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TECNICO AUXILIAR DE ENFERMERIA POR COMPETENCIAS

LAVADO HIGIÉNICO DE MANOS

DEFINICIÓN

El lavado de manos es la frotación vigorosa de las manos previamente enjabonadas,


seguida de un aclarado con agua abundante, con el fin de eliminar la suciedad,
materia orgánica, flora transitoria y residente, y así evitar la transmisión de estos
microorganismos de persona a persona.

El uso de soluciones alcohólicas para el lavado de manos constituye una alternativa a


tener seriamente en cuenta en la higiene de las manos en la actualidad (más
desarrollo en otro capítulo).
Flora residente: también llamada colonizante. Son microorganismos que se
encuentran habitualmente en la piel. No se eliminan fácilmente por fricción mecánica.

Flora transitoria: también llamada contaminante o "no colonizante". Son


microorganismos que contaminan la piel, no encontrándose habitualmente en ella. Su
importancia radica en la facilidad con la que se transmiten, siendo el origen de la
mayoría de las infecciones nosocomiales.

TIPOS DE LAVADO DE MANOS


LAVADO DE RUTINA HIGIÉNICO

Objetivo:

Eliminar la suciedad, materia orgánica y flora transitoria de las manos.


Material:

Jabón líquido ordinario, en dispensador desechable, con dosificador.


Toalla de papel desechable.

Técnica:

Humedecer las manos con agua corriente, preferiblemente templada.


Aplicar jabón líquido con dosificador.
Frotar las manos palma con palma, sobre dorsos, espacios interdigitales y muñecas
durante al menos 10 minutos.
Aclarar con abundante agua corriente.
Secar las manos con toallas de papel.
Cerrar el grifo con la toalla de papel utilizada para el secado (los lavabos con sistema
de cierre de codo o de pedal ahorran este paso; los de célula fotoeléctrica, además,
determinan un importante ahorro de agua).

Indicaciones:
Antes y después del contacto con cada paciente.
Entre dos procedimientos en el mismo paciente si hay sospecha de contaminación de
las manos.
Después del contacto con alguna fuente de microorganismos (sustancias y fluidos
corporales, mucosas piel no intacta...) y objetos contaminados con suciedad.
Después de quitarse los guantes.

LAVADO ESPECIAL O ANTISÉPTICO

Objetivo:

Eliminar la suciedad, materia orgánica y flora transitoria y parte de la flora residente de


las manos, consiguiendo además cierta actividad microbiana residual.

Material:

Jabón líquido con antiséptico (solución jabonosa de clorhexidina al 4% o povidona


yodada al 7,5%), en dispensador desechable, con dosificador. Toalla de papel
desechable.

Técnica:

Igual que en el lavado higiénico. Sólo cambia el tipo de jabón.

Indicaciones:
Antes de realizar procedimientos invasivos como inserción de catéteres, sondas
vesicales.
Antes y después del contacto con pacientes que se sabe o sospecha están infectados
o colonizados por microorganismos epidemiológicamente importantes.

Antes del contacto con pacientes inmunocomprometidos en situaciones de fundado


riesgo de transmisión.

LAVADO QUIRÚRGICO

Objetivo:
Eliminar la flora transitoria y al máximo la flora residente de las manos previo a un
procedimiento invasivo que por su especificidad o su duración requiere un alto grado
de asepsia y un efecto residual.

Material:
Jabón líquido con antiséptico (solución jabonosa de clorhexidina o povidona yodada),
en dispensador desechable, con dosificador.
Cepillo de uñas desechable (preferiblemente impregnado en solución antiséptica).
Toalla o compresa estéril.

Técnica:
Abrir el grifo (sólo lavabos con sistema de codo o pedal).
Aplicar jabón antiséptico.
Lavado mecánico de manos y antebrazos y limpiar debajo de las uñas con cepillo
desechable.
Aclarar con agua corriente abundante.
Aplicar de nuevo jabón antiséptico en manos y antebrazos friccionando al menos 2
MINUTOS.
Aclarar con agua abundante.
Secar por aplicación, sin frotar, con una compresa o toalla desechable estéril,
comenzando por los dedos y bajando hasta los codos.
Durante todo el proceso, mantener las manos por encima de los codos.

Indicaciones:
Antes de una intervención quirúrgica.
Antes de cualquier maniobra invasiva que requiera alto grado de asepsia.

RECOMENDACIONES

Mantener las uñas cortas y limpias. Las uñas largas son más difíciles de limpiar y
aumentan el riesgo de rotura de guantes. No llevar uñas artificiales.

No usar anillos, relojes, ni pulseras. Estos elementos pueden actuar como reservorio y
dificultan la limpieza de manos y antebrazos.

El uso de emolientes y lociones protectoras de la piel, después de la actividad laboral,


se considera deseable e incluso recomendable en la práctica diaria, porque pueden
aumentar la resistencia de la piel a los gérmenes y, por tanto, disminuir la infección
cruzada. Sin embargo, hay que tener en cuenta que algunos antisépticos se inactivan
en presencia de algunos de estos productos.

DEFINICIÓN

Medida de higiene consistente en la eliminación mediante arrastre de la flora presente


de manera transitoria en la piel de las manos. Se considera una de las medidas más
eficaces en la prevención y control de la transmisión de enfermedades infecciosas
dentro del ámbito hospitalario.

RECURSOS MATERIALES

Lavabo con agua tibia .Si fuera posible la llave del lavabo accionable con el codo, el
pie o la rodilla
Jabonera: dosificadora, Pastilla de jabón o Antiséptico jabonoso (optativo + cepillo)
Toallas de papel
Loción hidratante

OBJETIVOS
1. Disminuir el número de microorganismos en las manos
2. Disminuir el riesgo de transmisión de microorganismos a los pacientes
3. Disminuir el riesgo de transmisión cruzada entre pacientes
4. Disminuir el riesgo de infección entre trabajadores sanitarios
5. Disminuir el riesgo de transmisión de infección a uno mismo
¿QUIÉN?

Todo el personal.

¿CUÁNDO?

Antes y después del contacto con el paciente.


Después de quitarse los guantes.

PREVIO AL PROCEDIMIENTO

Es recomendable:
llevar las uñas cortas, retirar sortijas y joyas, revisar las manos buscando la existencia
de algún tipo de lesión, usar lociones hidratantes.

PROCEDIMIENTO

 Accione el grifo (con el codo si es posible) y mójese manos y muñecas con


agua tibia*.

 Sostenga las manos bajas en relación con los codos para evitar contaminar
regiones del lavabo limpias.

 Evite salpicaduras.

 Absténgase de tocar los grifos y el lavabo.

 Si usa jabón en pastilla: enjuáguela antes de regresarla a la jabonera. Si es


jabonera dosificadora acciónela con el codo tomando de dos a cuatro mililitros.

 Enjabónese enérgicamente frotando y entrelazando los dedos con fuerza y


movimientos circulares durante diez segundos. Preste especial atención a las
zonas subungueales, alrededor de la cutícula, pulgares, nudillos y lados de la
mano.

 Aclarar bien manos y muñecas SIN escurrir el agua hacia los codos.

 Secar manos y muñecas aplicando leves toques con la toallita de papel.

 Cerrar el grifo cogiéndolo con la toallita de papel si éste no se puede accionar


con el codo o el pie. Desecharla en el recipiente adecuado.

 Limpiar y desinfectar periódicamente los dispensadores de jabón y su


contenido**.
 El uso de jabones antisépticos debe ser restringido a: Zonas con resistencias
bacterianas, Unidades de Cuidados Críticos; salas de Neonatos, y antes de la
realización de cualquier procedimiento invasivo***.

* El agua tibia elimina la capa grasa de la piel en menor grado que el agua
caliente.
** Pueden ser fuente de pseudomonas.

INYECTOLOGIA

Distintas vías de administración parenteral

Introducción

Los inyectables pertenecen al grupo de los medicamentos que se administran por vía
parenteral.

Las vías de administración de inyectables son las siguientes:

1. Intravenosa
2. Intradérmica
3. Subcutánea
4. Intramuscular
Vía Intravenosa

La usaremos para administrar medicación urgente, para tratamientos de sueroterapia y


para la administración de fármacos diluídos. Lo haremos mediante la canalización de
una vía venosa periférica o un catéter central. La canalización de una vía periférica ya
se explicó en otro capítulo, por lo que no lo repetiremos y la canalización de una vía
central la realizará un facultativo. Es la vía más rápida, es decir, el tiempo de absorción
del medicamento es inmediato.
Vía Intradérmica

La usaremos para realizar la prueba del mantoux, pruebas cutáneas, como la de la


alergia y la administración de anestésicos locales. Se trata de introducir en la dermis
una cantidad de medicamento no superior a 0,3 ml mediante aguja y jeringa. La zona
más usada para el uso de esta vía es la cara anterior del antebrazo, entre cuatro
traveses de dedo por encima de la muñeca y dos por debajo de la flexura del codo.

Material
 Jeringa de insulina o de 1 ml.
 Aguja del nº 25 o 26 G de bisel corto, suele ser naranja o transparente.
 Gasas.
 Alcohol 70º .
 Guantes desechables.
 Rotulador indeleble.
Procedimiento
Lo primero que haremos es informar al paciente, nos lavaremos las manos y nos
pondremos los guantes. Limpiaremos la zona con alcohol, siempre en circulos de
dentro hacia fuera. Con una mano mano tensaremos la piel de la zona a puncionar y
con la otra introduciremos la aguja casi paralela a la piel y con el bisel hacia arriba.
Inocularemos la medicación muy lentamente, hasta que veamos que se forma una
pápula. Retiraremos la aguja sin hacer presión sobre la pápula y la rodearamos con un
circulo que dibujaremos con el rotulador.

Vía Subcutánea

La usaremos para la introducción de un medicamento en el tejido subcutáneo, adiposo


o tejido graso. Los medicamentos más utilizados para esta vía son las vacunas,
heparinas e insulinas. El volumen a introducir suele oscilar entre 1,5 ml y 2 ml. Es una
vía de absorción lenta. Laz zonas más usadas para esta vía son la cara externa del
brazo, cara anterior del muslo, tejido laxo del abdomen y la zona escapular de la
espalda.

Material
 Jeringa de 1 o 2 ml.
 Aguja del nº 24-27 G de bisel medio, es naranja.
 Gasas.
 Alcohol 70º o suero fisiológico.
 Guantes desechables.

Procedimiento

Informaremos al paciente de la técnica a realizar, nos lavaremos las manos y nos


pondremos los guantes. Elegiremos la zona de punción y la limpiaremos con alcohol
(si se trata de la administración de vacunas, limpiaremos con suero fisiológico). A
continuación cogeremos un pellizco de la piel y pincharemos en un ángulo de 45º y
con el bisel de la aguja hacia arriba (si se trata de administrar heparina, el ángulo de
punción será de 90º). Introduciremos el medicamento y retiraremos la aguja. Es
importante informar al paciente al que se le administra heparina, que no toque ni
presione la zona de punción, para evitar la aparición de hematomas.

Vía Intramuscular

La usaremos para la administración de medicación en el músculo. Los medicamentos


más utilizados para esta vía son las vacunas y otros fármacos como analgésicos,
antiinflamatorios, antibióticos, corticoides, etc. El volumen que se inyecta no sobrepasa
los 15 ml. Es una vía de absorción mas rápida que la subcutánea, su efecto aparece
alrededor de 15 minutos debido a la vascularización del músculo. Las zonas de
punción que se utilizan son el cuadrante superior externo del glúteo, deltoides y vasto
lateral de la pierna. Tendremos en cuenta que a los niños menores de 3 años, se les
pinchará en el vasto lateral de la pierna.

Material
 Jeringas de 2 o 5 ml.
 Agujas del nº 19-23 G de bisel medio, en adultos es verde y en niños azul.
 Gasas.
 Alcohol o suero fisiológico.
 Guantes desechables.

Procedimiento

Informaremos al paciente, nos lavaremos las manos y nos pondremos los guantes.
Elegiremos la zona de punción y la limpiaremos con alcohol (como en la vía
subcutánea, si se trata de administrar una vacuna, limpiaremos con suero).
Introduciremos la aguja rapidamente en un ángulo de 90º directamente al músculo,
adaptaremos la jeringa cargada y aspiraremos para comprobar que no hayamos
pinchado un capilar. A continuación inocularemos el medicamento lentamente, ya que
es una vía dolorosa (ésto se debe a que las fibras musculares permanecen muy
pegadas y al inyectar líquido o material oleoso, vamos haciendo que éstas se
despeguen provocando el dolor). Al acabar, retiraremos la aguja y la jeringa a la vez y
presionaremos con una gasa la zona de punción haciendo leves movimientos
musculares.

PRINCIPIOS:

  La relajación de los músculos en el área de inyección aumenta la seguridad


del procedimiento.
  El músculo absorbe fácilmente mayores cantidades de medicamentos por su
vascularidad.
Preparación del medicamento

Los medicamentos inyectables nos los encontraremos en dos tipos de recipientes de


cristal que son:

 Ampollas: Son un sistema cerrado, tienen un cuello largo que presenta una
constricción en su base. Una vez roto el cuello será un sistema abierto del cual
podemos aspirar el medicamento por la abertura que hemos creado.
 Viales: Son un sistema cerrado, tienen un cuello corto y un tapón de plástico
duro forrado externamente por metal. Para extraer el contenido, inyectaremos un
volumen de aire igual al volumen de la sustancia que queremos extraer.

El fármaco puede venir presentado para administrarlo directamente (forma líquida) o


para mezclarlo previamente con un disolvente (en polvo).

La aguja que usaremos para cargar la medicación no será la misma que usaremos
para administrárselo al paciente. Ya hemos visto las distintas agujas a usar según el
tipo de vía de administración. Las que usaremos para cargar la medicación se llaman
cargadoras, son de color rosa, tienen un calibre de 14-16 G y un bisel medio.

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