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Arte Egipcio

Mastaba de Mehu (jefe de los graneros)

Esta mastaba pertenece al jefe de los graneros, cuyo objetivo era custodiar los excedentes. En
su tumba apareció una pequeña puerta, espacio de tránsito al más allá. En ella aparece el
dueño de la tumba representado, sentado frente a una mesa con eses excedentes, los cuales
está comiendo. Se perfila la escena del ágape que se filtrará al cristianismo, en las catatumbas.
Aparecen personajes realizando una danza. Grandes frisos de oferentes que portan productos
para el gran festín, tales como cabras, ocas, pan… Esto se puede relacionar con la
representación de las panateneas en el Panteón, que llevan productos a la diosa palas atenea.

Lo más importante de esta obra es que introduce un nuevo componente: movimiento


dinámico. Paralelamente a ellos los asirios también lo introducen. Además se van
conformando los escorzos. Todos los personajes se dirigen hacia la puerta de tránsito.

Tumbas de Beni Hassam (tumba de Jeti)

Iconografía del faraón cazando.

La narración en friso de ha multiplicado y en ellas se muestran figuras impregnadas por un


gran esquematismo, a partir del cual se resume el cuerpo humano como si fuese un jeroglífico.
Se van practicando diferentes posturas con escorzos. Además, interesa la iconografía de los
púgiles, también presente en la pintura minoica.

Tumba de Baket

Mujeres realizando malabares.

Carácter dinámico, con líneas en diagonal. También está presente un gran convencionalismo
en el ropaje, en el que se representan faldellines, muy ceñidos. También destacan por su
joyería en los pectorales y en los tobillos. El icono del juego surge aquí y se expande por la
cultura grecolatina (etrusos). Todo esto recuerda a los mosaicos de la villa del Casale, Piazza
Armerina, Sicilia.
Tumba de Jnumhotep

Manda construir una tumba que recuerda a la etapa antigua, sobre todo por el sistema de
abovedamiento curvo, que recuerda al complejo de Zoser. Siguen presentes los elementos
convencionales: faldellín, barba osiriaca…, pero, sobre todo, destaca por la representación de
la naturaleza en los márgenes. La gran escena nos muestra una gran cacería de aves con una
red El cazador está oculto detrás de un parapeto, pr o que en la parte izquierda perdura el
convencionalismo que es completamente contrarrestado por el gran despliegue de la
naturaleza de la parte derecha. El realismo es tan abundante que hasta se pueden identificar el
tipo de aves. También tiene lugar la representación de una gran comitiva, de una caravana
comercial. Se tuvo un gran interés por fomentar los cambios económicos y comerciales, en los
que están presentes figuras extranjeras. Estes individuos se pueden diferenciar notablemente
a las figuras egipcias a través de algunos detalles como son la representación de los torsos, la
barba, los ojos, la piel… Por último destacar la estampación de los textiles que no es más que
un ejemplo de la comercialización que estaba teniendo lugar.

Capilla del Punt

Muestra una iconografía casi mitológica, a través de un temática con carácter expedicionista
que tiene como objetivo la conquista de nuevos territorios. En ella aparecen como figuras
principales el gran Punt y su mujer princesa Ati. La princesa aparece representada de una
forma obesa y, por lo tanto, realista. Voluptuosidad de las formas. Joyería tanto en las
muñecas como en los tobillos. Aunque hemos perdido casi toda la policromía esta era
remarcada en las provisiones entregadas.
Tumba de Tutmosis

Se presenta un fenómeno interesante ya que en un primer momento, en cuanto al estudio de


la pintura se refiere, podemos pensar que esta surge en las etapas más primitivas y que, a
partir de ahí, se produce un proceso de evolución e innovación. Pero, una vez vistos los
murales de esta tumba vemos que esto es una concepción equívoca ya que las formas se han
convertido en pictogramas abstractos con un esquematismo total. Los cuerpos se reducen a la
mínima expresión. Este tipo de estética luego se recupera en la tumba de Amenofis. Se coloca
un gran féretro en el centro. Carácter caligráfico de la pintura. Ser abstracto, ni individualismo
ni nada.

Simbología: serpiente noche, escarabajo el renacer del día

Amenofis II: la tumba de este faraón, hijo del anterior está pintada de la misma forma. Está
pintado con pictogramas. Es el caso en el que mayor abstracción hay de la pintura, parece
incluso escritura.

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