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Natalí Uribe - 20061129

FITEL – FONDO DE INVERSIÓN EN TELECOMUNICACIONES

El objetivo del presente ensayo es echar más luz acerca de la justificación del Estado, como
promotor de inversiones en el sector de las telecomunicaciones. Además, se busca responder si
dicho mecanismo es el más adecuado para afrontar el problema de los incentivos en el sector
privado y si actualmente sigue siendo válida dicha intervención. A partir de esto, se plantea la
siguiente hipótesis de trabajo: El acceso a las telecomunicaciones como factor relevante para el
desarrollo económico. En los siguientes apartados se intentará validar o refutar dicha hipótesis.

Una Breve descripción histórica del Sector de las Telecomunicaciones en el Perú:

Es importante entender en qué contexto se planteó este programa, ya que así nos será más fácil
entender y justificar la intervención del Estado en este sector.
A inicios de los años 90, los servicios de telecomunicaciones en el país eran suministrados
básicamente por dos empresas: la Compañía Peruana de Teléfonos SA (CPTSA) la cual tenía,
con carácter de exclusividad, la concesión para operar el servicio de telefonía local fija en el área
de Lima Metropolitana y el Callao ; y la Empresa Nacional de Telecomunicaciones del Perú
(ENTELPERU), empresa pública de derecho privado, que estaba a cargo del servicio de
telefonía en el resto del país; encargándose además, del servicio de comunicaciones de larga
distancia nacional e internacional para todo el país.
En este periodo, la densidad del servicio telefónico era de las más bajas de América, llegando a
sólo 2,9 líneas por cada 100 habitantes, situándose por muy debajo de la densidad promedio de
los países correspondientes a su grupo. A continuación, ver cuadro:
La baja densidad telefónica en el Perú se debió más que todo a una escasa inversión en la
expansión de la red telefónica. Las inversiones correspondientes a las 2 empresas que
controlaban el sector fueron de las más bajas del sector de empresas públicas peruanas, lo cual
era evidentemente insuficiente para cubrir las necesidades del sector.

Existen tres razones que pueden explicar la baja inversión en el sector:


a) Porque desde 1983 el Estado peruano dispuso que las empresas estatales dejaran de pagar sus
deudas contraídas en el extranjero, por lo que las empresas públicas, en general, dejaron de ser
sujetos de crédito en el mercado financiero internacional.
b) Porque la retracción de los ingresos fiscales limitó severamente el gasto en infraestructura.
c) Porque las tarifas (especialmente las de telefonía local fija) eran fijadas por debajo de los
costos operativos, lo cual hacía que las empresas no pudieran contar con los márgenes mínimos
para financiar sus planes de expansión.

Fue en este contexto en que el Estado decidió dictar una serie de leyes para la reestructuración
del sector telecomunicaciones, en las cuales se define el nuevo rol del Estado en ésta área de ser
promotor y regulador de la inversión privada, así también se plantea la privatización de las
telecomunicaciones y por tanto la búsqueda de la expansión de un mercado tan restringido.
Así en mayo de 1993 se promulgó el Texto Único Ordenado de la Ley de Telecomunicaciones
(TUO), el cual integra una serie de modificaciones y ampliaciones.

Los principales cambios que introdujo el nuevo marco legal fueron:


a) La eliminación de la exclusividad del sector público en el desarrollo del sector de
telecomunicaciones.
b) La promoción de la libre competencia en todos los servicios de telecomunicaciones en
donde fuera técnicamente posible.
c) La transferencia del protagonismo en el desarrollo y modernización de las
telecomunicaciones al sector privado.

Justificación de la Intervención del Estado:

De esta serie de modificaciones, nace el Fondo de Inversión en Telecomunicaciones (FITEL), el


cual tenía la finalidad de financiar los servicios de telecomunicaciones en zonas donde su
explotación comercial no fuera rentable y fueran áreas rurales o de interés social. Para financiar
tales actividades, la Ley estableció que a las empresas de servicios de telecomunicaciones les
correspondía financiar el Fondo a través de la transferencia de un porcentaje de sus ingresos
brutos (1%).

A partir de lo explicado anteriormente, se desprende la principal justificación de la intervención


del Estado en el sector de las telecomunicaciones, ya que la evidencia histórica nos muestra que
la provisión de este servicio sin intervención estatal era ampliamente insuficiente e ineficiente.
En particular, esta falla de mercado estaba concentrada en las áreas rurales, por lo cual este
Fondo está focalizado en ellas. En un mercado perfecto, el Estado no sería necesario, ya que este
tipo de servicio podría ser brindado netamente por el sector privado sin ningún tipo de
intervención, sin embargo, estamos ante el caso de un mercado incompleto, en el cual existe una
demanda por parte de los pobladores rurales pero no existen los incentivos suficientes para crear
una oferta, por parte del sector privado. Esta falta de incentivos se debe fundamentalmente a los
elevados valores de inversión y operación, limitadas expectativas de rentabilidad, elevada
percepción de riesgo, difíciles condiciones geográficas, etc. que se perciben en dicho sector. Por
lo tanto, el objetivo de este programa es crear las condiciones propicias para atraer la inversión
que requieren las telecomunicaciones en el Perú y de esa forma estar en capacidad de ofrecer los
servicios que, en términos de calidad, cobertura y diversidad, se necesitan para el desarrollo
nacional. Si bien es cierto, que la presencia de un fallo de mercado es razón para que el Estado
intervenga, es pertinente mencionar cuál es la importancia del desarrollo de este sector para un
país, lo cual nos determinará de manera más completa si está intervención estatal está bien
justificada o no.

Breve Descripción del Programa:

FITEL es un fondo destinado a la provisión del acceso universal a las telecomunicaciones que
actúa como un mecanismo para financiar, conjuntamente con el sector privado, la provisión de
servicios de telecomunicaciones en áreas rurales y lugares considerados de preferente interés
social. FITEL, como promotor de inversiones en telecomunicaciones, debe diseñar proyectos de
provisión de servicios en las zonas más necesitadas del país y menos atractivas para la actividad
privada. Utiliza un mecanismo de subsidio de dichos proyectos proporcionando financiamiento,
para que los operadores interesados ejecuten el proyecto y se hagan cargo de la operación. Este
financiamiento puede involucrar la inversión, montos de operación y mantenimiento y también
puede cubrir actividades complementarias como estudios, adquisición de equipos, obras civiles y
capacitación en el uso de los servicios. FITEL también se encarga de estudiar las necesidades de
servicios de telecomunicaciones en las zonas necesitadas y evaluar la sustentabilidad de los
proyectos, analizando los aspectos técnicos y los resultados económico-financieros de los
mismos. Además, promueve la opción de que terceras personas presenten proyectos de
telecomunicaciones para ser considerados dentro de la gama de proyectos a ser subsidiados
cumpliendo una lista de requerimientos.

Requisitos del área beneficiaria:

 No deben ser partes de áreas urbanas según INEI.


 Deben ser capitales de Distrito y Centros Poblados Menores con 3000 habitantes o
menos.
 Densidad en telecomunicaciones menor a 2% (telefonía fija de abonados).
 Capitales de Provincia y de Distrito carentes de algún servicio esencial.

Objetivos:

 Reducir la brecha digital de acceso a servicios en áreas rurales. Entre las principales
metas establecidas se encuentran la implementación de teléfonos públicos y el acceso a
internet como un objetivo complementario.
 Promover desarrollo socio-económico de áreas rurales: acceso a servicios y capacitación
en uso de Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC).
 Incentivar participación del sector privado mediante el mecanismo del mínimo subsidio.

Recursos:

 El Fondo se forma a partir de un tributo recaudado sobre los ingresos de las empresas
concesionarias de servicios públicos de telecomunicaciones, el 1% de sus ingresos
facturados y percibidos por la prestación de los servicios.
 Se recauda el 20% (mínimo) de canon por uso de espectro radioeléctrico.
 Otros: Tesoro Público, ingresos financieros, donaciones, etc.

Destino:

 Ejecución de los proyectos de inversión de implementación de servicios en las zonas


rurales carentes de dicha tecnología.
 Elaboración de los estudios pertinentes para la elaboración de los proyectos (máximo
10% del presupuesto anual): pruebas de modelos, nuevas tecnologías, etc.
 Acciones de supervisión.

Importancia del desarrollo de las telecomunicaciones:

El intento de expansión del desarrollo de las telecomunicaciones a un nivel universal ha sido


desde hace un tiempo un objetivo común en muchos países. Poco a poco los servicios de
telecomunicaciones juegan un rol cada vez más importante dentro de la sociedad. En un primer
momento, estos eran considerados como bienes de lujo, para luego pasar a ser considerados
como bienes necesarios para las comunicaciones diarias y son vistas además como herramientas
necesarias para la inclusión social y económica de los individuos. Es por esto, que el acceso de
los hogares a estos servicios, en especial a la telefonía, es considerado en muchos países como
una meta de sus políticas públicas y un factor relevante para el desarrollo.
Estos objetivos se ven influenciados por la concepción de que estos servicios deberían ser
considerados bienes meritorios, es decir, servicios a los que todos los individuos de una sociedad
deberían tener derecho sin importar su capacidad de pago o condición. Esto se basa en el hecho
de que estos servicios fomentan la integración y cohesión social de los pueblos más aislados,
influenciado en ellos de manera positiva tanto en el aspecto social como económico.
A partir de esto, podemos complementar la justificación de la intervención del Estado brindada
anteriormente, ya que, es ampliamente recomendado que el Estado participe en los casos en los
que existe una brecha real de acceso a estos servicios. Esta brecha real, es conocida también
como brecha de acceso y se refiere a la distancia entre la frontera de eficiencia de mercado y el
nivel de cobertura total que corresponde con una situación de servicio universal, es decir, un
contexto donde todas las comunidades acceden a los servicios. Habiendo ya sustentado la
importancia del desarrollo de las TICs en el desarrollo nacional, reafirmo mi justificación inicial,
la cual ahora encuentra un sustento adicional en la existencia de externalidades positivas que se
generan al brindar el servicio de telefonía en zonas rurales, beneficios económicos que el sector
privado no incorpora en su análisis, pero que el Estado en su obligación de velar por el bienestar
de la sociedad en su conjunto debe considerar.

Evaluación de Impacto:

En esta sección se intentará validar la hipótesis de trabajo planteada al inicio del trabajo. Gracias
a las distintas evaluaciones de impacto que se han realizado sobre el FITEL se podrá comprobar
que tan eficiente es la participación del Estado para el logro del acceso universal de las
telecomunicaciones, y si éste es imprescindible para la realización de dicho objetivo.

Los estudios encontrados tienen como característica común el haber encontrado una relación
significativa entre el nivel de penetración de las telecomunicaciones (especialmente, telefonía fija
y móvil) y el desempeño de variables macro (a nivel de países), como crecimiento económico,
pobreza y desigualdad. En un estudio realizado por Telefónica Móviles se mencionan ciertas
ventajas que brinda la telefonía móvil: promueve la creación de empresas, reduce los problemas
de información asimétrica y sustituye la necesidad de transportarse, incrementándose así la
productividad y la eficiencia. Por otro lado, es una herramienta que ayuda en caso de desastres,
permite la difusión de información ligada a la salud y educación, y promueve la creación de
capital social.

En nuestro estudio específico del caso FITEL, existe una última evaluación de Impacto de
Proyectos, la cual fue realizada por Cuánto. En dicha evaluación se busca medir concretamente
los logros de los proyectos durante su desarrollo, utilizando distintos criterios de evaluación: de
impacto, pertinencia y sostenibilidad, a modo de orientar futuros proyectos de
telecomunicaciones.

La población beneficiaria directa e indirecta de la intervención alcanza a 5'846,133 personas y


han intervenido en 6,056 Centros Poblados, siendo el producto principal la entrega de servicios
de telefonía pública (un teléfono comunitario) por comunidad. El contexto donde se desarrollan
los Proyectos es complejo, pues se ubican en el área rural, donde 9 de cada 10 personas es pobre,
sólo el 54.4% en edad de trabajar tiene ocupación, el 45% de la población que tiene ingresos, no
alcanza a tener un ingreso de 501 nuevos soles mensuales. La población es joven, el 65% de la
población tiene menos de 34 años, el 34% tiene educación primaria y el 13.1% son analfabetos
(FITEL 2009).

Se usa una metodología de evaluación que combina el análisis cualitativo y cuantitativo, usando
un modelo econométrico en el primero, buscando identificar la magnitud del efecto de la
intervención en el bienestar de las familias, a partir del análisis de los efectos renta y sustitución.
El análisis cualitativo se presenta en forma de complemento al análisis cuantitativo, sirviendo
para integrar los resultados obtenidos.

Para dicha evaluación utilizaron instrumentos y técnicas de recojo de información basadas en


información primaria (encuesta a hogares, Encuesta de Infraestructura y establecimientos de la
localidad, Encuesta a Establecimientos (negocios de la localidad), entrevista a emprendedores,
entrevista a operadores, Talleres participativos, Grupos Focales), e información secundaria
(revisión bibliográfica, revisión de informes, base de datos de la ENAHO y ENNIV).
Resultados:

Entre los principales efectos del programa, destaca el impacto significativo que ha tenido la
implementación de tecnología de información y comunicación en las zonas rurales, en el
aumento de precios de los agricultores en torno a sus principales productos. Entre estos destaca
generalmente el aumento del precio de la papa. Los resultados sugieren que en promedio, los
beneficiarios del proyecto perciben precios 8.8% mayores que el grupo no intervenido.

También se observa impacto en el aumento de la demanda de mano de obra externa a la familia


dueña de la chacra. El ratio de mano de obra externa sobre el total de mano de obra se
incrementó en 10.9%, sin embargo, este efecto fue nulo para el caso de hogares dirigidos por
mujeres. Este hallazgo sugiere la dificultad de las mujeres para comandar mano de obra externa.

Como consecuencia del efecto anterior, se observan aumentos en los salarios dependientes. Esto
se debe al mayor dinamismo mercantil que se genera por los menores costos de transacción y
menores precios, por lo cual, los agricultores contratan más trabajadores externos para potenciar
una mejora productiva. Es así por un mecanismo de demanda laboral, que se incrementan los
salarios.

Otra de los beneficios resultados del proyecto FITEL, fueron las mejoras en las tasas de
asistencia escolar, las cuales se incrementaron en 32.3 %. Esto va de la mano con una
disminución de la probabilidad de trabajo agrícola y/o pecuario, siendo este sustituido por
inversión intelectual. Cabe decir que este efecto también es nulo en el caso de hogares
comandados por mujeres, lo cual sugiere, que el hecho de no contar con un jefe de hogar
hombre, disminuye las posibilidades de los adolescentes de invertir en capital humano.

Por último, se evidencian efectos en el aumento de la probabilidad del acceso al crédito, lo cual
ha sido impulsado con la generación de un excedente monetario, causado por el incremento de
los salarios. Es decir, se ha implementando un esquema de préstamos de las personas
superavitarias hacia las deficitarias de la zona.

A partir de estos resultados, se evidencia el impacto positivo que la implementación de


telecomunicaciones ha generado en el desarrollo de las áreas rurales. De esta forma, a la vez que
estamos verificando la relación positiva que hay entre las TICs y el desarrollo de un país, damos
cuenta de la necesidad de la intervención del Estado en este sector, para poder captar el
verdadero beneficio social que brinda la implementación de estos servicios, la cual como
mencioné anteriormente, difiere del beneficio percibido por el sector privado.

A pesar de los buenos resultados registrados, la sostenibilidad de estos proyectos del FITEL,
viene siendo amenazada por la presencia de nuevos productos en el mercado de
telecomunicaciones, como sustitutos a la telefonía rural propuesta por los Proyectos, por lo que
se hace necesario establecer nuevos criterios para hacer frente a este avance tecnológico, donde
deben primar la opción de alianzas estratégicas con los proveedores de los otros servicios para
conciliar los avances tecnológicos y dirigirlos a la población donde se busca beneficiar. Un
ejemplo de estos sustitutos, son los teléfonos móviles, los cuales a partir del estudio realizado, se
han mostrado preferidos por los pobladores en lugar de la telefonía rural implementada por
FITEL. Esto ha generado una disminución importante en los minutos salientes y entrantes, los
cuales también se usan como indicador de impacto. Por consiguiente, en la siguiente sección
analizaremos si en el contexto actual: ¿sigue siendo válida la intervención del Estado?

Bibliografía:

El impacto de las telecomunicaciones en el desarrollo – El caso de la telefonía móvil en el


ámbito rural. Telefónica Móviles.

Evaluación del Fondo de Inversión de Telecomunicaciones (FITEL): ¿Es suficiente todavía su


esquema de subastas?

BARRANTES, R. (2007) Convergencia y universalización de los servicios de


telecomunicaciones: agenda pendiente. Informe Temático. Diálogo regional sobre la sociedad de
la información.

Christine Zhen-Wei Qiang - Tecnologías de la información y de la comunicación para el


desarrollo. Banco Mundial.

Humberto Campodónico Sánchez - LA INVERSIÓN EN EL SECTOR DE


TELECOMUNICACIONES DEL PERÚ EN EL PERÍODO 1994-2000.

Carla Marisa Bonina - Martín Rivero Illa. TELEFONÍA MÓVIL Y POBREZA DIGITAL EN
AMÉRICA LATINA: ¿Puede la expansión de los teléfonos celulares reducir la pobreza?

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