ITESO

Facultad de Filosofía
Fenomenología de la Religión
Alex Zatyrka
Estudiante: Diego Peláez Londoño.

La fenomenología de la religión comienza a ser una materia de gran interés a nivel

sociológico a partir del S, XIX. Los académicos se veían interpelados por una manera
particular que daba una organización social particular que necesitaba ser abordada para
comprender diversas comunidades. Juan Martín Velasco en su libro Introducción a la
fenomenología de la religión, hace una compilación importante y bastante amplia por todo
el proceso que tiene que ver con bordar el hecho religioso desde una perspectiva histórica;
esto permite tomar distancia y oxigenar la relación con respecto a la diversidad y la
apertura a distintas formas de expresar el sentido religioso del ser humano. La perspectiva
histórica es fundamental, ya que se separa de lo teológico y lo metafísico y lo convierte en
una materia de estudio que implica otros puntos de vista.

El estudio de las religiones a partir del método propio de las ciencias positivas y la relación
con el método fenomenológico. Permite encontrar una cierta tangibilidad de lo que se ha
podido encontrar a partir del vínculo entre religión y ser humano, la importancia de esta
para la supervivencia de las personas a lo largo de la historia y las distintas perspectivas que
genera la religión para comprender al ser humano. Las ciencias positivas desde un método
científico y cuantificable permiten encontrar variantes significativas en torno al estudio, la
fenomenología, por el contrario, nos da una perspectiva del campo y de las personas con
respecto a su experiencia y sensibilidad, esto se ve articulado por el método comparativista
que da una noción amplia en el estudio.

La religión como expresión de la cultura y del qué hacer del ser humano permite tejer una
relación con respecto a la vivencia personal del hecho religioso y esto como se articula con
la comunidad, la una es necesaria para la otra y es uno de los puntos principales que
defienden algunos sociólogos. En otro sentido es importante abordar la influencia que ha
tenido la cultura para formar la religión y su necesidad de estructura y de modo contrario la
relación que ha gestado la religión con respecto a la cultura, ambas han formado un híbrido
que se constituye así mismo como algo inseparable y sumamente importante para la
evolución del ser humano. De este modo es como puede afirmarse que la religión es un
hecho trasformador de la cultura y de los seres humanos y estos a su vez han venido
trasformando y cambiando el hecho religioso desde una vivencia personal vivida
comunitariamente.