Está en la página 1de 17

TOXICOLOGÍA DE LA SOLDADURA

MAESTRANTES:

 Marcatoma Mayra
 Cabanilla Daysi
 Pincay Mayra

LA

HISTORIA DE LA SOLDADURA
La historia de la soldadura se remonta a varios milenios atrás, con los
primeros ejemplos de soldadura desde la edad de bronce y la edad de
hierro en Europa y en Oriente Medio. La soldadura fue usada en la
construcción del Pilar de hierro de Delhi, en la India, erigido cerca del
año 310 y pesando 5.4 toneladas métricas. La Edad Media trajo
avances en la soldadura de fragua, con la que los herreros golpeaban
repetidamente y calentaban el metal hasta que se producía la unión.
En 1540, Vannoccio Biringuccio publicó De la pirotechnia, que incluye
descripciones de la operación de forjado. Los artesanos del
Renacimiento eran habilidosos en el proceso, y dicha industria
continuó desarrollándose durante los siglos siguientes. Sin embargo,
la soldadura fue transformada durante el siglo XIX. En 1800, Sir
Humphry Davy descubrió el arco eléctrico, y los avances en la
soldadura por arco continuaron con las invenciones de los electrodos
de metal por el ruso Nikolai Slavyanov y el norteamericano, C. L.
Coffin a finales de los años 1800. Incluso la soldadura por arco de
carbón, que usaba un electrodo de carbón, ganó popularidad.
Alrededor de 1900, A. P. Strohmenger lanzó un electrodo de metal
recubierto en Gran Bretaña, que dio un arco más estable, y en 1919,
la soldadura de corriente alterna fue inventada por C. J. Holslag, pero
no llegó a ser popular por otra década.

La soldadura se define como la unión localizada de dos piezas de


metal conseguida mediante la aplicación de calor, con o sin fusión,
con o sin adición de material de aportación y con o sin aplicación de
presión.

CLASIFICACIÓN DE LOS TIPOS DE SOLDADURA


• Soldadura heterogénea: Se efectúa entre materiales de distinta
naturaleza, con o sin metal de aportación, o entre metales iguales,
pero con distinto metal de aportación. Puede ser blanda o fuerte.

• Soldadura homogénea: Los materiales que se sueldan y el metal de


aportación, si lo hay, son de la misma naturaleza.

SOLDADURA MIG Y MAG

• El electrodo es un hilo de alambre continuo y sin revestimiento


(macizo o tubular) que se hace llegar a la pistola junto con el gas.

• Según sea el gas así recibe el nombre:

• MIG (Metal Inert Gas)

• MAG (Metal Active Gas).

GASES UTILIZADOS EN SOLDADURA

AGENTES CONTAMINANTES PRODUCIDOS DURANTE EL SOLDEO.

Humos y gases.

Radiaciones.

Ruidos y proyecciones

AGENTES CONTAMINANTES

HUMOS Y GASES

 A partir del metal base. Líquidos o gases en los depósitos a


soldar.
 A partir del recubrimiento del metal base. Galvanizado,
cromado, niquelado, etc. Por los productos desengrasantes.
 Por la limpieza. Del material base. Del material de aportación.
 A partir del material de aportación. Del revestimiento. De los
fundentes.

RADIACIONES
Durante el proceso de soldeo. Radiaciones infrarrojas. Radiaciones
ultravioletas. Pueden producir quemaduras en los ojos y en la piel.

RUIDOS Y PROYECCIONES

• El ruido se produce por operaciones auxiliares o bien


complementarias al soldeo. Esmerilado. Picado. Martilleado. Etc.

FISIOPATOLOGIA

 Absorción por vía oral o inhalación, por piel es insignificante.


 Por proceso de saturación de capacidad lenta y difusión
 Su absorción puede influirse por el Fe, Ca, fitato y aminoácidos
de la dieta.
 Después de la absorción intestinal se distribuye y llega al
hígado
 Se une a la transferrina y así entra a los astrocitos y neuronas
del cerebro o se acumula preferentemente en la mitocondria,
interrumpiendo la fosforilación oxidativa e incrementando la
generación de especies reactivas de oxígeno.
 Se excreta por orina y bilis

Elemento tóxico

Las sustancias en la soldadura que pueden ser dañinas son:

 Antimonio
 Bismuto
 Cadmio
 Cobre
 Etilenglicol
 Plomo
 Ácidos suaves
 Plata
 Estaño
 Zinc
TOXICOCINÉTICA

El humo se produce al condensarse los vapores, con la formación de


partículas sólidas. Esas partículas son muy pequeñas y presentan
tendencia a aglomerarse. Diversos estudios apuntan a que las
partículas tienen, en su mayoría, diámetros de 1 μm o menores, lo
que supone que el humo en este rango de dimensiones sea muy
respirable.

El tamaño de la partícula de polvo determina el tipo de lesión. La


mayoría de las partículas más gruesas, entre 50 μm y 100 μm, no
pueden penetrar en las vías respiratorias, quedando retenidas en las
fosas nasales y la garganta, y son eliminadas más tarde por el
organismo, mediante la deglución, secreción nasal o la expectoración
de las mismas.

El resto de partículas más finas (< 50 μm) pueden penetrar hasta los
pulmones y las inferiores a 5 μm lo hacen hasta los alvéolos
pulmonares. En general, las partículas de un tamaño suficientemente
pequeño flotan en el aire formando una suspensión de la que caen
lentamente.

Las de mayor tamaño sedimentan y el resto se mueven con el


movimiento del gas que las soporta. En el depósito y retención
pulmonar de estas partículas, intervienen factores tanto anatómicos y
fisiológicos como de índole puramente física, como el tamaño de las
partículas. Así las de diámetro superior a 30 μm carecen de
importancia fisiológica, ya que rara vez penetran en las vías
respiratorias.

Tanto la composición química como la concentración total son de


gran importancia para valorar el riesgo higiénico ocasionado por los
humos de la soldadura. Se supone que la mayor parte de los metales
están en forma de óxidos, pues las partículas metálicas se combinan
rápidamente con el oxígeno en las proximidades del arco.
El humo está formado por una mezcla compleja de contaminantes, y
como tal ha de ser considerado cuando se evalúa su toxicidad.
[ CITATION Ins16 \l 12298 ]

TOXICODINAMIA

Los principales efectos perjudiciales derivados de la inhalación de


humos de soldadura pueden clasificarse, de manera general, de la
siguiente forma:

a) Efectos agudos: Se entienden como tales aquellos que sobrevienen


por exposiciones a altas concentraciones de contaminantes, muy por
encima de los VLA, durante periodos cortos de tiempo (una jornada
laboral) y que provocan daños relacionados con el concepto de
“accidente de trabajo”. Así algunos metales como el cadmio, cobre,
berilio, cromo y níquel, tienen efecto irritante sobre los tejidos y
pueden originar inflamaciones pulmonares (neumonitis) y
acumulaciones de líquidos (edemas) de distinta gravedad según el
metal y la severidad de la exposición.
Ciertos gases y vapores, como los ácidos clorhídrico y fluorhídrico, la
acroleína, el ozono, el dióxido de nitrógeno y el fosgeno, provocan
irritación de las mucosas de las vías respiratorias y del tejido
pulmonar, y dependiendo de su concentración y del tiempo de
exposición, pueden ocasionar desde leves irritaciones hasta edemas.
Para algunas sustancias, como ácidos clorhídrico y fluorhídrico, la
acroleína, el ozono, su inmediata acción irritante sobre los ojos, la
nariz y la garganta puede servir de alerta al trabajador, por el
contrario, en el caso del dióxido de nitrógeno, el fosgeno y los
metales citados al principio, su inhalación puede pasar desapercibida
y no manifestarse síntomas de intoxicación hasta pasadas 24 horas
desde la exposición.
El monóxido de carbono y el dióxido de nitrógeno modifican la
composición de los glóbulos rojos de la sangre, con lo que su función
oxigenadora de los tejidos queda temporalmente disminuida. Ello
provoca jaquecas, aturdimiento y malestar crecientes conforme
aumenta la dosis inhalada, pero en condiciones muy desfavorables
podría llegarse a la inconsciencia o incluso a la asfixia química.
Los humos metálicos pueden provocar la conocida como “fiebre de
los metales” caracterizada por síntomas similares a los de la gripe,
que se presentan durante la noche posterior a la exposición y que,
normalmente, remiten sin dejar secuelas.
El daño de los rayos ultravioletas es acumulativo y permanente.
Puede afectar a la córnea, el cristalino, el iris, la retina y los tejidos
epiteliales y conjuntivales relacionados. Se han registrado daños en
cuatro estructuras fundamentales: la conjuntiva, la córnea, el
cristalino y la retina.[ CITATION ZAM15 \l 12298 ]

b) Efectos crónicos: Se consideran efectos crónicos aquellos que se


presentan como consecuencia de largos periodos de exposición a
concentraciones moderadas de contaminantes, a menudo por encima
de los VLA.
Son los más característicos de la inhalación de todo tipo de humos de
soldadura y se manifiestan tras largos años de trabajo, incluso
finalizada la vida laboral, debido a su progresiva acumulación en el
organismo o al proceso de deterioro de los órganos afectados.
Estos daños, de naturaleza y gravedad variables, se corresponden
con el concepto de “enfermedad” profesional”. Las finas partículas
que forman los humos pueden penetrar hasta la zona más profunda
de los pulmones y a lo largo del tiempo llegar a causar daños de muy
distinta relevancia, desde neumoconiosis benignas con leves
sobrecargas pulmonares, como ocurre con el hierro, hasta graves
fibrosis como las causadas por el berilio. La exposición continuada a
gases y vapores irritantes puede conducir a patologías bronco
pulmonares crónicas, como en el caso de los fluoruros. Ciertos
metales, como el berilio, cadmio, cobre, manganeso y plomo, y gases
como el monóxido de carbono y el monóxido de nitrógeno, se
disuelven en la sangre pulmonar y se distribuyen por todo el
organismo pudiendo llegar a originar deterioros progresivos en
diferentes órganos.

Efectos sensibilizantes: Se dice que una sustancia es sensibilizante


cuando después de exposiciones, más o menos prolongadas o
intensas a ella, se origina una hipersensibilidad de manera que
posteriores exposiciones mínimas desencadenan reacciones
fisiológicas adversas muy superiores a las que cabría esperar.
Los humos de soldadura pueden contener alguno de estos agentes
sensibilizantes capaces de actuar fundamentalmente sobre el sistema
respiratorio, siendo el asma su manifestación más común.

d) Efectos cancerígenos: Dependiendo de los procesos, o por formar


parte de los materiales que se están soldando, en los humos de
soldadura pueden estar presentes sustancias potencialmente
cancerígenas. Salvo en el caso del cromo, los estudios actuales no
permiten definir con suficiente certeza el carácter cancerígeno de los
humos de soldadura en general.
Sin embargo, estudios epidemiológicos indican que los cánceres
bronco pulmonares tienen una mayor incidencia, en una relación 14 a
10, entre los soldadores que entre la población general.

e) Efectos teratógenos: Se consideran sustancias teratógenos


aquellas que pueden perjudicar el desarrollo del feto durante el
embarazo. En los humos de soldadura presentan esta propiedad el
plomo, el monóxido de carbono y, posiblemente, el cadmio y el
pentóxido de vanadio.
En la siguiente tabla se resumen las principales características
toxicológicas de los me-tales presentes en el acero inoxidable, y que
han sido objeto del presente estudio:

Intoxicación aguda Intoxicación crónica


Cromo Gastrointestinal: dolor Cutánea: úlceras indoloras
abdominal, vómitos, diarrea, en dorso de las manos y
hemorragia intestinal.
dedos, dermatitis de
Insuficiencia renal aguda por contacto. Respiratoria:
necrosis tubular. Insuficiencia
rinitis, úlcera, perforación
hepática. Coagulopatía. del tabique nasal.
Cancerígeno de pulmón y
de senos nasa-les y
paranasales.
Níquel Fiebre de los metales Respiratoria: rinitis,
perforación del tabique
nasal, sinusitis, anosmia.
Cutánea: dermatitis de
contacto. Cancerígeno de
pulmón y de senos nasales
y paranasales. Cáncer
bronco-pulmonar o
etmoidal
Manganes Neumonitis química: neumonía Alteraciones respiratorias.
o mangánica. Cuadro neuropsiquiatrico:
“psicosis mangánica”,
“síndrome parkinsoniano”
con hipertonía y temblor
de extremidades
inferiores.
Molibdeno Irritación del tracto Dolores articulares. Daños
respiratorio. hepáticos

DIAGNÓSTICO DE LAS CONDICIONES DE TRABAJO DEL


SOLDADOR

Se considera en primer lugar un diagnóstico de las condiciones de


trabajo del soldador con base a la norma técnica, para poner en
contexto las características inherentes del mismo.

Cargo: Soldador.
Función: Soldar piezas metálicas para la industria
metalmecánica.
Condiciones de
trabajo
1.Factores de riesgo físico
Referentes Consideraciones
Nivel alto: no se
a. Ruido Equipos para puede escuchar
soldar, de corte y una conversación
pulidoras. a 40-50cm de
distancia.
Calor generado por Nivel alto:
b. Energía los equipos Temperaturas
Térmica propios, hornos extremas que
para la soldadura afectan al
y el mismo soldador,
ambiente. percepción
subjetiva de
calor.
Radiaciones
c. Radiación producida ultravioletas e
Energía en los procesos para infrarrojas que en
electromag soldar. su gran mayoría
nética afecta los ojos y
la piel.
2. Factores de riesgo químico
Se genera humos
metálicos en el Cromo, óxido de
a. Sólidos proceso, también hierro,
incide la pintura y manganeso,
recubrimientos níquel, plomo,
que puede tener cadmio, zinc,
la superficie del molibdeno, entre
material base. otros.

En los proceso de soldadura se desprenden variables que


incrementan la generación de contaminantes como la corriente
eléctrica, básica para que pueda funcionar los equipos, que con el
aumento de esta aumenta también la producción de humos, así como
el aumento del voltaje también aumentan los mismos, el gas de
protección que se utiliza en varios procesos afecta la composición y la
generación, si se toma el CO2 como ejemplo frente al argón, el
primero genera más humos que el segundo, por estos motivos
conocer los procesos en los cuales se trabaja se deben conocer.

Medidas de Prevención para la exposición a Humos de


Soldadura

Las medidas preventivas dependerán de los resultados de la


evaluación de riesgos realizada por puestos de trabajo. Cuando las
concentraciones de contaminantes a las que se encuentra expuesto
el soldador son inferiores a los límites de exposición profesional a
agentes químicos, los riesgos por inhalación de humos de soldadura
pueden considerarse controlados. Dentro de las medidas de
prevención podemos mencionar las siguientes:
1. Actuación sobre el foco contaminante, es decir eliminar o sustituir
contaminantes por otros menos peligrosos siempre que sea posible.
2. Aplicación de procesos de soldadura de menor contaminación,
seleccionando los procesos menos contaminantes, tales como el
oxicorte convencional pueden reducirse efectuando el corte con láser,
y eliminarse con el corte con chorro de agua a alta presión, soldadura
robotizada, la soldadura de acero inoxidable con electrodo no
consumible de tungsteno (TIG), genera una cantidad de humos
sensiblemente inferior a la realizada con electrodo consumible
revestido.
3. Actuación sobre la propagación de los contaminantes mediante la
ventilación evitando al máximo que los humos recién generados se
dirijan a las vías respiratorias del soldador. Para ello normalmente
será necesario aplicar la Ventilación localizada, la cual consiste en
crear corrientes de aire que actúen directamente sobre el foco de
contaminación, generalmente aspirando los humos de soldadura.
4. Aspiración acoplada a la pantalla a través de campanas de
aspiración ajustadas a ventiladores las cuales pueden resultar
eficaces cuando se opera en grandes estructuras en astilleros,
especialmente en el interior de piezas huecas, cisternas cubas y
espacios confinados, donde normalmente se renueva el aire Marco
Teórico 23 ambiente a través de ventiladores.
5. El Sistema de ventilación mecánica en una nave de soldadura: La
ventilación mecánica se basa en conseguir una renovación del
ambiente total del local mediante corrientes de aire estratégicas
creadas mediante ventiladores que extraigan el aire interior,
introduzcan el aire exterior, o produzcan una combinación de ambos
efectos. Estos ventiladores pueden estar instalados de forma aislada
en techos y paredes, o estar integrados en sistemas de conducciones
de distribución. (Rojas, 2009)
6. Actuación sobre el propio soldador: Uso de equipos de protección
individual para protección de las vías respiratorias, teniendo en
cuenta que son el último recurso cuando el resto de las medidas
técnicas han resultado inviables o no han resuelto suficientemente el
problema; utilizándolas como complemento y no como sustito. Su uso
normalmente está reservado a condiciones de trabajo especiales, por
ejemplo, imposibilidad técnica de adoptar medidas de protección
colectiva, operaciones de emergencias imprevistas, avería o periodo
de instalación de dispositivos de ventilación, trabajos de
mantenimiento esporádicos, y el tiempo de trabajo con ellos será el
mínimo posible.
En todo caso se deben establecer los periodos de uso continuado, se
recomienda que en ningún supuesto supere las dos horas, y de
pausas, en función de la sobrecarga que representen para el sistema
respiratorio y en su caso del sobreesfuerzo físico que pueda suponer
su utilización. Es imprescindible seguir estrictamente las instrucciones
de uso que acompañan a los equipos. (Rojas, 2009)

MEDIDAS DE PROTECCIÓN INDIVIDUAL

Protección individual respiratoria

Salvo en situaciones de exposición excepcionales o de muy corta


duración, no resultará aceptable confiar todo el control del riesgo a la
utilización por el trabajador de un equipo de protección individual
(EPI) respiratoria. No obstante, en los trabajos de soldadura de
aceros inoxidables o de aceros altamente aleados con cromo o níquel,
dada la gravedad de los daños que pueden producirse, el empresario
pondrá a disposición de los trabajadores expuestos, que los soliciten,
equipos adecuados de protección respiratoria incluso si las medidas
técnicas de control existentes han mostrado fehacientemente su
suficiencia. En tal caso el uso de los equipos será voluntario para los
trabajadores.
Si en alguna tarea, pese a utilizar las mejores medidas técnicas y
organizativas de control disponibles, no fuera posible conseguir que la
exposición de los trabajadores estuviera por debajo del valor límite, la
utilización de protección individual respiratoria será obligatoria y, si
hubiera de emplearse por periodos prolongados, se recurrirá
preferentemente a equipos de suministro de aire y a medidas
organizativas de rotación de los trabajadores. En estos casos habrá
de considerarse obligada para los trabajadores la vigilancia de la
salud.
En realidad, en todos los casos en que haya que usar protección
individual respiratoria (exposiciones ocasionales o puntuales,
insuficiencia de las medidas de protección colectiva pese a su buen
diseño e implantación e, incluso, utilización voluntaria por los
trabajadores) es más que recomendable recurrir a pantallas de
soldadura cerradas con aportación de aire filtrado, por su indudable
mayor comodidad y por la dificultad que presenta hacer compatibles
otros equipos de protección con las pantallas de soldadura de cabeza,
que son siempre preferibles a las de mano.
En cualquier caso, si se utilizaran equipos de protección respiratoria
dependientes del medio ambiente, habrían de ser de alta eficacia
frente a partículas sólidas (mascarilla autofiltrante FFP3 o mascarilla
con filtros desmontables P3) y compatibles con la pantalla de
soldadura de cabeza.
El mal uso de los EPI puede ocasionar un daño grave a la salud de los
trabajadores, por lo que el empresario se asegurará de que estos
reciban una información y adiestramiento suficientes sobre su
utilización correcta, con especial atención a su ajuste a las vías
respiratorios, así como sobre la limpieza, conservación,
almacenamiento y necesidad de sustitución. A estos efectos, entre
otras fuentes, se tendrán en cuenta las instrucciones del fabricante.
Protección de las trabajadoras embarazadas y en período de lactancia
natural se debe evitar la posibilidad de exposición a los humos de
soldadura de aceros inoxidables de las trabajadoras embarazadas y
en periodo de lactancia natural.

VIGILANCIA DE LA SALUD

Vigilancia de la Salud debido a la exposición a humos de soldadura


Según Albiano (1999), con el objetivo de prevenir las enfermedades
ocupacionales en los procesos de soldadura; el soldador debe ser
objeto de controles de salud rutinarios por parte del personal de salud
ocupacional, orientada a la detección precoz de enfermedades
profesionales y al control de otros posibles efectos nocivos de los
contaminantes concretos a los que estén expuestos. Para desarrollar
esta función los servicios de prevención necesitan conocer las
condiciones de trabajo, los contaminantes presentes en el puesto de
trabajo y la severidad de las exposiciones de los trabajadores, para lo
cual es fundamental disponer de una “Evaluación de Riesgos” del
puesto de trabajo. Así mismo se debe tener en cuenta cualquier
patología sospechosa de haber sido originada por las condiciones de
trabajo, incluyendo posibles signos o síntomas que puedan referir los
propios trabajadores.

Evaluación Médica Ocupacional:

Los reconocimientos médicos tienen el carácter de obligatorios para


el empresario, y también para el trabajador en los casos en los que
así esté establecido en el decreto ejecutivo 2393 de 1986. Se deben
realizar Protocolos de aplicación general a todos los soldadores estos
incluyen: o Protocolo para “Silicosis y otras neumoconiosis”. o
Protocolo para “Asma laboral”. o Protocolo para “Plomo”. o Protocolo
“Amianto”. Y que pueden ser visualizados en la siguiente tabla sobre
la vigilancia de la salud del soldador.
En los casos de
exposición a otros posibles contaminantes diferentes a los señalados,
como pueden ser el cromo, el níquel, el cadmio, el cobre, etc. no
existen protocolos específicos por lo que en esta propuesta se
recomendará el procedimiento a seguir para la vigilancia
epidemiológica de estos metales.
Prueba de Espirometría.- El personal médico de los servicios de
prevención establecerá los protocolos de vigilancia de la salud que
corresponda aplicar a cada trabajador en particular, definiendo en
ellos los distintos reconocimientos médicos a realizar, tales como por
ejemplo, la determinación de la capacidad pulmonar mediante
espirometrías, el estado de las vías respiratorias mediante
radiografías, el contenido de metales en sangre y orina, etc. así como
su periodicidad, semestral, anual, bianual, etc. (Rojas, 2009)

Referencias
ERNESTO, Z. P. (2015). INFLUENCIA DEL CONTROL AMBIENTAL Y BIOLÓGICO EN LA EXPOSICIÓN
DE LOS TRABAJADORES AL HUMO DE SOLDADURA EN EL TALLER DE MANTENIMIENTO.
Guayaquil, Ecuador.

Laborales, I. A. (2016). Estudio de la exposición a los humos generados en la soldadura de


acero inoxidable. Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales.
Revista SOMISA https://somisa.mx/la-historia-de-la-soldadura/

Versión en inglés revisada por: Jesse Borke, MD, FACEP, FAAEM,


Attending Physician at FDR Medical Services/Millard Fillmore
Suburban Hospital, Buffalo, NY. Also reviewed by David Zieve, MD,
MHA, Medical Director, Brenda Conaway, Editorial Director, and the
A.D.A.M. Editorial team.

Guía De Información Para El Control De La Contaminación De Gases Y


Humos Del Proceso De Soldadura. José Alberto Núñez González.

American Welding Society. Welding Handbook: Fumes And Gases,


Eighth Edition. Miami: Leonard P. Cono, 1987. V.2, P. 527-535. Isbn 0-
87171-280-4.

Colombia. Congreso. Ley 9 De 1979, Enero 24, Por La Cual Se Dictan


Medidas Sanitarias. Bogotá: El Congreso; 1979.

Intoxicación Ocupacional Por Metales Pesados Msc. Dunia Rodríguez


Heredia

Camacho Barreiro A, Ariosa Roche L. Diccionario De Términos


Ambientales. La Habana: Centro Félix Varela; 1998.P.45.

Metales Pesados [Citado 3 Jun 2012]. Disponible En:


Http://Www.Cricyt.Edu.Ar/Enciclopedia/Terminos/Metalespes.Htm

Toxicología Clínica; Indalecio Morán Chorro Jaume Baldirà Martínez


De Irujo Luís Marruecos – Sant Santiago Nogué Xarau

Intoxicaciones De Origen Laboral , M. Lezáun

Toxicidad Por Exposición A Humos De Soldadura En La Construcción


De Embarcaciones En Astilleros Navales Ecuatorianos - Astinave Ep.
Propuesta De Un Modelo De Prevención Para El Factor De Riesgo
Químico En Los Procesos De Soldadura”; Ing. Ind. Cano Menéndez
Yander Daniel
Rojas, J. (Mayo De 2009). Obtenido De
Http://Www.Osalan.Euskadi.Eus/ S94-
Osa9999/Es/Contenidos/Libro/Higiene_200920/Es_200920/Adjuntos/El
%20% 20soldador.Pdf

Albiano. (1999). Toxicologia Laboral. Polemos.

También podría gustarte