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ACTIVIDAD I DE LA UNIDAD I

PRESENTADO POR:
BLADIMIR MONTIEL MONTIEL
C.C. 83.091.206
NORMA CONSTANZA HUEJE MONTELEGRE
C.C. 36.347.613

EVALUACION DE PROYECTOS DESARROLLO HUMANO

TUTOR: ERNESTINA SUAREZ ARCHILA

XII CUATRIMESTRE

UNIVERSIDAD METROPOLITANA DE EDUCACION CIENCIA Y TECNOLOGIA


« UMECIT» PROGRAMA DE EDUCACION A DISTANCIA Y VIRTUAL
2018
1. Estas son algunas de lo más relevante de este capítulo, que lleva por título
“Desarrollo humano para todas las personas”, publicado por el Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Lograr el desarrollo humano para todas las personas no es un sueño sino un objetivo
realizable, en opinión de los expertos del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD) que han elaborado el informe correspondiente a 2016, presentado
hace unos días en Madrid y en otras capitales, titulado “Desarrollo humano para todos”.

En 2015 el mundo había superado algunos desafíos que parecían muy difíciles hace 25
años: más de 1.000 millones de personas salieron de la pobreza extrema, 2.100 millones
obtuvieron acceso a saneamiento mejorado y más de 2.600 millones tuvieron acceso a
una fuente mejorada de agua potable. Sin embargo, las carencias básicas siguen siendo
enormes para amplios sectores de población: una de cada nueve personas en el mundo
padece hambre y una de cada tres, malnutrición; anualmente alrededor de 15 millones de
niñas se casan antes de los 18 años; el VIH infecta a 2 millones de personas al año; y  hoy
son ya 65 millones de personas las que se ven desplazadas forzosamente de sus
hogares enfrentando condiciones extremas y siendo, a menudo, acosados y violentados
en los países de acogida.

Hablar de desarrollo humano implica crear capacidades humanas y mecanismos de


participación activa para que las personas puedan mejorar sus vidas. En este contexto, el
crecimiento económico es un medio importante para el logro del desarrollo humano, pero
no es el único, ni tampoco el fin último.

Según destaca Helen Clark, administradora del PNUD, en los últimos 25 años se ha


avanzado mucho en la reducción de la pobreza extrema, en el acceso a la educación, a la
salud, al saneamiento y se han ampliado las oportunidades para las mujeres, pero
advierte que tales avances deben llegar a todas las personas. Debemos preguntarnos
¿quién se ha quedado atrás? y ¿cómo y por qué ha sucedido? Se han quedado atrás las
personas pobres, las marginadas, los grupos vulnerables como las minorías étnicas, los
pueblos indígenas, los refugiados, los migrantes, las personas con discapacidad-, sin
olvidar a las mujeres y a las niñas. Muchos grupos de personas son excluidas
sistemáticamente debido a obstáculos políticos, económicos, sociales y culturales, 
profundamente arraigados en leyes discriminatorias, normas sociales excluyentes, en la
falta de participación política o la carencia de oportunidades.

Asimismo, muchas personas se quedan atrás porque el 1% de la población mundial posee


el 46% de la riqueza, según cálculos de la oficina del PNUD (2016). “Las desigualdades
de ingresos – se señala en el informe- influyen en las desigualdades en otras dimensiones
del bienestar y viceversa”. Los datos relativos a la desigualdad actual suponen
importantes trabas para las personas excluidas, dejándolas en una posición muy débil
para actuar frente a las instituciones y participar en la toma de decisiones. Sus voces no
se oyen. Para superar las trabas, es necesario tomar en consideración el pilar
fundamental del desarrollo que es, ni más ni menos, el reconocimiento universal y efectivo
de los derechos humanos a todas las personas para que nadie se quede atrás.
A fin de lograr el desarrollo humano, el informe insta a los países a que establezcan cuatro
ejes de actuación en sus políticas nacionales: políticas universales para llegar a los
excluidos, combinadas con medidas específicas para atender a la población con
necesidades especiales; que estas medidas sean resilientes para que el desarrollo
humano se mantenga pese a los vaivenes y, por último, medidas que impulsen el
empoderamiento de las personas para que puedan defender sus derechos y necesidades
en caso de que las políticas públicas fallen. En un mundo globalizado, las políticas
nacionales para el desarrollo humano universal deben complementarse y acompañarse
con un sistema mundial que sea equitativo y enriquezca el desarrollo humano.

El desarrollo humano entraña una ampliación de las posibilidades, que determinan


quiénes somos y lo que hacemos. Estas posibilidades se basan en varios factores: la gran
variedad de opciones entre las que podemos escoger (nuestras capacidades); las
limitaciones sociales y cognitivas y las normas e influencias sociales que determinan
nuestros valores y posibilidades; nuestro propio empoderamiento y la agencia (o
capacidad para actuar) que ejercemos de forma individual y como parte de grupos para
definir nuestras opciones y oportunidades; y los mecanismos que existen para resolver
pretensiones contrapuestas de una forma justa y conducente al desarrollo del potencial
humano. El enfoque de desarrollo humano ofrece una forma sistemática de articular estas
ideas. Puede ser un instrumento especialmente potente para arrojar luz sobre la
interacción entre los factores que pueden actuar en detrimento de personas y grupos en
diferentes contextos. Los derechos humanos son el pilar fundamental del desarrollo
humano y ofrecen perspectivas útiles para su análisis. Las personas y entidades
responsables en esta materia apoyan y potencian el desarrollo humano y deben rendir
cuentas del fracaso de un sistema social que no logra generar dicho desarrollo. Estas
perspectivas no solo van más allá de las pretensiones mínimas del desarrollo humano,
sino que pueden ser también una poderosa herramienta para obtener reparación. El
concepto de seguridad humana debería hacer hincapié en un profundo entendimiento de
las amenazas, los riesgos y las crisis para la acción conjunta en los enfoques de
desarrollo humano y seguridad humana. Las dificultades residen en equilibrar una
respuesta a las amenazas mundiales que se dé como reacción a las convulsiones y el
fomento de una cultura de prevención. La voz y la autonomía, como parte de la libertad de
agencia y la libertad de bienestar personal, son elementos indisociables del desarrollo
humano. La capacidad de deliberar, participar en debates públicos y ser agentes en la
configuración de la vida y el entorno propios es fundamental para que el desarrollo
humano llegue a todo el mundo. El enfoque de desarrollo humano se ha centrado
principalmente en la libertad de bienestar personal. Sin embargo, a medida que el
bienestar se ha hecho efectivo, ha cobrado más importancia la necesidad de hacer
hincapié en la libertad de agencia. El desarrollo humano consiste en promover no solo las
libertades de las personas, sino también las libertades de los grupos o colectivos. En el
caso de las personas en situación de mayor marginación y necesidad, la agencia colectiva
(o capacidad colectiva para actuar) puede ser mucho más poderosa que la individual. Es
improbable que una persona logre mucho por sí sola, y el poder solo puede ejercerse
mediante la acción colectiva. La identidad influye en la agencia y la autonomía. Las
personas tienen la libertad de escoger sus identidades, una libertad importante que debe
reconocerse, valorarse y defenderse. Merecen tener opciones para elegir entre diferentes
identidades que consideren valiosas. El reconocimiento y el respeto de estas opciones
son condiciones previas para la coexistencia pacífica en sociedades multiétnicas y
multiculturales. Hay tres cuestiones identitarias que tienen repercusiones en el desarrollo
humano universal. En primer lugar, el espacio para identidades múltiples es más limitado
en el caso de las personas en situación de marginación, y puede que esas personas
carezcan de la libertad para escoger la identidad que valoran. En segundo lugar, la
insistencia en una identidad única e irrefutable y la negación del razonamiento y la
elección a la hora de seleccionar identidades pueden generar extremismo y violencia y,
por tanto, plantear una amenaza para el desarrollo humano. En tercer lugar, los grupos de
identidad compiten por recursos y poderes económicos y políticos limitados, y las
personas en situación de necesidad y marginación salen perdiendo. En la mayoría de los
casos, los valores y las normas de la sociedad van en contra de los más desfavorecidos,
y, con frecuencia, las preferencias se forman sobre la base de tradiciones sociales de
privilegio y subordinación. Sin embargo, cambiar los valores y las normas puede
transformar este sesgo contrario a las personas desfavorecidas. Las libertades son
interdependientes, y en algunos casos dicha interdependencia constituye un elemento de
refuerzo. Por ejemplo, un trabajador o trabajadora que ejerce la libertad de armonizar el
lugar de trabajo con el medio ambiente puede contribuir a la libertad de los compañeros
de tener aire limpio. Sin embargo, la libertad de uno también puede menoscabar la libertad
de los demás. Una persona rica tiene la libertad de construir una casa de varios pisos,
pero esto tal vez prive a un vecino pobre de la luz del sol y de un entorno espacioso. La
igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres son dimensiones fundamentales
del desarrollo humano. Puesto que la mitad de la humanidad no disfruta de los progresos
realizados en materia de desarrollo humano, este desarrollo no es universal. La inversión
en las niñas y las mujeres comporta beneficios multidimensionales; por ejemplo, si todas
las niñas de los países en desarrollo terminasen la educación secundaria, la tasa de
mortalidad de menores de 5 años se reduciría a la mitad. Las mujeres también necesitan
apoyo para realizar estudios superiores, especialmente en ciencias, tecnología, ingeniería
y matemáticas, donde estará una gran parte de la futura demanda de trabajo de alto nivel.
Pese a la gran diversidad de identidades y necesidades, los grupos marginados, como las
minorías étnicas, los pueblos indígenas, las personas con discapacidad, las personas que
viven con el VIH/SIDA y las personas lesbianas, gais, bisexuales, transgénero e
intersexuales, a menudo se enfrentan a limitaciones similares, como la discriminación, el
estigma social y el riesgo de sufrir daños. Sin embargo, cada grupo tiene también
necesidades especiales que hay que satisfacer para poderse beneficiar de los progresos
en materia de desarrollo humano. En el caso de algunos grupos vulnerables, como las
minorías étnicas y las personas con discapacidad, la no discriminación y otros derechos
están garantizados en las constituciones y otros instrumentos jurídicos. Del mismo modo,
a menudo existen disposiciones especiales que protegen a los pueblos indígenas, como
en Canadá y Nueva Zelandia39. Sin embargo, en muchos casos faltan mecanismos
eficaces de ejecución y plena igualdad ante la ley. Las comisiones nacionales de derechos
humanos o las comisiones para grupos específicos pueden supervisar y garantizar que no
se vulneren los derechos de estos grupos. Además, la superación de la discriminación y el
maltrato de miembros de la comunidad de personas lesbianas, gais, bisexuales,
transgénero e intersexuales requiere un marco jurídico que permita defender sus derechos
humanos. Debe garantizarse la participación de los grupos desfavorecidos en los
procesos que determinan las vidas de sus miembros. Por ejemplo, las cuotas para
minorías étnicas y la representación de los pueblos indígenas en los parlamentos son
formas de ayudarlos a poner de manifiesto sus problemas. Algunos pueblos indígenas
disponen de sus propios parlamentos y consejos, que son órganos consultivos. Nueva
Zelandia tiene la historia más larga de representación indígena en una cámara legislativa
nacional40. En cuanto a las personas con discapacidad, su inclusión y su cabida son
esenciales para empoderarlas a fin de que vivan de manera independiente, encuentren
trabajo y contribuyan a la sociedad. Deberían llevarse a cabo iniciativas específicas de
formación profesional para desarrollar sus cualificaciones. El aumento del acceso a los
recursos productivos, como la financiación para trabajar por cuenta propia, y el suministro
de información a través de dispositivos móviles pueden ayudarlas en el autoempleo. La
implantación de infraestructuras adecuadas, como la tecnología, puede dotarlas de una
mayor movilidad. Los migrantes y los refugiados son vulnerables en los países de
acogida, y se necesitan medidas nacionales para dar respuesta a la nueva naturaleza de
la migración y su evolución. Los países deben aprobar leyes que protejan a los refugiados,
especialmente a las mujeres y los niños, que constituyen una gran parte de la población
de refugiados y son las principales víctimas. Los países de tránsito y destino han de
ofrecer bienes públicos esenciales para atender a las personas desplazadas, como, por
ejemplo, la escolarización de los menores refugiados. Asimismo, es necesario que los
países de destino formulen políticas y disposiciones de trabajo temporal para los
refugiados.
El desarrollo humano para todos requiere instituciones nacionales de derechos humanos
sólidas con la capacidad, el mandato y la voluntad de hacer frente a la discriminación y de
garantizar la protección de los derechos humanos. Las comisiones de derechos humanos
y los ombudsman o defensores del pueblo se ocupan de las denuncias relacionadas con
los abusos de derechos, educan a la sociedad civil y los Estados sobre los derechos
humanos y recomiendan reformas jurídicas. Sin embargo, nos encontramos con que la
determinación de los Estados de defender estos derechos varía, las instituciones
nacionales tienen distintas capacidades de ejecución, y a veces faltan mecanismos de
rendición de cuentas. Al margen de las deficiencias institucionales, tratar el desarrollo
como un derecho humano ha sido fundamental para reducir las carencias en algunas
dimensiones y contextos. Los derechos humanos no pueden hacerse efectivos a nivel
universal sin unos mecanismos internos bien establecidos y una acción internacional más
firme.
Para que el desarrollo humano llegue a las personas en situación de exclusión, el fomento
de las capacidades debe enfocarse desde la perspectiva del ciclo de vida, puesto que las
personas se enfrentan a diversos tipos de vulnerabilidades en las distintas fases de sus
vidas. Las probabilidades de un desarrollo humano sostenido aumentan cuando todos los
niños y niñas tienen la posibilidad de adquirir las cualificaciones adecuadas para
aprovechar las oportunidades que se ofrecen a la juventud al incorporarse al mundo
laboral. Gran parte de la atención se centra, correctamente, en lo que se necesita para
que todos los niños y niñas, se encuentren donde se encuentren, terminen un ciclo
completo de escolarización, incluida la etapa preescolar. El Banco Mundial considera que
por cada dólar gastado en educación preescolar se generan entre 6 y 17 dólares de
beneficios públicos, en forma de una mano de obra más saludable y productiva. Ghana
cuenta actualmente con dos años de educación preescolar en el sistema educativo. China
está contemplando la posibilidad de implantar centros preescolares para todos los niños y
niñas
La igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres son dimensiones
fundamentales del desarrollo humano. Existen diferencias entre los géneros en las
capacidades y las oportunidades, y los avances siguen siendo demasiado lentos para
desarrollar todo el potencial de la mitad de la humanidad. En una reunión histórica
celebrada en Nueva York en septiembre de 2015, cerca de 80 líderes mundiales se
comprometieron a poner fin a la discriminación contra las mujeres de aquí al año  2030 y
anunciaron medidas concretas y cuantificables para poner en marcha inmediatamente
procesos de cambio en sus países50. Ha llegado el momento de actuar respecto a lo
prometido y acordado.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible, fundamentales por derecho propio, también son
cruciales en lo que respecta al desarrollo humano para todos; la Agenda  2030 y el
enfoque de desarrollo humano se refuerzan mutuamente. Además, la consecución de los
Objetivos de Desarrollo Sostenible es un paso importante para que todos los seres
humanos desarrollen al máximo su potencial en la vida. El histórico Acuerdo de París
sobre el cambio climático es el primero que tiene en cuenta tanto a los países
desarrollados como a los países en desarrollo en un marco común, y los exhorta a trabajar
con el máximo empeño y reforzar sus compromisos en los próximos años. En la Cumbre
de las Naciones Unidas sobre los Refugiados, celebrada en septiembre de 2016, se
asumieron compromisos audaces para hacer frente a los problemas que sufren los
refugiados y los migrantes y para prepararse ante los futuros desafíos. La comunidad
internacional, los gobiernos nacionales y todas las demás partes deben velar por el
cumplimiento, la aplicación y el seguimiento de los acuerdos.

2. Qué se podría hacer en Colombia o en su región para mejorar lo expuesto en


este capítulo, a través de PROYECTOS DE DESARROLLO HUMANO que busquen
el mejoramiento de la calidad de vida y en consecuencia lograr el desarrollo
social, económico, cultural, etc.

Hace 15 años, en el año 2000, 189 países miembros de la Organización de las Naciones
Unidas se comprometieron a cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), que
fueron la plataforma que ha permitido que los diferentes países alrededor del mundo se
comprometieran en el logro de ocho desafíos, considerados el primer escalón del
desarrollo humano. Según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo
(PNUD), el desarrollo humano, es aquel que sitúa a las personas en el centro del
desarrollo, trata de la promoción del desarrollo potencial de las personas, del aumento de
sus posibilidades y del disfrute de la libertad para vivir la vida que valoran. En la
Declaración del Milenio se recogieron entonces ocho objetivos referentes a la erradicación
de la pobreza, alcanzar la educación primaria universal, la igualdad entre los géneros, la
reducción de la mortalidad infantil y materna, combatir el avance del VIH/sida y el sustento
del medio ambiente, y en respuesta de aquellos que demandaban un cambio hacia
posturas más sociales de los mercados mundiales y organizaciones financieras se añadió
el Objetivo 8, Fomentar una Asociación Mundial para el Desarrollo. Cada Objetivo se
dividió en una serie de metas, un total de 18, cuantificables mediante 58 indicadores
concretos. Y por primera vez, la agenda internacional del desarrollo puso una fecha para
la consecución de acuerdos concretos y medibles, el año 2015.

Los títulos de los ocho objetivos, con sus metas específicas, eran:

Objetivo 1: Erradicar la pobreza extrema y el hambre. Reducir a la mitad, entre 1990 y


2015, la proporción de personas que sufren hambre. Reducir a la mitad, entre 1990 y
2015, la proporción de personas cuyos ingresos son inferiores a un dólar diario. Conseguir
pleno empleo productivo y trabajo digno para todos, incluyendo mujeres y jóvenes,
además rechazando rotundamente el trabajo infantil.

Objetivo 2: Lograr la enseñanza primaria universal. Asegurar que en 2015, la infancia de


cualquier parte, niños y niñas por igual, sean capaces de completar un ciclo completo de
enseñanza primaria.

Objetivo 3: Promover la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer. Eliminar


las desigualdades entre los géneros en la enseñanza primaria y secundaria,
preferiblemente para el año 2005, y en todos los niveles de la enseñanza antes de finales
de 2015.

Objetivo 4: Reducir la mortalidad infantil. Reducir en dos terceras partes, entre 1990 y
2015, la mortalidad de niños menores de cinco años.

Objetivo 5: Mejorar la salud materna. Reducir en tres cuartas partes, entre 1990 y 2015, la
mortalidad materna. Lograr el acceso universal a la salud reproductiva.

Objetivo 6: Combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades. Haber detenido y


comenzado a reducir la propagación del VIH/ SIDA en 2015. Haber detenido y comenzado
a reducir, en 2015, la incidencia de la malaria y otras enfermedades graves.

Objetivo 7: Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente. Incorporar los principios del
desarrollo sostenible en las políticas y los programas nacionales y reducir la pérdida de
recursos del medio ambiente. Haber reducido y haber ralentizado considerablemente la
pérdida de diversidad biológica en 2010. Reducir a la mitad, para 2015, la proporción de
personas sin acceso sostenible al agua potable y a servicios básicos de saneamiento.
Haber mejorado considerablemente, en 2020, la vida de al menos 100 millones de
habitantes de barrios marginales.

Objetivo 8: Fomentar una asociación mundial para el desarrollo. Desarrollar aún más un
sistema comercial y financiero abierto, basado en normas, previsible y no discriminatorio.
Atender las necesidades especiales de los países menos adelantados.
Atender las necesidades especiales de los países en desarrollo sin litoral y los pequeños
Estados insulares.

Encarar de manera integral los problemas de la deuda de los países en desarrollo con
medidas nacionales e internacionales para que la deuda sea sostenible a largo plazo. En
cooperación con las empresas farmacéuticas, proporcionar acceso a los medicamentos
esenciales en los países en desarrollo a precios accesibles.

En cooperación con el sector privado, dar acceso a los beneficios de las nuevas
tecnologías, especialmente las de información y las comunicaciones. En este sentido se
logró poner en la agenda de lo público que el bienestar de las poblaciones necesita
esfuerzos articulados desde todos los sectores de la sociedad: academia, sector privado,
gobiernos y la misma cooperación internacional. Colombia se acogió a este compromiso
de desarrollo global a través de los CONPES (Consejo de Política Económica y Social) 91
y 140, y de esta manera se convirtió en Política Pública Nacional este ideal de sociedad,
lo que en términos legislativos posibilitó una oportunidad única para garantizar que cada
ciudadano/a colombiano/a tuviese acceso a bienes y servicios básicos.

De igual manera, el Sistema de las Naciones Unidas emprendió acciones para apoyar al
Gobierno Nacional en el logro de estos Objetivos y priorizó territorios en contextos de
vulnerabilidad, definidos a partir de desigualdades en términos sociales y económicos o
contextos de conflicto armado interno.

Sin embargo, y a pesar de todos los esfuerzos que se han realizado, estos territorios aún
cuentan con cifras muy preocupantes. Por ejemplo, tasas de pobreza por encima del 50%
como Chocó, Cauca y la Guajira (son mayoritariamente poblados por minorías indígenas y
afrodescendientes) mientras otros tienen tasas de 10% como Bogotá.

De mantenerse la tendencia de los últimos años, 13 de los 24 departamentos donde hay


medición de la pobreza por ingresos, no alcanzarán la meta de 28.5% en 2015. De igual
manera y no menos preocupante son las diferencias urbano-rurales, donde se siguen
presentando resultados desiguales. Dos claras muestras son los resultados en pobreza,
donde actualmente, 1 de cada 2 colombianos/ as que habita en zonas rurales es pobre,
mientras que 1 de cada 4 que habita en zonas urbanas es pobre; y un segundo ejemplo
es la mortalidad materna de 2013, donde en las zonas urbanas, el número de defunciones
maternas es de 46 y en las zonas rurales el indicador es de 95 muertes por cada 100.000
nacimientos, es decir, casi el doble de diferencia.
No obstante, Colombia ha tenido avances importantes en la reducción de la pobreza
logrando anticipadamente la meta establecida en los ODM. En 2014 la población en
situación de pobreza es de 28,5% y en pobreza extrema de 8,1%. Hace 12 años estos
indicadores estaban respectivamente en 49,7% y 17,7%.
Asimismo, es importante reconocer que entre los años 1992 y 2013, Colombia ha
incrementado en 1.650.000 los cupos escolares en la educación básica y aunque aumentó
en 760.000 las matrículas en educación media, aún se necesitan más de 260 mil nuevas
matrículas para alcanzar la meta de 93%. Del mismo modo, la tasa de desempleo
disminuyó, sin embargo las mujeres y jóvenes tienen las tasas de desempleo más altas (el
50% de los desempleados está entre los 14 – 28 años y la tasa de desempleo de las
mujeres es el doble de los hombres). A la fecha, en Colombia se sigue trabajando de
manera intensiva en la implementación de estrategias que posibiliten la aceleración del
logro de los ODM, identificando cuellos de botella e implementando soluciones de corto y
mediano plazo para garantizar el cumplimiento de las metas más rezagadas, apoyando la
construcción de políticas públicas que permitan la superación de la pobreza extrema y el
hambre, con esfuerzos realizados desde instituciones del Gobierno Nacional como las
lideradas por la Agencia para la Superación de la Pobreza Extrema (ANSPE).

En este mismo propósito vienen trabajando los distintos Fondos, Programas y Agencias
del Sistema de las Naciones Unidas en el país, implementando soluciones en temas de
hábitat, educación, salud, género, gobernabilidad, desarrollo económico incluyente y
generación de una cultura de paz. Este tipo de procesos se hacen evidentes en proyectos
que se han puesto en marcha en municipios como La Guajira donde se ha impulsado la
creación de alternativas de productividad con comunidades indígenas que buscan mejorar
las condiciones de desarrollo socioeconómico y de su calidad de vida, fomentando el
incremento de sus ingresos a través del fortalecimiento de las capacidades técnicas,
asociativas y empresariales en la siembra de cultivo de cacao (apoyo financiero del Fondo
Koreano). O el caso de los programas conjuntos de Fondo PNUD – España entorno a la
construcción de la PAZ en Nariño, la equidad entre los géneros en Bolívar y Santander, la
adaptación al cambio climático en el Cauca y la Seguridad alimentaria y Nutricional en
Chocó.
Se ha posibilitado entonces el fortalecimiento de la capacidad local, mejorando las redes y
el tejido social, permitiendo incidir en el logro fundamental de los ODM, es decir, la
erradicación de la pobreza extrema y el hambre.

En Colombia durante el año 2013 a través de un ejercicio tripartito (sociedad civil,


Gobierno y Sistema de las Naciones Unidas), se desarrollaron también diálogos
presenciales que contaron la participación de cerca de 300 organizaciones, incluyendo
diversos grupos poblacionales: jóvenes, afro colombianos/as, indígenas, mujeres, LGBTI;
así como consultas sectoriales con el sector privado, ONG y la academia. De esta manera
más de 10.000 personas a lo largo y ancho del territorio nacional han alzado su voz y han
priorizado temas referentes a sociedades en paz, educación de calidad.

Muchos de ellos reiteran los desafíos planteados en los ODM, pero con metas mucho más
universales que incluyen temas como el Desarrollo Económico Sostenible y la
construcción de sociedades en paz como garantes del bienestar social. Esta agenda se
implementará entre los años 2015 al 2030 y tiene los siguientes objetivos:
Objetivo Propuesto 1. Terminar con la pobreza en todas sus formas posibles en todas
partes.
Objetivo Propuesto 2. Terminar con el hambre, lograr la seguridad alimentaria y
nutricional y promover la agricultura sostenible.

Objetivo Propuesto 3. Asegurar vidas saludables y promover el bienestar para todos/as


en todos los momentos de la vida.

Objetivo Propuesto 4. Asegurar la calidad y la pertinencia educativa y promover


oportunidades de aprendizaje para todos/as.

Objetivo Propuesto 5. Lograr la equidad entre los géneros y el empoderamiento de las


mujeres y las niñas.

Objetivo Propuesto 6. Asegurar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el


saneamiento para todos/as.

Objetivo Propuesto 7. Asegurar el acceso a una energía asequible, fiable, sostenible y


moderna para todos.

Objetivo Propuesto 8. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y


sostenible, el empleo pleno y productivo; y el trabajo decente para todos/as.

Objetivo Propuesto 9. Construir infraestructura flexible, promover la industrialización


inclusiva y sostenible; y fomentar la innovación.

Objetivo Propuesto 10. Reducir la desigualdad dentro y entre países.

Objetivo Propuesto 11. Ciudades y asentamientos humanos inclusivos, seguros y


sostenibles.

Objetivo Propuesto 12. Garantizar patrones de consumo y producción sostenibles.

Objetivo Propuesto 13. Tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus
impactos.

Objetivo Propuesto 14. Conservar y utilizar de manera sostenible los océanos, los mares y
los recursos marinos para el desarrollo sostenible (Propuesta del Gobierno Colombiano).

Objetivo Propuesto 15. Proteger, restaurar y promover el uso sostenible de los


ecosistemas terrestres, el manejo sostenible de los bosques, la lucha contra la
desertificación; detener y revertir la degradación de la tierra y detener la pérdida de
biodiversidad (Propuesta del Gobierno Colombiano).

Objetivo Propuesto 16. Promover sociedades en PAZ, inclusivas y sostenibles.

Objetivo Propuesto 17. Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la alianza


mundial para el desarrollo sostenible.
3. Mencionar 3 ideas para proyectos de desarrollo humano (sólo mencionar las ideas,
no es elaborar proyectos).

Prevención De La Violencia Intrafamiliar

Brindar Educación Para La Prevención De La Violencia Intrafamiliar En Las Familias, se


enfoca en el tema de la violencia intrafamiliar es un tema que en los últimos años ha
crecido notablemente debido a la falta de conciencia que tienen los ciudadanos, esta
constituye una violación a los derechos humanos cometida en el marco de estructuras
familiares jerárquicas, caracterizadas por relaciones de poder que se transmiten de
género a género y de generación en generación.
Es un fenómeno cuyo costo humano y material es alto, causa un profundo impacto sobre
la calidad de vida de las personas, evidenciado a través del daño físico y psicológico
ocasionado a las víctimas. En la actualidad se considera que la violencia en el hogar es
también un problema de primer orden para la salud pública y la seguridad ciudadana, y
sus hechos constituyen delitos penados por las leyes. La violencia intrafamiliar constituye
un elemento cotidiano en la vida de miles de niños, adolescentes y adultos (hombres y
mujeres) siendo los delitos contra la integridad sexual, maltrato psicológico, la violencia
física y violencia económica, algunas de las manifestaciones más graves o extremas que
afecta fundamentalmente en la integridad del ser humano.
Mediante este proyecto se busca educar y prevenir en el tema de la violencia intrafamiliar
en los miembros del hogar por medio de estrategias como: talleres, foros, juegos
autodidácticos, videos, conversatorios y capacitaciones entre otras herramientas
diseñadas para identificar e implementar en nuestra sociedad nuevos hábitos de crianza y
convivencia que contribuyan al mejoramiento de la calidad de vida de estas familias.

Proyecto Social y Cultural en Niños y Jóvenes

Es un proyecto social y cultural para crear espacios adecuados para la niñez y la


juventud donde ellos ejercerá la libertad creativa y permite a la vez expresarse desde la
fascinación de las artes visuales, el teatro, la música, la danza, el futbol y la natación, ya
que es un propósito contribuir en la formación artística a ciudadanos del futuro y
ciudadanos de la paz. La importancia será el fortalecimiento de la cultura, la inversión
social y que la comunidad tendrá un contacto con la cultura, con el saber, con el
aprendizaje del arte que constituye justicia social y superación social.

Fomento De La Autoestima En Los Estudiantes

En la institución Educativa un adolescente con poca autoestima accede al aprendizaje con


menor dedicación, entusiasmo y esfuerzo que si su autoestima respecto a ese aprendizaje
es elevada. Evitan ponerse en evidencia de sí mismo en contenidos que cree no domina y
buscará contenidos que le hagan sentirse a gusto consigo mismo. En la relación con sus
compañeros pueden provocarse conflictos por miedo a dejar en evidencia sus pocas
habilidades. Sin duda, a través de la historia de cada uno, de forma dinámica como la
propia vida. De las interacciones con los demás: familia, amigos, profesorado dando gran
importancia a lo que piensan de él, la valoración de sus capacidades y características, que
hacen que se vaya confeccionando la idea de cómo ha de ser ya la que se irá adecuando.
Si tiene una buena relación afectiva con esas personas y las valora, serán influyentes
positivamente. Si, por el contrario, no las valora ni quiere, se orientará en dirección
opuesta a la imagen que de él transmiten. Así se formará el conocimiento y la valoración
de sí mismo, es decir, su autoestima.

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