Coro Gloria al ser abnegado que cuida con amor de la patria salud! Al que pone la luz de la vida en el alma de la juventud. I En sus manos no luce y destella ni la espada marcial ni el cañón sino el libro, la bíblica estrella que conduce hacia la redención. II El combate que mancha la tierra no es el teatro de su heroicidad es la escuela su campo de guerra, y su espada mejor, la verdad. III El error, enemigo siniestro va borrando su denso capuz, cuando pasa triunfante el maestro esparciendo torrentes de luz.