Está en la página 1de 1

Las palabras son mías.

Las veo, me llaman por mi nombre.


Aunque me alejan para siempre.
Ellas me condenan.
Abro la boca. Nunca me callo.
Dije la verdad. Siempre.
Aunque tenga ese sabor horrible.
Hay peores palabras. Las endulzadas. Las mentirosas.
A veces las recuerdo.
No debió tocarte.
No debiste escribir sobre eso.
Siempre estuviste celosa.
Es tu opinión sobre la verdad.
Sentía una espantosa aversión.
La verdad es que el cuento es una mierda.
Pero creo en lo que escribí.

También podría gustarte