El amor, un sentimiento tan complejo que resulta imposible describirlo, ya que
cada persona lo siente de una manera diferente, para algunos significa felicidad, para otros tristeza y desgracia. Lo único seguro con este sentimiento es que a todos nos afecta, al igual que la muerte, nadie se salva de el. El ser humano por naturaleza le teme a la soledad, por eso es que siempre está en busca de alguien a quien querer, ya sea amigo o pareja. En una sociedad como la griega, que se caracteriza por los sistemas jerárquicos, más que por amor las relaciones se han hecho por interés, riqueza, sabiduría o estatus social. La odisea es un legado que dejan los griegos a la historia de la humanidad, la narración se sitúa en la antigua Grecia. El protagonista es Odiseo, rey de Ítaca, una isla en la cual viven sus hombres, su esposa Penélope, su madre Anticlea y su hijo Telémaco, Odiseo viaja en su barco acompañado de sus hombres, viaja hacia una guerra motivado por el orgullo y amor de sus tierras. Todos algo que nos motive, que nos ayude a ser mejores y conseguir nuestros objetivos, el motivo de Odiseo era el amor. El regreso de la batalla de Troya con victoria de Odiseo lo aleja de su mujer por desafiar a los dioses, él y su ejército pierden el mar por castigo de Poseidón, aunque parece imposible Odiseo lucha por encontrar el camino a casa, el amor por su familia lo hace fuerte, están perdidos y paradójicamente guiados por el amor. Los hermanos no necesariamente tienen que ser de sangre, para Odiseo sus hombres eran sus hermanos, sufría y luchaba por su ejército, aunque esto desatara la furia de los dioses. Por lo general las personas piensan en su propio interés antes que en el de los demas, pero cuando el amor por alguien es tan grande no importa hacer sacrificios, ya que esa persona se lo ha ganado. Por eso a Odiseo no le importaba sacrificarse por su familia y amigos, el amor que sentía por ellos era más grande que su miedo a morir.