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Flexión dorsal: movimiento que discurre en un plano sagital y durante el cual la zona
distal del pie o parte de él se aproxima a la tibia.
Inversión: Movimiento que sucede en un plano frontal, durante el cual la superficie plantar
del pie se inclina mirando hacia el plano medio.
Eversión: Movimiento que tiene lugar en un plano frontal durante el cual la superficie
plantar del pie o parte de la gira hacia fuera, se aleja del plano medio.
Aducción: movimiento sobre un plano transverso en el que la parte distal del pie se
desplaza o aproxima hacia la línea media del cuerpo.
Abducción: movimiento que tiene lugar sobre un plano transverso, durante el cual la zona
distal del pie se desplaza o aleja de la línea media del cuerpo.
Deformidades:
Pie equino: Deformidad del pie caracterizada porque la totalidad del mismo esta
sostenida en posición de flexión plantar con relación a la pierna con relación a la pierna, la
contractura del musculo tríceps (tendón de Aquiles acortado) es la causa de que el pie
adopte esta posición.
El individuo optara por tomar marcha con el antepie (en puntillas)
Algunas opciones de tratamiento son:
Pie valgo: Se define con el pie cuyo talón está en eversión y su parte distal se encuentra
en eversión y abducción, radiográficamente son pies con estructura ósea normal no hay
luxación o subluxación de los huesos del tarso.
Esta deformidad se resuelve siempre sin problema salvo de que hubiera una alteración
neuromuscular.
Su tratamiento es el siguiente:
Quirúrgico: se requiere cuando la rehabilitación no cumple su función. Puede necesitarse
también en quienes tienen anomalías en el astrágalo vertical o en los medios de unión
articular, igualmente si el paciente presenta otras características adicionales relacionadas
con la estabilidad del pie.
Ortopédico: aplicado por un ortopedista o podólogo, quien indica el uso de determinadas
plantillas que obliguen al pie a modificar su posición hasta crear un arco en función de la
anatomía. Al algunos casos de pie valgo puede necesitarse el uso de zapatos especiales.
Causas
el pie varo postural por torsión tibial interna y anteversion femoral, se debe a la posición
intrauterina de las extremidades inferiores, que esta incluye aducción e inversión de
antepie e inversión del retropié, los límites de la dorsiflexion de, tobillo y pie son normal.
Tratamiento
Este tipo de deformidad, que con tanta frecuencia se remite a las consultas de ortopedia
pediátrica, no requiere ningún tipo de tratamiento (a veces ejercicios de estiramiento
pasivos) y sí un seguimiento durante los primeros años de vida. No obstante, ante
cualquier duda, se remitirá a los servicios especializados de ortopedia infantil.
Son tratados por un ortopedista pediátrico, en la mayoría de los casos tratamiento
quirúrgico.
Pie cavo: Es el pie que presenta un aumento anormal de la altura de la bóveda plantar en
el mediopié por flexión acentuada de los metatarsianos, La edad de presentación está
entre los 8-12 años, aunque en ocasiones está presente al nacer con el primer dedo en
garra. Raramente idiopático, la mayoría de las veces (80%) asociado a una causa
neurológica (ante todo, hay que buscar una lesión del cono medular que se acompaña, a
veces, de una enuresis nocturna, o de un nevó en la región lumbar).
Clínicamente existen trastornos en la marcha, con tensión permanente y contractura
dolorosa en la planta del pie, metatarsalgias y durezas en la zona de la cabeza de los
metatarsianos y con dificultades para el calzado por la garra de los dedos y la joroba del
dorso del pie.
Etiología
Según la etiología que sea, la alteración del pie cavo es distinta.
1. Alteraciones óseas
a. Malformaciones congénitas: poco frecuentes.
b. Secuelas traumáticas: por la excesiva corrección del traumatismo, no por la
intensidad del golpe.
c. Acciones mecánicas externas, como los vendajes en los pies y zapatos
estrechos a niñas chinas que aumentan el cavo y acortan el pie.
2. Alteraciones cápsulo-ligamentosas
a. Retracciones cutáneas.
b. Enfermedad de Ledderhose: equivalente a Dupuytren de la mano y el
Peyronie del pene, pero en el pie (las 3 enfermedades se asocian).
c. Artritis crónica juvenil.
3. Alteraciones neuromusculares
a. Enfermedades heredodegenerativas
b. Pie cavo esencial: se da en el atletismo, baloncesto, salto, ya que esta
deformación permite más flexibilidad al pie.
Exploración
Medición de desnivel entre punta y calcáneo: El pie cavo anterior se puede explorar
encajonando el pie con el paciente tumbado, se mide el desnivel entre la punta y el
calcáneo y así veo el grado de desnivelación.
Podoscopio.
Tratamiento
Es un pie mucho más quirúrgico que el plano, sobre todo los anteriores; las correcciones
pasan por cirugía casi siempre. Sus manifestaciones clínicas fundamentales son dolor
(más o menos intenso), deformidades y alteraciones de la marcha; en el pie plano infantil
el dolor es menor que en el pie cavo, y se altera mucho más la marcha y hay más
deformidades en este último que en el primero. Pero no todos los pies cavos hay que
operarlos, sino que en pies cavos poco molestos y poco pronunciados se puede optar por
la opción conservadora, pero para ello el zapato debe ser holgado (para evitar el roce lo
máximo posible), hay que hacer ejercicios de estiramiento...
El pie cavo se acompaña muchas veces de retracción de las partes blandas plantares, y
esto lo podemos corregir mediante la desinserción de la aponeurosis plantar (operación
de Steindler).
Cuando en el pie plano anterior la flexión del primer metatarsiano es muy marcada, se
puede desinsertar el extensor propio del dedo gordo y transferirlo a la cabeza del primer
metatarsiano (operación de Jones).
En pies cavos muy marcados se recurre a osteotomías (en función del tipo de cavo) o
artrodesis.
- Se realizan resecciones cuneiformes a nivel de tobillo en pie cavo posterior.
- Resecciones a nivel de la articulación de Lisfranc en pie cavo anterior.
Pie plano: Es un término genérico poco preciso que se utiliza para describir cualquier
cuadro del pie en el que la bóveda plantar es demasiado baja o está desaparecida,
creando un área de máximo contacto de la planta del pie con el suelo, el retropié presenta
una deformidad en valgo y el antepié se encuentra abducido.
Antepiése encuentra abducido la mayoría de los niños presenta un pie plano antes de los
3 o 4 años. Se considera que la bóveda plantar inicia su desarrollo a partir de los 4-6
años, en cuya formación influyen la pérdida de la grasa plantar, muy abundante en el pie
del niño.
Todo ello se desarrolla con el crecimiento. Como consecuencia de todo lo anteriormente
dicho, el pie plano no es una condición necesariamente patológica y, sin embargo, esta
deformidad es la causa de consulta más frecuente en la edad pediátrica.
Exploración
Debe hacerse con un podoscopio, para valorar el hundimiento de la bóveda. En el pie
normal la anchura de la parte central debe ser la mitad de la huella de la base de los
dedos.
También es muy útil el fotopodograma (sobre una placa velada, se apoya el pie
impregnado en líquido de revelado), donde puedo ver las huellas de la planta del pie y así
saber cuánto del mismo apoya. Es muy grave si se marca toda la planta, y aún más si los
bordes del pie están muy marcados (ver imágenes de abajo)
La radiografía lateral valora muy bien el grado de hundimiento al permitir calcular el
ángulo de Costa-Bartani.
Tratamiento
Nunca debe hacerse contención con botas rígidas que inmovilicen el tobillo. Lo
recomendable es usar un zapato flexible, de punta ancha (para que los dedos se puedan
mover) y talón rígido (corrige el valgo de talón). Como mucho, a veces hay que recurrir a
las plantillas (nunca antes de los 4 años), las cuales se deben confeccionar con moldes
de la bóveda del paciente.
Este contiene una seria de clasificación, son las siguientes:
Pies planos rígidos: aquellos que no son susceptibles de modificación pasiva.
Corresponden a alteraciones congénitas, como el astrágalo vertical congénito, o del
desarrollo, como las coaliciones tarsales.
Pies neurológicos: son los que se presentan secundariamente a desequilibrios
neuromusculares graves. Las causas suelen ser: la parálisis cerebral y la espina bífida.
En estos casos el plan terapéutico difiere entre procedimientos estabilizadores (cirugía) y
movilizaciones (rehabilitación). – Pies planos flexibles: son aquellos que presentan
recuperabilidad morfológica, tanto activa como pasivamente. Excepcionalmente
sintomáticos, constituyen la mayoría de los pies planos de los niños (90%). En este grupo
se incluyen los pies calcáneo valgos, los pies planos laxos y los pies planos con el tendón
de Aquiles corto.
Tratamiento:
No tiene tratamiento ortopedico, solo unas ortesis plantares de sostén, para que este no
evolucione más.
El pie calcáneo valgo es el precursor, según Giannestras15, del pie plano17. No es un
pie propiamente plano, ya que su aparición es en el recién nacido y en el lactante; por
tanto, en niños que no han iniciado la marcha. La tendencia habitual de su evolución es
hacia la corrección espontánea. En los casos en que la evolución no es favorable, deben
ser tratados mediante manipulaciones y aplicación de yesos correctores para conseguir la
flexión plantar y la eversión del pie.
Tratamiento:
Para este se usan unas ortesis plantares hasta alcanzar la madurez o unas ortesis dafo.
El pie plano laxo infantil es la forma más frecuente de presentación del pie en patología
infantil. La sintomatología dolorosa es excepcional. Suelen ser niños obesos, hiperlaxos,
habiéndose considerado que la debilidad muscular16 sería la responsable del pie plano,
pero estudios electromiográficos han desmentido esta aseveración; suelen acompañarse
de alteraciones torsionales y angulares de los miembros inferiores como genu valgo,
generalmente fisiológico.
El examen del pie hay que realizarlo en apoyo estático y durante la marcha, tanto de talón
como de puntillas, lo que nos proporcionará información sobre la rigidez, la deformidad y
la tensión del tendón de Aquiles.
Se han realizado estudios para poder evaluar los resultados comparativos de los diversos
tratamientos y ha sido manifiesta la ausencia de sintomatología en niños de países con
etnias que caminaban descalzos. Otros estudios comparativos, durante 3 años, de grupos
control con grupos de niños menores de 6 años tratados con plantillas de cazoleta, grupos
tratados con calzado y grupos tratados con plantillas de molde no han evidenciado
diferencias en los resultados finales entre ninguno de ellos. Todo ello confirma el criterio
de que las plantillas no corrigen un pie plano, pero sí pueden ayudar a equilibrarlo y evitar
que sean dolorosos.
En cuanto a calzados, se aconseja utilizar calzados flexibles, que sujeten retropié y que
permitan estimular el desarrollo muscular y la función dinámica del pie. Es necesario
insistir en la nula indicación de la cirugía de un pie plano estático asintomático.
Pie aducto/metatarso varo: Es una deformidad leve que afecta sólo a la parte anterior
del pie y que consiste en una desviación interna o medial de los metatarsianos y de los
dedos, con supinación leve o moderada del antepié, estando el talón en posición neutra o
moderada. valgo.
Pie zambo: El pie zambo no es una deformidad embrionaria, sino del desarrollo.
Constituye la deformidad más frecuente del pie, de fácil diagnóstico por el ortopeda
pediátrico experto, y su frecuencia es de 1 por cada mil nacidos vivos. La deformidad
tiene 4 componentes: equino, varo, cavo y adductus, asociados a una torsión tibial
interna. Las deformidades más graves de pie zambo se localizan a nivel del retropié.
La patogenia del pie zambo suscita gran controversia. Se han barajado diversas teorías
para su explicación: freno al desarrollo fetal (se habla de que la detención del desarrollo
fetal a partir del primer trimestre determina un pie zambo); factores hereditarios;
plasmáticos; mecánicos; de origen neurogénico, etc.
Una vez que se ha diagnosticado un pie zambo, y con la mayor brevedad posible, se
remitirá a un servicio de ortopedia pediátrica para su tratamiento inmediato, dependiendo
de la precocidad del mismo el éxito alcanzado. El tratamiento es el preconizado por el
profesor Ponseti mediante manipulaciones y yesos seriados, con una mínima cirugía del
tendón de Aquiles, una vez que se han corregido todos sus componentes, a excepción del
equino.
Causa
Los médicos aún no saben por qué ocurre, a pesar de que puede ocurrir en familias con
antecedentes de pie zambo. En realidad, la probabilidad de que su bebé tenga pie zambo
es el doble si usted, su cónyuge o sus otros niños también tienen pie zambo. Hay
problemas de pie menos graves en los recién nacidos, que a menudo se los llama
incorrectamente pie zambo.
Síntomas
El aspecto no deja dudas: el pie está girado hacia dentro e incluso puede parecer que la
parte superior del pie está en el lugar de la base.
El pie, la pantorrilla y la pierna afectados son más pequeños y más cortos que los del lado
normal.
No es una deformidad dolorosa. Pero si no se trata, el pie zambo llevará a una
incomodidad y discapacidad significativas cuando el niño llegue a la adolescencia.
Tratamiento
Tratamiento no quirúrgico
El tratamiento debe comenzar inmediatamente para tener la más alta probabilidad de un
desenlace exitoso sin necesidad de cirugía. Durante los últimos 10 a 15 años, se ha
logrado cada vez más éxito en la corrección del pie zambo sin necesidad de cirugía. Un
método específico de estiramiento y enyesado, que se conoce como el método de
Ponseti, ha sido responsable por el éxito. Con este método, el médico cambia el
enyesado cada semana durante varias semanas, siempre estirando el pie hacia la
posición correcta. El tendón de Aquiles entonces se libera, seguido de otro enyesado
durante tres semanas.
Una vez que el pie ha sido corregido, el niño debe usar un aparato ortopédico de noche
durante tres o cuatro años, para mantener la corrección. Esto ha sido sumamente efectivo
pero exige que los padres participen activamente en el cuidado diario con la aplicación del
aparato ortopédico. Sin la participación de los padres, el pie zambo casi con seguridad
recurrirá. Eso sucede porque los músculos alrededor del pie pueden volver a llevar hacia
la posición anormal.
El objetivo de esto, y de cualquier programa de tratamiento, es darle la funcionalidad al
pie zambo (o pies zambos) de su recién nacido, que no duela y esté estable para cuando
él o ella pueda caminar. (Nota: Cuando su bebé esta con el yeso, observe si hay cambios
en el color de la piel o en la temperatura, que podrían indicar problemas de circulación).
Tratamiento quirúrgico
En ocasiones, el estiramiento, enyesado y aparato ortopédico no son suficientes para
corregir el pie zambo de su bebé. Podría necesitarse cirugía para ajustar los tendones,
ligamentos y articulaciones en el pie y el tobillo. Por lo general la cirugía, que se hace
entre los 9 y los 12 meses de edad, corrige todas las deformaciones del pie zambo de su
bebé en el mismo momento. Después de la cirugía, un enyesado sostiene el pie zambo
mientras cicatriza. Todavía es posible que los músculos del pie de su bebé traten de
regresar a la posición de pie zambo, y probablemente el bebé deberá usar zapatos
especiales o aparatos ortopédicos durante un año o más, después de la cirugía. La
cirugía probablemente produzca un pie más rígido que el tratamiento no quirúrgico, en
especial con el paso de los años.
Sin tratamiento, el pie zambo de su niño derivará en una discapacidad funcional severa.
Con tratamiento, su niño debería tener un pie casi normal. Él o ella podría correr y jugar
sin sentir dolor, y usar zapatos normales. Con todo, el pie zambo corregido no será
perfecto. Las expectativas son que ese pie sea 1 talla ó 1 talla y 1/2 más pequeño y algo
menos móvil que el pie normal. Los músculos de la pantorrilla en la pierna con pie zambo
del niño también serán un poco más pequeños.
OTRAS MALFORMACIONES
Deformidades de columna
Escoliosis congénita.
Es una desviación lateral de la columna vertebral que se debe a malformaciones
congénitas de las vértebras y de los elementos de sostén adyacentes, enfermedad no
transmisible.
Las malformaciones o deformidades congénitas, por definición, son las debidas a un
defecto del desarrollo, y están presentes al ocurrir el nacimiento o pueden ser reconocidas
tardíamente, ellas varían desde severas malformaciones, que son incompatibles con la
vida, encontradas en un feto muerto, hasta con menores anomalías sin importancia
práctica, estás necesitan ser diagnosticadas precozmente por el médico integral para su
mejor tratamiento.
Causas
Los médicos no conocen las causas del tipo más frecuente de la escoliosis —aunque, al
parecer, supone factores hereditarios, debido a que este trastorno suele venir de familia
—. Los tipos menos frecuentes de escoliosis pueden ser a causa de:
Afecciones neuromusculares, como la parálisis cerebral infantil o la distrofia
muscular
Defectos de nacimiento que afectan la formación de los huesos de la columna
vertebral
Lesiones o infecciones de la columna vertebral
Clasificación
La clasificación de las anomalías en la escoliosis congénita es la siguiente:
Escoliosis neuromuscular: debido a alteraciones primarias neurológicas o
musculares, que causan pérdida de control del tronco por debilidad o parálisis.
Escoliosis congénita: causada por malformaciones vertebrales de nacimiento.
Escoliosis idiopática: constituyen más del 80% de todas las escoliosis y su causa
es desconocida. Según la edad en que es diagnosticada, se divide en tres tipos:
o Escoliosis idiopática infantil: desde el nacimiento hasta los 3 años de edad.
Displasia de cadera
Displasia del desarrollo de la cadera (DDC) es una dislocación de la articulación de la
cadera que está presente al nacer. Es una afección que se encuentra en bebés o niños
pequeños.
Causas
La cadera está conformada por una bola y un receptáculo articulatorio. La bola se
denomina cabeza femoral. Forma la parte superior del hueso del muslo (fémur). El
receptáculo (acetábulo) se forma en el hueso de la pelvis.
En algunos recién nacidos, el receptáculo está demasiado superficial y la bola (fémur)
puede salirse ya sea parcial o completamente. Una o ambas caderas pueden estar
comprometidas.
Tratamiento
El tratamiento de la displasia de cadera depende de la edad del paciente y del grado de
daño en la cadera. Los bebés generalmente se tratan con un dispositivo de inmovilización
blando, llamado arnés de Pavlik, que mantiene la parte de la cabeza de la articulación
firme en su cavidad durante varios meses. Esto ayuda a que la cavidad se amolde a la
forma de la cabeza.
QUEDO ATENTA