Me parece interesante e importante que Parménides en su poema sobre el ser, pone su
doctrina en los labios de una diosa. Esta diosa que simboliza la verdad, al final del prólogo, le dice 3 cosas: Es preciso que aprendas todo 1) De la verdad bien redonda el corazón inconmovible. 2) Y de las opiniones de los mortales, en las que no existe certidumbre veraz; 3) También aprenderás esto: cómo es necesario que admita la existencia de las apariencias quien en todos los sentidos indaga todo. Por lo tanto, la diosa le indica tres caminos: 1) el de la verdad absoluta, 2) el de las opiniones falaces (el de la falsedad y el error), 3) y un camino que podría llamarse de la opinión plausible. 1) De la verdad absoluta: dirá Parménides que la única verdad consiste en el ser no engendrado, incorruptible, inmutable, inmóvil, igual, esférico y uno. Todas las demás cosas no son más que nombres vacíos. 2) De las opiniones falaces: el camino del error abarca las posturas de todos aquellos que, en la forma que sea, admiten explícitamente el no-ser, o que formulan razonamientos en que éste interviene, ya que el no-ser no es, porque es impensable e indecible. 3) De la opinión plausible: Parménides tuvo que reconocer un tipo de razonamiento que sirviese para dar cuenta de los fenómenos y de las apariencias de las cosas, con tal de que no se opusiese a su principio básico y no admitiese al mismo tiempo el ser y el no-ser. Po lo tanto, El ser de Parménides no admite diferenciaciones cuantitativas o cualitativas. Y así en la medida en que están englobados en el ser, los fenómenos quedan no sólo igualados, sino también inmovilizados, petrificados en la invariabilidad del ser.