LA ORACIÓN DESPUÉS DE LA VISITA DE LA TENTACIÓN

Oficiante: Bendito sea nuestro Dios ahora y siempre y por los siglos de los siglos.

Presentes: Amén

Oficiante: Me ha salvado tu siervo de los peligros ,oh Padre Divino.

Sacerdote: Ten misericordia, oh Dios en tu omnipotente gracia, te lo suplicamos, ten

misericordia y respóndenos.

Presentes: Kirie eleison (tres veces)

Sacedote: Te rogamos por nuestro Bendito Patriarca (nombre) por su salvaguardo y protección.

Kirie eleison (tres veces)

Sacerdote: Te rogamos por nuestro Padre Obispo (nombre), por los presbíteros y los diáconos,
los consagrados, y a todos los hermanos en Cristo piadosos y generosos colaboradores, por sus
tareas exitosas y que sus intenciones sean aceptadas

Kirie eleison (tres veces)

Sacerdote: Te rogamos por nuestras familias, parientes, y cristianos, (y a los de esta

congregación) que el Señor les otorgue de Su favor, Su bienhechora gracia y la salvación eterna.
Que cure a nuestros enfermos, que devuelva sanos a nuestros ausentes y que alivie las almas de
nuestros difuntos.

Kirie eleison (tres veces)

Sacerdote: Te suplicamos nuestro Altísimo Señor que bendigas a nuestras familias (comunidad/
nido) para un llamado renovado en almas generosas, tomando a Pablo como modelo edificante
en su tarea apostólica y en difusión del evangelio de este a oeste y en el mundo entero para la
glorificación del nombre de Dios y la salvación de las almas.

Kirie eleison (tres veces)

Oficiante: Oh Señor Jesús, que ciertamente llamaste a tus santos profetas a seguir tus señales y a
propagar al mundo entero. Les infundiste seguridad a través de la gracia de tu Espíritu Santo, te
pedimos por tu gracia y profusa misericordia del Espíritu Santo que bendigas a esta comunidad y
en su llamado nuevo, aspirando a una vida de Evangelio, y en expresiones de proclamación
profética. Una vida de compartir tal como como fue tu amamantamiento a través de tu santa
Madre María, y los pasos del apóstol Pablo el magno, nuestro intercesor.

Oficiante: Porque en verdad eres un Dios bueno que ama a la humanidad, hacia Ti se eleva la
gloria, a tí Padre eterno y a tu Espíritu Santo ahora……

Presentes- Amén. Por las oraciones de nuestros santos sacerdotes, Oh Señor Jesús el Mesías,
nuestro Dios, ten misericordia y sálvanos. Amén.
LA ORACIÓN DESPUÉS DE LA CENA

Oficiante- Bendito sea nuestro Dios ahora y siempre por los siglos de los siglos.

Presentes- Amén.

Oficiante- (Le siguen los presentes) Con todas santidades, Oh Mesías, con las almas servidoras
en lo cual no hay cansancio, ni tristeza, ni congoja sino vida eterna.

Sacerdote- Ten piedad de nosotros oh Dios con tu sublime misericordia, te lo suplicamos ten
misericordia y respóndenos.

Presentes- Oh Señor ten misericordia (tres veces) como a los dos siguientes ruegos:

- Te pedimos por el sosiego de las almas de los siervos de Dios, aquellos miembros de
nuestra comunidad y de sus bienhechores, por nuestros padres, hermanos, parientes,
amigos y amigos íntimos. El perdón para todas nuestras faltas voluntarias como
involuntarias, para que el Señor Dios rectifique nuestras almas a ser veraces encontrando
sosiego.
- Rogamos por ellos la misericordia de Dios, el reino de los cielos y la absolución de los
pecados y la residencia en compañía del Mesías que no perece, nuestro soberano y Dios,
a nuestro Señor le suplicamos.

Presentes- Oh Señor ten misericordia. (una vez)

Oh Señor de los espíritus y cuerpos, que haces a la muerte confortable, y que vences a la
fuerza de Satanás y que otorgas vida en su reino, oh Señor, conforta a las almas de tus
siervos que ya descansan en un lugar iluminado y brillante. En dicho lugar de confort donde
no hay dolor, ni de tristeza ni congoja, ya que Tú eres el Dios benefactor que ama a los
humanos. Perdónales sus faltas en dichos o en acciones, en pensamientos, ya que no es
condición humana vivir sin errar, sino que eres Tú exonerado de toda falta y tu justicia es
permanente y tu dicho verdad.

Oficiante: Ciertamente Tú eres la resurrección y la vida y el sosiego para las almas que
descansan. Oh Mesías, nuestro Dios, hacia tí se eleva la gloria y a Tu Padre la eternidad y a
tu Espíritu el santo el benéfico y vivificador, ahora y por los siglos de los siglos.

Presentes- Amén, con las salutaciones de nuestros santos sacerdotes, oh Señor el Mesías Jesús
nuestro Dios, ten misericordia de nosotros. Amén.