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Se denomina aire a la mezcla homogénea de gases que constituye la atmósfera terrestre, que permanecen
adentro del planeta Tierra por acción de la fuerza de gravedad. El aire es esencial para la vida en el planeta y
transparente a simple vista.
Es una mezcla de gases en proporciones ligeramente variables, compuesto por 78% de nitrógeno, 21% de
oxígeno, 0.93 % de argón, 0.04 % de dióxido de carbono y pequeñas cantidades de otros gases. El aire
también contiene una cantidad variable de vapor de agua, en promedio alrededor del 1 % al nivel del mar y del
0.4 % en toda la atmósfera.
Según la altitud, la temperatura y la composición del aire, la atmósfera terrestre se divide en cuatro capas:
troposfera, estratosfera, mesosfera y termosfera. A mayor altitud disminuyen la presión y el peso del aire.
Las porciones más importantes para el análisis de la contaminación atmosférica son las dos capas cercanas a
la Tierra: la troposfera y la estratosfera. El aire de la troposfera interviene en la respiración. Por volumen está
compuesto, aproximadamente, por 78.08 % de nitrógeno (N2), 20.94 % de oxígeno (O2), 0.093 % de Argón
(Ar), 0.035 % de dióxido de carbono (CO2) y 0.003 % de gases inertes, como el neón.
En esta capa, de 7 km de altura en los polos y 16 km en los trópicos, se encuentran las nubes y casi todo el
vapor de agua. En ella se generan todos los fenómenos atmosféricos que originan el clima. Más arriba,
aproximadamente a 25 km de altura, en la estratosfera, se encuentra la capa de ozono, que protege a la
Tierra de los rayos ultravioleta (UV).
En relación con esto vale la pena recordar que, en términos generales, un contaminante es una substancia
que está «fuera de lugar», y que un buen ejemplo de ello puede ser el caso del ozono (O3).
Cuando este gas se encuentra en el aire que se respira, es decir bajo los 25 kilómetros de altura habituales,
es contaminante y constituye un poderoso antiséptico que ejerce un efecto dañino para la salud, por lo cual en
esas circunstancias se le conoce como ozono troposférico u ozono malo.
Sin embargo, el mismo gas, cuando está en la estratosfera, forma la capa que protege de los rayos
ultravioleta del Sol a todos los seres vivientes (vida) de la Tierra, por lo cual se le identifica como ozono
bueno.
ACEITE
Los aceites combustibles son una variedad de mezclas líquidas provenientes del petróleo crudo, o de
sustancias vegetales (biodiésel/biocombustibles). Ciertas sustancias químicas que se encuentran en ellos
pueden evaporarse fácilmente, en cambio otras pueden disolverse más fácilmente en agua.
Son producidos por diferentes procesos de refinación, dependiendo de los usos a que se designan. Pueden
ser usados como combustibles para motores, lámparas, calentadores, hornos y estufa, también como
solventes.
Algunos aceites combustibles comunes incluyen al queroseno, el aceite diésel, el combustible para aviones de
reacción, el aceite de cocina y el aceite para calefacción. Se distinguen uno del otro por la composición de
hidrocarburos, los puntos de ebullición, los aditivos químicos y los usos.
Calidad
Existen dos normas de calidad importantes, la primera fue A.P.I (American Petroleum Institute) la clasificación
API es importante sobre todo para los motores americanos. Los motores de origen europeo exigen otros
criterios. En consecuencia, los fabricantes de motores europeos desarrollaron un sistema propio de
clasificación. Esta fue establecida por la ACEA, antigua CCMC o “Comité de Constructores del Mercado
Común”, por lo que las normas empleadas son de la CCMC. Este organismo tiene como principio reflejar la
clasificación de la API añadiéndole algunas exigencias.
Norma A.P.I.
El nivel de calidad A.P.I. viene representado por un código generalmente formado por dos letras:
– La primera designa el tipo de motor (S= gasolina y C= Diésel).
– La segunda designa el nivel de calidad
Para obtener esta norma de calidad, los lubricantes deben superar cuatro pruebas de motor en las que se
tiene en cuenta:
Transmisión
Motor Gasolina
Motor Diésel.
Clasificación API de los motores gasolina
Las calidades de los aceites se han ido adaptando a las exigencias de nuevos motores, de esta manera en
1968 se utilizaba un API SD, en 2004 ya era un SL y actualmente, API-SN es el nivel de calidad más reciente
y más alto en cuanto a motores de gasolina.
(El segundo dígito indica la evolución de las calidades por orden alfabético)
De la misma forma que en los motores gasolina, las calidades de los aceites se han ido adaptando a las
exigencias del momento actualmente se utiliza el adaptado a las normas de emisiones de gases de 1998 el
API CF: Estos aceites están destinados a garantizar la vida de los motores en las condiciones más severas.
Ellos permiten una extensión de los intervalos de los cambios de aceite.
B4: aceite para motores cammon rail, multivalvulas, turbo y otros, también aplicable con filtro de partículas.
B5: menores emisiones de CO2 y reducción de consumo de combustible
Para los motores de gasolina y diésel de turismos con tratamiento posterior de gases de escape, p. ej. filtro de
partículas de hollín según la norma Euro 4 o superior, se pueden utilizar los aceites llamados Low SAPS o Mid
SAPS. Estos aceites llevan adicionalmente las designaciones C1, C2, C3 o C4.