Está en la página 1de 3

Cristian Camilo Díaz Sandoval ID 638436 NRC 1985

Hablar de lo que es Público y Privado permite explorar un sinnúmero de concepciones, 1

consensos y también disensos que llevan a definir, a partir de distintas concepciones un tema tan

coyuntural para la nación y para nosotros sus habitantes, cierto es que desempeñamos un rol

activo en la sociedad, que basándose en las instituciones del estado, las ramas del poder público

intentan establecer un “orden” y en lo posible “coincidir con el cumplimiento de los fines del

Estado”, consagrados en la Constitución Política de Colombia, pero la realidad es totalmente

distinta, William Ospina (2012) afirma: “El Estado no existe para garantizar la salud, la igualdad,

la justicia, a la vez que existe infinitamente, saqueando el tesoro público, garantizando

privilegios”(¿Dónde está la franja amarilla? (p.16-17)), en la actualidad el Estado hace las veces

de árbitro, cuya gestión a lo largo de la historia reciente del país permite afirmar que estamos

frente a un gobierno que se limita a decidir y a dirigir, delegando a los demás el quehacer, es

pertinente también considerar que el Estado desempeña un papel de vital importancia en la

interacción del interés público y de privado para responder de manera acertada a los

interrogantes, ¿cómo vivimos? y ¿cómo se puede vivir mejor?.

Podemos así establecer algunas diferencias entre lo que es Público y lo que es Privado,

cada una está dentro de una esfera sobre la que está dividida la civilización y que procuran la

prosperidad si su conjunción es la apropiada, de tal manera que lo público es aquello que es de

todos, además es el lugar en el que contamos ¿quiénes somos?, también se considera que es el

espacio de la claridad por que la existencia individual se organiza en común con el entorno que

la rodea, en contraste con la anterior definición, lo Privado puede definirse como aquello que es

propio y de nadie más, por lo que se reviste de carácter prohibido, incluso íntimo, que busca

satisfacer las necesidades propias, oscureciendo el ámbito de lo público, es aquí donde el Estado

entra a tomar partido buscando el reconocimiento de su autoridad, un Estado “simulado”, que a


pesar de proclamarse soberano y revolucionario, no reconoce la pobreza como problema de 2

todos en el intento de equilibrar esta balanza, realmente aquí nada sirve para un propósito

público, cada institución “al servicio de la ciudadanía” es un negocio en el que se lucran las

familias más poderosas que siguen enraizadas en el poder, pero estos funcionarios, políticos y

autoridades no son la causa, son la consecuencia de un Estado que defiende el interés particular

por encima del interés general.

El asunto no es solamente exhortar a la ciudadanía a ejercer su derecho a la indignación,

reclamar el pleno disfrute de sus garantías individuales, dejar a un lado la sumisión y reaccionar

frente a tanta negligencia que está carcomiendo el bienestar del

pueblo colombiano, también aclarar que no se trata de preferir qué puede ser lo más conveniente

para la nación, los recursos que alimentan la redacción del presente documento permiten afirmar

que es importante para la nación y sus distintos sectores la satisfactoria conexión entre lo Público

y lo Privado, sería un error el afirmar que prime lo público por encima de lo privado, y viceversa,

es de vital importancia para las naciones garantizar la armonía entre estos dos sectores, de ahí

deriva la importancia del Estado quien debe fijar y vigilar las “reglas de juego”; dado que las

características conjuntas de cada sector pueden apuntar a un equilibrio determinado entre la

optimización de los beneficios privados y en simultánea la optimización de los intereses

públicos, es asunto del gobierno vigilar y ejecutar los planes acción tendientes a que esto sea

posible, no sólo el coordinar sino también vigilar y garantizar el cumplimiento del contrato

social, para que esta dinámica sea un gana- gana para las empresas, como agentes económicos,

asimismo lo sea para el Estado como veedor y procurador de la estabilidad y la sustentabilidad

del territorio, honrando y garantizando el cumplimiento de los fines consagrados en la carta

constitucional, así se posibilitará la igualdad, el acceso a las oportunidades y la prosperidad

económica y social.
Referencias:

• Darmorahj, Adrián. (s.f.). La relación público-privado. Una vieja discusión para nuevas

perspectivas. Notas para una agenda de investigación.

• Ospina, William. (2012). ¿Dónde está la franja amarilla? -Primera edición. Editorial

Random House

• Periódico el economista-Recio, Eugenio. (26 de mayo de 2015). La importancia de

armonizar lo público con lo privado. [Página Web]. Recuperado de:

https://www.eleconomista.es/opinion-blogs/noticias/6740619/05/15/Armonizar-lo-

publico-con-lo-privado.html

• Ponce de León, Facundo. (30 de septiembre de 2014). Lo público y lo privado-La

educación como puente. [Video]. Recuperado de:

https://www.youtube.com/watch?v=H9A7ocO9MuY

También podría gustarte