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Guía para

la optimi-
zación de
contenidos
Índice
Introducción

Identifica qué contenido hay que optimizar


1.1. Tendencias de tráfico
1.2. Búsquedas

Optimízalo para buscadores


2.1. Title
2.2. URL
2.3. Descripción
2.4. Estructura de la página

Optimízalo para usuarios


3.1. Actualízalo
3.2. Amplíalo
3.3. Compártelo (de nuevo)

Conclusión
Introducción
A la hora de hablar de Marketing de Contenidos, la
reutilización de contenido es una de las técnicas más efectivas
e interesantes que deberías explorar.

Producir contenidos es una tarea realmente compleja y cara,


ya sea en esfuerzo, tiempo o dinero. Cuando se habla de
contenidos, siempre pensamos que producirlos desde cero es
la única vía. Sin embargo, debería ser solamente una parte de
nuestra estrategia.

Reutilizar o readaptar el contenido ya publicado no sólo ayuda


a reducir considerablemente el esfuerzo en coste y tiempo.
Además, se convierte en tu máxima prioridad cuando tus
posts empiezan a perder tráfico, ya sea a nivel SEO o por una
desactualización del contenido.

Pero, ¿hay que optimizar todo el contenido publicado? Y lo que


es más importante, ¿cuándo hay que hacerlo?

La reutilización de
contenido es una de las
técnicas más efectivas e
interesantes que deberías
explorar.
01
Identifica
qué
contenido
hay que
optimizar
1. Identifica qué contenido hay que
optimizar
Empecemos por el principio: ¿Por qué debemos optimizar un
contenido?

Internet es algo así como el bolso de Mery Popins o el bolsillo


mágico de Doraimon: hay de todo ahí dentro, sólo tienes que
meter la mano, rebuscar y disfrutar. Sea del año que sea, sobre
el tema que sea, seguro que estará. Internet lo guarda todo y
los buscadores lo encuentran todo.

Imagina que escribiste un post en 2013 sobre “Las 5


herramientas para programar publicaciones en Instagram” y
fue muy compartido, recibió muchas visitas... lo petó.

Ese contenido aún está en tu blog. Google lo sigue indexado


y los usuarios continúan realizando búsquedas relacionadas…
Pero dos años después, las herramientas pueden haber
cambiado, algunas quizá ya no existan, otras seguramente
se hayan actualizado aplicando mejoras, nuevas funciones, o
puede que los términos que usabas ya no sean tendencia… En
definitiva, el contenido se ha quedado obsoleto.

Esto podría llevar a una mala experiencia de usuario, un


aumento del porcentaje de rebote, pérdida de usuarios
recurrentes e incluso podría afectar a las ventas.
Pero, ¿cómo identifico el contenido que debo optimizar?
¿Tengo que optimizarlo todo? ¿Cómo afectarán estos cambios?

Sí tenemos un blog pequeño, con pocas páginas o con poco


volumen de contenido, el trabajo de identificación y priorización
puede ser fácil. Pero en el caso de un blog grande con mucho
contenido puede resultar más costoso. No te agobies, no es tan
complejo. Te vamos a enseñar cómo lo hacemos en 40deFiebre
paso a paso.

1.1. Tendencias de tráfico

Lo primero que vamos a hacer es analizar las tendencias de


tráfico de nuestros posts. Esto nos va a dar una visión más
clara de lo que está pasando con nuestros contenidos, es decir,
si se mantiene el tráfico, aumenta, o por el contrario cae y está
perdiendo el interés del usuario mes a mes.

Para ello, vamos a generar un gráfico en Excel dónde lo ideal


sería ir apuntando los datos de tráfico de Analytics que ha ido
recibiendo cada post mensualmente, para generar el gráfico de
tendencia.
Por el momento, Google Analytics no nos permite exportar los
datos de un año o un largo periodo y segmentarlos por meses,
como hace Adwords. Por eso, para hacerlo con el contenido
publicado hasta el momento deberíamos ir extrayendo mes
a mes los datos. Si te resulta un trabajo algo tedioso, te
recomendamos que a principios del mes vigente extraigas los
datos del mes anterior: tan sólo te llevará unos minutos cada
mes y el resultado a final del año o pasado un tiempo es de
gran utilidad.

¿Cómo lo hacemos? Nos vamos a Analytics y seleccionamos el


periodo a analizar. Lo ideal es que la fecha de inicio coincida
con la del primer post publicado.

Y entramos en el panel:

Comportamiento Contenido del sitio Todas las páginas


Estos datos nos muestran todas las páginas de nuestro site y
las visitas que ha recibido cada una en el periodo establecido.
Para sacar sólo los posts, tenemos que crear un filtro avanzado
excluyendo las páginas que no contengan posts, como por
ejemplo la / (home), las páginas de /contacto/ o /acerca-de/, y,
como en nuestro caso, el diccionario /que-es/ o las guías.

Si tu blog está dentro de una web, o la URL de los posts se


anida de alguna forma común (como www.tusitio.com/blog/)
podrías realizar un filtro avanzado que incluyera sólo las
páginas con /blog/.
Sí nos interesa analizar también el volumen y tendencia
de tráfico del resto de páginas, podemos mantenerlas y
analizarlas. Pero nosotros las vamos a excluir porque en lo
que queremos centrarnos es en identificar qué posts hay que
optimizar.

Una vez que tenemos filtrada la lista, exportamos los datos


(recuerda que debes repetir este proceso modificando el
periodo mes a mes).

Y ahora es cuando añadimos estos datos a nuestro Excel en


la pestaña del mes correspondiente. ¿Por qué no los metemos
directamente en la primera pestaña de Tendencia? Luego lo
vamos a ver paso a paso, pero principalmente se debe a que
cada mes los posts van a ir variando posiciones, se agregarán
nuevos que vayamos escribiendo, quizá algún mes alguno no
reciba visitas, etc.
Esto haría que se moviera la gráfica, lo que sería un poco lioso.
Para simplificarlo, te recomendamos que los separes por meses
como lo tenemos en nuestro Excel (luego veremos cómo los
unificamos con una fórmula muy sencilla).

Una vez que hemos extraído todos los datos de los meses a
analizar, nos vamos a la pestaña “valores”. Aquí es donde vamos
a ordenar los posts por meses, limpiar y formular.
Utiliza la fórmula VLOOKUP o BUSCARV para encontrar un
valor dentro de un rango de celdas. La búsqueda se hace
sobre valores ubicados en una columna, por lo que también se
la conoce como una búsqueda vertical (es la razón por la que
el nombre de la función contiene la “V”). Y se desarrolla de la
siguiente manera:

VLOOKUP (lookup_value, table_array, col_index_num, [range_


lookup])
Lookup_value (Obligatorio): Es el valor o el término que
queremos buscar y que será comparado con los valores de la
primera columna de la tabla. En nuestro caso A2.

Table_array (Obligatorio): Le mostramos dónde tiene que


buscar ese dato. Contiene tanto los valores a comparar como
los valores que serán devueltos por la función. En nuestro caso
buscará la url del post (A2) en la pestaña “Enero 2014” que
engloba desde la celda A2 a la B321. Añadiremos los signos
del dólar $, que sirven para fijar las celdas y que cuando
arrastremos la fórmula para copiarla en el resto de celdas no
nos de error.

Col_index_num (Obligatorio): Aquí va el número de la columna


de la Table_array que contiene los valores que serán devueltos
como resultado de la búsqueda. La primera columna del rango
de búsqueda tiene asignado el número 1. En nuestro caso, será
la columna número 2 de la pestaña “Enero 2014”, que es la que
contiene el dato de visitas.

Range_lookup (Opcional): Este es un valor lógico que indicará si


deseamos hacer una búsqueda exacta (FALSE) o una búsqueda
aproximada (TRUE). La nuestra es exacta.
En nuestro caso:

=VLOOKUP(A2;’Enero 2014’!$A$2:$B$381;2;FALSE)
Ahora arrastramos hasta el final y repetimos la misma operación
con todos los meses.

Ahora ya podemos ordenar, filtrar, borrar duplicados (si los


hubiera) y dejar nuestros datos limpios para pasarlos como
valores a la pestaña de “Tendencias”, donde añadiremos una
columna de “Total” para analizar qué post ha recibido más
tráfico a lo largo del histórico. Y generaremos otra pestaña
de “Tendencia” donde agregaremos gráficos con la función
“Sparkline” o “Minigráficos” en español.
De esta manera, tenemos los datos ordenados y visualmente es
más fácil entender el histórico y analizarlo.

Vale y ahora, ¿qué posts empiezo a optimizar? La respuesta es:


sentido común. Lo más lógico sería empezar a revisar los posts
que están recibiendo más visitas, pues son los que más se están
viendo y compartiendo, sobre todo en los últimos meses. ¿Están
actualizados? ¿Las imágenes o pantallazos corresponden con
la actualidad? ¿Estámos usando términos relevantes? ¿Tienen
sentido?

Pero sobre todo tendremos que fijarnos en aquellos que han


recibido mucho tráfico y luego han empezado a caer, o en los
que tuvieron picos algunos meses y otros meses no. Es ahí
donde habrá que descubrir qué ha podido pasar para que
esos contenidos hayan dejado de funcionar (¿tienen datos
que han quedado desfasados?, ¿han bajado posiciones en las
búsquedas?, ¿contienen enlaces rotos? etc.).
1.2. Búsquedas

Otra manera de identificar el contenido a optimizar es


analizando las búsquedas que realiza la gente en Google y por
las cuáles llegan a nosotros. Esto lo podemos averiguar a través
de la herramienta de Google Webmaster Tools.

Dentro de la pestaña

Tráfico de búsqueda Consultas de búsqueda

se muestran las consultas que han realizado los usuarios en el


buscador de Google y que han ofrecido como resultado URLs de
tu sitio. Aquí puedes consultar las páginas o posts de tu sitio que
se han visto con mayor frecuencia en los resultados de búsqueda
(impresiones) y cuáles han obtenido más visitas (clics). De forma
predeterminada se muestran los datos de los últimos 30 días,
pero puedes definir el periodo que necesites.

Ordenamos por clics para que nos muestre las búsquedas que
han recibido más interés. Es normal que en primeras posiciones
esté la marca o nombre de nuestro site. Y después el contenido.
Si activamos la pestaña “Con cambios” nos muestra el
porcentaje comparativo con el mes anterior, aquí vemos si han
descendido o aumentado las impresiones, los clics, el CTR o las
posiciones.

En el Support de Google para webmasters puedes ampliar


toda la información sobre los términos, los filtros que puedes
crear para segmentar, y todas las funciones y posibilidades que
puedes encontrar en la herramienta.

Primero nos centraremos en aquellas búsquedas que han bajado


el rendimiento (menos clics que el mes anterior, peor porcentaje
de CTR, peores posiciones…). Lo normal, tratándose de tu blog,
es que por la búsqueda que realiza el usuario sepas a qué
post se ha dirigido. Pero si no sabes a cuál se refiere, prueba a
realizar la misma búsqueda en Google desde una sesión privada
y sin estar logueado y aparecerá tu contenido en los resultados.

Céntrate en las búsquedas que están por debajo de la de marca


y analiza aquellas donde el rendimiento general haya bajado.
Hemos aparecido un 16% más que el mes anterior, pero tenemos
un 7% menos de clics, lo que hace que baje el CTR y la posición
media…. Es entonces cuando habremos identificado un post
susceptible de ser optimizado.

Una vez que hayamos identificado, de alguna de las dos maneras


anteriores, qué post necesita ser optimizado, recurriremos de
nuevo al sentido común para analizar el contenido y llevar a
cabo las siguientes mejoras.
02
Optimízalo
para
buscadores
2. Optimízalo para buscadores
Una correcta optimización SEO pasa por comprobar que todas
las meta-etiquetas del post estén correctas y ayuden a un mejor
posicionamiento del contenido, orientado a mostrar un resultado
llamativo que atraiga visitantes. Para ello, prestaremos atención
a cada uno de los siguientes elementos de tu post:

2.1. Title

La etiqueta title es el elemento más importante dentro de las


meta-etiquetas. Es lo primero que aparece en los resultados
en Google y es lo que se muestra cuando la gente comparte el
enlace en redes sociales (excepto en Twitter).

Hay que tener en cuenta una serie de cosas a la hora de


optimizar el title:
La etiqueta debe estar en la sección del código.
Cada página ha de tener un título único.
No debe sobrepasar los 70 caracteres, si no aparecerá
cortado.
Debe ser descriptivo con respecto al contenido de la página.
Debe contener aquella keyword para la que estemos
optimizando la página.
Nunca debemos abusar de las keywords en el título: esto hará
que los usuarios desconfíen y que Google piense que estamos
intentando engañarle.

Otra cosa a tener en cuenta es dónde poner la “marca”, es decir,


el nombre de la web. Por lo general, se suele poner al final del
title para dar más importancia a las keywords, separando éstas
del nombre de la web con un guión o una barra vertical. Pero si
el título es muy largo Google no lo va a mostrar entero (mostrará
puntos suspensivos), así que es importante que las keywords
importantes estén al principio y que el título no sea muy largo.

2.2. URL de la página

Es positivo que la dirección de tu página contenga la palabra


clave y una estructura de carpetas lógica. Por ejemplo, si quieres
vender una alfombra persa; ¿qué opción será mejor?

www.tutiendaonline.com/item_2178
www.tutiendaonline.com/alfombras/alfombra-persa

En este caso, la segunda opción da mucha más información a


Google (por ejemplo, que se engloba dentro de la categoría
alfombras, que es similar al resto de productos que hay ahí,
y que esa página está relacionada con el término “alfombra-
persa”).

Si en el caso de optimizar tu contenido antiguo te ves obligado


a modificar la URL del post, es mejor crear un contenido nuevo
aprovechando el contenido antiguo (si no sabes cómo, consulta
los recursos adicionales al final de esta guía).
2.3. Descripción

Google la obtiene de la Meta Description. Para la meta


description seguiremos los mismos principios que con el título,
solo que la longitud de ésta no debe superar los 155 caracteres.

Esta meta etiqueta da a Google una breve descripción de qué


trata la web. No tiene peso SEO directo, pero afecta de manera
considerable a la tasa de clics (CTR o click-through rate) en los
resultados de búsqueda. Además, define el texto que acompaña
al resultado de búsqueda, lo que es vital para la experiencia del
usuario.

Tanto en los títulos como en las descripciones debemos evitar la


duplicidad de contenido.

Compruébalo en:

Google Webmaster Tools Aspecto de la búsqueda Mejoras HTML


2.4. Estructura de la página

Google es capaz de identificar las páginas más importantes


de la estructura de tu web y situar accesos directos a ellas.
Algunos resultados pueden contener información de microdatos.
Si añadimos microdatos a nuestra web, Google puede leerla
y mostrarla en los resultados de búsqueda. Esta información
puede incluir votaciones de usuarios, foto y nombre del autor,
vídeo, audio, etc.

Para una completa optimización SEO, puedes analizar también


los siguientes elementos dentro de la página en la que se
encuentre tu post:

h1, h2, h3…

Estas etiquetas son muy importantes para una correcta


estructura de información y una buena experiencia de usuario,
ya que definen la jerarquía del contenido, algo que mejorará el
SEO de manera considerable. Debemos darle importancia al h1
porque normalmente está en la parte más alta del contenido y
cuanto más arriba esté una keyword más importancia le dará
Google a éste.
Etiqueta “alt” en la imagen

La etiqueta “alt” en las imágenes se añade directamente en el


propio código de la imagen:

<img src=”http://www.ejemplo.com/ejemplo.jpg” alt=”keyword molona” />

Esta etiqueta tiene que ser descriptiva con respecto a la imagen


y el contenido que la rodea, ya que es uno de los factores que se
usa para posicionarla en Google Imágenes.

Textos

El contenido es la parte más importante de una web y por mucho


que tu web esté muy bien optimizada a nivel SEO, si el contenido
no es relevante con respecto a las búsquedas que realizan los
usuarios nunca vas a aparecer en las primeras posiciones.
Para crear buen contenido que siga las directrices de Google
hay que tener una serie de cosas en cuenta:

Aunque no hay una medida estándar de cuánto es “suficiente”,


se recomienda que al menos cada post contenga 300
palabras.

El contenido tiene que ser relevante y útil para el lector:


simplemente preguntándonos si nosotros leeríamos eso,
obtendremos la respuesta.

Los textos deben contener las keywords para las que


queremos posicionar, evitando siempre el Keyword Stuffing.

Tiene que estar bien escrito, es decir, no puede contener


faltas de ortografía, errores de sintaxis o datos erróneos.

Ha de ser fácil de leer. Usa imágenes y gráficos que amenicen


la lectura y la hagan más visual, apoyáte en negritas, en
listados, etc.

Tiene que ser enlazable: si no le facilitamos al usuario la


forma de compartirlo es muy probable que no lo haga. Pon
botones de compartir en redes sociales en lugares visibles de
la página, sin estorben la visualización del contenido.

Debe ser actual: cuanto más actualizado esté tu contenido


mayor será la frecuencia de rastreo de Google en tu web y
mejor será la experiencia del usuario.
03
Optimízalo
para los
usuarios
3. Optimízalo para usuarios
Si a través de las vías planteadas al inicio de esta guía has
identificado que tu contenido debe ser optimizado, no bastará
con analizar y modificar únicamente su optimización para
buscadores. Debemos pensar también en mejorar el contenido
para el usuario. Para ello, estas son algunas de las técnicas a
llevar a cabo:

3.1. Actualízalo

Algunos posts contienen datos que pueden quedar desfasados


con el paso del tiempo. Para evitar que esa pieza de contenido
pierda interés por los usuarios al ver que no es un contenido
actualizado, es fundamental que revises constantemente la
información.

Una forma de llevar al día esta tarea es marcar en tu gestor de


contenidos aquellos posts que contengan datos susceptibles
de variar en el tiempo (por ejemplo, un porcentaje extraído de
un estudio que se actualiza cada mes o un paso a paso de un
proceso que explica el uso de una herramienta). De esta manera,
podrás establecer un sistema de alertas que te notifique la
revisión del contenido para actualizar toda aquella información
que, pasado un tiempo (el que tú establezcas) haya quedado
desfasada.
3.2. Amplíalo.

Debemos ser capaces de ampliar cualquier contenido


antiguo para darle un nuevo punto de vista con el que atraer
nuevamente tráfico. Se trata de cambiar el formato del post
(de texto a infografía, por ejemplo), añadir nueva información
(nuevas fuentes o ejemplos) o cambiar el contexto.

E incluso generar spin offs de esa pieza a optimizar. Imagina un


ebook sobre SEO. De una pieza como ésta puedes sacar cientos
de pequeños posts con información útil, para luego generar
desde ahí más descargas hacia el ebook (a través de un CTA).
De una pieza como ésta también puedes generar gráficos,
infografías y recursos, para luego utilizarlos en diferentes posts
aislados que llamen al usuario a la acción.

Esto significa que con cada pieza de contenido grande podemos


crear 5 variaciones con diferentes formatos. Es lo que llamamos
la teoría del pavo: trincha una pieza grande en 5 formatos
diferentes más pequeños y más fáciles de generar.

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3.3. Compártelo (de nuevo)

Twitter es un medio perfecto para generar tráfico. De hecho,


es nuestro principal canal de atracción de tráfico después del
orgánico. Por eso, para mantener cierto tráfico recurrente a un
contenido su difusión vía Twitter es clave.

Sin embargo, Twitter es también un medio donde los mensajes


desaparecen rapidísimo.

Como ves, cada mensaje recibe el 90% de las posibles


impresiones en la primera media hora desde su publicación. A
partir de ahí deja de verse. Por tanto, ¿qué sentido tiene publicar
un post o un buen tuit una única vez?

La clave de la difusión
de un post en Twitter
está en la republicación.
A la hora de crear una pieza de contenido en el blog
trabajaremos su difusión con una regla sencilla: cada pieza tiene
que tener, al menos, 6 tuits para conseguir la mejor difusión
posible durante un periodo de un mes. Para redactar esos 6
tuits, utilizamos la fórmula que hemos bautizado como “regla del
Vals”, con la que establecemos los posibles titulares que tendrá
cada uno de los tuits.

El primero de los tuits lo publicaremos en el momento de


lanzamiento del post y tendrá el título de éste (1): “¿Para qué
sirve un FAV en Twitter?”

El segundo de los tuits, publicado a los 7 días, tendrá otro


título, que habrá sido previamente definido en tu calendario
editorial (2): “10 razones para usar el favorito de Twitter”

El tercer tuit, a los 14 días, tendrá otro título diferente al


primero y al segundo (3): “Cómo ganar followers usando el
favorito de Twitter”

Y aquí entra en juego el baile. Después del tercer tuit,


volvemos de nuevo al ataque con el primero de todos (a los 15
días), que era el título de la noticia.

Luego el segundo (a los 21 días),

Y después el tercero (a los 30 días). Un, dos, tres; un, dos, tres.
Conclusión
A través de esta guía esperamos que hayas comprendido
la importancia de optimizar tus posts en la estrategia de
contenidos de tu blog. El objetivo de todo esto es que empieces
poniendo en práctica cualquiera de las técnicas planteadas
y midas los resultados obtenidos. Cambia cosas, anótalas,
comprueba los resultados de estos cambios y pregúntate si ha
funcionado para seguir tomando decisiones.

Eso sí, cuidado con cambiar muchas cosas de golpe: modificar en


exceso puede afectar, y seguramente afecte, negativamente a
nuestro posicionamiento, bajando posiciones y perdiendo tráfico.
Si piensas que el contenido ya no tiene sentido y te ves obligado
a modificar gran parte del post debes plantearle generar uno
nuevo. Y, sobre todo, no olvides informar al usuario del cambio.
Recursos adicionales:
Guía de Webmaster Tools para tu blog

Cómo crear un contenido nuevo aprovechando uno antiguo

La fórmula definitiva para republicar contenido en Twitter


¡Esperamos
que te haya
gustado !

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