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UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR

NOMBRE: Juan Carlos Flores Argoti

SEMESTRE: Quinto PARALELO: C

MATERIA: Historia mundial y contemporánea

Resumen de la revolución centenaria

Este capítulo del libro analiza los elementos que forman parte del “progreso” eurocéntrico
desde finales del siglo XIX. Aquí se analizan los avances tecnológicos, culturales, demográficos,
económicos y políticos que dividieron al mundo en dos sectores: los países desarrollados o
primer mundo y los países del segundo mundo.

Esta revolución inicia con la Revolución Francesa y la Revolución Norteamericana como


fenómenos sociales para dar el paso a una nueva era que se fomentaría con inventos como el
ferrocarril y el telégrafo eléctrico que acortarían las distancias entre las personas. Este mundo
se poblaba con mayor rapidez debido a que se empezaban a urbanizar las ciudades y esta
expansión desplazaba a los campos. A la vez que había un crecimiento poblacional empezaba a
darse las primeras diferencias establecidas por la cultura y la política. Los países europeos
empezaban a ser centros culturales que se diferenciaban de otros lugares en el mundo por la
educación universitaria que poseían. Además la población empezaba a ser más culta a
comparación de otros lugares donde apenas accedían a libros o educación primaria. Con esto el
pensamiento se empezó a configurar a la manera que estos países lo establecían, incluso en la
política. Los países se configuraban en el estilo de estado-nación liberal-constitucional copiado
de Europa, incluso llegando a procesos de blanqueo.

No sólo la cultura y la política marcaron el proceso de progreso europeo, la economía vinculada


con la tecnología tuvieron mucho que ver. Los avances tecnológicos como el carbón que estaba
en apogeo, la electricidad y el petróleo que todavía no cobraban importancia dieron paso a una
sociedad industrial que influyó la división mundial. Las industrias empezaban a dar el salto a las
primeras burguesías y a consolidar el sistema capitalista que lo asumiría también Estados
Unidos que también aportaría con los primeros almacenes, instaurados por negociantes y
campesinos ahorradores. El mundo subdesarrollado o segundo mundo también tenía pequeñas
industrias pero no dejaban de lado las costumbres coloniales y por esta razón no lograban
desarrollarse. La diferencia entre industrias fue notoria recién desde la primera guerra mundial
para los europeos porque la mayoría de los inventos eran desarrollados en Estados Unidos.

El aspecto social era donde la brecha era más amplía. La hambruna se daba en Europa pero en
Latinoamérica y África era endémica, esto se debía a que la riqueza no llegaba a todos por igual,
únicamente llegaba a las élites burguesas, incluso en Europa, en donde varios países se los
consideraba retrasados. A los países retrasados o de segundo mundo les tocó adaptarse al
modelo de progreso debido a sus élites a pesar del miedo a este progreso y a la oposición de
diversos grupos, incluso la Iglesia. El progreso tuvo que ser un proceso conquistador para que
todos se adapten a él y todos sigan ese camino. Aunque siempre hubo grupos que se preguntan
si el progreso era poderoso, ¿por qué no se lo deseaba? Ante esta dificultad los ideólogos del
progreso tuvieron que recurrir a la biología y demostrar que la gente opuesta al avance era
gente de otra raza, lo que demostró que el progreso era un proceso desigual.

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