Está en la página 1de 7

UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

ESCUELA DE PSICOLOGÍA
LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA

Asignatura

Sexualidad Humana

Tema:

Variaciones en la conducta sexual, Trastornos sexuales y Terapia Sexual

Participante

Matrícula

Facilitador

Nagua, María Trinidad Sánchez


República Dominicana
UNIDAD VII

Después de consultar la bibliografía señalada (Libro Sexualidad Humana


de Rathus, Nevid & Fichner-Rathus) y otras fuentes de interés científico
para la temática objeto de estudio, se sugiere que realice la siguiente
actividad:

1. Realiza una informativa sobre las disfunciones sexuales y parafilias


estudiadas, incluye sus criterios diagnósticos según el DSM-5 y el
posible tratamiento o las técnicas de terapia sexual que se le podrían
aplicar.

Existen diversos términos que se utilizan para el comportamiento anormal,


desviaciones sexuales, perversión, varianza sexual y parafilia. Una conducta
anormal es todo aquello que es poco común o que unas pocas personas lo
practican, un sociólogo podría definir un comportamiento sexual desviado como
una conducta que viola las normas de la sociedad.

En un enfoque medico de acuerdo al Manual Diagnostico y Estadístico de los


Trastornos Mentales (DSM V), la parafilia se define como la conducta sexual
recurrente y poco convencional que es obsesiva y compulsiva. Para esto se
reconocen 8 parafilias: fetichismo, voyeurismo, sadismo, fetichismo travestista,
masoquismo sexual, frotteurismo, exhibicionismo, hipersexualidad, entre otras
parafilias. Cabe destacar que para ser una parafilia, esto debe transcurrir por un
periodo no menos de 6 meses y estos causan angustia o deterioro.

Fetichismo

El fetichismo es caracterizado por fantasías, impulsos o conductas sexuales que


implican el uso de objetos inanimados para producir o mejorar la excitación sexual
en ausencia de una pareja, durante un periodo de cuando menos seis meses y
que provoca angustia importante. Por ejemplo: ropa, zapatos, ropa interior, el
individuo tiende a masturbarse cuando acaricia alguno de estos objetos. Algunas
veces la persona no logra tener una excitación sexual si no está en presencia de
algunos de los objetos que le causa deseo sexual.

Travestismo

El travestismo se refiere a vestirse como un miembro del otro género. Esto lo


practican algunas personas debido a algunas razones. Por ejemplo los varones
gays que se visten con ropa femenina se consideran travestis femeninos, hay
otros que se les llama transformista femenino, estos son hombres que se visten de
mujer debido a su trabajo en el espectáculo. El diagnóstico del fetichismo travesti
se aplica correctamente a los heterosexuales que sufren un importante estrés
psicológico o un deterioro de su función a causa de sus fantasías e impulsos
sexuales recurrentes o de un comportamiento travesti que por lo menos dura seis
meses.

Sadismo

El sadismo sexual se caracteriza por impulsos persistentes y poderosos, y


fantasías sexuales, que implican infligir dolor y sufrimiento sobre otros para
conseguir excitación o satisfacción sexual. Cuando estos actos son recurrentes y
con una duración de 6 meses se le considera parafilia.

Masoquismo sexual

Esta parafilia se caracteriza por el deseo o necesidad de dolor o humillación para


alcanzar una excitación sexual. Un masoquista sexual, o bien actúa, o está
estresado, por impulsos persistentes y fantasías sexuales que implican el deseo
de ser atado, azotado, humillado, o bien que una pareja sexual le haga sufrir de
alguna manera, para conseguir la excitación sexual, como anteriormente se
menciono. El masoquismo sexual es la única parafilia donde es más común en
mujeres. La excitación sexual se puede alcanzar a partir de varias experiencias
como el Bondage (practica de ser atado).

Por lo general el sadismo y el masoquismo forman pareja que deriva la conducta


sadomasoquista, es que la combinación de ambas.

Voyeurismo

Es la acción que consiste en obtener placer sexual mientras se observan cuerpos


desnudos, casi siempre desconocidos, sin el consentimiento de la otra persona.
Para clasificar el voyeurismo se requiere lo siguiente: la conducta sexual atípica ha
de preferirse a las relaciones sexuales, y debe practicarse con cierto nivel de
riesgo o sumar ambas condiciones. El voyeurista suele excitarse sexualmente
cuando el riesgo de ser descubierto es grande, lo cual explicaría por qué no le
atraen lugares como los campos o playas nudistas, donde el mirar es aceptable
(Tollison y Adams, 1979). Aunque es una práctica exclusiva de los hombres, a
menudos se pueden ver a mujeres con esta acción. Con un periodo de tiempo de
al menos 6 meses.

Exhibicionismo

El exhibicionismo consiste en impulsos persistentes y poderosos y fantasías


sexuales que conllevan la exposición de los genitales a extraños que no se lo
esperan, con el propósito de conseguir excitación o gratificación sexual. Los
exhibicionistas casi siempre son hombres. El exhibicionista arquetípico es una
persona joven, infelizmente casada y sexualmente reprimida. Un exhibicionista
puede alegar que el coito conyugal es razonablemente satisfactorio pero que
también siente la compulsión de exponerse ante extraños. Sin embargo, muchos
exhibicionistas están solteros. Típicamente, tienen dificultades para relacionarse
con mujeres y han sido incapaces de establecer relaciones heterosexuales
significativas.

Frotteurismo

También tiene una duración de 6 meses. Consiste en fantasías, impulsos o


conductas sexuales que implican tocar o frotar los propios genitales contra el
cuerpo de una persona que no ha consentido a ello, hacer este tipo de conducta
provoca angustia o dificultad interpersonal notables. Generalmente son Hombres
quienes realizan este tipo de acción. El hombre que practica el froteurismo se
excita y experimenta el orgasmo durante el acto. Comúnmente incorpora más
tarde las imágenes mentales de sus acciones a las fantasías de masturbación.

Hipersexualidad

La hipersexualidad incluye a la ninfomanía y a la satiriasis, en los cuales existe un


nivel extremadamente elevado de actividad e impulso sexuales; en casos
extremos, la persona es aparentemente insaciable y la sexualidad oscurece todas
las demás preocupaciones e intereses. Cuando ocurre en las mujeres, se
denomina ninfomanía; en los hombres, se denomina satiriasis (o Donjuanismo).

Asfixiofilia

Es un deseo de inducir en uno mismo un estado de deficiencia de oxígeno para


crear excitación sexual o para aumentar la excitación y el orgasmo. Se utilizan una
variedad de técnicas, incluyendo estrangulación temporal con una cuerda
alrededor del cuello, una almohada contra el rostro o una bolsa de plástico sobre
la cabeza o la parte superior del cuerpo.

Tratamiento en la parafilia

El tratamiento de estos patrones atípicos de conducta sexual pone en juego varios


asuntos. Primero, las personas con parafilias normalmente no quieren ni buscan
un tratamiento, al menos no voluntariamente. A menudo niegan que sean
delincuentes sexuales, incluso después de haber sido detenidos y condenados. La
conducta parafílica es una fuente de placer, por lo que muchas personas no están
motivadas para dejarlo. Típicamente, el individuo percibe que sus problemas
tienen su origen en la intolerancia de la sociedad, no en sentimientos de culpa o
vergüenza.

Psicoterapia Psicoanalítica: El psicoanálisis se centra en la resolución de los


conflictos inconscientes que se cree se han originado en la infancia y que se
manifiestan en la edad adulta en forma de problemas patológicos, como las
parafilias. La finalidad de la terapia es ayudar a traer a la conciencia los conflictos
inconscientes, principalmente los conflictos de Edipo, de manera que puedan
trabajarse a la luz de la personalidad adulta del individuo (Laws & Marshall, 2003).
Terapia cognitivo- conductual: Esta terapia es relativa y breve se centra
directamente en cambiar la conducta. La terapia cognitivo-conductual ha generado
varias técnicas para ayudar a eliminar las conductas parafílicas y fortalecer las
conductas sexuales apropiadas. Estas técnicas incluyen la desensibilización
sistemática, la terapia de aversión, el entrenamiento de habilidades sociales, la
sensibilización encubierta y el recondicionamiento del orgasmo.

 Desensibilización sistémica: intenta romper el vínculo que existe entre el


estímulo sexual (como un estímulo fetichista) y la respuesta inapropiada (la
excitación sexual). En primer lugar, la persona en tratamiento hace
ejercicios de relajación muscular. Luego la relajación muscular se
simultanea repetidamente con una imagen, entre una serie de imágenes o
fantasías parafílicas que se van presentando una a una, progresivamente
más excitantes.
 Terapia de aversión: Método para eliminar la conducta sexual no deseada,
en el cual la conducta se acompaña repetidamente con un estímulo
desagradable, como una descarga eléctrica, de manera que se desarrolla
una aversión condicionada.
 Entrenamiento de habilidades sociales: Se centra en ayudar al individuo
a mejorar sus habilidades para relacionarse con personas del otro sexo.
Primero, el terapeuta puede modelar la conducta deseada, por ejemplo,
cómo pedir una cita a una mujer o cómo hacer frente a un rechazo. La
persona en tratamiento puede entonces representar esa conducta, con el
terapeuta representando el papel de la mujer. Después de la sesión, el
terapeuta puede proporcionar retroalimentación y consejos adicionales, y
representar el modelo, para ayudar a la persona a mejorar sus habilidades.
Este proceso puede repetirse hasta que la persona en tratamiento domine
la habilidad.
 Sensibilización encubierta: Es una variación de la terapia de aversión en
la cual las fantasías son simultaneadas con un estímulo desagradable
imaginario.
 Recondicionamiento orgásmico: Método para reforzar la conexión entre
la excitación sexual y una estimulación sexual apropiada (como fantasías
acerca de un adulto del otro sexo), acompañando repetidamente el estímulo
apropiado con el orgasmo. El recondicionamiento orgásmico se combina a
menudo con otras técnicas, como el entrenamiento de las habilidades
sociales, de manera que también pueden reforzarse conductas sociales
más deseables.

Disfunciones Sexuales

Las disfunciones aparecen en cualquier etapa de la vida de un individuo,algunas


personas experimentas estas disfunciones al inicio de su vida sexual, otras
durante el transcurso del tiempo. Los trastornos sexuales son un problema con la
respuesta sexual que provoca angustia mental a la persona.
Las disfunciones sexuales se pueden clasificar en: Un trastorno sexual
permanente es aquel que ha estado presente desde que la persona se volvió
sexual y un trastorno sexual adquirido es una disfunción que se desarrolla
después de un periodo de funcionamiento normal.

Tipos de disfunciones

Trastorno del deseo sexual. Falta de interés por el sexo o aversión al contacto
sexual, entre este trastorno se puede mencionar dos:

 El deseo sexual hipoactivo: falta de deseo sexual.


 Trastorno de aversión sexual: rechazo a cualquier contacto sexual.

Trastornos de excitación. Las personas con este tipo de trastorno no alcanzan o


no logran mantener la lubricación o la erección necesaria para el acto sexual.

 Trastorno de erección masculina: Es la incapacidad para tener una


erección o para mantenerla. Otros términos son disfunción eréctil,
excitación sexual inhibida e impotencia. Un resultado del trastorno eréctil es
que el hombre no puede tener coito.
 Trastorno de excitación sexual femenina: Las mujeres pueden padecer
dificultades persistentes para excitarse o lubricarse suficientemente como
respuesta a la estimulación sexual. Ocurren tanto en la masturbación como
en el sexo con la pareja.

Trastornos orgásmicos. En el trastorno orgásmico femenino o masculino, la


mujer o el hombre, de manera persistente, tardan mucho en llegar al orgasmo o no
llegan en absoluto, a pesar de conseguir una estimulación sexual cuya intensidad
debería ser suficiente para producir el orgasmo.

 Trastorno orgásmico femenino: dificultad o imposibilidad de llegar al


orgasmo.
 Trastorno orgásmico masculino: El opuesto de la eyaculación precoz, el
hombre no llega a tener un orgasmo o se le dificulta llegar a uno.
 Eyaculación precoz: Disfunción sexual en la cual la eyaculación ocurre
con la mínima estimulación y antes de que el hombre desee.

Trastornos asociados al dolor sexual. La relación sexual dolorosa es menos


común en los hombres y, por lo general, está asociada con infecciones genitales
que causan quemazón o eyaculación dolorosa.

 Dispareunia: Dolor genital durante el acto sexual. Normalmente el dolor es


una señal de que algo no va bien. La dispareunia puede ser el resultado de
causas físicas, factores emocionales o una interacción de ambos. La causa
más común en las mujeres en una lubricación escaza o inadecuada.
 Vaginismo. Ocurre lo que es espasmo. consiste en la contracción
involuntaria de los músculos pelvianos que rodean el tercio exterior de la
entrada de la vagina. El vaginismo ocurre de manera refleja durante los
intentos de penetración vaginal, haciendo dolorosa o imposible la entrada
del pene.

Tratamiento para las disfunciones sexuales

Existen una variedad de terapias para los trastornos sexuales que van a depender
cada una de ellas de una diferente comprensión teórica acerca de la causa de
cada trastorno.

Terapia conductual. Tiene sus orígenes en el conductismo y en la teoría del


aprendizaje. La suposición básica es que los problemas sexuales son resultado
del aprendizaje previo y que se mantienen por reforzamientos y castigos continuos
(causas inmediatas). En 1970, Masters y Johnson informaron sobre el desarrollo
de un nuevo conjunto de técnicas para la terapia sexual e introdujeron una nueva
era en este tipo de terapia. Operaban desde un modelo de terapia conductual
porque consideraban que los trastornos sexuales son comportamientos
aprendidos en lugar de síntomas de enfermedad psiquiátrica. Si los trastornos
sexuales son resultado del aprendizaje, pueden desaprenderse.

Terapia cognitivo-conductual. Actualmente, muchos terapeutas sexuales utilizan


una combinación de los ejercicios conductuales, cuyos pioneros fueron Masters y
Johnson, junto con terapia cognitiva. La reestructuración cognitiva es una técnica
importante en el enfoque cognitivo de la terapia sexual. El terapeuta ayuda al
paciente a reestructurar sus patrones de pensamiento, ayudándole a volverse más
positivo. De igual modo el terapeuta desafía las actitudes negativas del paciente.

Terapia de pareja. Una causa importante de los trastornos sexuales son las
dificultades interpersonales. De acuerdo con ello, algunos terapeutas sexuales
emplean la terapia de pareja como una parte del tratamiento. En la terapia de
pareja se trata la relación misma, con la meta de reducir el antagonismo y las
tensiones entre los miembros. A medida que mejora la relación, debería reducirse
el problema sexual.

También podría gustarte