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”UNIVERSIDAD NACIONAL DE TUCUMAN”

FACULTAD DE ARTES
AÑO: 2019
CARRERA: LICENCIATURA EN TEATRO
CATEDRA: HISTORIA DE LAS ESTRUCTURAS TEATRALES III
PROFESORA: DIP, NERINA

ALUMNO: GALARZO. FRANCISCO ANTONIO

MONOGRAFIA: TEATRO DEL ABSURDO

Introducción:
En este trabajo monográfico, tratare de realizar un análisis tanto sobre el teatro del
absurdo según Martin Esslin, así como el capítulo número 3 de su libro: el teatro del
absurdo donde dedica varias páginas al dramaturgo y escritor franco-romano: Ionesco,
Eugene y su anti teatro. Son varios los cultivadores del teatro del absurdo con un
enfoque humorístico, experimental, pero más pesimistas. Ionesco con su índole
existencial y vanguardista, empleo la escena de la creación del sinsentido y el burlesco
para así conformar situaciones sobre la incomunicación entre los seres humanos.
Al margen de sus obras teatrales Ionesco escribió novelas, ensayos, y cuentos
infantiles, pero fueron sus obras cargadas de pesimismo y de críticas a como el ser
humano vive en este mundo, que fueron las más influyentes incluso al día de hoy para
una gran cantidad de pensadores y críticos teatrales, investigadores e incluso a actores
en pleno desarrollo de su formación académica, etc.
Martin Julius Esslin fue un productor y guionista británico, también fue crítico literario
y llevo una gran parte de su carrera a analizar el teatro del absurdo.
Esslin escribe: "Habiendo forjado la expresión de teatro del absurdo, nunca sé, cuando la
veo citada en un diario o en un libro, si debo serle fiel o taparme la cara de vergüenza;
porque lo que yo consideraba un concepto genérico, una hipótesis de trabajo, destinada a
comprender un gran número de fenómenos tan variados como difíciles de aprender, se
transformó para muchos -entre ellos los críticos teatrales- en una realidad tan concreta y
específica como un sello" (fuente: Wikipedia)

Así mismo, también añadiré a esta monografía un análisis de la obra el rinoceronte de


Eugene Ionesco al ser para mí una de sus obras más completas en simbolismos, el
conformismo, la sumisión ante el sistema, la incomunicación y el pesimismo del ser
humano, etc.

Teatro del absurdo


Martin Esslin

El llamado “teatro del absurdo” es una de las manifestaciones culturales más


notables de la postguerra, como fenómeno sintomático de una mentalidad en crisis
El teatro del absurdo, puntualiza el autor Martin Esslin, no constituye una escuela, no
se agrupa en torno a un manifiesto o cuerpo de doctrina pre establecido. Cada uno de
sus cultivadores parte casi cero y vive en completa peripecia existencial.
Cuatro son las figuras claves de la tendencia; Samuel Beckett, Arthur Adamov,
Eugene Ionesco, jean genet.
M. Esslin va trazando un breve cuadro de la literatura del absurdo en todos sus países
y todas las épocas.
El fenómeno teatral de que se va a ocupar (M.E) no concierne, pues solo a un
reducido círculo de intelectuales. Nos puede ofrecer un nuevo lenguaje, nuevas ideas,
nuevos caminos y una nueva y vital filosofía de pensar y sentir de un vasto publico
Además la comprensión de esta técnica teatral todavía para muchos oscura,
contribuiría a esclarecer tendencias actuales de pensamientos en otros campos, reflejo
de las transformaciones sufridas por l ciencia, la psicología y la filosofía, en el último
siglo
Lo que tienen en común, es que su trabajo refleja sensiblemente las preocupaciones y
las ansiedades, las emociones y el pensamiento de muchos de sus contemporáneos
del mundo occidental. El eje de esta actitud es su sentido de que las certidumbres y
supuestos fundamentales e inamovibles del pasado, han sido barridos, han sido
puestos a prueba y han resultado ineficaces por ser una especie de ilusiones
infantiles. Así como el decline de la religión fue enmascarado hasta el final de la
segunda guerra mundial por sustitutivos como el de la fe en el progreso.
En 1942 Albert Camus expuso, ya que la vida había perdido todo sentido y camus
trato de diagnosticar la situación del hombre de esa época con el mito de Sísifo.
“un mundo que pueda ser explicado por razonamientos aunque defectuosos, es
un mundo familiar. Pero en un universo que súbitamente se ve privado de
ilusiones y de luz, el hombre se siente como un extranjero. Es un exilio
irremediable, ya que está falto de los recuerdos de una patria perdida, así como
de la falsa esperanza de una tierra prometida que se aproxima. Este divorcio
entre el hombre y su vida, el actor y sus decorados, constituye ciertamente el
sentimiento del absurdo”
“absurdo” puede significar simplemente ridículo, pero no es este el sentido empleado
por camus, ni el que empleamos al hablar del teatro del absurdo.
En un ensayo sobre Kafka, Ionesco define lo que entiende por este término al decir:
“absurdo es lo desprovisto de propósito, separado de sus raíces religiosas,
metafísicas y trascendentales, el hombre está falto de sentido, absurdo, inútil”
La angustia metafísica originada por el absurdo de la condición humana, es en líneas
generales, el tema de las obras de Beckett, Ionesco, genet, Adamov
El teatro del absurdo tiende hacia una radical devaluación del lenguaje, busca una
poesía que ha de surgir de las imágenes concretas y objetivas del escenario. El
elemento lenguaje todavía juega un papel muy importante en su concepción, pero lo
que ocurre en la escena trasciende, y a menudo contradice, el dialogo. Por ejemplo en
las sillas obra de Eugene Ionesco. El poderoso contenido poético de la obra no se
apoya en la banalidad de los textos que recitan los actores, sino en el hecho de que va
dirigido a un número, cada vez mayor de sillas vacías.
De este modo el teatro del absurdo es parte del movimiento “antiteatro” de nuestro
tiempo que ha hallado su expresión en la pintura abstracta
París tiene un público receptivo y consciente, capaz y ávido de asimilar nuevas ideas,
así las primeras representaciones de alguna obra de teatro del absurdo no provocaron
demostraciones hostiles eran más las expresiones de una apasionada inquietud e
interés por parte de los espectadores.
Estas obras extrañas y enigmáticas, tan claramente desprovistas de las tradicionales
atracciones del drama “bien hecho” habían de alcanzar, en menos de una década, los
escenarios de todo el mundo, desde Finlandia hasta Japón, desde noruega a
argentina, etc. Estimulaban una gran cantidad de trabajos con idénticos supuestos
escénicos, lo cual representa una prueba contundente y empírica de la importancia del
teatro del absurdo.
El estudio de este fenómeno desde el punto de vista literario, como técnica teatral y
manifestación del pensamiento de una época, debe emprenderse a partir del estudio
de sus obras. Solo entonces puede ser comprendida como parte de una vieja tradición
que a veces sumergida, puede recorrerse hasta la antigüedad. Una vez que este
movimiento literario actual haya sido encajado dentro del contexto histórico, se podrá
intentar una determinación de su significado y establecer la importancia que le
corresponde dentro de la estructura del pensamiento contemporáneo.

Capítulo tercero: Eugene Ionesco


Teatro y anti-teatro
Para los que no lo saben Ionesco, Eugene nació en Slatina, Rumania, el 26 de
noviembre de 1912. Poco después de su nacimiento su familia y el viajaron para parís,
así el francés fue su primera lengua.
Tiempo después volverían a Rumania y Ionesco comenzó sus estudios hasta lograr
ser estudiante de francés en la universidad de Bucarest. Escribió sus primeros poemas
y elegías, influenciado por maeterlinck y Francis jammes. También intento la crítica
literaria.
Pese a lo oscuro y enigmático que pueda parecer en sus obras, ha demostrado ser un
formidable polemista, muy persuasivo, cuando se le ataca, como hizo en una
entrevista con el crítico teatral Kenneth tynan. El criticaba a Ionesco diciendo que
Ionesco es un enemigo del realismo teatral. Explícitamente anti realista y en
consecuencia contra la realidad. “Un escritor dispuesto a declarar que las palabras,
estaban desprovistas de significado, y que toda comunicación entre los seres
humanos es imposible” tynan concedía que Ionesco nos daba una visión personal
valida, pero que el peligro surge en el momento en que se le considera como un
camino general a seguir, como puerta de entrada al teatro del futuro, un mundo nuevo,
desierto, del cual serán borradas las herejías humanas de la fe en la lógica y en el
hombre. Ionesco se iba apartando del realismo de los personajes con raíces en la
vida, de obras como lo de Chejov, Arthur Miller, Tennessee Williams, Brecht, sastre,
etc.
Ionesco replico que no se consideraba un mesías porque personalmente no le
gustaban los mesías y porque no consideraba que la vocación del artista o del escritor
de teatro vaya por esa dirección.
Ionesco protesto contra las acusaciones de ser deliberadamente anti realista y de
mantener la improbabilidad de comunicación a través del lenguaje.
“yo sostengo simplemente, que es difícil hacerse entender, pero no
absolutamente imposible” E. Ionesco
Ionesco manifestó su convicción de que la misma sociedad era una de las barreras
existentes entre los humanos, y que la auténtica comunidad humana es más amplia
que la sociedad. “ninguna sociedad ha sido capaz de abatir la tristeza humana,
ningún sistema político puede liberarnos del dolor de vivir, del temor a la
muerte, de la sed, es la condición humana lo que configura la condición social,
no viceversa”
De aquí la necesidad de romper con el lenguaje de la sociedad, del cual “no es más
que clichés, formulas vacías y slogans”.
“Por esta razón las ideologías deben ser continuamente revisadas, y su
fosilizado lenguaje, arrancado implacablemente a fin de encontrar debajo la
savia viva”
El ataque de Ionesco a las formas fosilizadas del lenguaje, que es en sí un intento de
revitalizar formas muertas, estas tan profundamente relacionadas con la realidad
objetiva como cualquier realismo social.” Renovar el lenguaje es renovar la
concepción, la visión del mundo. Una revolución consiste en llevar a cabo un
cambio de actitudes mentales”
Toda expresión artística genuina, al ser un intento de decir cosas nuevas en formas
nuevas, no puede, por definición, servir meramente para re exponer ideologías ya
existentes.
A Ionesco no le disgustaba la actuación en el cine. Pero en el teatro era la presencia
en escena de gente de carne y hueso lo que le estorbaba. Su presencia material
destruía la ficción. Decía que esto se encontraba en dos planos de la realidad
enfrentados: la realidad concreta, material, empobrecida y limitada, realidad de esta
vida, representado por seres de carne y hueso moviéndose.
Y la realidad de la imaginación, donde Ionesco intentaba exteriorizar la ansiedad de
sus personajes a través de objetos, hacer hablar a los decorados, traducir la acción en
términos visuales, proyectar imágenes visibles del miedo, la pena, el remordimiento, la
alineación, jugar con las palabras.
Las dos caras, sin coincidir, incapaces de ponerse en relación una con otra, dos
mundos antagónicos incapaces de fundirse, de unificarse.
La cantante calva fue su primera obra y fue estrenada el 11 de mayo 1950.
El 20 de febrero de 1951 fue estrenada su segunda obra la lección
22 de abril de 1952 se estrenaba las sillas
Y el 28 de abril de 1960 El rinoceronte: se ha dicho que el rinoceronte representa los
sentimientos de Ionesco cuando en 1938 tuvo que abandonar Rumania, viendo como
la mayor parte de sus conocidos se adherían progresivamente al fascismo de la
guardia de hierro. Según ha dicho el mismo “como de costumbre volví a mis
obsesiones. Recordaba cómo durante toda mi vida me he sentido muy afectado
por lo que podríamos llamar la corriente de opiniones, su rápida evolución, su
poder contagioso, como el de una auténtica epidemia. La gente se deja invadir
por una nueva religión, una doctrina, un fanatismo, en esos momentos somos
testigos de una terrible mutación humana”. La rinoceritis no es únicamente una
enfermedad de regímenes totalitarios de derecha e izquierda, es también la atracción
del conformismo. Después de diez años como dramaturgo, Ionesco ha triunfado.

EL RINOCERONTE: EL FANATISMO DE LA SOCIEDAD


Eugene Ionesco escribió Rinoceronte después de la Segunda Guerra Mundial a fines
de los años 50. Rinoceronte parte de una experiencia vivida y personal del
dramaturgo, porque Ionesco fue testigo del asentamiento del fascismo en Rumania y
él vio como su padre se transformaba en fascista, entonces la obra trata el tema de la
transformación y el autor toda su vida sufrió al ver estas transformaciones, como el
hombre podía transformarse en un ser terrible, como si de una epidemia se tratara, un
efecto de contagio que consistente en la transformación de las personas. Por lo tanto
se plantea cuestionamientos sobre el tema de la humanidad y por ello eligió el
rinoceronte como animal, porque es un animal arcaico. La obra denuncia la
uniformidad de la normalización, cosa que podemos ver hoy en democracias estables.
Esta obra es un llamado para cada individuo. El cambio súbito que sufrieron muchos
amigos suyos y cómo la comunicación entre ellos se volvió imposible. Aquí el fascismo
Ionesco lo transforma en una enfermedad, que convierte a todas las personas en
rinocerontes, y poco a poco invade a todo un pueblo. Así Berenger, el protagonista, ve
como todos sus colegas, amigos, e incluso su amada, se convierten en rinocerontes.
Esta obra es muy importante en el siglo XX, trata el tema de la contaminación
intelectual y a la vez sobre el lenguaje, y cómo a través del lenguaje es que uno
comienza a repetir y decir cosas que hemos escuchado sin reflexionar. La obra
termina con Berenger monologando porque es el único que se resiste a la
transformación. Pero al mismo tiempo dice “me gustaría ser como ellos, pero no
puedo, no voy a renunciar…voy a resistir”. Eso quiere decir que existe la
fascinación, la atracción y la tentación de ser como los demás, pero la obra nos habla
de la resistencia individual y de la responsabilidad individual y no solamente colectiva.
Ionesco define el concepto de la resistencia individual en El Personalismo que es una
corriente filosófica que existe en Francia desde los años 50, el personalismo es distinto
al individualismo, que muchas veces se relaciona con el egoísmo y la incapacidad
para entender al mundo y a los demás. El personalismo es una corriente filosófica que
defiende la idea de que cada individuo debe encontrar su propio camino y conquistar
su propia vida. Ionesco por su autobiografía y su sufrimiento, fue muy sensible a esta
corriente filosófica que defiende el camino personal, Ionesco por esencia desconfiaba
de todo movimiento colectivo, masivo, tuvo miedo de la masificación, y a través de la
poesía y la literatura él busca su camino, busca la conquista de la libertad.
Sin duda lo interesante del Rinoceronte es que el personaje que va a resistir, el que no
se va a transformar, no es el personaje fuerte, no es un hombre fuerte, al contrario, es
una persona que tiene dudas, que habla de su angustia en la vida, que acepta que la
vida puede ser algo angustiante. Habla de la relación con la muerte, de la
temporalidad de la vida, de sus límites, de un tiempo contado. Lo interesante es ver
cómo este hombre angustiado por la existencia, acepta esa angustia y resiste a la
masificación. El personaje apunta a que siempre hay que tener la capacidad de
resistir, de abordarlo con rebeldía.
“Rinoceronte”, constituye una obra importante en la carrera de Ionesco hacia el éxito.
Como vamos a ver, esta pieza representa también un cambio en su obra. Y para
entenderlo mejor, es preciso volver hacia atrás y examinar rápidamente las ideas de
Ionesco sobre el teatro.
Desde sus dos primeras obras “La cantante calva” y “La lección”, las más sencillas en
apariencia y en las que quiere divertirse más, Ionesco, toma la crítica del lenguaje,
denunciando la mecánica profunda de las palabras. Recurriendo a algunos términos
vacíos en su sustancia y transformando automáticamente. Los personajes no son más
que marionetas, y su dialogo se asemeja a un diálogo de sordos o de locos. El
profesor de “La lección” anuncia ya la lógica de “Rinocerontes” enseñando a su
alumno algunas fórmulas falsas y extravagantes que condenan una cultura vana e
intransmisible.
En su segunda fase, ya esclavos de palabras estereotipadas en las que se advierten
más que las contradicciones, los hombres quieren llegar a ser prisioneros de los
objetos que acaban por paralizar la poca conciencia que les quedaba.
BERENGER: (personaje principal)
Lo que hay de curioso es que Berenger era, al principio, el menos protegido de todos
los personajes que nos presenta Ionesco en la obra.
Desde el principio, constatamos que Berenger es bastante blando y pasa la vida un
poco como sonámbulo, su aspecto es continuamente el de un hombre cansado, su
manera de vestir es descuidada, sus facciones son cansadas y bebe más de lo
necesario; sin duda lo hace para darse ánimo y fuerza de voluntad, demasiado tímido
para declararle su amor a Daisy, y parece mucho más asustado por la aparición de
Daisy en la cafetería que por la del rinoceronte en la ciudad. Su indiferencia a esta
consideración es incluso bastante sorprendente, pero Ionesco, hace evolucionar a este
personaje.
Berenger tiene, más cualidades de alguien normal. No ha estudiado, pero tiene el
deseo ingenuo de instruirse. Le falta profundidad en su hablar, tiene corazón y sobre
todo un buen sentido y la justa medida para hablar. No es más que cuando la
mutación está realizada y Jean (su amigo) que se ha convertido en un rinoceronte, en
ese momento Berenger comprende el peligro, pero no hace más que aumentar su
impaciencia. Es entonces que vemos al personaje evolucionar.

CONCLUSIONES:
Desde mi punto de vista, la obra está enfocada a plantearnos una serie de cuestiones,
las situaciones que se viven en la obra ocurre también en nuestra sociedad, aunque
de una manera menos burlesca; e incluso creo, que la obra, partiendo de lo cómico
nos quiere enseñar que la situación es más trágica de lo que parece
Para concluir este trabajo, quiero dejar asentado mi gran entusiasmo al poder tratar de
desmenuzar lo más comprensiblemente el universo del teatro del absurdo y un poco la
vida y obra de este gran dramaturgo que fue Eugene Ionesco y que tanto aporto con
su nuevas ideas, sentires y pensares del teatro, a las diferentes salas y teatros de
todos el mundo.

BIBLIOGRAFIA:
Theatre of the Absurd (de 1961 teatro del absurdo) Martin Julius Esslin

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