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ESPECIALIZACION DOCENTE EN CIENCIAS SOCIALES

MARCO POLÍTICO PEDAGÓGICO

Clase 2. Los desafíos de una escuela secundaria para todas/os

La institución que he elegido es una escuela en la periferia marplatense. El contexto


en el que está inmersa es un barrio con graves situaciones de violencia y de delincuencia,
mayormente relacionadas con el narcotráfico. La escuela atraviesa serias dificultades, que
no son ajenas a la realidad de la zona. Entre las mismas encontramos la deserción, los
episodios violentos y una convivencia dificultosa. Esto lleva a que muchos estudiantes
decidan cambiarse de institución y que muchos docentes renuncien a sus módulos. En la
actualidad, solo concurren tres estudiantes al 5° año de la secundaria, y uno al 6°. El clima
que se vive desde hace un tiempo es de suma tensión. A esto se le suman problemas de
infraestructura, los que llevan a pérdidas de días de clase, con la consiguiente reducción del
proceso de continuidad pedagógica.

Tomaré como referencia la escena b: “En un curso, estudiantes que no asistían a la


escuela desde hace más de un año, quieren volver e intentar terminar la secundaria.
Algunos/as docentes ven como  compleja su reinserción en la escuela.”

En la escuela en cuestión se dan este tipo de situaciones año tras año. Muchos
estudiantes dejan de asistir, la mayoría de ellos en los primeros años pero también se dan
muchos casos de abandono en la última etapa del secundario. Algunos consiguen trabajos
temporales y deciden dedicarse a ellos, no asistiendo a la escuela. Otros optan por cambiar
de institución y en el camino pierden meses de clase, y terminan perdiendo el ciclo lectivo
completo. También existen los casos de las chicas que quedan embarazadas y abandonan la
escuela. Y a algunos estudiantes se les da el pase a otra escuela por recurrentes problemas
de convivencia y de violencia. La matrícula de la escuela baja año tras año. Esto pone en
riesgo el mantenimiento de los cursos, alguno de los cuales son de reciente creación. La
primera promoción data del año pasado. Año en el que los problemas de infraestructura y
de violencia llevaron a esta deserción notable de la escuela. No obstante estos problemas, la
escuela hoy se encuentra mucho mejor. Por esto, algunos estudiantes que dejaron de venir,
manifiestan su deseo de retornar para finalizar sus estudios. Sin embargo, algunos docentes
creen que será complejo el retorno de los mismos. Pareciera que desean un estudiantado
“ideal”, basado en preceptos obsoletos y discriminadores. Algunos expresan que son
estudiantes problemáticos o con sobre edad para reincorporarse. Si bien es cierto que la
escuela atravesó graves problemáticas de convivencia entre diferentes grupos de
estudiantes, debemos trabajar en este punto, intentando que los chicos retornen y puedan
terminar el secundario, cumpliéndose así el derecho a la educación.

El “falso problema” sería la complejidad de la reinserción en la escuela. El anexo


de la Resolución CFE Nº 93/09 expresa una serie de orientaciones para la orientación
pedagógica e institucional de la secundaria obligatoria. En la parte 3 punto 3, titulada Sobre
las condiciones de ingreso, permanencia, movilidad y egreso se manifiesta la situación en
cuestión. Allí se destacan la libre matriculación de los estudiantes y la organización
temporal del plan de estudio y de la condiciones de regularidad. Para estos estudiantes que
por diversos problemas han tenido que dejar de asistir a la escuela, en este apartado se
presentan una serie de posibles soluciones al problema real, que sería que los chicos no
terminen la escuela secundaria. Entre otras medidas se muestran alternativas de cursado
para poblaciones como la de la escuela en cuestión, con alumnos trabajadores o alumnas
embarazadas. La semi presencialidad o el sistema de tutorías son algunas opciones. Que los
estudiantes deseen regresar a la escuela no representa un problema sino un gran paso para
que nosotros como docentes colaboremos en que puedan terminar sus estudios.

Por supuesto que en este punto estamos de acuerdo con los preceptos de Flavia
Terigi en su crítica al aprendizaje mono crónico, aquel que expresa que se debe utilizar el
mismo tiempo para todos. Sabemos que nuestra realidad nos demuestra lo absurdo de este
supuesto. La trayectoria real de los estudiantes dista mucho de la trayectoria teórica
expuesta por un sistema educativo en desuso. Las trayectorias de los estudiantes del caso
analizado estarían enmarcadas en las no encauzadas. Aquellas que desestructuran nuestro
saber pedagógico, y que nos ponen a prueba en nuestra tarea docente.

Es necesario entonces, que pongamos en marcha un modelo pedagógico renovador.


Los problemas del aula los conocemos todos aquellos que convivimos diariamente en ellas.
Ya es momento de terminar con los clichés y los supuestos trillados, como los del
cronosistema, la descontextualización de saberes, la presencialidad o la simultaneidad.
Conocemos las falencias del Estado en el sistema educativo. Pero también debemos
interpelarnos en nuestra tarea de colaboradores en el cumplimiento de derechos. Como
docentes de Ciencias Sociales, deberíamos poner especial atención en el desarrollo de los
avatares de nuestra sociedad. Entender que está en profundo y constante cambio y que los
estudiantes que tenemos son estos, no otros. Y que conocer sus realidades, comprenderlas y
colaborar con ellas es parte crucial de nuestra labor.

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