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METAMODELO DEL LENGUAJE

“Muchos creen estar pensando cuando meramente reordenan sus


prejuicios”
David Bohm
El Mapa no es el Territorio

Esta afirmación es uno de los principales presupuestos de la PNL (programación neurolingüística) y da


explicación a cómo todo ser humano crea un modelo de la realidad a través de las percepciones recogidas
por sus sentidos (vista, oído, tacto, gusto, olfato) y su transformación lingüística posterior a través del
lenguaje. Este modelo es una representación (el mapa) muy particular que cada persona crea de la realidad
(el territorio) basado en su sistema de creencias, educación, experiencias anteriores, cultura,
conocimientos, entorno familiar y profesional, etc. Como podrás imaginar, este modelo no se corresponde
con la realidad del mundo … y efectivamente, tu modelo tampoco.

Indagar en el mapa de aquellos que nos rodean

Para tener relaciones más ricas y empáticas con nuestros iguales es fundamental entender y profundizar en
la interpretación que hacen de la realidad.

Para ello te propongo una herramienta de la PNL diseñada por sus creadores, Richard Bandler y John
Grinder, y que se denomina «el metamodelo del lenguaje». Fue publicada en su libro “La Estructura de
la Magia”.

Omisiones
Omisión: Proceso por el cual eliminamos toda aquella información que no nos es relevante, nos pasa
desapercibida o no se adapta a nuestro sistema de creencias. En nuestro discurso tenderemos a obviar
aquella información que bajo nuestra interpretación es irrelevante (aunque no lo sea para nuestros oyentes)

Falta de índice referencial:


Situación: No se identifica el sujeto activo de la acción. Es decir, se elimina quién o qué cosa hace
concretamente la acción. La persona o personas u objetos a los que se refiere la frase no están claros. La
persona elimina cierta información. Ha olvidado dicha información o no la considera relevante.

Objetivo: Concretar quién o qué realiza la acción. Especificar el sujeto de la acción

Ejemplos:

• La gente dice que no es posible – ¿A qué gente específicamente te refieres? ¿Quién concretamente
dice que no es posible?
• Ellos no lo conseguirán – ¿Quiénes son ellos?
• Me han arruinado la vida – ¿Quién concretamente te ha arruinado la vida?
• Es muy difícil – ¿Qué concretamente es muy difícil?
• En recursos humanos no me hacen caso”- ¿Quién, exactamente, no te hace caso en recursos
humanos?”
• Tus compañeros me trataron mal. - ¿quiénes específicamente?
• Deberías hacer algo por mí. - ¿qué debería hacer concretamente?
• Los últimos acontecimientos han hecho que ahora no sea un buen momento para decidirlo. - ¿Qué
acontecimientos concretamente? ¿qué tienes que decidir? ¿qué tiene que pasar para que sea un buen
momento para decidirlo?

Verbo inespecífico:
Situación: No se detalla en que consiste la acción. En este caso no está claro cómo se ha hecho algo. Los
verbos utilizados no clarifican el significado real de las cosas.

Objetivo: Definir claramente y sin ningún tipo de dudas la acción .

Ejemplos:

• No me gusta cuando me mira así – ¿Cómo te mira?¿Qué concretamente no te gusta cuando te


mira?
• Me molesta su actitud – ¿Qué específicamente te molesta? ¿Qué actitud concretamente te
molesta?
• Estoy enfadada – ¿Qué es lo que concretamente te enfada?
• No aguanto a los sabelotodos – ¿Qué es lo que no aguantas?
• Han rechazado mi oferta” - Cómo la han rechazado exactamente?
• Lo voy a montar yo solo - ¿Qué montarás específicamente?
• Si sigues con esa actitud me voy - ¿A qué actitud te refieres concretamente?

Omisión simple:
Situación: Se omite información clave en la frase. Objetivo: Encontrar la información relevante que falta
en las afirmaciones. Especificar el criterio y la referencia de la comparación.

Ejemplo:

• Estoy amargado – ¿Qué concretamente es lo que te amarga?


• No puedo hacerlo – ¿Qué concretamente es lo que no puedes hacer?
• No me aceptan – ¿Qué es lo que sientes que no aceptan de ti?
• Estoy enfadado – ¿Qué es lo que te enfada? ¿Enfadado sobre qué?
• Estoy algo desmotivado. - ¿Qué te desmotiva?
• Este año hemos alcanzado el objetivo - ¿Cuál era el objetivo?

Omisión comparativa:
Situación: Se realiza una comparación pero no se especifica con quién o qué se está comparando. Se hace
una comparación pero no se explica qué es lo que se está comparando. La frase suele contener palabras
como: bueno, malo, mejor, peor, más, menos, etc…

Objetivo: Determinar el criterio y la referencia de la comparación.


Ejemplo:

• El azul es mejor – ¿Comparado con cuál?


• Soy el peor – ¿Comparado con quién?
• Es mejor así – ¿Es mejor con respecto a qué?
• Esto es lo más difícil – ¿Lo más difícil comparado con qué? ¿Cuáles son las otras opciones?
• Él es peor - ¿En qué es peor? ¿Peor comparado con quién?
• Esta operación es más difícil. - ¿Más difícil comparada con qué otra operación? ¿Cuánto más
difícil? ¿En qué te basas para tener esa opinión?

Normalización:
Situación: Utilización de palabras abstractas que conllevan generalmente un significado muy subjetivo.
Un proceso ha sido convertido en una “cosa”. Las nominalizaciones son nombres, pero no los puedes
tocar ni poner en una caja. Ejemplos comunes de nominalización son: comunicación, relación, liderazgo,
respeto, verdad, libertad, depresión, miedo, amor, alegría, etc…

Objetivo: Transformar la abstracción en algo concreto. Nuestra tarea es hacer una pregunta usando el
verbo para que el proceso se ponga de manifiesto.

Ejemplo:

• Quiero ser feliz – ¿Para ti concretamente que significa ser feliz?


• La comunicación con mi pareja es mala – ¿Cómo considerarías que la comunicación sería buena?
• El mundo es un desastre – ¿Qué cosas consideras del mundo un desastre?
• Sus ideales están equivocados – ¿Cuáles son concretamente sus ideales?
• Para mi lo más importante es triunfar – ¿Qué es lo que entiendes por triunfar?
• La comunicación en la empresa es mala” - ¿Cómo te gustaría comunicarte?”

Ejecución perdida, Juicios:


Situación: Se realizan juicios de valor que no se sabe quien los hace.

Objetivo: Determinar quién es el que realmente realiza el juicio y/o cuál es la norma oculta tras dicho
juicio.

Ejemplos:

• Los tíos no lloran – ¿Quién dice eso? ¿En base a qué dices que no lloran?
• Es evidente que debemos hacerlo así – ¿Quién dice que es evidente? ¿Para quién es evidente?
• A quién madruga Dios le ayuda – ¿Quién concretamente dice eso?
• No por mucho madrugar amanece más temprano – ¿Quién concretamente dice eso?

Distorsiones
Distorsión: Representación diferente de la realidad con respecto a lo percibido a través de los sentidos. Se
tiende a cambiar datos, añadir nuestra propia interpretación de los mismos o a no recordarlos con
exactitud.
– Ejemplo: Un persona después de no haber sido atendido en una llamada telefónica afirma: No me
contestan … no les intereso.

Lectura mental:
Situación: Se realiza una afirmación basada en lo que se cree saber de otra persona. El que habla dice que
conoce lo que otra persona cree, siente o piensa.

Objetivo: Determinar la base y el origen de la información.

Ejemplos:

• Luis me odia – ¿Cómo sabes que te odia?


• Es evidente lo que le motiva – ¿Cómo sabes qué es lo que le motiva?¿En base a que sabes lo que
le motiva?
• Mi jefe no está contento con mi trabajo - ¿Cómo lo sabes?” o “¿Cómo, exactamente, sabes que tu
jefe no está contento con tu trabajo?
• A tu compañero no le caigo bien - ¿Cómo sabes específicamente que no le caes bien? ¿Qué
comportamiento tiene contigo para hacerte sentir eso?

Referencia perdida – Juicios:


Situacion: Se hacen juicios de valor y no está claro quién los ha hecho. Juicios de valor expresados como
verdades universales. Se pierde el autor de la afirmación.

Objetivo: Recuperar el autor de la afirmación. Retar la afirmación.


Ejemplos:

• Esta no es la manera de dirigir una empresa -¿Según quién?” o “¿Cómo sabes que esta no es la
manera de dirigir una empresa?”. También puedes preguntar “¿Según San quién?” o “¿De
acuerdo a qué mandamientos?
• Es negativo hacerlo así - ¿Quién dice que es negativo? ¿Hacerlo cómo? ¿Cómo se debe de hacer
para no sea negativo?

Causa Efecto:
Situación: Se relaciona una causa externa con un efecto concreto en la persona. El que habla establece
una relación causa-efecto arbitraria entre dos sucesos o acciones.

Objetivo: Encontrar la relación entre la causa y el efecto. Desarmar la estructura causa-efecto. Encontrar
la relación entre la causa y el efecto, si la hubiera. Construcciones habituales incluyen: si/entonces,
porque, hace que, lleva a, provoca, etc…

Ejemplos:

• Su sola presencia me enfurece – ¿Qué es concretamente lo que te enfurece de esta persona?


• La corrupción me indigna – ¿Qué es concretamente lo que te indigna de la corrupción?
• Los días nublados me ponen triste – ¿Qué es concretamente lo que te pone triste de los días
nublados?
• “Cuando me miras me siento incómoda”- ¿Cómo exactamente hago que te sientas incómoda al
mirarte?” o “¿Te sientes cómoda si no te miro?
• El tono de tu voz me enfada. - ¿Cómo es mi tono de voz concretamente para que te haga sentir
enfado?
• La forma en que me tratas me irrita. -. ¿Cómo te trato? ¿qué es lo que te irrita específicamente?

Equivalencia compleja:
Situación: Cuando relacionas dos experiencias distintas. En esta situación, dos situaciones dispares se
interpretan como si fueran idénticas.

Objetivo: Verificar que la relación es correcta. Romper la sinonimia con un contraejemplo o preguntar
por el significado de las cosas. Estas dos experiencias pueden ser unidas por: así que, significa, implica.

Ejemplo:

• Es un antipático, no me mira – ¿Todas las personas que no te miran son antipáticas? ¿Quieres
decir que si alguien no te mira es antipático?
• Me engaña, me ha regalado flores – ¿Si alguien regala flores a otra persona es que la engaña?
• No me ha saludado, es un antipático – ¿Concretamente en que situación no te ha saludado?¿Puede
haber alguna razón, que no sea que es un antipático, por la que no te haya saludado?
• “Mi jefe pasó por delante de mi mesa sin saludarme. Eso significa que no está contento con mi
trabajo” - “¿Cómo significa el hecho de que no te haya saludado que no esté contento con tu
trabajo?” o “¿Nunca has estado preocupado por la familia u otros asuntos y se te ha olvidado
saludar a alguien?”
• No me llamaste, creo que no te importo. - ¿En qué te basas, aparte de la llamada, para pensar así?
¿He hecho otras cosas que te hagan pensar de esa manera?
• No me llamas regularmente. No te importo lo suficiente. - ¿Con qué regularidad te gustaría que te
llamara? ¿Hay otras cosa de mi comportamiento que te hagan pensar así? ¿Qué puedo hacer o
decir para que pienses de otra forma?

Presuposición:
Situación: Se propone que algo es cierto antes de que ocurra. Las afirmaciones basan su consistencia en
un supuesto previo. Una parte de la frase presupone o implica la existencia o no existencia de algo aunque
no se mencione explícitamente.

Objetivo: Desafiar la presuposición.

Ejemplo:

• Lo entenderás cuando madures (te considero un niño) – ¿Qué es lo que te hace creer que no he
madurado?
• Será un infeliz – ¿Qué es lo que te hace suponer que será un infeliz?
• ¿Prefieres hacerlo ahora o luego? – ¿Qué es lo que te hace pensar que prefiero hacerlo?
• ¿Cuándo vas a mostrar liderazgo en tu equipo?” (Presupone que ahora mismo no lo estás
haciendo) - “¿Qué te hace pensar que no estoy mostrando liderazgo?” o “¿Cómo es que no
demuestro liderazgo?”

Nominalización:
Situación: El verbo es transformado en un sustantivo. El sustantivo representa el hecho consumado cuando en
realidad se hace referencia a una actividad en proceso.

Objetivo: Volver a utilizar el verbo activo para salir del estancamiento del hecho consumado.

Ejemplo:

• Necesito otro tipo de experiencia.- ¿Qué necesitas experimentar?


• Lo que piensas me asusta. - ¿Qué crees que estoy pensando?

Generalizaciones
Proceso por el cual tendemos a desprender algunos elementos de nuestra experiencia
original representándolos en una categoría total. La persona universaliza aspectos particulares de su
experiencia o generaliza elementos de su modelo de la realidad.

Cuantificadores Universales
Situación: Basándose un unos pocos ejemplos se generaliza. Utilizamos siempre, todos, nunca, jamás,
nada, …

Objetivo: Cuestionar la generalización.

Ejemplos:

• Todo el mundo me odia – ¿Todo, todo el mundo?¿Yo también te odio?


• No se hacer nada – Ya, nada, nada. Y que me dices de …
• Mi jefe nunca me felicita por lo que hago - ¿Nunca?” o “¿Ha habido alguna vez en la que te haya
felicitado?
• Todos los de esa ciudad son iguales - ¿Iguales con respecto a qué? ¿De verdad somos todos
iguales?¿Yo también soy igual a ellos? Otra solución es poner ejemplos donde esa afirmación se
hace falsa.

Operadores modales:
Situación: Se dan normas, limitaciones al comportamiento. Palabras que se refieren a la posibilidad o
necesidad de hacer algo y que reflejan un estado interno intenso relacionado con nuestras obligaciones en
la vida. Pueden ser de necesidad (debo, tengo que, hay que, necesito que, …) o posibilidad (no puedo, no
es posible)
Objetivo: Identificar el origen de la norma o limitación y las consecuencias del incumplimiento de la
misma o identificar el origen o la causa del impedimento. La clave está en desafiar esa limitación para
explorar nuevas posibilidades. Estas preguntas devuelven a la persona la capacidad de elegir y pasa de
estar reaccionando a una posición proactiva.

Ejemplos:

• Necesito comprarme ropa nueva – ¿Qué te obliga a comparte ropa nueva?¿Qué pasaría si no te la
compras?
• Tengo que gustarle a Luis – ¿Qué pasaría si no le gustases?¿Qué es lo que te obliga a gustarle?
• No puedo ir solo – ¿Qué pasaría si vas solo?¿Qué te impide ir solo?
• No puedo relajarme – ¿En que circunstancias podrías relajarte?¿Qué te impide relajarte?
• Tengo que aceptar las cosas como están” - ¿Y qué pasaría si no lo hicieras?”
• Estoy muy estresado. Creo que me voy a bloquear. Tengo que acabar el trabajo el lunes. - ¿Qué pasaría si
lo acabas el martes?

Perdida de concreción
Situación: Las personas damos por supuesto algo que no se especifica claramente.

Objetivo. Concretar aquello que no se especifica.

Ejemplo:

• Conmigo tendrías que comportarte de otro modo - ¿De qué modo me tendría que comportar? ¿Qué tipo de
comportamiento no quieres?

Si uno presta atención a su diálogo interno, a las conversaciones que mantiene consigo mismo, a
las cosas que se dice en su cabeza, descubre que a menudo lo único que hace es dar vueltas sobre
presuposiciones que no resisten un análisis más completo. Podemos decirnos a nosotros mismos
“Juan piensa que soy imbécil” y a partir de ahí comenzar un argumento de varios minutos que
puede venir acompañado de un intenso componente emocional. Si nos detuviéramos a analizar el
diálogo con el metamodelo en la mano, o con un mínimo de sentido común, nos daríamos cuenta
de que es imposible que sepamos lo que piensa Juan, con lo cual todas las conclusiones que se
derivan de la primera dejan de tener una razón de ser y estamos abiertos a una interpretación más
ajustada de lo que realmente está sucediendo.

De la misma manera, podemos pensar “Viajar en metro me agobia” y perpetuar


inconscientemente ese problema. Si reformulamos la frase y nos decimos “Me agobio cuando
viajo en metro”, pasamos a darnos cuenta de que la causa de la situación somos nosotros y no el
metro. Esto nos devuelve nuestro propio poder y nos sitúa en disposición de abordar el problema
de una manera activa en vez de seguir viéndonos como víctimas de la situación.

Si es importante emplear el metamodelo para hablar con otros, es también muy importante
utilizarlo en nuestro diálogo interno para detectar fallos de razonamiento e incoherencias al
describirnos nuestras experiencias a nosotros mismos. Si prestas atención a tu diálogo interno, te
sorprenderá darte cuenta de la inmensa cantidad de conclusiones fraudulentas a las que llegas
cada día y de la cantidad de trauma emocional, para ti y para otros, que puedes ahorrarte al
describirte a ti mismo las cosas como realmente han sucedido.

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