Está en la página 1de 14

República Bolivariana De Venezuela

Ministerio Del Poder Popular Para La Defensa


Universidad Nacional Experimental Politécnica De La Fuerza Armada
UNEFA- San Felipe

Elaboración de un fertilizante orgánico a base de humus de lombriz y vinaza para


la evaluación del crecimiento en plantas de cebollín (Allium schoenoprasum)
“Municipio San Felipe sector El Jobito”

Profesora: ing. Yorkys Pérez


asignatura: Fertilidad
Emprendedores:
Adrian Montesinos
Nelson Campos
Introducción

Los cultivos agrícolas son a nivel mundial la fuente principal de la dieta


alimenticia de todos los seres humanos, lo que ha llevado a la implementación de
nuevas técnicas de cultivos y fertilización que permitan la sustentabilidad de esta
actividad en el tiempo, y si también ser aprovechadas por las generaciones
futuras.

En la actualidad Venezuela ha sido afectada, producto de la escases de rubros


del campo los cuales son parte fundamental de la alimentación de la población,
dicha situación a desprovisto principalmente a los agricultores de productos
esenciales para los cultivos como lo son abonos, fertilizantes y herbicidas lo que
ha generado un aumento en los precios de las distintas frutas, verduras y
hortalizas para el consumo. En este sentido se están implementando nuevas
formas de satisfacer la necesidad de estos agro-productos que son de gran
importancia con la creación de fertilizantes, abonos e insecticidas ecológicos que
no causen daños al ambiente donde estos son aplicados.

Los residuos generados como desechos y desperdicios productos de la


actividad humana y de las industrias son en gran parte contaminantes del
ambiente lo que ha causado daños en las aguas, el suelo, el aire y la atmosfera
permitiendo a su vez la muerte de especies susceptibles a todos estos factores
nocivos.

Entre estos subproductos podemos encontrar una amplia variedad de


compuestos con propiedades químicas capaces de complementar la fertilización
de los suelos en cultivos. Uno de estos productos de gran importancia es la
vinaza el cual es el resultado de la destilación del jugo de la caña de azúcar. Dicho
compuesto es rico en una amplia gama de elementos los cuales puede ser
aprovechables para la fertilización de los suelos. Por otra parte se conocen que la
degradación de material orgánico puede generar un residuo llamado humus el cual
puede aportar propiedades físicas y químicas a los suelos las cuales son
aprovechables para las plantas en su desarrollo.
Vinaza

La vinaza es un material líquido que resulta de la producción de etanol, ya sea


destilada de la melaza fermentada o de la fermentación directa de los jugos de la
caña de azúcar. Está compuesta por materiales orgánicos y nutrientes que hacen
parte de compuesto y constituyentes vegetales (García y Rojas, 2006)

Contiene alrededor de un 93% de agua, la cual por evaporación se lleva la


vinaza diluida de un 6% de solidos hasta una concentración del 60%. Es muy rica
en potasio y cantidades apreciables de otros elementos esenciales para la
nutrición de las plantas como Ca, Mg, So (Pereira et al, 1992, Mora y castor,
2005).

Entre los usos de la vinaza se conoce que puede reutilizarse en proceso de


fermentación, abonos en cultivos agrícolas que provee la materia prima, usado
como combustible en la destilación, recuperación de la proteína celular obtenida
por el tratamiento anaeróbico de la vinaza para la alimentación animal, venta de
vinaza pura y concentrada para el uso directo de productos pecuarios, previos
estudios nutricionales y producción de cenizas potásicas para el mercado de los
fertilizantes ( González et al, 2004, sarria y serrano, 2008).
Humus de lombriz

El humus es materia orgánica degradada a su último estado de descomposición


por efectos de microorganismos, que se encuentra químicamente estabilizada, por
lo que regula la dinámica de la nutrición vegetal en el suelo. El humus líquido
contiene todos los microorganismos que se encuentran en el producto sólido, y
como es lógico aporta todos los beneficios microbióticos. Además, aporta
nutrientes como aminoácidos naturales y extractos de algas que le confieren como
el fertilizante perfecto para cualquier planta.
Al ser líquido, se facilita enormemente su aplicación, basta con aplicarlo con un
riego normal o a través del riego que se tenga instalado. Gracias al sistema
Venturi o similar es perfectamente posible. La dosificación es muy sencilla: basta
con mezclar con la cantidad de agua necesaria para un riego.

Por estos motivos, se produce una reducción de los costes logísticos, lo que


permite que el agricultor, con una inversión similar, pueda aplicar mucho más
humus líquido que sólido en la temporada de cultivo, multiplicando los beneficios.

Por otro lado, su naturaleza líquida hace que llegue mucho más rápido a las
raíces. Los microorganismos que hemos aportado se instalan antes, se
reproducen a mayor velocidad y las plantas rápidamente incorporan los nutrientes;
el resultado visible es mucho más evidente y rápido que con el humus sólido.

En cultivos intensivos bajo abrigo, son suficientes 120L/Ha al año de humus


líquido para mejorar la productividad y alargar la duración de la plantación.

En frutales, la dosificación varía entre 60 y 90 litros/ha y año, dependiendo


mucho del marco de plantación y las características del suelo. Para huertos
pequeños y jardines la dosificación es de 1L/m2 y año, repartiéndolo en varias
aplicaciones a lo largo de la temporada de producción.
Biofertilizantes

Los biofertilizantes son productos a base de microorganismos benéficos para los


suelos, formados especialmente bacterias y hongos. Estos microorganismos viven
asociados o en simbiosis con las plantas y les ayudan a su proceso natural de
nutrición, además de ser regeneradores de suelo.

En suelos que no han sido afectos por el uso excesivo de fertilizantes químicos,
estos microorganismos se encuentran de forma natural por lo que el uso
de biofertilizantes ayuda, y mucho, a recuperar el equilibrio de los suelos, hacerlos
“más naturales” a la vez que sirven a su nutrición. Por su uso, los biofertilizantes
se podrían dividir en 4 grandes grupos; fijadores de nitrógeno, solubilizadores de
fósforo, captadores de fósforo y promotores del crecimiento vegetal.
Fijadores de nitrógeno

Las bacterias fijadoras de nitrógeno que se desarrollan de forma natural en el


suelo, representan un biofertilizante ecológico y se dividen en dos grupos: Las
simbióticas, como Rhizobium, específicas de las leguminosas y las libres, que
viven en el suelo y no necesitan a la planta para su reproducción,
como Azotobacter y Azospirillum. Las bacterias libres fijadoras de nitrógeno, en
concentraciones adecuadas y en ciertos cultivos de baja demanda, pueden
sustituir la aplicación de nitrógeno sintético (urea, amoníaco, nitratos).

Solubilizadores de fosforo

Son los microorganismos que realizan el paso de fósforo de formas orgánicas a


inorgánicas, formas insolubles a solubles. Esta transformación de fosfatos
insolubles a formas disponibles para las plantas se obtienen por procesos de 1).
Quelación, 2). Reducción de Hierro, y 3). Producción de ácidos orgánicos.

Durante el proceso de Quelación, se forman quelatos de Ca, Mg y Fe gracias a


los microorganismos presentes en el suelo, esto logra desestabilizar el fósforo
mineral y lo hace soluble. En el proceso de Reducción de hierro, el Fe3+ se
reduce a Fe2+, este último es más soluble, el fosfato de hierro se desestabiliza y
se libera difosfato, que es una forma disponible para las plantas. Finalmente, en el
proceso de Producción de Ácidos Orgánicos, los microorganismos producen y
liberan algunos de estos compuestos, que reaccionan con aniones fosfatos fijados,
lo que permite su solubilización.

Captadores de fosforo

Las micorrizas fungen como captadoras de fósforo, penetran o se unen a las


raíces para que éstas les proporcionen los alimentos necesarios y con ello
cumplan su ciclo de vida, se alimentan de exudados de la raíz ricos en azúcares.
La presencia de las micorrizas en el medio favorece al sistema radical, ayudando
a la planta a una mejor absorción de agua y nutrientes, así como defensa contra
patógenos.
Promotores de crecimiento vegetal

Estos son microorganismos que durante su actividad metabólica, son capaces


de producir y liberar sustancias reguladoras de crecimiento para las plantas. En el
cuadro 1 se muestran algunos ejemplos y se menciona las sustancias que liberan.

Generalmente el éxito en la aplicación de biofertilizantes dependerá del


conocimiento de sus requerimientos nutricionales y ambientales, así como de su
interacción con otros microorganismos, incluyendo su habilidad para coexistir en
cultivos mezclados con otros microorganismos, tanto antes como después de su
aplicación al suelo.

.Cebollín (Allium schoenoprasum)

El cebollín o cebollino, denominado científicamente Allium schoenoprasum,


pertenece al género Allium en la familia de las Amarilidáceas. En este grupo
de plantas bulbosas se incluyen el ajo, la cebolla, la cebolleta, la chalota y
el puerro. Se dice que antes de hacerse popular en el siglo XIX, el cebollín crecía
de forma silvestre en toda Europa y América del Norte. Actualmente su presencia
sigue siendo predominante en estas regiones, así como en muchos países de
Asia, donde se ha cultivado durante siglos debido al sabor, el aroma y sus
propiedades medicinales. Los expertos consideran que Allium schoenoprasum es
la única especie del género Allium nativa tanto del nuevo como del viejo mundo.

Características

1. Aunque el cebollín es una planta bulbosa, la parte más comestible de la


planta son los tallos largos y huecos. Comúnmente son cortados y
agregados a recetas de pescado, sopas, salsas, ensaladas, cremas, entre
otras preparaciones.

2. Cuando todavía no han abierto, los botones florales de la planta también se


pueden moler para crear un tipo de especia.

3. El sabor del cebollino no es muy diferente al de otras hortalizas de bulbo,


como las cebollas y el ajo, pero muchos lo consideran una opción más
agradable debido a su sutileza.

4. Se sabe que tuvo un gran uso como remedio medicinal desde la época del
Imperio Romano, aunque probablemente se haya utilizado desde mucho
antes. Sus propiedades medicinales son similares a las de otros parientes
cercanos.

5. En la actualidad, el cebollín es una especie muy común que se puede


encontrar en la mayoría de los supermercados de todo el mundo.

Variedades de cebollín

Cebollín común: El cebollín común (Allium schoenoprasum), con ese sabor


suave tan parecido a la cebolla, se puede comer cocido o crudo y es muy popular
como ingrediente en sopas y ensaladas. Tiene hojas huecas y en forma de púas,
que pueden crecer hasta 25-30 cm de longitud. La planta se cubre de flores color
lavanda durante los primeros meses de verano y se puede propagar mediante las
semillas o al dividir la planta cada 2 o 3 años.

Cebollino chino o cebollino de ajo: El cebollino chino (Allium tuberosum) tiene


un sabor similar a la mezcla entre la cebolla y el ajo, y es más usado en la cocina
asiática. La planta puede alcanzar los 60 cm de altura, con hojas largas y planas
como si se tratara de una hierba. Sus flores son blancas, tienen forma de estrella y
aparecen a fines del verano y hasta principios del otoño. El cebollino ajo puede
esparcirse rápidamente, tanto así que en muchos lugares es considerado una
maleza (mala hierba).

Cebollín gigante siberiano: Se dice que el cebollín gigante de Siberia (Allium


ledebourianum) tiene el sabor más potente de todas las demás variedades de
cebollín, con un fuerte sabor a cebolla y ajo. Los cebollinos gigantes de Siberia
son similares en apariencia al cebollín común, pero la planta es más alta y
frondosa.

Cebollino ajo de Siberia o cebollino azul: Al igual que otras variedades de


cebollín, el cebollino ajo siberiano (Allium nutans) aporta una combinación de
sabor entre la cebolla y el ajo. Comúnmente conocido como “cebollino azul”, se
distingue por su follaje de color azul-verdoso y las flores rosadas que emergen en
pleno verano.
Materiales

Pala

Tobos de albañil

Martillo

Clavos

Tablas

Tierra negra

Bosta de ganado

Vaso con medidas

2 Embaces con capacidad de 1L

Embace de 2L de humus líquido

Embace de 1L de vinaza

2 piezas de cualquier material impermeable, para separar los tratamientos (zinc)

Cuchara de albañil

Cinta métrica

Tallos de cebollín con raíces


Procedimientos

Extracción
del humus
la vinaza
Búsqueda de los
materiales

Dos tobos de bosta Obtención de:


de ganado
Dejar
expuesta a
luz solar por
Cuatro tobos de tierra
dos dias
negra

Medición y
formación
del cantero
Mezclado de los
materiales

División del
cantero

Llenado del cantero


Testigo solo
Selección con agua
de los tallos

Siembra de los
cebollines
Tratamiento N-2
Riego
50:50 de humus
y vinaza
Clasificación de las
plántulas

Tratamiento N-1
70:30 de humus
y vinaza
Resultados

Según lo obtenido en el tratamiento n-1 de proporciones 70:30 o 700ml de


humus de lombriz y 300ml de vinaza, aplicada a raíces de cebollín se apreció un
crecimiento más acelerado que el testigo del ensayo.

En la evaluación del tratamiento n-2 el cual su proporción correspondía a 50:50


o 500ml de humus y 500 de vinaza, dicha proporción fue aplicada y se obtuvo
como resultado un crecimiento de 8.50cm/día, respectos al tratamiento anterior
70:30 y al testigo evaluado, hasta llegar a su marchites.

Por último el testigo el cual solo se rego con agua, tuvo un desarrollo de
6,50cm/día, menos pronunciado en comparación a lo observado en tratamientos
anteriores hasta su posterior muerte,

Análisis de Resultados

En el tratamiento n-1 se pudo ver un crecimiento acelerado, durante un periodo


corto de tiempo no mayor de 5 días, en este periodo se apreció un
marchitamiento progresivo de las plántulas. De igual forma se pudo observar el
comportamiento del tratamiento n-2, en el cual al igual que el tratamiento anterior
creció de forma pronunciada con respecto al testigo, las plántulas del dicho
tratamiento fueron las primera en mostrar síntomas marchites y morir en un tiempo
menor de 3 días. Por otra parte aunque el testigo no fue fertilizado con ningún
tratamiento y se apreció el crecimiento normal de las plántulas, estas plántulas
también mostraron características de marchites después de haber pasado un
lapso de tiempo de 7 días hasta morir.

En este sentido se presume, la intervención de factores tales como la


composición del suelo y la disposición de los elementos esenciales en el
desarrollo de las plántulas; ya que al estudiar la composición de la vinaza
podemos observar altos contenidos en macro elementos como lo son el N;P;K,
esto unido a la composición del humus, el cual como fertilizante aporta altas
cantidades de Nitrógeno, supone que la marchites observada en las plántulas, es
causada por toxicidad de los elementos incorporados durante la aplicación de los
tratamientos.

Sin embargo la falta de un análisis de suelo, también juega un papel muy


impórtate al momento de la siembra ya que este permite apreciar la disposición de
elementos en el suelos, y así poder realizar un plan de fertilización adecuado a las
necesidades o requerimientos de las plastas a cultivar.

Por último el material vegetativo utilizado para este ensayo fueron semillas
asexuales del cebollín, que no poseía una vigorosidad acta para resistir las
aplicaciones de los diferentes tratamientos de fertilizantes lo que pudo generar el
marchitamiento progresivo de las plántulas, también debido a la alta concentración
de los tratamientos estudiados.
Conclusión

El ensayo realizado permite comprender que hay criterios necesarios al


momento de la siembra y la fertilización que se deben cumplir para que ambas
sean exitosas. En este sentido es fundamental conocer la disposición y
cantidades de los elementos que posee el suelo, de igual manera como son
utilizados por las plantas, para así de esta forma lograr un desarrollo óptimo de los
cultivos, en este caso se trata de cebollín (Allium schoenoprasum) el cual es una
de las hortalizas de hoja con mayor importancia gracias a su sabor y alto valor
nutricional para los seres vivos

A su vez la elaboración de biofertilizantes conlleva un proceso de análisis que


es necesario para saber los aportes al suelo generados por estos productos
aplicados a la siembra. Es por esto que este ensayo sobre la elaboración de un
fertilizante a base de vinaza y humus de lombriz, brinda datos de interés sobre el
comportamiento de las plántulas de cebollín en tratamiento de proporciones 50:50
y 70:30 de estas sustancias y su posible uso en la fertilidad de hortalizas de hoja
con proporciones menores a las estudiadas, que se presume según lo observado
pudiera generar un fertilizante altamente eficiente en planta de ciclo corto y así
poder contribuir con el ambiente al utilizar, un subproducto considerado como
desecho en este caso la vinaza la cual en grandes cantidades es altamente toxico,
para la elaboración de una amplia variedad de productos que varían desde
fertilizantes, suplemento para la alimentación animal hasta como generador de
energía.

También podría gustarte