que el
espacio no requiere de un esfuerzo o dedicación simplemente está ahí para
disfrutarse.

Por lo cual, la limpieza genera bienestar para nosotros pues nos da ese
momento de tranquilidad de poder disfrutarlo. Por lo que el orden
representa magia.
Consejos y conclusiones

Marie Kondo quien es la reconocida “gurú del orden” es una experta


japonesa que ha planeado metodologías para organizar de forma efectiva.
El método que ella ofrece está basado en 9 consejos:

1. Almacena solo aquello de lo que te genera alegría


2. Ordena por categoría
3. Empieza con la ropa
4. No desperdicies espacios
5. Todo a la vista
6. Dobla verticalmente
7. No gastes para tener productos para almacenar
8. Se minimalista
9. Aplica todo esto en todas las partes de la casa

Ella desde pequeña ordenaba de forma “obsesiva” o muchos lo creían así,


pero se debía al hecho que buscaba espacios limpios y que pudiera
encontrar y tener ubicado lo que necesitaba. Menciona entre muchas cosas
que, aunque veía varias revistas, compró muchos productos para
almacenar; se dio cuenta, que lo único que necesitaba era realmente ser
disciplinada generar su propia metodología del orden, tener solo lo que
realmente necesitaba, y ordenar de acuerdo a su gusto.

Entre otros consejos que te puedo recomendar es que dividas la


organización por días:

DÍA 1: Aprende a tirar


DÍA 2: Descubre una metodología que te funcione
DÍA 3: Genera el caos, saca todo descubre que tienes repetido
DÍA 4: Todo tiene un espacio asigna de acuerdo con el lugar

En conclusión, la mejor forma de organizar es primeramente plantearte un


objetivo claro de que es lo que quieres lograr, hacer que toda tu familia se
involucre y generar una disciplina de limpieza. Para ello, es importante
que no se relacione la palabra orden o limpieza con algo que es una tarea
asignada, un castigo, etc.

Dale un sentido a esto que forme parte de ustedes como una práctica
familiar, en pocas palabras haz especial ese momento para todos y se
disciplinado en la limpieza, recuerda que esta no es de un día sino de todo
momento. Una vez que puedas ir generando dicha practica en tu vida verás
como esto se empieza hacer un hábito que formará parte de ti. El espacio
donde pasamos tiempo es tanto el hogar como el trabajo, ten presente que
lo que aprendemos en casa es lo que reflejamos en otros espacios, por lo
que una de las mejores cosas que podemos reflejar es el orden y la
disciplina.

Tu casa es parte de tu familia es el lugar donde más tienes una convivencia


por lo que tenerlo limpio te generará menos preocupación al momento de
recibir visitas. Sabrás que podrás recibirlas en cualquier momento y se
verá bien. Además de que, al llegar a tu casa, esa sensación de paz y
tranquilidad es una de las mejores que podrás sentir, por lo que no olvides
que para lograr esto tendrás que hacer un trabajo hacia atrás contigo
mismo y con tu familia para fomentar el orden y la limpieza. Te invito a
que veas imágenes, revistas, o espacios decorados para que puedas
plantearte la vista que buscas en tu hogar. No compres nada para
almacenar, desecha cosas y ya si es necesario que quieras un mueble
piensa en cuanto espacio te ocupará y si es sumamente necesario. Saca lo
mejor de ti con este tipo de prácticas del orden para que tu mente esté
tranquila y la limpieza forme parte de ti.

Mi mejor consejo para ti es que seas disciplinado; en verdad, que esto te


ayudará a tomar las cosas de la mejor forma y que sea parte de ti la
limpieza continua para que sea menos lo que tengas que estar ordenando.
Asigna un día especial para realizar un día de organización, tengo una
frase que uso personalmente la cual es, “necesito un orden existencial”.
Cada vez la uso menos, pero sinceramente es la frase que me ayuda a
darme ese momento de parar todo y dedicarle a la organización.
FIN

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