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Estamos profundamente programados por nuestros padres, familias, sociedad, escuela, y un largo
etc. ¿Qué ideas están en tu “chip” que te están obligando a hacer cosas que tu no quieres o
limitan? Haz una lista completando la frase: Yo debería… y luego explica ¿Por qué? Anota todas las
que vengan a tu mente, de un tema en específico o todos los que se te ocurran.
Ejemplo: Yo debería estudiar porque así seré alguien en la vida, como me decían mis padres…
Yo debería ____________________________________________________________________
Ahora, una vez que realmente ves el porqué, completa las mismas oraciones anteriores con:
Yo debería estudiar porque así seré alguien en la vida, como me decían mis padres… En realidad,
yo ya soy alguien… y si estudio o no, no me hace mejor persona ni mas o menos valioso… Si
realmente quisiera, podría trabajar y ser exitoso sin mayores estudios… y se va una creencia que
me auto-limita.
2. AMARSE A SI MISMO
El amor es la cura milagrosa para sanarnos de cualquier cosa, cuando nos amamos, milagros ocurren
en nuestra vida. No se trata de arrogancia o engreimiento, se trata de estar agradecidos por el
milagro de nuestro cuerpo y mente. Nos desvalorizamos cuando nos regañamos o criticamos,
maltratamos o no escuchamos el cuerpo, cuando aceptamos creer que no merecemos amor o
cobrar un precio digno por nuestro trabajo, cuando nos creamos deudas o desorden en nuestra
vida, o atraemos compañeros o amantes que nos humillan.
a) Piensa ahora ¿como se expresa en tu vida la falta de amor por ti mism@? (Ej. Falta de
autocuidado, mala alimentación, dejarte explotar por tus jefes, o dejarte abusar por tus
parejas, etc) Anota todo en tu bitácora.
b) Ejercicio El Espejo
Ahora, mírate al espejo, di tu nombre y repite: yo te amo y te acepto exactamente tal como eres.
¿Qué sucede contigo? ¿Es difícil o fácil? Escribe y analiza si hay algún problema con este ejercicio:
¿Cuál es mi problema que no puedo o se me hace difícil decir que me amo a mi misma? Anota
todo en tu bitácora.
Muchas veces, los problemas que creemos que tenemos para amarnos y ser felices no son mas que
programaciones sociales, culturales, religiosas, familiares que quedan grabadas en el subconsciente,
generando creencias que nos limitan a avanzar y lograr nuestros objetivos. Ahora, analizaremos
creencias que no nos sirven y que seguramente están dirigiendo nuestra vida sin darnos cuenta… ¡y
renunciaremos a ellas! Pero primero debemos identificar qué creencias tenemos, para eso haremos
dos ejercicios.
Tus padres y parientes Ej. “eres tan desordenada!” “No sirves para nada!” etc.
Tus profesores
Tus amigos y
compañeros de colegio
Religión
Recomendaciones:
- Imaginate como una niña. Cuando te criticas o te tratas mal, estas criticando a ese niño/a.
Cierra los ojos, e imagínate como ese niño, abrázalo y dale tu amor.
- Deja de criticarse por todo. De ahora en adelante ¡cero auto-critica!
- Deja de culpar a la familia o a otros, ya que nos quitamos nuestro propio poder. Entender
que nuestros padres hicieron lo único que sabían hacer, y sin prejuicios, perdonarlos y
seguir adelante. Honrarlos por darnos la vida, y tomar las riendas de nuestra propia vida
ahora es lo mejor que podemos hacer, si queremos ser felices.
Cualquier cosa que creamos llega a ser verdad para nosotros. Si crees que la vida está en tu contra,
así será, ya que atraes ese tipo de experiencias a tu vida. Lo que analizaste en la sección anterior,
no son más que creencias que aprendiste de niñ@. ¿Pero te has preguntado alguna vez si esas
creencias son realmente ciertas? Creencias como “los niños no lloran” genera un hombre incapaz
de expresar sus sentimientos y por tanto reprime su pena y llanto generando enfermedad. ¿No será
mejor abandonar esa creencia, que limita y genera enfermedad? De la misma manera, si crees algo
positivo, será verdad para ti. Si queremos una vida amorosa, prospera y feliz, no tienes más que
creer que es posible. Aquello que verbal o mentalmente
enviemos hacia afuera, será lo que de la misma forma
vuelva a nosotros. El único momento que existe es el ahora,
el pasado ya pasó y el futuro aun no ocurre. Por lo tanto
HOY es el momento de cambiar. ¿Estas dispuest@ a
cambiar? Este es el primer paso.
Repite la afirmación: “Estoy dispuesta a cambiar” con frecuencia y tocándose la garganta. Toma
consciencia que donde no quieras cambiar algo (te cause resistencia) es donde mas necesitas el
cambio. El Universo siempre esta escuchando. Repite la frase y rápidamente las cosas empezaran
a cambiar. Debes estar atent@ a señales…
Ahora repite esta afirmación frente a un espejo mirándote a los ojos. Observa como te sientes, si
hay resistencias, o simplemente no quieres, y pregúntate porqué. ¿Qué creencia hay detrás? Si no
lo sabes, no importa, repite 10 veces tocándote la garganta: “ Estoy dispuest@ a abandonar toda
resistencia al cambio”.
Repite la afirmación “Ahora me doy cuenta que yo he creado esta situación y estoy dispuesta a
renunciar al modelo mental que en mi conciencia es responsable de esta situación”.
Puedes usar ho’oponopono: “Divinidad, elimina en mi todo aquello que haya causado este
problema ___. Lo siento, perdóname, te amo, gracias.” “Divinidad, elimina, transmuta y corrige en
mi las memorias dolorosas y creencias limitantes que causan el problema ____. Lo siento,
perdóname, te amo, gracias” Repetir varias veces, varias veces al dia.
c) Ejercicios de descarga física: A veces necesitamos descargar físicamente lo que nos abruma y que
quedan en el cuerpo. Encerrarte en un auto con las ventanas cerradas y gritar y decir garabatos
fuertes si estas reprimiendo la expresión verbal. Aporrear una cama o cojines a patadas o puñetazos
de manera inofensiva ayuda a liberar la furia contenida.
d) El Pasado: Aferrarse al pasado solo nos causa sufrimiento. Una forma de liberar la mente del pasado
es renunciar el apego emocional que sentimos por el pasado. Hay eventos del pasado que al quitarle
la carga emocional que le hemos dado, no queda más que en un recuerdo. Haz una lista de todas
las cosas por las que estas dispuest@ a soltarte, y analízate… ¿estás dispuesta? ¿Que debes hacer
para lograrlo? ¿Te causa resistencia?
b) Ho´oponopono:
Repite constantemente:
Dios Padre Madre, elimina en mi la causa de mi problema con (persona, situación, etc). Lo siento,
Perdóname, Te amo, Gracias.