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FACULTAD DE FARMACIA

UNIVERSIDAD COMPLUTENSE

TRABAJO DE PRÁCTICAS TUTELADAS

REACCIONES ADVERSAS MÁS


COMUNES DE LA METFORMINA Y SU
EFECTO SOBRE EL CUMPLIMIENTO
TERAPÉUTICO

Autores: Gonzalo Robles, Laura Ruiz, Sofía San Frutos e Iván Sanz

Julio de 2019
ÍNDICE

1. RESUMEN...........................................................................................................................3
2. INTRODUCCIÓN...............................................................................................................3
3. OBJETIVOS........................................................................................................................4
4. MATERIAL Y MÉTODOS.................................................................................................4
5. RESULTADOS Y DISCUSIÓN..........................................................................................4
6. CONCLUSIONES...............................................................................................................6
7. BIBLIOGRAFÍA..................................................................................................................6

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1. RESUMEN POR HACER

2. INTRODUCCIÓN

La diabetes es una enfermedad caracterizada por un exceso de glucosa en sangre


(hiperglucemia). Hay varios tipos de diabetes: diabetes tipo I, tipo II, MODY y
gestacional. Todas cursan con hiperglucemia y difieren en la etiología, sintomatología y
epidemiologia

La diabetes tipo II (DMII) ocurre cuando el páncreas pasa a secretar incorrectamente


insulina y, además, disminuye la captación periférica de la glucosa. Estos dos hechos
llevan a desarrollar una resistencia a la insulina del individuo, tanto en el tejido adiposo
como en el tejido muscular. La insulina desencadena una serie de mecanismos para la
captación y almacenamiento de la glucosa. Al generarse una resistencia a esta hormona,
deja de captarse glucosa por parte de los tejidos, habiendo hiperglucemia, pero bajas
concentraciones de glucosa intracelulares aun en situación postprandial, lo que se
considera una circunstancia patológica y deriva en la sintomatología específica de la
diabetes. El desarrollo de esta patología está estrechamente relacionado con la edad y la
obesidad, entre otros factores.

La DMII afecta al 6% de la población mundial, estando presente tanto en países


desarrollados como subdesarrollados. Se trata de una enfermedad que va en aumento,
reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una epidemia global.
Los esfuerzos por controlarla y sensibilizar a la población sobre sus potenciales riesgos
para la salud es una prioridad actual, por lo que el conocimiento de su epidemiología y
su efecto en la vida de los pacientes son vitales para abordar con éxito este desafío.

La metformina es una biguanida utilizada para el tratamiento de la DMII. Ejerce su


efecto farmacológico mediante tres mecanismos: inhibe la gluconeogénesis y la
glucogenólisis hepática, disminuyendo la producción de glucosa; aumenta la
sensibilidad muscular a la insulina, aumentando la captación de glucosa en dicho tejido;
retrasa la absorción de glucosa a nivel intestinal. Estos tres mecanismos reducen la
glucemia y aumentan la concentración de glucosa en los tejidos.

Este fármaco pertenece a la lista de medicamentos esenciales de la OMS por su gran


seguridad y eficacia clínica, lo que le convierte en terapia de primera línea para tratar

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esta patología, ya sea solo o como coadyuvante de ejercicio físico y dieta en pacientes
con sobrepeso. Como ventaja frente a otros antidiabéticos orales destaca que es de los
pocos fármacos que no producen hipoglucemias. Como contrapunto, se encuentran sus
reacciones adversas gastrointestinales como vómitos, diarrea, gastritis o incluso
alteraciones del gusto con un sabor metálico desagradable. Estas reacciones adversas
son muy comunes, presentándose hasta en un 50% de pacientes, lo que compromete su
adherencia al tratamiento por parte de aquellos que desconozcan la gravedad de su
patología o no estuviesen avisados de los potenciales riesgos de esta medicación.

3. OBJETIVOS

Este trabajo busca determinar las reacciones adversas más comunes asociadas al uso
de metformina y su relación con la falta de adherencia al tratamiento por parte de los
pacientes, a la vez que trata de investigar la influencia que ejerce la falta de
conocimiento por el paciente sobre su enfermedad y tratamiento en la falta de
adherencia al mismo. Paralelamente, se busca determinar qué porcentaje de los
tratamientos con antidiabéticos orales alternativos se debe a la presencia de reacciones
adversas a la metformina, ya que esta es, en la mayoría de los casos, terapia de primera
línea.

4. MATERIAL Y MÉTODOS

Este trabajo se ha elaborado mediante la realización de encuestas a diversos


pacientes en tratamiento con metformina para el control de su DMII. En dichas
encuestas se recoge información acerca de los grupos etarios de los pacientes, su grado
de conocimiento sobre la indicación de la metformina, el tiempo que llevan tomando
este medicamento, su posología, la presencia de reacciones adversas y, en caso de
haberlas tenido, cuál fue la respuesta o reacción del paciente a las mismas.

5. RESULTADOS Y DISCUSIÓN

El 92,3%±5.9% de los pacientes encuestados presentaban una edad superior a 65


años y el 7,7%±5.9% restante tenía una edad comprendida entre 45 y 65 años. La
diabetes mellitus tipo 2 generalmente se da en adultos mayores de 50-55 años.

El 100% de estos pacientes conocía que la metformina se utiliza para el tratamiento


de la diabetes. La metformina está indicada en el tratamiento de la DMII, especialmente

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en pacientes con sobrepeso, cuando la dieta prescrita y el ejercicio físico no son
suficientes por sí solos para un control glucémico adecuado. En adultos, la metformina
puede utilizarse en monoterapia o en combinación con otros antidiabéticos orales, así
como con insulina. Se ha demostrado una reducción de las complicaciones relacionadas
con la diabetes en pacientes adultos diabéticos tipo II con sobrepeso tratados con
metformina como tratamiento de primera línea tras el fracaso de la dieta.

La dosis inicial habitual es 500 mg u 850 mg de hidrocloruro de metformina 2 o 3


veces al día administrados durante o después de las comidas. Al cabo de 10-15 días, la
posología se ajusta en función de los niveles de glucosa en sangre. La dosis máxima
recomendada es de 3 g de hidrocloruro de metformina al día, dividiendo la dosis en 3
tomas. Debido a la posible reducción de la función renal en personas mayores, la
posología de la metformina debe ajustarse según la función renal. Cerca de la mitad de
los encuestados (43,6%±11%) refieren tomar metformina 2 veces al día, el 30,8%
±10.2% 3 veces al día y el 25,6%±9.7% restante, 1 vez al día.

Un 60% de las personas encuestadas nunca había notado ninguna reacción adversa a
la metformina, mientras que el 40% restante sí. Entre los efectos adversos descritos, los
más frecuentes fueron el malestar intestinal (50%±11.1%), mareos y náuseas (14,3%
±7.8%), sabor metálico en la boca (10,7%±6.9%), dolor de cabeza (7,1%±5.7%) y
cansancio (7,1%±5.7%). En la ficha técnica de la metformina se describen los trastornos
gastrointestinales (náuseas, vómitos, diarreas, dolor abdominal y pérdida de apetito)
como reacciones adversas muy frecuentes, lo que coincide con nuestros resultados.
Estos trastornos aparecen con mayor frecuencia durante el inicio del tratamiento y
desaparecen espontáneamente en la mayoría de los casos.

La mitad de los pacientes consultaron a su médico o farmacéutico al notar estos


efectos no deseados. Un 31%±10.3% continuó tomando la medicación y un 12,5%
±7.3% se saltó los siguientes días de toma. A los pacientes que acudieron al médico se
les redujo la dosis ya que un incremento lento de la dosis mejora la tolerabilidad
gastrointestinal.

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Figura 1. Efectos adversos a la metformina descritos por los pacientes
encuestados.

6. CONCLUSIONES

 La metformina se considera fármaco de primera elección en obesos con DMII.


Reduce la hiperglucemia basal y postprandial del diabético sin producir
hipoglucemia.
 Los trastornos gastrointestinales como náuseas, vómitos, dolor abdominal y
pérdida de apetito son bastante frecuentes. Aparecen con mayor frecuencia
durante el inicio del tratamiento y desaparecen espontáneamente en la mayoría
de los casos. Para prevenirlos se recomienda administrar metformina en 2 o 3
tomas al día, durante o después de las comidas. Un lento incremento de la dosis
puede también mejor la tolerabilidad gastrointestinal.
 En general, los pacientes encuestados presentan una buena adherencia al
tratamiento.

7. BIBLIOGRAFÍA

1) https://cima.aemps.es/cima/pdfs/es/ft/73309/FichaTecnica_73309.html.pdf

2) Sanamé, R., Andrés, F., Pérez Álvarez, M. L., Alfonso Figueredo, E., Ramírez
Estupiñan, M., & Jiménez Rizo, Y. (2016). Tratamiento actual de la diabetes
mellitus tipo 2. Correo científico médico, 20, 98-121.

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