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• Vivito y coleando:
Imagínemos que el osito o la muñeca favorita de su hijito es real: haga que camine, que se
vaya a dormir y que salte de un lado a otro del cuarto. Inclúyala en las actividades diarias,
siéntela en la mesa para almorzar, por ejemplo y ponga un babero para que coma. Hablar de
lo que está haciendo le ayudará a su hijo o hija a comprender el lenguaje. Actúe de forma
alegre a veces y otras con tristeza, para que pueda aprender acerca de los sentimientos y
emociones, así como a desarrollar su imaginación.
• Dar palmadas
Probablemente su hijo podrá mantener ya sus manos abiertas, pero puede que todavía pase
un tiempo hasta que dé palmadas él solo. Por ahora, delas con él, o déjele que sujete sus
manos mientras usted las das. Siéntese en el piso, frente a él, mirándolo y cante canciones en
las que se den palmadas, como "Palmas palmitas, que viene papá, tócalas pronto, ¡que en
casa está ya!". Esto alentará sus habilidades con el lenguaje, así como su coordinación entre
manos y ojos.
• El escondite
Dar un paseo con su hijo/a y llevar un balde con usted. Puede coleccionar
pequeñas cosas que le interesen a su hijo/a como piedras, hojas y semillas
(si es que se puede) o si no pequeñas cosas que haya dentro del hogar. su
hijito querrá llevar el balde, pero no se sorprenda si tira todo el contenido y
quiere empezar de nuevo. A los niños/as de esta edad les encanta llenar
recipientes... ¡para volver a vaciarlos de nuevo! Mientras tanto, estará
practicando sus movimientos de la mano y desarrollando destreza manual.
• Diversión con Globos
Los globos son algo fantásticos para divertirse. Se mueven lo suficientemente despacio como
para poder seguirlos y son relativamente fáciles de atrapar. Puede inflar uno (ver esto es la
mitad de la diversión) y lanzarlo al aire. Cuente en voz alta lo que tarda en caer al piso y deje
que su hijo/a lo atrape. Es un buen juego para desarrollar la capacidad de contar y la
coordinación entre ojo y manos.
• ¿Qué es lo que oyes?
Tome una gran toalla o una manta, sáquela al jardín y recuéstese en ella con su hijo/a. Dígale
que cierre los ojos y que escuche atentamente. Después de un minuto o así pregúntele qué es
lo que puede oír y dígale lo que usted ha escuchado: el aire en los árboles, el canto de un
pájaro, el ruido de un auto al pasar. Es una buena forma de ayudarlo/a a desarrollar su
capacidad de escuchar.
• Atrápame si puedes
A los niños/as les encanta que los/las persigan y a los padres les suele encantar perseguir a sus
niños/as pequeños/as. El objetivo de este juego es ser atrapado, especialmente si su hijo sabe
que recibirá un gran abrazo y un beso cada vez que consiga atraparlo. Para variar el juego,
pretenda que es diferentes tipos de animales: un león que ruge o un ratoncito. Cuando su
hijo/a lo/la atrape, déjale que se divierta. Es un gran juego para sonreír y liberar el
estrés en estos tiempos de crisis.
Jugando con pañuelos
Ustedes los padres, deberán guardar pañuelos de género en una caja y decir a los
niños/as que tienen una sorpresa, luego le mostraran los distintos pañuelos que hay
dentro y el padre o la madre será el encargado/a de colocar una canción y juntos
bailaran moviendo los pañuelos y dejando que los niños exploren diversas formas de
moverlos.