EL ESPÍRITU SANTO

El espíritu santo es la "tercera persona de la santísima trinidad". Es decir, habiendo un sólo dios,
existen en él tres personas distintas: padre, hijo y espíritu santo.

Símbolos

Al espíritu santo se le representa de diferentes formas:

El agua: Representa la acción del espíritu santo en el bautismo: el espíritu es el agua viva que brota
de Jesús crucificado

La unción: En la confirmación, donde recibimos la plenitud del espíritu santo, la unción con el óleo
es el «signo sacramental».

Fuego: El fuego porque se posó el espíritu santo sobre los discípulos la mañana de pentecostés y
los llenó de él. Simboliza la energía transformadora de los actos del espíritu.

Sello: Es un símbolo cercano al de la unción. Indica el carácter indeleble de la unción del espíritu en
los sacramentos del bautismo, de la confirmación y del orden en la consagración del cristiano.

La mano: Mediante la imposición de manos los apóstoles y ahora los obispos, trasmiten el "don del
espíritu". Por ejemplo, en la santa misa, justo antes de la consagración, el sacerdote coloca sus
manos sobre el pan y el vino, que por el espíritu santo se transforman en cuerpo y sangre de Jesús.

La paloma: Quizá el símbolo más conocido, después de que Jesús se bautizara, bajó sobre él el
espíritu santo en forma de paloma

Los siete dones del espíritu santo