RESEÑA HISTORICA SOBRE LA TOMA GUERRILLERA

DE EL MUNICIPIO EL CLAVARIO META.

ALUMNO:
MILEIDY NATALY RAMOS ORTIZ.

GRADO:
ONCE.

INSTITUCION EDUCATIVA SIMON BOLIVAR

SANFRANCISCO EL CLAVARIO (META)
2014.
 RESEÑA HISTORICA SOBRE LA TOMA GUERRILLERA DE
EL MUNICIPIO EL CALVARIO META.

ALUMNO:
MILEIDY NATALY RAMOS ORTIZ

TRABAJO RESEÑA HISTORICA:

(TOMA GUERRILLERA DE EL MUNICIPIO EL CALVARIO META).

GRADO:
ONCE.

PRESENTADO A:
LUZ BERTA OLMOS.

INSTITCION EDUCATIVA SIMON BOLIVAR

SANFRANCISCO EL CALVARIO.(META)
2014.
 EL CALVARIO META.

El Municipio de El Calvario fue fundado en el año 1911 por el Padre Francés Juan
Bautista de Arnaud quien pertenecía a la comunidad religiosa Monfortiana y las
posteriores migraciones de Familias colonas provenientes de Choachí, Cáqueza,
Fosca, Junín y Ubaque quienes coadyuvaron a construir el poblado después de la
construcción de la primera iglesia fundada por el misionero francés; El actual
Municipio de el Calvario fue inscrito en 1916 como corregimiento perteneciente a
Villavicencio (Intendencia del Meta) y declarado como Municipio en el año 1945 ,
pero oficialmente obtiene su título en el año 1955 mediante el Decreto intendencial
No 182 y ratificado por el Decreto Nacional No 2543; la inspección de Monforth fue
fundada en el año 1949 por el padre Alejandro Chesnaie en el punto geográfico
denominado la esmeralda, terrenos donados en 1948 por Don Antonio Contento y
la inspección San francisco fue declarada inspección mediante la ordenanza No
34 de 1971 y como fundadores se registran los señores Abel Rojas, Leocadia
Bobadilla y sus Hijos Efraín, Héctor, Tito, Baudilio, Raúl, Ángel Horacio y Fidel
Bobadilla, Olga y Néstor Vargas Moreno.
El Municipio de el Calvario este ubicado al noroccidente del Departamento del
Meta en las estribaciones de la cordillera Oriental y se localiza 4°18’25’’ de latitud
Norte y 73°46’20’’ de longitud Oeste; El Municipio presenta relieve montañoso, por
estar ubicado en la vertiente oriental de la cordillera oriental, el territorio del
municipio presenta afloramiento, rocoso en dirección NNE-SSW. EL IGAC de
manera general clasifica los suelos como clase IV, presentan baja fertilidad, pero
responden bien a la baja dosis de fertilizantes; El territorio del Municipio de El
Calvario, pertenece en su totalidad a la cuenca media del río Guatiquia; el cual
tiene una longitud de 21.750 metros; el territorio Municipal se divide en tres
cuencas hidrográficas: cuenca del rio Santa Bárbara, cuenca Quebrada Onda,
abastecedora del acueducto de Villavicencio, cuenca rio guatiquia.
El Municipio de El Calvario limita con el Norte con el Departamento de
Cundinamarca y el Municipio de San Juanito (Meta), al occidente con el
Departamento de Cundinamarca, al Oriente con los Municipios de Restrepo,
Cumaral y el Departamento de Cundinamarca y al Sur con el Municipio de
Villavicencio;
Extensión total: una extensión de 270,70 Km2, Km2
Extensión área urbana: 0.1 km2 Km2
Extensión área rural: 270.6 km2 Km2
Altitud de la cabecera municipal (metros sobre el nivel del mar): una altitud de
1.987 metros/ Nivel del Mar
Temperatura media: con una temperatura de 17 0 C. º C
Distancia de referencia: una distancia en Kilómetros de 84 de la ciudad de
Villavicencio
Aéreas: no hay
Terrestres: El Municipio de El Calvario cuenta con los siguientes carreteables que
lo comunican con los municipios vecinos: cabecera municipal a Villavicencio 84
km, a San Juanito 25 km, a San Pedro 8 km; de San francisco a Quetame 20KM Y
de Monforth a Villavicencio 27 km. Para el desplazamiento entre veredas se
utilizan caminos de herraduras angostos y con pendientes fuertes, interceptados
por quebradas.
Fluviales: no hay

RESEÑA HISTÓRICA

LA TOMA GUERRILLERA EN EL MUNICIPIO DEL CALVARIO (META).

El señor José Antonio Pérez González, quien se desempeñaba como Juez
Municipal de El Calvario, el día de los hechos nos da su testimonio de que el
cuándo había llegado al calvario meta como Juez encargado el tres de junio del
presente año, desde ese entonces escucho una presunta toma, comentario
general de la gente, de una presunta toma del pueblo por parte de la
guerrilla inclusive ya pasando el tiempo y familiarizándose con la gente del
pueblo, observo en el restaurante de doña Irene , uno de esos domingos, gente
distinta y extraña del pueblo.  Pasó el tiempo y cuando fue el señor Gobernador y
el mayor Esquivel, delegado del Ejército a consecuencia de los derrumbes, se le
informó de una presunta toma del temor que existía entre los funcionarios del
estado y los catorce miembros de la policía de una toma guerrillera, además se les
mostró y el fue uno de ellos, que al frente del pueblo, en la otra colina
denominado San Francisco, estaban ubicados los comandos guerrilleros y de allí
se proveían de víveres.  El día de los hechos lunes día 17 de agosto de 1992.  El
día anterior había gente ingiriendo licor más o menos hasta las cuatro de la tarde,
inclusive hubo peleas en un café, pero como cosa rara, de las cinco de la tarde no
había un parroquiano.  Las tiendas y piqueteaderos estaban desocupados, se
alcanzaba apreciar en la atmósfera que iba a ocurrir algo.   Luis Alfonso
Gutiérrez Pinilla era agente de la Policía Nacional.  Había sido asignado a la
Subestación de Policía del Municipio El Castillo (Meta), al mando del Cabo
Segundo Elman Emir Torres Acero, donde se les dotó con armamento de mala
calidad, “desusado, desgastado, inservible e inoperante, para prestar el
servicio  Desde antes del 17 de agosto de 1992, el personal de la citada
subestación adelantó actividades de inteligencia en la región; detectó la presencia
de subversivos de las FARC ,como también la inminencia de un ataque de éstos al
personal uniformado.  Las informaciones de inteligencia eran continuas, reiteradas
y fueron comunicadas inmediata y oportunamente a sus superiores, por lo que
éstos eran sabedores de las circunstancias existentes en dicha área.     Las
autoridades de policía, sin embargo, no calificaron ni clasificaron la información
suministrada; no reforzaron el pie de fuerza en el número mínimo que exigían
ellas; no realizaron operativos con personal extra o del Ejército Nacional en el
sector; no se hicieron reconocimiento con aeronaves, ni mucho menos se les
reemplazó el armamento por uno más eficiente y eficaz, como tampoco se les dotó
en forma adecuada, omisiones que fueron funestas para los agentes de
policía.  Sólo se ordenó un traslado de tres agentes, para completar 16 unidades,
en total, en la subestación, y se les recomendó la evacuación del puesto de policía
durante la noche, lo que demuestra hasta donde importó o se tuvo en cuenta tanto
las informaciones de inteligencia, como la suerte de los policías.    El 16 de agosto
de 1992, dos agentes de policía fueron autorizados para gozar de vacaciones, de
manera que sólo quedaron catorce. En la subestación, no se ordenó el desalojo de
todo el personal mientras se tomaban otras medidas.  En cumplimiento de las
instrucciones del comandante de la subestación de Policía de el Calvario y de los
altos mandos militares, el domingo 16 de agosto de 1992, a las 8:00 p.m., se
conformaron tres grupos, que debían evacuar por la noche el puesto de policía, y
regresar a las 5:00 a.m. Al día siguiente, al regresar, a la hora acordada, fueron
sorprendidos por los facinerosos que se encontraban en inmediaciones del puesto
de policía quienes los atacaron, empezó el tiroteo mientras otros guerrilleros iban
de casa en casa obligando a los civiles a salir de sus casas inmediatamente hacia
las instalaciones del colegio, en donde la mayoría de la gente salieron en piyama,
unas familias se negaron a salir de sus casas. La guerrilla se tomó al pueblo
colocándole una bomba a la estación de policía en donde la casa que se
encontraba al pie fue también desplomada por la bomba allí se encontraban los
dos civiles que murieron (familia Amaya), Escuchándose los primeros cuatro tiros
de fusil por el lado de la Caja Agraria se dice que una segunda bomba fue
colocada a la caja agraria que funcionaba en un salón que le había arrendado la
casa cural, antes de ser colocada, le avisaron al sacerdote de esa época (padre
Gildardo) dándole unos segundos donde tenía solo plazo para sacar sus
papeles de identidad. De la caja agraria solo quedo un pedazo de papelería el
resto fue destrozado. Pasado el tiempo, las cinco y cuarto, la explosión sonó con
fuerte ruido. La secuencia posterior del ataque guerrillero es una constante, se oía
un ruido del fusil G-3, un traqueteo de una M-60, seco el metrallazo, dos o tres
ruidos de tipo rockts lo cual era contestado por los tiros característicos de
carabina M-1 de los Policías. Una tercera bomba fue colocada en la caja fuerte
para poder sacar la plata un poco llevaron, otro recogieron la gente y el resto se
volvió pedazos. El enfrentamiento ocurrió por espacio de cinco horas cometiendo
todo tipo de actos de barbarie, la iglesia quedo un poco averiada en su torre
principal por la causa de la explosión, también se dice que en la casa en donde
pagaban arriendo Don Horacio Baquero y su mujer (ellos Vivian en el piso de
abajo), les fue quemada la pequeña droguería que tenían y todas sus
pertenencias, allí también pagaba arriendo el comandante de la policía (que vivía
en el segundo piso). De tiempo atrás, el cabo Torres, que en paz descansé
estaba practicando la estrategia de evacuación del puesto a las 19:00 horas, por
tal razón los agentes estaban repartidos en tres patrullas, una al mando del agente
Gutiérrez por ser el más antiguo, otra al mando del agente Reyes y, la primera,
ubicada en ese momento en la casa de habitación de Gutiérrez, lugar donde
hicieron su defensa y donde según comentarios de los mismos vecinos, la guerrilla
en número muy superior en una proporción de ocho a uno y mejor equipado de
armamento en la puerta de entrada al segundo piso donde ellos estaban,
colocaron una carga explosiva, volando la puerta, siendo metálica y gruesa y aun
en los colchones donde el agente Gutiérrez escondió sus hijos se observó balas
de galil y G-3, siendo una de esas balas en revote que hirió a los hijos del agente
Gutiérrez . Donde fue masacrado delante de su hija de más o menos unos 3 o 4
años de edad, esta casa estaba ubicada en la calle central bajando a mano
derecha. Y muchas más personas que fueron víctimas de este hecho, en donde
el municipio quedo semidestruido, cuando habían caído varios uniformados,
heridos otros, fueron rendidos. En el desarrollo del combate, “unas carabinas se
trabaron, otras se desbarataron, pues en su mayoría no sirvieron para repeler el
mismo” y fueron “decomisadas posteriormente por la guerrilla”. Los agentes de
policía de la subestación de el Calvario se encontraban en “inhumana
desprotección”, tanto en número (los subversivos eran más de 80), como en
armamento, y a ello se debió el fallecimiento de Luis Alfonso Gutiérrez y otros
cinco uniformados agentes de la policía Nacional y dos civiles resultaron
muertos, un oficial un suboficial, dos soldados muertos; ocho heridos, tres
guerrilleros dados de baja. Además, otras cinco personas heridas, incluidos tres
agentes de la institución y dos niños. Por otro lado se dice que así mismo, las
sedes de la caja agraria, puesto de salud, casa cural y puesto de policía,
resultaron completamente destruidos al igual que tres viviendas de vecinos de
esos lugares. Los altos mandos de la Policía no suministraron la protección
urgente que demandaba la situación de los agentes de El Calvario, a pesar de que
conocían la precaria defensa con que contaban. El ataque no constituyó un acto
imprevisible y, sin embargo, dichos agentes fueron “abandonados a su propia
suerte y sacrificados en aras del deber”. La instrucción de evacuar la subestación
en horas de la noche “no era la forma de protegerlos eficazmente contra la acción
del enemigo que amenazaba inminentemente; ello no conducía a reducirlas el
riesgo que comporta la prestación del servicio, pues no se trataba de un riesgo
común y normal y mucho menos en esta área y bien pudo acudirse a formas o
instrumentos acostumbrados por el arte de las armas y la experiencia e
inteligencia de los comandos superiores   Los hechos relatados son corroborados
en las declaraciones de los agentes sobrevivientes a la toma del Calvario, así
como en el concepto del investigador y el fallo del Comandante del Departamento
de Policía del Meta, que decidió el informativo citado.  Estas circunstancias no
fueron desvirtuadas por los investigadores, ni consideradas por ellos como
tendenciosas o mentirosas; por el contrario, en el combate y siendo rematados
por el famoso tiro de gracia, la patrulla de Reyes, según la versión escuchada a
don Benigno Peña, duelo de la casa donde se encontraban haciendo resistencia,
esa patrulla sostuvo el ataque por un tiempo aproximado de dos horas por
escases de munición y la ineficiencia de las armas M-1, inclusive la carabina del
agente Policarpo estaba amarrada con esparadrapo, fueron tomados por la
guerrilla y prisioneros y conducidos a las afueras del pueblo, creo que estos
agentes le deben la vida porque el comandante no era sanguinario cosa que no
encontró los otros agentes de la patrulla Gutiérrez, quienes heridos y sin armas
fueron ajusticiados.  En cuanto a la patrulla del cabo Torres Acero Elman, se ubicó
en la casa de habitación y sostuvo con el agente Castillo Q.E.P.D. y los agentes
Gómez, Marulanda y Herrera una batalla en defensa de sus vidas y en honores de
la patria e institucionales, desde las cinco de la mañana y hasta las nueve y media
de la mañana. Los hechos heroicos de estos agentes no se pueden relatar  pero sí
se dice que todos estos muchachos son unos héroes, sé que estos agentes
causaron bajas a la guerrilla, se defendieron con solo coraje institucional, con
armamento inservible frente a una superioridad numérica. Dentro de los hechos de
la patrulla del cabo segundo, se informaba que la única manera que sacaron al
cabo del fortín, fue con una granada incendiara que abrazaron los techos y piso
de madera de la casa, el cabo salió después de resistir dentro de la casa en
llamas y al salir fue eliminado por la guerrilla, según las versiones de testigos, él
salió disparando y buscando protección al lado opuesto de la calle, no lográndolo y
quedando muerto en la mitad de la vía, los demás agentes heridos, el caso de
Marulanda, él salió arrastrándose a la vía sin armas y otros dos agentes que no sé
sabe quiénes fueron, se votaron por atrás y fueron recibidos por el fuego del
enemigo. se Indica además, que, el grupo guerrillero estaba conformado por más
de 150 personas, y que éstas se fueron del pueblo más o menos a la 1:00 p.m.,
luego de haber saqueado las tiendas de los comerciantes particulares.  Precisó
que estaban vestidas con uniformes de policías y botas pantaneras, y en su
mayoría, portaban armamento compuesto de fusil galil y G-3, las personas
comentan que vieron una M-60, granadas de fusil y que escucharon los rockts
funcionando. Los insurgentes utilizaron, rockets, granadas de fragmentación,
armas automáticas de largo alcance y bombas. También se Indica que, como a
las 7:30 a.m., salió el juez de su casa y buscó al Alcalde, quien estaba reuniendo
a la gente fuera del área de combate, en el Colegio; luego revisó los daños, junto
con el alcalde y, por la tarde, practicó los levantamientos de los cadáveres, los
habitantes del municipio de el Calvario (Meta) no salían de sus refugios por la
sangrienta toma guerrillera de lo que había sucedido. Mientras se observaba la
evacuación de los cadáveres, la movilización de los heridos y el desembarco de
tropas se enteraban de la intensa persecución del ejército contra las insurgentes.
Al cierre de esta edición hubo resultados en la ofensiva oficial: se esperaban
nuevos contactos porque las tropas combinadas del ejército y la policía
mantienen acordonada la zona de la cordillera oriental, aledaña a la población. En
busca del frente guerrillero. Los muertos empezaron a ser enviados a sus lugares
de origen. Donde serían sepultados. El cabo segundo. Elman Emir Torres Acero,
para Bogotá; los agentes Fernando Díaz Ortiz, para Bogotá; Álvaro Díaz Vidal,
para Palmira (Valle del Cauca); Armando Frías montero, a Valledupar (Cesar), y
Edilberto Castillo Morales, para Turbaco (Bolívar), mientras que Luis Alfonso
Gutiérrez Pinilla seria sepultado en Villavicencio. Entre tanto los tres agentes
heridos, Felipe Gómez de la Cruz, Fredy Marulanda León y Ramiro Herrera
Martínez, fueron internados en la clínica de la policía nacional en Bogotá. Los
dos menores lesionados también, Jenny y Diego Alonso Gutiérrez, de 12 y 10
años respectivamente, fueron atendidos en la clínica de la institución en
Villavicencio. Mientras tanto, Andrés Amaya y Rosa Morales, los dos civiles que
murieron, fueron sepultados en la localidad. En el puesto de policía se
encontraban en el momento de la toma sudversiva,14 uniformados, de los cuales
cinco salieron ilesos, incluido uno identificado como Miguel Orlando Reyes, de
quien se decía estaba desaparecido, pero apareció sin novedad. El estado
expuso a sus agentes a un riesgo excepcional previsible, arrastrándolos, junto con
sus familias como soportes del ataque. Luis Alfonso Gutiérrez Pinilla se había
casado con Martha Morales, de su unión nacieron Sandra María, Martha Cecilia
Sisam Jenny, Diego Alfonso y Larry Julián Gutiérrez Morales.  Luis Alfonso
Gutiérrez Pinilla era la única persona que sufragaba todos los gastos del hogar y
de su familia; los colmaba, además, de cariño, amor y cuidados, propios de un
buen marido y padre, de todo lo cual quedaron desprotegidos como consecuencia
de su muerte. A raíz de la toma guerrillera, el Comando de Policía del Meta
levantó el puesto de policía, evacuando definitivamente al personal allí acantonado
y sólo. Hace poco, volvió a asignar personal a dicho municipio, medida que pudo
tomar antes del ataque subversivo con base en las informaciones de inteligencia y
haber evitado la muerte de los agentes, si no era posible reforzarlo conforme las
exigencias lo ameritan. Tropas del batallón servies de la séptima brigada
ingresaron luego de varios meses al municipio del Calvario Meta , uno de los
santuarios de las farc en plena cordillera oriental, donde desmantelaron dos
gigantescos campamentos de los frentes 52 y 53 que comandaba Alias
“Manguera”, hermano de Henry Castellanos, Alias Romaña y de Alias el “Zarco”.