REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

INSTITUTO UNIVERSITARIO JESUS OBRERO
CENTRO DE PROFESIONALIZACIÓN DE FE Y ALEGRÍA
RESOLUCIÓN Nº 2388 DEL MPPEU. GACETA OFICIAL Nº 39.828

Descripción de los Aprendizajes en el área: ESCUELA DEMOCRÁTICA:

DEMOCRACIA, PARTICIPACIÓN Y CIUDADANÍA

En el “Programa Internacional de Formación de Educadores Populares”

de Fe y Alegría, tuve la oportunidad de trabajar y formarme como facilitadora
en 3 dimensiones: La dimensión humana, la Dimensión Pedagógica y la
dimensión Sociopolítica.
En esta última Dimensión se llevo a cabo durante 6 sesiones. Su
objetivo era formar un educador capaz, comprometido y responsable como
ciudadano del mundo, transformando el entorno que lo rodea.
La participación positiva en la sociedad no es solo tarea de los
ministros, concejales. Nosotros desde la educación también podemos
promover una democracia participativa desde nuestras aulas y en todo el
contexto educativo, pero para ello debemos involucrarnos con las
comunidades conociendo sus necesidades y fortalezas a través de un
análisis de contexto. Por ello la convivencia ciudadana y la participación
requieren que formemos a todos en la verdadera democracia participativa y
dejar atrás la concepción de la democracia representativa.
Los ejes temáticos de estas sesiones fueron:
Democracia-Participación – Ciudadanía.
Cultura – Interculturalidad – Inculturación.
La globalización: formas, consecuencias y desafíos.
La recuperación de la historia local urbana
La recuperación de la historia urbana desde una perspectiva indígena.
El análisis de contexto nos permite acercarnos a las comunidades y
participar de forma coherente y pertinente en su transformación, respetando
su cultura y su historia.
Es en este contexto cultural e histórico que es pertinente formar en la
conciencia ciudadana, de los derechos y deberes que tenemos como
ciudadanos, es decir una convivencia y vida digna, solo pueden lograrse con
la buena practica de nuestros deberes y derechos. Por lo tanto, educar
integralmente a la persona, como ciudadano, que vea la política practicada
desde su cotidianidad. Es decir, el problema de las calles, la inseguridad, la
electricidad, es mi problema y es el problema de todos, es nuestro deber
aportar soluciones y educar a la comunidad a ser parte de la solución.