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Obras de captación – Sistema de agua potable

Las obras de captación son las obras  civiles y equipos electromecánicos que se
utilizan para reunir y disponer adecuadamente del agua superficial o subterránea.
Dichas obras varían de acuerdo con la naturaleza de la fuente de abastecimiento su
localización  y magnitud.

Algunos ejemplos de obras de captación se esquematizan en la Fig 2.1 . El diseño de


la obra de captación debe ser tal que prevea las posibilidades de contaminación del
agua.

Fig. 2.1 Obra de Captación


Es necesario separar en el término general de “obra de captación” el dispositivo de
captación propiamente dicho y las estructuras complementarias que hacen posible su
buen funcionamiento.

Un dique toma, por ejemplo, es una estructura complementaria, ya que su función es


represar las aguas de un río a fin de asegurar una carga hidráulica suficiente para la
entrada de una estabilidad y durabilidad.

Un dispositivo de captación puede consistir de un simple tubo, la pichancha de una


bomba, un tanque, un canal, una galería filtrante, etc., y representa parte vital de la
obra de toma que asegura, bajo cualquier condición de régimen, la captación de las
aguas en la calidad prevista.

El mérito principal de los dispositivos de captación radica en su buen funcionamiento


hidráulico.

OBRAS DE CAPTACIÓN METEÓRICAS

CAPTACIÓN DE AGUAS PLUVIALES

La captación de estas puede hacerse en los tejados o áreas especiales debidamente


dispuestas. En estas condiciones el agua arrastra las impurezas de dichas superficies,
por lo que para hacerla potable es preciso filtrarla. La filtración se consigue mediante
la instalación de un filtro en la misma cisterna. Un dispositivo de este tipo se ilustra
en la figura 2.2
 
Fig. 2.2 Captación de Agua Pluvial

La recolección de agua de lluvia como única fuente de agua, sólo es conveniente en


regiones con lluvia confiable a lo largo del año (o donde no están disponibles otras
fuentes de agua), debido a que las obras individuales de almacenamiento para todas
las casas de una comunidad rural pueden ser costosas.

La cantidad de agua de lluvia que puede recolectarse depende del área de captación y
de la precipitación promedio anual. Un milímetro de lluvia en un metro cuadrado
produce alrededor de 0.8 litros de agua, considerando la evaporación y otras pérdidas.

Cuando se diseña un sistema de captación de aguas pluviales es necesario determinar


el área de captación y el volumen de almacenamiento.

Vs = D x t x ( 1 +  l) x P

Donde:
 Vs :  Volumen de almacenamiento necesario para satisfacer la demanda en época de secas
 D  :  dotación, L/ hab./ día
 t   :  tiempo que dura la temporada de secas, días
 l  :  Factor de seguridad, mínimo 30 % en decimal
 P  :  número de habitantes

El volumen anual de agua de lluvia captada se puede estimar a  partir  de  la  ecuación
( 1 ) donde se relaciona la precipitación media anual y área de captación. En diseños
conservadores es conveniente considerar que se pueden aprovechar el 75 % de la
precipitación total anual.

Vc = Pr x A x n   _________ ( 1 )

Donde:

 Vc :  volumen anual captado, m3


 Pr :   precipitación media anual, m
 A    :  área de captación, m2
 n    :  eficiencia de captación del agua pluvial, decimal

Si el volumen anual captado es mayor que el volumen de almacenamiento necesario


para satisfacer la demanda durante la época de secas, no existirá problema de
suministro.

En el caso contrario, se tendrán problemas de abastecimiento. Entonces, al considerar


sistemas de abastecimiento con agua de lluvia, se deberá garantizar al menos que el
volumen captado es igual al volumen almacenado para satisfacer la demanda durante
la época de sequía.

EJEMPLO 1

Determinar qué volumen de agua puede ser almacenado en una cisterna próxima a
una casa rural, con un área de captación de 70 m2, si la precipitación media anual es
de 90 cm.

Solución:

Considerando una eficiencia de captación de 75 % (diseño conservador) y


convirtiendo la precipitación media anual a metro, se tiene:

Vc = 0.90 m (70 m2) (0.75) = 47.25 m3

EJEMPLO 2

Calcular el volumen de agua que se debe almacenar en una cisterna para una
población de 1500 habitantes si se les asigna una dotación de 100 l/hab./día. La
precipitación media anual es de 90 cm, y la época de lluvias dura 4 meses. Determinar
el área de captación requerida para satisfacer el volumen de almacenamiento
requerido.

Solución:
La duración de la época de sequía será:

T  =  8 meses  x  30 días /mes  =  240

El volumen necesario Vs, para el consumo en época de secas, considerando un factor


de seguridad de 30% será.

 Vs = 100 L / hab. d   x  240 d x  (1 + 0.30 )  x  1500 hab  =  4.68 x 107 Litros
 Vs =  46, 800 m3

El volumen anual captado, considerando la precipitación media anual de 0.90 m, y un


diseño conservador  (75 %   de eficiencia  de captación), será:

 VC = 0.90 x  A  x  0.75   =  0.675 X A

Para que no exista problema de suministro, al menos debe tenerse que:   VC =  Vs

 0.675 X A  =  46800 m3

Por lo que el área de captación necesaria es:

 A =  46800 / 0.675   =   69,333 m2

Es poco probable que la totalidad de las viviendas de la localidad considerada tengan


la superficie de techos necesaria para proporcionar el área requerida para captar el
agua suficiente, por lo que se requeriría la construcción de patios de captación de agua
pluvial para que ésta fuera considerada una fuente confiable de abastecimiento.

Las superficies de captación de agua de lluvia en piso pueden ser materiales


impermeables que han recibido acondicionamiento químico (por ejemplo, la mezcla
de sales de sodio con capas superficiales de suelo arcilloso).

Si la superficie es lisa y el escurrimiento se almacena en un depósito, las perdidas por


evaporación, saturación del material base e infiltración, son casi nulas.

Como regla general, las perdidas en superficies de captación a nivel de piso con
recubrimiento de concreto o asfalto son menores al 10 %, en techos aislados
recubiertos con brea (alquitrán) y grava esparcida son menores al 15 %, y en techos de
lámina metálica prácticamente no hay pérdidas.

Se recomienda la construcción de trincheras que desvíen los escurrimientos


superficiales protejan el área de captación en piso. Asimismo, se recomienda instalar
cercas para evitar el paso de animales y personas.

Las tapas de registro deben estar bien selladas. Es conveniente que los tubos de
ventilación estén protegidos con rejillas para evitar el paso de animales  e insectos, y
se tenga previsiones para evitar el paso de luz, polvo y agua superficial. La cisterna de
almacenamiento debe ser impermeable, con superficies interiores.
El orificio del registro debe tener un brocal bien sellado y que sobresalga del nivel de
piso por lo menos 10 cm. La tapa de registro debe cubrir el brocal y proyectar, por lo
menos 5 cm, su pestaña hacia abajo. Para evitar contaminación y accidentes la tapa
del registro debe cerrarse con candado.

Es importante contar con previsiones para desviar el agua de las primeras lluvias,
época en que se lava el área de captación después del estiaje. También, se recomienda
contar con drenes al fondo de la cisterna de almacenamiento con el objeto de drenar
sedimentos acumulados y facilitar el lavado de la misma. Ninguna tubería que entre o
salga de la cisterna de almacenamiento deberá conectarse al drenaje sanitario.

Las cisternas enterradas puede construirse con tabique o piedra, aunque se recomienda
el concreto reforzado. Si se utiliza tabique o piedra, estos deben ser bajos en
permeabilidad y colocarse con juntas de cemento Pórtland. Los tabiques deben
humedecerse antes de su colocación. Un recubrimiento con mortero cemento-arena
1:3 ayudará a impermeabilizar el depósito. Con el fin de conseguir una superficie dura
y no absorbente, se utiliza una llana para aplanar el recubrimiento antes de que se
haya endurecido.

Es necesario mantener limpias todas las  conducciones que colecten agua de lluvia
hacia la cisterna. Los canales y techos deben mantenerse inclinados hacia la cisterna
con el fin de evitar estacionamientos de agua.

Los techos utilizados para captar agua de lluvia no deben pintarse. Materiales tales
como las tejas vidriadas y el acero galvanizado son apropiados para superficies de
captación.

El agua atmosférica susceptible de aprovecharse mejor, hasta ahora, es el agua de


lluvia.

OBRAS DE CAPTACIÓN SUPERFICIALES.

Para el diseño de obras de captación superficiales se requiere obtener, la información


siguiente:

 a).- Datos Hidrológicos

o Gasto medio, máximo y mínimo


o Niveles de agua normal, extraordinario y mínimo
o Características de la cuenca, erosión y sedimentación
o Estudios de inundaciones y arrastre de cuerpos flotantes

 b).- Aspectos Económicos

o Planeamiento de opciones, elección de la más económica que cumpla con los


requerimientos técnicos
o Costos de construcción, operación y mantenimiento
o Costo de las obras de protección
o Tipo de tenencia del terreno
o Tipos de obras de toma.
Dependiendo de las características hidrológicas de la corriente, las obras de captación
pueden agruparse en los siguientes cuatro tipos:

 a).- Captaciones cuando existen grandes variaciones en los niveles de la superficie libre.

Torres para captar el agua a diferentes niveles, en las márgenes o en el punto más
profundo del río, (Fig. 2.3)

Fig. 2.3 Torres para captar agua a diferentes niveles


Estaciones de bombeo flotantes. También pueden usarse en lagos o embalses  (figuras
2.4a. y 2.4b).

Fig. 2.4 a) Estación de bombeo Flotante

CAPTACIÓN EN RIO NAVEGABLE EMBALSES O EN LAGOS Y LAGUNAS

(Fig. 2.4 b)
b).- Captación cuando existen pequeñas oscilaciones en los niveles de la superficie
libre, como estaciones de bombeo fijas con toma directa en el rió o en un cárcamo.
(Figura 2.5)

Fig. 2.5 a) En un cárcamo

 
Fig. 2.5 b) En río

Fig. 2.5 Estación de bombeo

Canales de derivación con o sin desarenadores. Una estructura de este tipo


comprende, esencialmente (Figura. 2.6 )

Fig. 2.6 Canal con derivación

Un muro equipado corrientemente de una compuerta en prevención de las crecidas


(V1)

Una incisión de la margen provista de compuertas que permiten detener las aguas en
exceso y cerrar la toma (V2).

Un canal ( C ) que, partiendo de la incisión cuente en su origen con un vertedor (D)


que permita el retorno del agua sobrante al río, y

Una compuerta (V3) que permita cerrar completamente el canal.

c ).-  Captaciones para escurrimientos con pequeños tirantes

muro con toma directa. (Fig. 2.7)


 

Fig 2.7 Muro con toma directa

Fig. 2.8 Muro vertedor con caja y vertedor lateral

Muro con caja y vertedor lateral. (Fig. 2.8)

Muro con vertedor y caja central. (Fig. 2.9)


 

(Fig. 2.9) Muro vertedor con caja central y toma

d).- Captación directa por gravedad o bombeo

Este es el caso común para sistemas rurales por lo que se presentará con mayor detalle
en un apartado especial.

Captación directa

Cuando el agua de un río está relativamente libre de materiales de arrastre en toda


época del año, el dispositivo de captación más sencillo es un sumergido. Es
conveniente orientar la entrada del tubo en forma tal que no quede enfrente la
dirección de la corriente, y se debe proteger con malla metálica contra el paso de
objetos flotantes(Fig 2.10 ).
 

Fig. 2.10 Métodos de protección de la entrada a la línea de conducción

La sumergencia del dispositivo debe ser suficiente para asegurar la entrada del pago
del gasto previsto en el sistema . En vista de que la dirección y velocidad de la
corriente no pueden determinarse con exactitud en la zona de acercamiento es
conveniente suponer una pérdida de carga por entrada equivalente a la carga de
velocidad (V2 / 2g), siendo V la velocidad de flujo en el tubo para el diámetro y gastos
dado y, g la aceleración de la gravedad.

Esa pérdida se aumenta considerablemente si la entrada está protegida con rejillas. Su


valor puede estimarse tomando en cuenta el área libre de entrada al tubo y el
coeficiente de contracción del flujo a través de la rejilla. Si por ejemplo, una rejilla
reduce el área del tubo en un 40 % y el coeficiente de contracción es del orden de 0.5,
la perdida por entrada será de.

hs =   1 x  V2

0.6 x 0.5      2g

En el caso en que la captación por gravedad no sea factible debido a la topografía el


método de captación recomendable es por bombeo. De las bombas disponibles
comercialmente, la bomba centrífuga horizontal tiene la ventaja de que la ubicación
del equipo de bombeo y el punto de captación pueden ser distintos, o sea que la
estación de bombeo pude construirse en el sitio más favorable desde el punto de vista
de cimentación, acceso, protección contra inundaciones, etc. Su desventaja principal
es que la altura de succión queda limitada y el desnivel máximo permisible entre la
bomba y el nivel de bombeo, es relativamente pequeño (Fig. 2.11)
 

Fig. 2.11 Captación directa con bomba centrífuga horizontal

De hecho, se puede afirmar que cuando se trata de la captación directa de las aguas
superficiales, el tipo de bomba más comúnmente empleada es la bomba centrífuga
horizontal.

Su localización recomendable se ilustra en la (Fig. 2.12)

Fig. 2.12 Localización recomendable de la toma directa en curvas


La bomba centrífuga vertical (tipo pozo profundo ) tiene mayor eficiencia, pero el
costo del equipo es mayor y la estación de bombeo tiene que ubicarse directamente
por encima del punto de captación. Estas condiciones a veces representan problemas
graves de cimentación, resultando obras de construcción sumamente costosas no
compatibles con sistemas rurales (fig. 2.13).

Fig. 2.13 Captación directa con bomba centrifuga vertical

OBRAS DE CAPTACIÓN DE AGUAS SUBTERRÁNEAS.

El agua subterránea existe casi en cualquier parte por debajo de la superficie terrestre,
la exploración de la misma consiste básicamente en determinar en dónde se encuentra
bajo las condiciones que le permitan llegar rápidamente a los pozos a fin de poder ser
utilizada en forma económica.  La manera práctica de hacer lo anterior incluye la
aplicación de conocimientos técnicos, experiencia en la perforación y sentido común.
(Fig. 2.14 Identificación de las aguas subterráneas).
 

(Fig. 2.14)

A continuación se describe un enfoque para realizar una exploración del agua


subterránea.

Ciertos indicios útiles en la localización de abastecimientos de agua subterránea son


por ejemplo, que ésta probablemente se encuentra en mayores cantidades bajo los
valles que en las partes altas; en las zonas áridas cierto tipo de plantas;  nos indican
que el agua que las nutre se encuentra a poca profundidad; asimismo en las áreas en
donde el agua aparece superficialmente como son manantiales, pantanos y lagos,
también debe existir agua subterránea aunque no necesariamente en grandes
cantidades o de buena calidad;  sin embargo, los indicios más valiosos son las rocas,
ya que los hidrólogos y los geólogos las agrupan sin importar que sean consolidadas
como las areniscas, calizas, granitos y basaltos;  o no consolidadas como las gravas,
arenas y arcillas.

La grava, la arena, y las calizas, son las mejores conductoras del agua, sin embargo,
solo constituyen una parte de las rocas que forman la corteza terrestre y no todas ellas
aportan la misma cantidad de agua.

La mayor parte de las rocas constituidas de arcilla, lutitas y rocas cristalinas son en
general pobres productoras, pero pueden aportar agua suficiente para usos domésticos
en las áreas en donde no se encuentran buenos acuíferos.

Los lineamientos generales para realizar una exploración del agua subterránea son los
siguientes:
Primero se elabora un plano geológico que muestre los diferentes tipos de roca que
afloren a la superficie y de ser posible, secciones y explicaciones anexas, deben
mostrar justamente cuáles rocas son probables conductoras de agua y en donde se
encuentran por debajo de la superficie.

Después de reunirse toda la información respecto a la existencia de pozos, su


localización, profundidad de perforación, profundidad a nivel del agua, caudal
promedio y el tipo de rocas que se hayan encontrado al perforar.

La historia de los pozos en donde el perforista ha tenido el cuidado de registrar la


profundidad y el tipo de los diferentes estratos que ha ido encontrando al realizar la
perforación, siempre son de gran utilidad para conocer las condiciones
geohidrológicas de cualquier región.

La historia de un pozo es realmente útil cuando incluye lo siguiente:  Muestras de las


rocas, información de cuáles estratos contienen agua y con qué facilidad la ceden, la
profundidad a que se encuentre el nivel estático del agua en los estratos que la
contengan y los datos de las pruebas de aforo y bombeo de cada uno de los acuíferos a
fin de poder determinar cuánta agua pueden aportar y cuánto se abate el nivel del agua
de acuerdo a los caudales de bombeo.

Cuando no hay pozos o no existe la suficiente información sobre ellos, es necesario


perforar algunos pozos de exploración, mediante los cuales se obtienen muestras del
material encontrado durante el avance de la perforación, mismo que posteriormente es
examinado y analizado para determinar cuáles estratos son los que contienen agua y
de que tamaño son las áreas en que se extienden.

Los reportes y los planos que sobre las condiciones geohidrológicas de cualquier
región se elaboren, deben mencionar los lugares en donde puede encontrarse el agua
subterránea, la calidad química de ésta y en forma muy general que cantidad puede
obtenerse, asimismo los lugares en que tienen lugar la recarga y descarga natural de
los acuíferos.

RECONOCIMIENTOS GEOLÓGICOS:

Mediante los reconocimientos geológicos es posible obtener conclusiones


hidrogeológicas de una región, pudiéndose avanzar en forma rápida gracias al
desarrollo que ha tenido a últimas fechas la fotointerpretación; sin embargo, en
cualquier estudio siempre serán necesarios los reconocimientos de campo, que
permiten afinar lo observado en las fotografías.

En la exploración, el geólogo se sirve de la petrografía, de la estratigrafía de la


geología estructural y de la geomorfología.

La petrografía constituye uno de los renglones más importantes dentro de los


reconocimientos geológicos, ya que mediante ella, es posible determinar la porosidad
y la permeabilidad característica de los diferentes tipos de roca, eliminando en
función de dichas características, las zonas que no representan condiciones favorables
para la localización del agua subterránea.
La porosidad determina la cantidad de agua que puede almacenarse y la
permeabilidad la facilidad con que ésta puede extraerse.  La tabla 2.1 muestra una
clasificación general de algunos tipos de rocas en función de su porosidad y de su
permeabilidad.

TABLA 2.1   –   PROPIEDADES ACUIFERAS DE ALGUNAS ROCAS


COMUNES

PERMEABILIDADPOROSIDAD

PERMEABILIDAD MAXIMA                                            POROSIDAD MÁXIMA

Gravas bien clasificadas                                                     Arcillas blandas

Basalto poroso                                                                       Limos

Caliza calsificada                                                                   Tobas

Arenas bien clasificas                                                         Arenas bien clasificadas

Arenas y gravas mal clasificadas                                   Arenas y gravas mal


clasificada.

Rocas cristalinas fracturadas                                          Arenisca

Limos y tobas                                                                         Basalto poroso

Arcillas                                                                                     Caliza calsificada

Roca cristalina masiva                                                      Roca cristalina fracturada

Roca cristalina masiva.

La estratigrafía es un instrumento esencial para la prospección hidrogeológica de


extensas regiones de rocas sedimentarias o volcánicas.  La posición y el espesor de los
horizontes acuíferos así como la continuidad de las capas confinantes revisten
particular importancia, por lo que el auxilio de la estratigrafía resulta siempre
indispensable.

La geología estructural junto con la estratigrafía se utiliza en la localización de los


horizontes acuíferos que hayan sido desplazados por movimientos tectónicos.

Los estudios estructurales son también utilizados para localizar zonas de fracturación
en    rocas compactas pero frágiles; o bien en la localización de fallas en materiales no
consolidados que en ocasiones pueden formar barreras hidrológicas, las cuales son
importantes en el estudio del movimiento del agua subterránea.

Las aguas de las capas acuíferas del subsuelo se clasifican en:

a) aguas  freáticas   y   b) aguas artesianas.


Las aguas freáticas son aquellas que no tiene presión hidrostática, trabajan por la
acción de la presión atmosférica, circulando el agua en materiales graduados, no
confinados, como arenas y gravas, esta agua se localiza a profundidades que van de
1.0 a 30.0 metros .

Las aguas artesianas son aquellas que están confinadas bajo una presión hidrostática
mayor que la atmosférica, por una capa superpuesta de material relativamente
impermeable  esta agua se localiza a profundidades que van de 31.0 a 300 metros  de
profundidad o más.

Desde el punto de vista de calidad las aguas artesianas es la de mejor calidad; en


muchos casos potable, en otros muy mineralizada y es la que esta menos expuesta ala
contaminación. Se estima que aproximadamente el 90% el agua que se usa para
industria y más o menos el 70% de los abastecimientos públicos de agua para
consumo domestico, procede del bombeo de aguas subterráneas, en nuestro medio.

CAPTACIÓN DE MANANTIALES:

Generalidades.

El principal objetivo es captar y aprovechar los pequeños manantiales, que se


encuentran generalmente en las laderas de las montañas, con el fin de llevar el agua a
las partes bajas, donde se aprovechará para  el consumo humano ( figura  2.1.a)

Los factores más importantes que intervienen en la localización, dirección y Área de


influencia de los afloramientos son:

–  El ciclo hidrológico de la región

–  La topografía

–  La geología de la cuenca

Las aguas de manantial generalmente fluyen desde un estrato acuífero de arena y


grava y afloran a la superficie debido a la presencia de un estrato de material
impermeable, tal como arcilla o roca, que les impide fluir e infiltrarse.  Los mejores
lugares para buscar manantiales son las laderas de montañas.  La vegetación verde en
un cierto punto de un área seca puede indicar la presencia de un manantial en el lugar
o aguas arriba.  Los habitantes de la zona son los mejores guías, y probablemente,
conocen todos los manantiales del área.

El agua de manantial generalmente es potable, pero puede contaminarse si aflora en


un estanque o al fluir sobre el terreno.  Por esta razón el manantial debe protegerse
con mampostería de tabique o piedra, de manera que el agua fluya directamente hacia
una tubería, evitando así que pueda ser contaminada.

Para proteger el manantial debe excavarse la ladera donde el agua sale y construirse
un tanque o “caja de manantial”, como se muestra en la (Fig. 2.15) El detalle de la
figura muestra la unión de la tubería con los codos a 90o, con el fin de permitir que el
filtro sea levantado sobre el nivel del agua para su limpieza.  Debe tenerse el cuidado
de no excavar demasiado en el estrato impermeable, ya que puede provocarse que el
manantial desaparezca o aflore en otro sitio.

Fig. 2.15 Caja de Manantial

Antes de construir el muro de la caja de manantial adyacente a la ladera, es


conveniente apilar rocas sin juntear contra el “ojo del manantial”.   Esto es con el fin
de construir una cimentación adecuada del muro posterior para evitar que al salir el
agua deslave el material del acuífero.   Debe tenerse presente que después de una
lluvia el agua puede fluir más rápidamente por lo que el muro debe quedar
firmemente colocado, para ello se pueden emplear rocas de gran tamaño combinadas
con algunas pequeñas, grava e incluso arena para llenar los espacios.

La tubería de salida debe estar colocada a cuando menos 10 cm sobre el fondo de la


caja y bajo el nivel donde aflora el agua.  Si el nivel del agua en la caja del manantial
fuera muy alto, los sedimentos podrían bloquear el afloramiento del agua.  En el
extremo de la tubería de salida, localizado en interior de la caja, debe instalarse un
filtro para evitar que piedras, ramas u otros objetos obstruyan la tubería.  Una manera
de hacer este filtro es con un tramo corto de tubería de polietileno, taponado en un
extremo y con pequeñas perforaciones a su alrededor.  También debe instalarse una
tubería de demasías de diámetro suficiente para desaguar el gasto máximo en época
de lluvias bajo el nivel de afloramiento del agua.  El extremo de la tubería de
demasías localizado en el interior de la caja debe quedar cubierto con un filtro
adecuado para mantener fuera a los mosquitos y a las ramas.  La losa de la caja debe
quedar al menos 30 cm arriba del nivel del terreno para evitar que el agua de lluvia
entre a la caja.  También con esta finalidad, el registro que se construye en el

techo de la caja debe tener un reborde de 10 cm.   La tapa de registro debe quedar
asegurada con bisagras y candado.  Una tercera tubería localizada en el fondo de la
caja se instala con la finalidad de extraer los sedimentos.  Esta tubería debe tener en
su extremo un tapón que no pueda retirar cualquier persona sin herramientas.

Si no es posible hacer una excavación suficiente para que el fondo de la caja del
manantial esté 10 cm por debajo de la tubería de salida, entonces puede usarse una
tubería de 5 cm de diámetro y conducir el agua a otra caja localizada a una distancia
no mayor de 50 m a la cual se le llama “trampa de sedimentos” (Fig.2.16).  Esta caja
también debe tener losa, tubería de demasías a prueba de mosquitos y tubería de
salida a 10 cm del fondo con filtro.  Si el manantial tiene un rendimiento menor a 5
litros por minuto la trampa se puede construir para varios manantiales, como se
muestra en la    (Fig. 2.16). Esta caja debe contar con registro
 

Fig. 2.16 Tres manantiales protegidos conectados a una trampa de sedimentos

Los manantiales pueden ser de afloramiento, de emergencia, de grieta o filón según


los insterticios de donde proviene el agua y de tipo artesiano según su origen Fig.
2.17.
 

(Fig. 2.17)

La captación se puede hacer mediante cajas cerradas de concreto reforzado o


mampostería denominadas cajas colectoras. El agua se debe extraer solamente con
una tubería que atraviese la caja.  Se debe excavar lo suficiente para encontrar las
verdaderas salidas del agua, procurando que la entrada del agua a la caja de captación
se efectúe lo mas profundo posible, se debe de dotar a la caja de un vertedor de
demasías (Fig. 2.18 a  y b )

CAJA COLECTORA PARA CAPTAR LAS AGUAS DE MANANTIAL

(Fig. 2.18 a)   PERFIL CAJA COLECTORA

CAJA COLECTORA

(Fig. 2.18 b) PLANTA Y PERFIL CAJA COLECTORA


  Recomendaciones para evitar la perdida del manantial o bien la disminución del
gasto:

Limpiar con todo cuidado la zona de afloramientos, quitando árboles, basuras, lodo,
hierbas, etc.

Conducir el agua por medio de tubería perforada de barro o de concreto sin juntear
(Galería Filtrante), localizada a un nivel inferior al que tengan los brotes de agua,
basta una caja colectora de mampostería, la cual debe tacharse con una losa de
concreto.

Al construir las cajas colectoras los muros no se deben desplantar a mucha


profundidad, ya que al afectar excavaciones en la zona de afloramiento se notan
cambios en el régimen hidráulico.

Debe evitarse el uso de explosivos que casi siempre hacen perder el afloramiento y a
veces es imposible volver a localizarlos.

Debe evitarse el bombeo que se hace para trabajar en seco, pues aleja algunas
corrientes de agua y aunque en ocasiones vuelven a aparecer en la superficie, pueden
cambiar la localización del manantial.

Hay que tener presente que la colocación de tuberías, materiales graduados, cajas
colectoras, etc., debe hacerse precisamente sobre el manantial y no construir la
conducción hasta tener una idea del gasto efectivo.

AGUAS FREÁTICAS

Como ya sabemos, estas aguas se caracterizan por estar a la presión atmosférica, esta
agua no tienen presión hidrostática y circular en materiales granulares no confinados
como arena, grava etc. Estas aguas se captan mediante pozos noria, mediante galerías
filtrantes, mediante sistemas de puyones o de pozos Ranney.

POZOS SOMEROS

Los pozos someros a cielo abierto ( norias)  Son aquellos que permiten la explotación
del agua freática y/o subálvea.  Se construyen con picos y palas; tienen diámetros
mínimos de 1.5 m. y no más de 30 m. de profundidad.

Para permitir el paso del agua a través de las paredes de los pozos someros se dejan
perforaciones de 25mm de diámetro con espaciamiento entre 15 y 25 cm, centro a
centro.

Si las paredes del pozo son de mampostería de piedra o tabique, se dejan espacios sin
juntear en el estrato permeable para permitir el paso del agua (Fig. 2.19).
2.19 Pozos Somero

Los pozos someros ( hasta 30 metros de profundidad ) pueden tener las siguientes
desventajas para servicio público.

Da  un rendimiento variable por la fluctuación considerable del nivel freático

Calidad sanitaria del agua probablemente deficiente.

Para estos pozos excavados a cielo abierto existe el procedimiento tipo ” indio ” (  por
tener su origen en la India ). En estos pozos, la cimbra se forma previamente en el
exterior y en el sitio de la construcción, se arma el refuerzo y se va colocando el
ademe o pared, mismo que por su propio peso y con el auxilio de la excavación se va
hundiendo a medida que se profundiza el pozo. El ademe se forma en anillos de 1.00 a
1.50 m. de altura, con el diámetro requerido y espesor mínimo de 0.30 m.
dependiendo éste último del peso que debe tener los anillos para vencer la fricción
entre   el concreto  y el suelo ( Figura 2.20 ).
fig. 2.20 pozo tipo noria

CAPTACIÓN POR GALERÍAS FILTRANTES.

Una galería filtrante se utiliza principalmente para captar el agua  subálvea de


corrientes superficiales, construyéndose de preferencia en los márgenes,
paralelamente a la corriente o transversalmente, también cuando el agua subterránea
está a profundidad moderada. Estas obras, en lo general, deben proyectarse de
acuerdo con la posición y forma del acuífero, con el corte geológico y con las curvas
de nivel del terreno y de la superficie exterior del nivel freático, a fin de orientar la
galería con la dirección de la mayor pendiente de la superficie formada por el nivel de
saturación.

Las galerías filtrantes son excavaciones en túneles o a cielo abierto, revestidas o no,
que penetran en la zona  de saturación del terreno para captar y colectar por gravedad
el agua del subsuelo.
Se pude calcular el gasto de extracción de una galería filtrante utilizando la ley de
Darcy

Tomando en consideración el tipo de terreno en cual se haya.

Si se tiene un excavación uniforme el área es función de Y; entonces

Q = K Ai

Este gasto es unitario, es decir, por metro de longitud de galería y por lado ya que
representa el aportado por una sola de sus paredes.

Donde:

Q = Gasto en m3/dia..

K = Coeficiente de permeabilidad  y su valor varía según el diámetro efectivo del


material adyacente como ya se explico .

R = Radio del círculo de influencia en m.

H = Carga estática o distancia vertical del nivel estático al estrato impermeable en m.

L = Longitud de la galería en m.

h’ = Abatimiento observado.

El área de penetración queda definida por la grava de envoltura del tubo de


recolección y la longitud total del mismo.   Para los afectos de adaptación indirecta de
aguas superficiales normalmente se toma el área de la cara hacia él rió, dejando el
flujo desde el lado opuesto como margen de seguridad.   El gradiente hidráulico
disponible es tomado desde el nivel del agua en él rió hasta la grava de envoltura.  Por
consiguiente, i = Z/L siendo  Z la profundidad de la grava de envoltura con respecto al
nivel estático de las aguas subterráneas y  L, la distancia desde la orilla del rió hasta la
galería.  Como se puede ver en esta forma se obtiene el gradiente mínimo, ya que para
estratos de alta permeabilidad puede presentarse el caso en que la depresión del nivel
de las aguas subterráneas se inicie cerca de la galería, y la distancia L para el mismo
valor de Z  será mucho menor.  Esta condición se refleja en una producción superior a
la estimada, por lo tanto, se tendrá un factor de seguridad adicional.

Es de observarse, también, que tanto el nivel del rió como el nivel estático de las
aguas subterráneas varía según la época del año.  Evidentemente, habrá que diseñar la
galería tomando como base el nivel mínimo estimado.

El diámetro y la separación de las perforaciones de la tubería de recolección se


calculan para obtener una velocidad de entrada tal que se evite un arrastre de
partículas finas desde el acuífero hasta dicha tubería. Esta velocidad puede fijarse de 5
a 10 cm/s, logrando este valor en la  mayoría de los casos sin dificultad alguna.  El
tamaño de la  grava de envoltura es función de la granulometría del acuífero y de las
perforaciones de la tubería de recolección empleando normalmente piedra picada de
½ a 1” de diámetro nominal cerca del acuífero y tamaños ligeramente mayores cerca
del tubo.

La posición de la galería en un río puede ser transversal a la corriente o paralela a ella


dentro o fuera del cauce, de acuerdo con la distribución y la circulación del agua
freática o subálvea, que se determinarán por la observación de los pozos de
exploración.

Localización.- Se pueden construir paralelas o perpendiculares a la corriente, lo


primero es lo más recomendable, debiéndose hacer la construcción en el
estiaje( figuras 2.22, 2.23, 2.24, 2.25 y 2.26).

Galerías construidas por medio de tubos.- En la captación de agua por medio de


galerías filtrantes se utilizaron varios años perforadas con diámetro menor a 45 cm.

El uso de tubos de concreto obligada a tener grandes diámetros y longitudes


importantes de galería que encarecería mucho la obra; además, el manejo de los tubos
de concreto simple perforados tenía que ser muy cuidadoso.

Las galerías filtrantes se emplean también en la captación de manantiales cuando se


presentan en las laderas o cuando afloran en una superficie y no en un punto definido
( figuras 2.21e , 2.21.f y 2.21.g).

Hidráulica de las galerías.- Las formulas teóricas que se han desarrollado para él
calculo de los gastos que se pueden captar con una galería filtrante están basados
fundamentalmente en la “Ley de filtración de Darcy”, y en las teorías sobre el
escurrimiento del agua en medios permeables, homogéneos e isotrópicos.

También el diseño de la galería se puede hacer como sigue: conocido el gasto


requerido, se elige un diámetro en los catálogos de tubería de acero ranurada por
ademe, de preferencia la de tipo  “concha”, con ranuras de 4.78 a 6.35 mm,
obteniendo el área de infiltración requerida, dividiendo el gasto entre la velocidad de
entrada del agua a través de las ranuras, considerando un valor de 1.0 cm/seg. La
longitud de la tubería se obtendrá dividiendo el área obtenida entre el área de
infiltración por metro, del diámetro considerado.

PLANTA GALERIA FILTRANTE HORIZONTAL

(CON CAJA COLECTORA)

(Fig. 2.21 f)

GALERIA FILTRANTE HORIZONTAL CON CAJA COLECTORA


(Fig 2.21 g)  Perfil caja colectora con galería filtrante horizontal

PLANTA DE LA GALERÍA HORIZONTAL Y MURO


DE CONTENCIÓN ESC:1:50
(Fig 2.21 e)

GALERÍA FILTRANTE
(Fig 2.21 h) Planta y Perfil Galería Filtrante Horizontal
La tubería de la galería va unida al cárcamo de bombeo para fijar la localización,
profundidad y características de la galería se efectuará previamente pruebas  de
campo, haciendo perforaciones

de exploración con profundidades  de 4 a 8 m., espaciados de 5.00 a 10.00 m. en el eje


probable

de la galería.

Una galería de infiltración consiste en un tubo perforado o ranurado , rodeando de una


capa de grava o piedra triturada graduada instalada en el acuífero superficial, o en el
caso de captación indirecta de aguas superficiales, en el estrato permeable que se
comunica con dichas aguas.

En los extremos aguas arriba de la galería y a una longitud aproximada de 50 m,


normalmente se coloca un pozo de visita. En el extremo aguas abajo se construye un
tanque o pozo recolector, de donde se conducen las aguas por gravedad o por bombeo
hacia el sistema de distribución (Fig. 2.22). El tubo de recolección usualmente es de
concreto o de fibrocemento. Su diámetro es función del gasto, siendo el mas
recomendable del orden de 200 ó 250 mm.

(Fig. 2.22) Detalle de una Galería de infiltración

La galería de infiltración se orienta con la dirección predominante del flujo


subterráneo. Cuando la velocidad de un rió es pequeña y existen extractos de alta
permeabilidad que se conectan, la galería normalmente se instala paralela al eje del
mismo. En este caso, la dirección del flujo subterráneo principalmente es desde el río
hacia la galería, aunque desde el lado opuesto de la misma también penetrará el agua,
ya que el río y la instalación de la galería será análoga (Fig. 2.23 y 2.24).

Fig.     2.23 Galería de infiltración con flujo del río hacia la galería

Fig. 2.24 Galería de infiltración con flujo del acuífero al río y la galería.

En caso de cursos rápidos y extractos de baja permeabilidad, será necesario investigar


la dirección del flujo subterráneo, a fin de interceptar el paso del mismo con la galería
de infiltración. Normalmente, unos ramales perpendiculares al eje del río dan los
resultados deseados (Fig. 2.25).Cuando no existen extractos permeables con la
excepción de unos bancos de arena o grava depositados por el río en un lecho limitado
la galería se instala por debajo del río, normal a su eje. La misma solución se emplea
cuando el acuífero es de muy baja permeabilidad. (Fig. 2.26).
Fig. 2.25 Galería de infiltración en extractos poco permeables

Fig. 2.26 Galería de infiltración bajo el lecho de un rió

EJEMPLO 1.-
Como una idea inicial para el proyecto de una galería filtrante sin tener todavía las
características del terreno, se reconoce éste como una mezcla de arena fina y
sedimentos. Se desea saber la longitud de la galería para extrae un gasto de 5 lts./seg.
La aportación a la galería será por ambos lados según se  observa por su ubicación y
condiciones geohidrológicas ; por tanto:

Q =   2  (1/2 K  H2 – h2 )

Si se excava bajo el nivel estático 2 m y el tubo de captación es de 30 cm de


diámetro , entonces:

H = 2 m;        h= 0.20 m

Supóngase que;

L = 10 m

K = 8.64 m/día

q =  8.64 4 – 0.04

10

q = 3.42 m3/día m

Q = 5 lts/seg

Q = 5 ( 60X 60 X 24 horas) / 1000 =  432 m3/dia/ m

Q = 432 m3 /día

L   =   432 m3/día

3.24 m3/día m

L  =  126 m.
EJEMPLO 2.-

Cálculo de la Galería filtrante horizontal.

Q = 20 l./seg.

V = Velocidad del agua a través de los orificios.

V = 1 cm./seg.

d = Diámetro de la tubería.

d = 20 cm.

Los diámetros de los agujeros varía de 2.5 a 5.0 cm., con una separación de 15 a 25
cm.

D = Diámetro del agujero.

D = 3.0 cm.

A = Área de cada agujero.

A =  0.785 D2

A = 0.785 ( 3.0)2 = 7.07 cm2.

Tomaremos una separación de 15 cm. entre agujeros.

Numero de agujeros = 100 cm/ 15 cm  = 6.66  = 7  agujeros

Número de hileras = semi perímetro /2S = ¶D /2S  =  ( 3.1416 X 0.20 ) / 2 X 0.15)  =


2.09  = 3

Número de agujeros por metro   = 7 agujeros x 3 =  21 agujeros.

At  =  Area total.

At = 7.07 x 21 = 148 cm²/ml.

Ai = Área de infiltración.

Para determinar la longitud de la tubería:

Área de infiltración: Área total de un orificio / metro por longitud.

EJEMPLO No. 3.-

Calculo de la longitud de una galería filtrante horizontal.


Q = 7.94 l/seg.

V = Velocidad del agua a través de las fisuras = 1 cm./seg.

d = Diámetro de la tubería = 20 cm.

D = Diámetro de los agujeros  ( 2.5 – 5.0 cm. ) = 3 cm.

S = Separación entre agujeros ( 15- 25 cm. ) = 15 cm.

Ao = Área de agujeros = 0.785 d² = 0.785 ( 3 ) ² = 7.07 cm²

No. de agujeros / m. = 100 cm. / 15 cm. = 6.66 7 agujeros.

Número de hileros = semi-perímetro   =  ¶D/2S  =  ( 3.1416 x 0.20 ) / 2 x 0.15 ) = 2.09


=  3.0

No. de agujeros por metro = 7 x 3 hiladas = 21 agujeros/ ml.

At = Área total de los agujeros .

At = 7.07 cm. ² x 21 = 148 cm. ² / ml.

Ai = Área de infiltración.

Se usará tubería de concreto simple ranurada con una longitud de 54 ml. y con un
diámetro de 20 cm. orificio de 3 cm. de diámetro, separada 15 cm.

POZOS RANNEY O POZOS COLECTORES HORIZONTALES.

Estos pozos radiales, consisten en un pozo central armado, de un diámetro inferior


mínimo de 4.00 m con paredes de 0.45 m. cuyo fondo está cerrado con una solera
fuerte de concreto armado        ( figura 2.27.a ).

A 1.20 m. del fondo del pozo y en orificios previamente dejados  en las paredes del
mismo, se introducen horizontalmente unos tubos perforados con longitudes de 30 a
80 m, estos tubo se introducen con ayuda de gastos hidráulicos. Los tubos llevan los
siguientes accesorios            (figura 2.27):

–  Una punta de acero en la extremidad externa, que facilitan su penetración en el


terreno.

–  Unos anillos que sirven de guía al tubo y un cople o manguito impermeable.

–  La extremidad interior  de cada tubo está provista de una compuerta plana que
acciona desde la casa de máquina, emplazada sobre el pozo central.

Estos pozos están fundados en los principios siguientes:

–  Filtración de una gran superficie de capa acuífera


–  Extracción artificial de la arena de la misma capa acuífera.

–  Control del gasto del pozo cerrando los tubos convenientes.

–  Impermeabilidad de las paredes del pozo, pues actúa como cárcamo o recolector de
las aguas subálveas.

La velocidad del paso del agua por los agujeros debe estar entre 6 y 12 mm, por
segundo y en el tubo mismo de 1 a 2 m, por segundo.

La zona de captación que se forma alrededor de cada tubo en servicio tiene una
anchura comprendida entre 1.50 y 2.50 m, según sea la composición de la capa
filtrante subálvea.

La capacidad de captación en régimen normal de servicio la da la fórmula:

Q = 2 T r h ( K/15 )2

En la que:

Q = GASTO EN M3 POR SEGUNDO

R = radio del pozo en m.

H = Altura del agua sobre la solera en régimen normal.

K = Coeficiente de permeabilidad en m/s.

El gasto pues, depende del radio r y de la altura h y como poco se puede hacer para
aumentar dicha altura, debe actuarse sobre el radio, que puede ser grande.

Al ser la velocidad de infiltración en estos pozos hasta 30 veces inferior a la de los


ordinarios ( 0.1 mm. Contra 3 mm por segundo) el arrastre de arenas y elementos
finos es menor y se reduce el peligro de asolvamiento de los tubos. Para regular esta
velocidad de infiltración se maniobran las compuestas.

El rendimiento hidráulico de la capa acuífera llega en estos pozos a 70 0 90 % contra


25 a 30 % de un pozo ordinario, pudiendo llegar, en capas freáticas, de 200 a 400
litros/ segundo.

Si los pozos están próximo a un río, pueden dar de 750 a 1,150 litros/seg.

POZO RANNEY
(Fig. 2.27 a)

2.4.5.   SISTEMA DE PUYONES.

También se puede captar el agua freática por un sistema llamado de puyones, cuando
el medio permeable es arenoso y superficial.
Este sistema consiste en hincar en el terreno una serie de tubos de pequeños diámetros
( 1″ a 2″ ) y de 4 o 5 metros de longitud ( figura2.28 ) .

Estos  tubos se perforan y se hincan a distancias que fluctúan entre 30 y 60 m. una de


otra y se conectan todos a un tubo múltiple principal, que a su vez está conectado a
una bomba centrífuga. Con éste sistema se captan pequeñas cantidades de agua, pues
cada puyón en éstas condiciones capta más de 1 lts./seg. su empleo en nuestro medio
depende de las características del suelo y del nivel freático.

La tubería de la galería quedará unido al cárcamo de bombeo.

Para fijar la localización. Profundidad y características de la galería se efectuarán


previamente pruebas de campo, haciendo perforaciones de exploración con
profundidad de 4 a 8 m. espaciadas de 5 a 10 m. en el eje probable de la galería.

SISTEMA DE PUYONES

(Figura 2. 28).- captación de aguas freáticas por medio del sistema de Puyones

POZOS PROFUNDOS.

¿ QUE ES UN POZO DE AGUA?


Es una perforación forrada o encamisada que intercepta las corrientes o
acumulaciones de aguas subterráneas con el fin de extraerlas.

Ya hemos visto que al agua artesiana está a presión diferente de la atmosférica por
estar confinada entre dos capas de terreno impermeable.

De las aguas subterráneas, ésta es la fuente que más agua proporciona y a la que se
recurre cuando se abastece a poblaciones de fuerte concentración demográfica.

Un “pozo artesiano” es aquel en el que el agua se eleva por encima del nivel en que se
encuentra el acuífero, debido a la presión del agua aprisionada en el acuífero (Figura
2.29)

2.29 Esquema de pozos artesianos

Haciendo referencia a la (Fig.2.30 y 2.31) , los componentes de los pozos son:


a).-Ademe. Es una tubería, generalmente de acero, colocada con holgura dentro de la
perforación. Proporciona una conexión directa entre la superficie y el acuífero y sella
el pozo de las aguas indeseables superficiales o poco profundas. Además, soporta las
paredes del agujero de perforación.

b).- Cedazo, filtro o ademe ranurado. El cedazo es un tubo ranurado colocado al


interior del ademe, que tiene las siguientes funciones:

Estabilizar las paredes de la perforación.

Mantener la arena fuera del pozo.

Facilitar la entrada de agua al interior del pozo.

Los cedazos se fabrican en tubo de diferentes metales con protección o sin ella, en
aleaciones de plástico, concreto, fibrocemento o fibra de vidrio.

Los más económicos y comúnmente usados, son los fabricados en tubo de acero con
bajo contenido de carbón.

Si las ranuras o perforaciones del cedazo no son de la dimensión precisa para el


acuífero, los pozos bombearán arena.

El cedazo del pozo es particularmente susceptible al ataque corrosivo y a la


incrustación por depósito de minerales debido a la gran cantidad de arena expuesta
que representa el medio poroso donde se localiza.

Además, el agua que lo atraviesa constantemente puede traer sólidos dispuestos que
reaccionen con el material del cedazo o entre sí.

c).- Empaque de grava . Las funciones principales del empaque de grava son:

Estabilizar el acuífero y minimizar el bombeo de arena.

Permitir el uso del cedazo con la mayor área abierta posible.

Proporcionar una zona anular de alta permeabilidad, aumentando el radio efectivo del
pozo y su gasto de explotación.

El sitio elegido para la perforación estará de acuerdo con los estudios geohidrológicos
y/o geofísicos.

El proyecto de entubamiento dependerá del corte geológico  del pozo ya perforado y


del registro eléctrico que nos dará la profundidad del acuífero.

El diámetro del ademe estará en función del diámetro de los tazones del equipo de
bombeo que asegure el gasto de explotación ( Figura 2.31).
Fig. 2.30 Algunos tipos de pozos

1. Sello sanitario, generalmente con tubos de PVC. De 8” hasta 12”


2. Diámetro del pozo de 6” hasta 12“
3. Tubo PVC encamisado de la bomba de 5” hasta 10”
4. Filtro hecho con gravas de rió no 2 ó 3
5. Ranuras
6. Nivel estático del agua
7. Bomba sumergible
8. Electrodo de seguridad
9. Cable de Bomba
10. Tanquilla de protección de la bomba
11. Tablero electrónico de seguridad de la bomba.

figura 2.31.- Corte  esquemático de un pozo profundo

PASOS A SEGUIR EN LA LOCALIZACIÓN DE UNA FUENTE DE


ABASTECIMIENTO DE AGUA POTABLE.

1).- Se visita la población y se platica con las autoridades que saben del problema del
agua potable.
2).- Técnicamente se estudia el tipo de fuente que más convenga para la población.

3).- Con estos datos se elabora el estudio geohidrológico de la zona, para tener un
documento que ampare la fuente que se propone.

4).- Las fuentes pueden ser:

–  Galerías filtrantes ya sean: Vertical, horizontal o combinadas.

–  Manantiales.

–  Pozos profundos.

Dentro de los tipos de fuentes la más difícil y la que requiere de un conocimiento


Técnico-Científico, es la perforación de pozos profundos.

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