Marlon Fernando Melo Bohorquez

Código: 764216286

SOBRE LA PROPIEDAD INDUSTRIAL, PATENTES DE INVENCIÓN, MODELOS

DE PRODUCTOS Y MARCAS DE PRODUCTOS O SERVICIOS

INTRODUCCIÓN

¿Resulta viable para un joven inventor, sin experiencia en procesos legales, patentar sus
invenciones? Es mucha la inspiración que crece en una mente inventiva, una mente al servicio de
la innovación y la creación, que vive para crear y que crea para vivir (vivir en cuanto a realización
personal y no en cuanto la obtención de ingresos monetarios se refiere), que además de pensar
constantemente en el qué y el cómo de algún nuevo proyecto, disfruta el recorrido y cada
experiencia adquirida, experiencia que aunque en error o tropiezo haya terminado resulta ser la
que le permite avanzar y crecer, autorrealizándose.

Ahora bien, que en el mundo actual aunque tener esa naturaleza inventiva y esa personalidad
conquistadora sea importante, no basta para hacer las cosas bien, no basta en cuanto a que como
individuo que se encuentra en una sociedad está regido por normas, leyes y directrices, las cuales
en definitiva son las que le permiten a ese mismo individuo desarrollarse con libertad dentro del
marco social que le compete; es por eso que es imperativo tener en un principio, junto con la
inventiva y sus resultantes (proyectos, métodos, entre otros), el conocimiento de las normas que
rigen y permiten el libre desarrollo de esos proyectos para que sean reconocidos socialmente
como una realidad común, y si no el conocimiento al menos la noción de que existen normas,
instituciones y leyes que defienden y promueven esos tan meritorios inventos.

Es aquí entonces donde entra en consideración aquellas instituciones, normas y leyes que
contribuirán al avance progresivo en el proceso de formalizar dichas invenciones, convirtiéndolas
entonces en una idea reconocida socialmente. Dichos elementos están compuestos por
instituciones como la Cámara de Comercio, la Superintendencia de Industria y comercio, y por
normativas como la decisión 486 del 2000 de la Comisión de la Comunidad Andina y el Código de
Comercio de Colombia. Instituciones y normativas que contribuirán de maneras legales en
acompañamiento de la conformación de la idea inventiva, mecanismos de financiación,
instrucciones como un manual a seguir para lograr pues, posicionar formalmente el elemento
inventivo dando como resultado una patente, brindando a quien la produzca beneficios y regalías,
y por qué no, un sentimiento de autorrealización.
DESARROLLO

Para saber si resulta viable para un joven inventor, sin experiencia en procesos legales, patentar
sus invenciones es necesario remitirse a la praxis del ejercicio legal al que hay lugar al intentar
patentar un invento. En primer lugar hay que definir si el territorio en el que se encuentra quien
quiera desarrollar su invento existen mecanismos estatales de protección a la propiedad industrial
e incentivos para quienes realicen dichos procedimientos, para el caso de Colombia sí existe dicha
protección a la propiedad industrial, la cual es impartida por la Superintendencia de Industria y
Comercio, “Los Países Miembros otorgarán patentes para las invenciones, sean de producto o de
procedimiento, en todos los campos de la tecnología, siempre que sean nuevas, tengan nivel
inventivo y sean susceptibles de aplicación industrial.” (Decisión 486, 2000, art. 14).

En segundo lugar debe tomarse a consideración si lo que se está inventando, para ello resulta
oportuno remitirse al artículo 15 de la decisión 486, donde: “No se considerarán invenciones: a)
los descubrimientos, las teorías científicas y los métodos matemáticos; b) el todo o parte de seres
vivos tal como se encuentran en la naturaleza, los procesos biológicos naturales, el material
biológico existente en la naturaleza o aquel que pueda ser aislado, inclusive genoma o
germoplasma de cualquier ser vivo natural; c) las obras literarias y artísticas o cualquier otra
protegida por el derecho de autor; d) los planes, reglas y métodos para el ejercicio de actividades
intelectuales, juegos o actividades económico-comerciales; e) los programas de ordenadores o el
soporte lógico, como tales; y, f) las formas de presentar información.” (Decisión 486,2000, art. 15),
si lo que propone a formalizar como invención no se encuentra de dichos puntos del artículo,
puede considerarse entonces como un punto a favor, ya que el proyecto que se planee patentar
no estará sujeto a respuestas negativas por parte de la organización que analiza la propuesta.

Como hemos visto anteriormente, patentar una nueva invención no resulta tan sencillo como
parecería en un principio, debe cumplirse con una serie de condiciones, las cuales no se limitan a
los dos artículos anteriormente visto sino que es un compendio completo de normas que fijan al
detalle los pasos a seguir y las condiciones que debe cumplir una persona natural para patentar
una invención, es por eso que si un joven planea patentar un proyecto o idea, debe antes tomar
en cuenta los puntos de dicha decisión 486.

Ahora bien, que lo que produzca sea o no una idea original y se encuentre dentro del marco de las
obras científicas literaria o artísticas, de eso dependerá si lo cobija o no la ley de derechos de
autor, la cual para el caso de Colombia está regulada por la Ley 23 de 1982 y la decisión Andina
351 de 1993, los cuales le brindan las garantías suficientes para ejercer la propiedad intelectual
sobre lo que ha inventado “Los derechos de autor comprenden para sus titulares las facultades
exclusivas:

A. De disponer de su obra a título gratuito u oneroso bajo las condiciones lícitas que su libre
criterio les dicte.

B. De aprovecharla, con fines de lucro o sin él, por medio de la imprenta, grabado, copias,
molde, fonograma, fotografía, película cinematrogafía, videograma, y por la ejecución,
 recitación, representación, traducción, adaptación, exhibición, transmisión, o cualquier
otro medio de reproducción, multiplicación, o difusión conocido o por conocer.

C. De ejercer las prerrogativas, aseguradas por esta Ley en defensa de su "derecho moral",
como se estipula en el Capítulo II, Sección Segunda, artículo 30 de esta Ley.  Adiciona
mediante la Ley 44 de 1993.” (Ley 23, 1982, art. 3).

De esta manera vemos entonces como existe una gran variedad de mecanismos con los cuales
puede el individuo desarrollar libremente su idea original sobre lo que le plazca, puede también
fijarse en la sección II del capítulo II del Libro Tercero del Código de Comercio de Colombia, con el
fin de esclarecer dudas acerca de marcas de productos y servicios, si lo que deseare fuese llevar su
idea a un nivel más avanzado y conformar una empresa propia, en la que hiciera uso de una
marca, un lema y un logotipo.

Para efectos del lema deberá remitirse al SIC (Superintendencia de industria y comercio) y realizar
el respectivo registro que allí se encuentra, además de revisar la clasificación internacional de
NIZA, con el objetivo de instruirse más respecto a los procedimientos conductuales a seguir, si lo
que quisiere fuese conformar después de su idea original una marca y un lema.

Así entonces, podemos evidenciar que la rigurosidad de los procesos a seguir para patentar una
invención propia es bastante alta, y no menos el número de diligencias a seguir. Ahora bien, habrá
que analizar los beneficios tras realizar tan engorroso procedimiento, “La patente confiere a su
titular el derecho de impedir a terceras personas que no tengan su consentimiento, realizar
cualquiera de los siguientes actos: a) cuando en la patente se reivindica un producto: i) fabricar el
producto; ii) ofrecer en venta, vender o usar el producto; o importarlo para alguno de estos fines;
y, b) cuando en la patente se reivindica un procedimiento: i) emplear el procedimiento; o ii)
ejecutar cualquiera de los actos indicados en el literal a) respecto a un producto obtenido
directamente mediante el procedimiento.” (Decisión 486, 2000, art. 52), son muchos y variados los
derechos que confiere patentar una idea, y así mismo sus beneficios: a) Obtener ganancias e
ingresos por concepto de regalías (terceros usando su idea para lucrarse), b) Obtener
financiamiento estatal, c) Posibilidad de acceder a nuevos campos en el mercado, entre otros.

Si los beneficios satisfacen las necesidades del joven emprendedor que innova con sus inventivas
asertivas en pro de su autorrealización, entonces será viable el realizar tal magnitud de
procedimientos legales porque aunque muchos sean, cortos se quedan ante el sentimiento de
recompensa que otorga el ser reconocido por una comunidad científica y legal tan importante
como lo es la del mundo de las patentes y los derechos de autor.
BIBLIOGRAFÍA

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https://www.wipo.int/edocs/lexdocs/laws/es/can/can012es.pdf

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