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Juan Sebastián Valencia Jiménez - 49430

RESUMEN: EL RÍO DE LOS CINCO COLORES

Caño cristales es uno de los sitios paradisiacos más representativos de la belleza de


nuestro país, es conocido como el río de los cinco colores ya que se puede distinguir el
amarillo, azul, verde rojo y negro dentro de sus plantas acuáticas. Esta cuenca consta de
dos grandes zonas protegidas, la zona alta que es su nacimiento en el Parque Natural de
la Macarena, está bajo la jurisdicción de Cormagdalena, es una zona de distrito de manejo
integrado y zona de amortiguamiento y la zona baja, bajo la jurisdicción de Cormacarena,
que es donde se encuentra la mayor parte de la extensión de caño cristales hasta su
desembocadura en Río Guayabero, forma parte del cratón de la Guayana, que es una gran
meseta tabular que se fue elevando por procesos de tectónicos y que presenta erosión por
millones de años, además a niveles biogeográficos, la fauna presente en la Serranía de la
Macarela presenta fauna amazónica, aún que hablemos desde la cuenca del Orinoco desde
el punto de vista hidrográfico, tiene cercanías al pie de monte andino y los Andes, en
consecuencia, permite tener una mezcla a nivel florístico y faunístico.

La Serranía de la Macarena fue colonizada a mitad del sigo XX por miles de campesinos
expulsados de las zonas andinas. Actualmente, gracias y por desgracia al proceso de paz,
esa zona ya no es catalogada como “Zona Roja” como sucedía cuando las FARC ocupaban
ese espacio, ya que eran los encargados del control y orden del lugar, incluido caño
cristales, pero que de un modo u otro protegieron el cauce y entendían su importancia
dentro del ecosistema, lo que dio paso a que muchas personas por fin lograrían conocer
ese maravilloso lugar. Desde el 2010 la cifra de visitantes era de 1500 y que al año 2016
ha crecido hasta los 15000 visitantes anuales. Este paraíso cuenta con 6 senderos para
disfrutar del atractivo turístico del lugar (águila, pianos, intermedio, caño escondido, piscinas
y pailones), se supone que el plan de manejo que se le da es por medio de un estudio de
capacidad de carga para que no la excedan los visitantes. Las personas encargadas de
controlar son los mismos habitantes de la zona, como lo son los de la vereda “La Cachivera”,
un pueblo de campesinos como Jorge Gutiérrez un agricultor que toda su vida se han
dedicado a la agricultura y la ganadería, siendo uno de los principales problemas tiempos
atrás, pero que gracias al apoyo del Instituto Alexander von Humboldt que ha trabajado de
la mano con científicos, ecólogos y biólogos con dicha comunidad, han avanzado en el
cambio de actividades productivas para dejar atrás esas prácticas de deforestación y
cambiarlas por la del ecoturismo, avistamiento de aves y conservación de la microcuenca.

En un proyecto que participó el biólogo e investigador Carlos Andrés Lasso junto al Instituto
Alexander von Humboldt, se centran en la investigación de la Macareina clavijera, que es
una planta acuática de la familia de las Podostemaceaes, que es una familia que se puede
encontrar en América del sur y África, lo que en primera instancia nos lleva a confirmar que
algunas vez estos 2 continentes estuvieron unidos, continuando con la especie objetivo de
estudio, viven en zonas de rápidas corrientes de agua, con entornos turbios, de alta
oxigenación y capaces de soportar la fuerza con la que pasa el agua. Cabe recalcar que
esta especie no es como todo el mundo piensa un “Alga”, sino que es una Planta acuática
superior; para entender porque se le asocia con algas es porque dentro de sus pigmentos
y fluidos internos, poseen microalgas que son las encargadas de brindar eso peculiares
pigmentos a la planta, otra curiosidad, se encuentra en su estructura radicular, ya que es
fascinante ver como al ser tan corta puede aferrarse a las rocas con las condiciones ya
mencionadas en las cuales crece esta planta; también se desea conocer si existen especies
que permitan su dispersión, si tiene especies depredadoras, su relación con el medio
ambiente, la disponibilidad de luminosidad y las condiciones que definan sus diversos
colores. La temporada más recomendada para ir a visitar caño cristales es entre junio a
noviembre que es cuando se presentan los mayores afloramientos de dichas plantas, el
resto de meses están en etapa reproductiva.

La meta que se quiere alcanzar en el estudio de la Macareina clavijera es la resolver alguna


de dos de las hipótesis planteadas, la primera es que en la Sierra de la Lindosa, una
geoforma cercana, y que junto a la Serranía de la macarena en algún momento cientos o
millones de años atrás formaron un continuo peor que por movimientos tectónicos, balanceo
y apalancamiento de sorprendentes esfuerzos de las placas o movimientos orogénicos y
mucho tiempo después se separaron, debido a que existe una especie de Macareina
clavijera en la Sierra de la Lindosa, y se quiere saber si serán la misma familia o conocer el
distanciamiento genético que tienen ambas especies, con el apoyo del laboratorio de la
Universidad de los Andes, para conocer su historial genético. La segunda hipótesis es
conocer o averiguar si existe alguna dispersora (aves) que haya ocasionado el crecimiento
de la misma especie en una zona distinta al área de estudio. Otro atractivo es que cuenta
es la laguna del silencio que es el único cuerpo lagunar cerca a caño cristales y que se
caracteriza por ser un atractivo a la pesca deportiva por su alto contenido de nutrientes.

La principal amenaza futura potencial es la frontera agropecuaria que existe entre las fincas
cercanas a la microcuenca, ya que se debe mejorar los planes de ordenamiento y
asignación de usos del suelo para mitigar este impacto que se genera día a día por la
deforestación de la zona. Otra amenaza que se pronostica a mediano plazo es la que debido
a la ausencia de grupos al margen de la ley, la cantidad de visitantes exceda la capacidad
de carga que tiene el ecosistema, ya que al contar con solo 6 senderos y un atractivo
impresionante por conocer el cuerpo de agua, el sistema no de abasto y colapse generando
una perturbación que afecta a todos los organismos que dependen del mismo; una de las
propuestas de biólogo Carlos Lasso, es que se promuevan nuevos senderos, ya que el
lugar cuenta con otros servicios disponibles como lo es el avistamiento de aves para permitir
descansos periódicos del ecosistema y que la cantidad de personas permitidas (10 – 15
personas) para los recorridos no sea superada, ya que es un ecosistema muy frágil y poco
inexplorado, por lo tanto, se debe conservar, proteger y cuidar entre todos los implicados.
Los habitantes de las veredas son las más comprometidas, ya que se encargan de recibir,
atender y guiar a los turistas que los visitan, sin olvidar darles las respectivas
recomendaciones, como traer de regreso su basura, los lugares donde se permite el baño
en el caño sin que se vean afectadas las plantas al ser pisoteadas y/o arrancadas, y lo más
importantes entienden el valor histórico, cultural y ambiental de caño cristales y la laguna
del silencio como parte del patrimonio de su comunidad, de la región y del país.

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