Introducción

El conflicto palestino-israelí surge debido a las decisiones que tomaron las

potencias occidentales luego de la primera guerra mundial, lo que genero
odio entre estos dos pueblos, y la gran importancia que tomo el
movimiento sionista creado con el propósito de establecer un lugar seguro
para el pueblo judío en la Israel, fomentando la masiva inmigración de
judíos a medio oriente, sin importarles las personas que vivían allí
(palestinos) lo que provoco guerras y numerosas revueltas, sumado a esto
se fundó el Estado de Israel, sin el reconocimiento por parte de los
palestinos, como resultado fueron apropiándose se sus tierras y
obligándolos a emigrar a diferentes partes del mundo.

Conflicto israelí-palestino

A fines del siglo XIX, en un contexto en el que interviene el desarrollo del

nacionalismo y las persecuciones que sufre la población judía en la Europa
del Este, nace el movimiento sionista. Su fundador Thedor Herzl proponía
la creación de un Estado judío en el territorio palestino.
En 1882 comenzaron a establecerse en palestina las primeras aldeas de
judíos procedentes de Europa. A su llegada, los judíos pedían a los
palestinos que se rebelaran contra el imperio otomano a cambio de
promesas de independencia.
Esto genero el origen de los futuros conflictos entre estos dos pueblos que
pretendían apropiarse de este territorio, ambos lo reclamaban como
propio. Los israelíes consideran que les pertenecía, porque afirmaban que
les había sido legado por Dios, como figura en el Antiguo Testamento. Por
otro lado este territorio estaba poblado mayoritariamente por árabes y
palestinos ya que había sido parte del Imperio Otomano desde 1517

Primera Guerra Mundial

Ya en 1916, Gran Bretaña y Francia, con el apoyo de Rusia, acordaron en el

pacto Sykes-Picot el reparto de las posesiones del Imperio Otomano si
ganaban la Primera Guerra Mundial. Tras ello, se firmó la
llamada 'Declaración Balfour' de 1917, en la que el gobierno británico se
comprometía a respaldar la creación de un hogar nacional judío en
Palestina. Es aquí cuando comenzó un gran éxodo de judíos europeos
hacia Palestina, que se dedicaron desde su llegada a comprar tierras a los
árabes. A la vez, los británicos hacían promesas de todo tipo a los líderes
árabes para animarles a la rebelión contra el gobierno turco. Se puede
afirmar que en gran medida el conflicto árabe-israelí deriva de la errática y
demagógica política exterior británica.

Tras la Primera Guerra Mundial y por mandato de la Sociedad de

Naciones, Palestina pasa a estar bajo control de los ingleses. El gobierno
de Londres se mostró reacio a cumplir sus promesas de independencia a
los árabes y, simultáneamente, los judíos comenzaron a crear
instituciones autónomas a modo de protesta y desarrollaron prácticas
excluyentes y discriminatorias respecto a los árabes. Poco a poco fue
creciendo una espiral de violencia entre árabes y judíos lo que llevó a la
partición del territorio.

Segunda Guerra Mundial

Con la llegada en Alemania de Adolf Hitler al poder, las migraciones de

judíos hacia Palestina se multiplicaron, lo que fue agravando la
convivencia con los árabes palestinos, dando lugar a fuertes disputas y
revueltas entre ambos.

Una vez acabada la Segunda Guerra Mundial, Gran Bretaña decidió dejar

en manos de la ONU el problema de convivencia de ambas religiones,
proponiendo la división en dos estados, uno judío y otro árabe. Este plan
fue rechazado por los árabes pues legalizaba, a sus ojos, los planes de los
sionistas. En 1948, la comunidad judía declaró unilateralmente la creación
del Estado de Israel, en palestina, acto que desencadenó la intervención
militar de los Estados árabes vecinos formada por Líbano, Siria, Irak, Reino
de Egipto y Transjordania. Esta guerra dura hasta el año 1949, en el cual se
firma un armisticio que favorece a Israel, a través de este se divide a
Jerusalén en dos zonas y se le otorgan nuevos territorios, reduciendo los
territorios palestinos a Cisjordania que fue anexionada por Jordania y la
Franja de Gaza bajo administración egipcia.  
Además esta guerra significó la intervención de las superpotencias de la
época, que se hallaban en plena Guerra Fría, Israel recibió mucha ayuda
de Estados Unidos y los países árabes fueron apoyados por la Unión
Soviética. Luego en el año 1956 se produce la 2ª Guerra Árabe-Israelí o
guerra de Suez a través de un ataque de Israel a Egipto con el fin de
controlar el Canal de Suez. De este modo invaden la península del Sinaí,
pero las presiones de EEUU y la ONU lo obliga a retirarse.
Otro suceso ocurrió en el año 1967 que se lo llamo Guerra de los seis días,
en donde Israel inicia una acción de guerra y en pocos días tras derrotar al
ejército jordano, sirio y egipcio, ocupó toda la península del Sinaí, la franja
de Gaza, una zona de Siria lindante con Israel y la parte de Jordania
situada al oeste del río Jordán (conocida como Cisjordania), y ademas
anexiona Belén, Jericó, Tirán, El canal de Suez, Los Altos del Golán y se
queda con toda Jerusalén.
Tras la Guerra de los Seis Días, seis años después los egipcios y sirios
volvieron a atacar a Israel con el fin de recuperar sus territorios perdidos,
el suceso ocurrió en pleno Yom Kipur el 6 de octubre de 1973, una de las
fechas más importantes en la religión judía. Inicialmente los árabes
obtuvieron victorias en las alturas del Golán y en la península del Sinaí,
pero los israelitas realizaron contraataques exitosos.
Paralelamente al desarrollo de la guerra, otro conflicto surgió. Se lo
conoce como la "crisis del petróleo", lo que empezó con el embargo
petrolero a los Estados Unidos, aliado de Israel, el rey Feisal de Arabia
Saudita, prohibió el embarque de petróleo hacia puertos de Estados
Unidos, o de aquellos puertos que pudieran ser intermedios en la ruta
hacia aquel país. De esta manera pretendían recuperar los territorios
perdidos, empleando al petróleo como un arma económica.

Por otra parte, esta crisis represento el retroceso de la URSS en la región y

el aumento de la influencia de Estados Unidos, que inicia negociaciones
que llevan a un acuerdo de paz entre Egipto e Israel. Fue a partir de este
momento que Estados Unidos empezó a intervenir directamente en la
política israelí, y se creó un vínculo simbiótico entre los dos países. Gracias
a la influencia que tiene la comunidad judía en Estados Unidos,
principalmente en el capital financiero concentrado en Nueva York.

En 1982 estalló un nuevo enfrentamiento de Israel contra Líbano y la OLP

(Operación para Liberación Palestina), el cual se ha mantenido hasta la
actualidad. En la década de 1990 se firmaron una serie de tratados con el
objetivo de mantener una estabilidad en la zona. El primero y más
importante fueron los Acuerdos de Oslo, en los cuales se fundó
la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que administra los territorios
actuales de los palestinos: Cisjordania y la Franja de Gaza.
En la actualidad:

Desde el 2008 hasta el presente ha habido una serie de guerras en la

Franja de Gaza, entre Israel y el grupo palestino. Aunque Cisjordania siguió
gobernada por la Autoridad Nacional Palestina, La Franja de Gaza, está
controlada desde 2007 por los radicales islamistas de Hamás. Este grupo
es considerado una organización terrorista por Estados Unidos, la Unión
Europea e incluso por algunos países del Medio Oriente. Hamás lucha
contra el Estado Israelí usando métodos terroristas, como atentados
suicidas. Este grupo también se niega a reconocer los acuerdos logrados
anteriormente entre palestinos e israelíes, quedando suspendidas las
negociaciones de paz entre ambos pueblos.

Con el pretexto de privar a los locales de materiales para la producción de

armas, Tel Aviv (segunda mayor ciudad de Israel y centro económico del
país) ha impuesto durante la última década un bloqueo que controla
estrictamente las fronteras y el espacio aéreo de la Franja de Gaza. Por
eso desde el año 2002, comenzó la construcción de un enorme muro en
Cisjordania. Su longitud supera los 700 kilómetros. Los funcionarios del
régimen israelí afirman que el objetivo de este muro es evitar la
infiltración de los grupos armados y proteger la frontera. Aunque esta no
es toda la realidad, ya que extensas áreas de tierras agrícolas han sido
confiscadas y destruidas, y decenas de vivienda palestinas demolidas,
además el 80% del muro está construido dentro del territorio de
Cisjordania, y se ha usurpado los suministros de agua, incluyendo el mayor
acuífero de Cisjordania. El estado sionista para apropiarse de los
territorios palestinos, necesita de la emigración judía de todo el mundo,
por lo que el agua es un elemento vital para desarrollar la agricultura y la
industria. Esta situación empeoró las condiciones de vida de los palestinos
en este territorio, ya que se ven privados de empleo, educación, asistencia
médica y otros bienes de primera necesidad.

Reflexión

Es difícil llegar a conclusiones en un tema tan complejo como este, pero

de lo que se tiene certeza es que, gran parte de la culpa de lo que sucede
hoy en la región recae sobre las potencias occidentales que dividieron el
territorio luego de la Primera Guerra Mundial. Aunque tanto israelíes
como palestinos han contribuido a empeorar la situación de este territorio
debido a las medidas tomadas por sus representantes y el rechazo mutuo
que no permite que vivan en armonía. Yo creo que ambos pueblos deben
aceptarse y repartir equitativamente el territorio, si se quiere llegar a un
acuerdo de paz.  

Conclusión

Podemos observar que los enfrentamientos y la violencia entre palestinos

e israelíes se mantiene hasta la actualidad, lo que dificulta lograr la paz y
una buena convivencia en este territorio, es el odio que se ha arraigado
con el transcurrir de los años y la falta de intervención de instituciones y
países que podrían controlar este asunto y dar fin al conflicto, sin embargo
esto se ve limitado por los intereses económicos. Por lo que es muy difícil
que se dé fin a este enfrentamiento tan antiguo.