¡Hundirá sus raíces como cedro del Líbano! 6 Sus vástagos crecerán, y tendrán el esplendor del olivo y la fragancia del cedro del Líbano. 7 Volverán a habitar bajo mi sombra, y crecerán como el trigo. Echarán renuevos, como la vid, y serán tan famosos como el vino del Líbano. 8 Efraín, ¿yo qué tengo que ver con las imágenes? ¡Soy yo quien te responde y cuida de ti! Soy como un pino siempre verde; tu fruto procede de mí»”.
Oseas 14: 5 – 8 NVI
… en las expectativas que en algún momento de nuestra vida hemos tenido de algo o alguien.
1. La expectativa es la esperanza, sueño o ilusión de realizar o cumplir
un determinado propósito.
2. En la vida espiritual, cuando comenzamos nuestra relación con Dios,
tenemos expectativas de lo que él va a hacer cada día y de ser testigos de sus milagros.
3. La expectativa no es exclusiva de los seres humanos; Dios como
nuestro labrador, poda con la expectativa de que la cosecha que nacerá después de este proceso, será mucho más abundante.
4. El Labrador tiene una gran expectativa en tu fruto futuro, por eso te
poda. Él no lo hace con tristeza, ni con melancolía; él te poda con la expectativa de un futuro mejor.
5. No debemos perder la capacidad de estar expectantes a lo que Dios
puede hacer. Levanta tu expectativa, el labrador está creyendo en ti porque él te hizo y sabe que puedes dar un fruto más abundante del que has dado hasta hoy.