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Introducción al libro de Filipenses

En la actualidad, vivimos bombardeados por los modelos que el


mundo nos ofrece. Cuando nos remitimos a la historia, nos damos cuenta que
muchas costumbres han cambiado y que la actualidad cada día más se aleja de
los principios morales de Dios para dar paso a la inmoralidad. Cuando todo
esto nos ataca, encontramos que también los estilos de vida cambian. Para el
mundo, los designios que Dios determinó para la humanidad han sido
modificados. El matrimonio no es bien visto en nuestra sociedad actual, tener
hijos no es correcto para la sociedad occidental, los medios de entretenimiento
están enfocados en otras áreas. Ya no es común que la sociedad lea, y si leen,
están más interesados en historias con un contenido mórbido, lleno de
contenido erótico y de libertinaje. La sociedad está apurada, está consumida
por el trabajo. El día de hoy, mientras revisaba Facebook, una mujer publicó
una oferta de trabajo; necesitaba a una mujer que atendiera su hogar desde las
7:10 de la mañana hasta las 4:30 pm. En la oferta mencionaba que también
tendría que cuidar a una niña de 10 meses de nacida y, si fuera posible,
empezaría hoy mismo. Me aterré al ver esa oferta, estoy seguro que era una
mujer desesperada, estaría seguro que a la mayoría de nosotros nunca se nos
ocurriría dejar el cuidado de un recién nacido a una persona totalmente
desconocida.

Desafortunadamente, este mundo caótico, afanado, sin esperanza está


involucrado en la iglesia moderna. Vivimos vidas afanadas, estresadas. La
mayoría de los cristianos jóvenes no está pensando en el matrimonio, mucho
menos en hijos. Los cristianos están más preocupados por alcanzar el éxito,
nuestra vida cristiana está ligada a los triunfos que conseguimos y
condicionamos nuestro estado espiritual por la cantidad de dinero que
tengamos. La pregunta es evidente: ¿qué relación puede tener esta
problemática con Filipenses? En el día de hoy, quisiera colocar un pequeño
panorama acerca de lo que este libro puede enseñarnos en cuanto a la vida
práctica.

Para algunas personas, este libro está enfocado hacia la práctica


cristiana. Algunos dicen que es carente de contenido teológico (o que tiene
muy poco de él); sin embargo, considero que, si bien es cierto que es un libro
enfocado más a la práctica de una vida cristiana, es también una fuente de
contenido teológico importante. Recordemos que la Biblia es la palabra de
Dios y todo nos enseña.

En la época en que fue escrito este libro (profundizaremos esto más


adelante), no existía el Nuevo Testamento como lo conocemos hoy. Es por
esto que los escritos que se distribuían en aquella época eran los libros del A.T.
observemos por un momento lo que Pablo dice acerca de las enseñanzas
escritas en el A.T. ‘Porque todo lo que fue escrito en tiempos pasados, para
nuestra enseñanza se escribió, a fin de que por medio de la paciencia y del
consuelo de las Escrituras tengamos esperanza’ (Romanos 15.4- LBLA) La
palabra esperanza hace alusión a ‘una espera feliz del bien’ y ‘tiene que ver
con lo invisible y lo futuro’ 1. Ahora, relacionemos este significado y el texto
con lo que Pablo menciona Filipenses 4.7 ‘Y la paz de Dios que sobrepasa
todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo
Jesús’ (LBLA). En relación con estos dos textos: ¿Estamos cumpliendo el
propósito de Dios en cuanto a tener esperanza de las cosas venideras?

1
[CITATION WEV07 \p 347 \l 3082 ]
Historia de la iglesia en Filipos

Todo comienza con los dominios griegos desde el año 359 a.C. Felipe
II, padre de Alejandro Magno reinaba en Macedonia; sin embargo, su zona de
gobierno era muy limitada, la ambición de Felipe era la de extender sus
terrenos, es por esto que equipa a sus soldados y comienza con la exploración
de las zonas aledañas a su gobierno. La necesidad de sostener dicho equipo de
soldados le obligó a asentarse en un lugar llamado Crenides (que traducido es
‘Fuentecillas’) decidió llamarla Filipos en honor a su nombre. Esta ciudad era
un lugar de granes cantidades de oro. Era un hombre codicioso y promovía los
sobornos ‘Ninguna fortaleza, a cuyos muros pueda acercarse un asno cargado
de oro es inexpugnable”. Tanto fue la explotación de las minas por parte de
Felipe II que en poco tiempo la ciudad simplemente se convertiría en otra zona
de macedonia sin ninguna importancia.

La soberanía de Dios actúa en la historia. Es interesante la manera en


la que el comentarista W. Hendriksen define: ‘Inestimables consecuencias se
derivan de esta conquista. Se ha dicho con verdad que si Felipe y Alejandro no
hubieran llegado hasta el este, Pablo y el evangelio que él proclamaba nunca
hubieran pasado al oeste, pues fueron estos conquistadores los que crearon un
mundo de habla helena haciendo posible con ello la difusión del evangelio a
muchas regiones.’ 2

Con la invasión de Roma en el año 146 a.C, Filipos fue considerada


una colonia Romana. Luego, durante el año 42. d.C, tuvo lugar la famosa
guerra de Filipos, en donde se estaba defendiendo el imperio de la república
Romana, pronto Octavio (desdepués de la muerte de Antonio) tomaría el lugar
del César, sería conocido bajo el nombre de César Augusto en el año 29 d.C.

2
[CITATION Wil06 \p 11 \l 3082 ]
Recordemos que este momento tiene relación con la creación de la
dinastía Herodiana. Después de la guerra de Filipos, este lugar fue un sitio de
descanso para los jubilados soldados romanos. Esta provincia era considerada
como la Roma en miniatura. Los ciudadanos poseían los beneficios de ser
soldados Romanos, entre los cuales habían: ‘…el estar exentos de se azotados,
no poder ser arrestados, salvo en casos extremos, y el derecho de apelar al
emperador. Tenían sus nombres registrados en los archivos de Roma; su
lenguaje era el Latín; y les gustaba vestirse según el estilo de Roma.’ 3 Los
beneficios era bilaterales, el imperio se aseguraba de protegerse de cualquier
ataque, puesto que lo primero que los invasores atacarían serían las provincias
y los habitantes se beneficiaban también del cuidado del imperio. Sin duda, la
moda en la época era ser un ciudadano de Filipos, estas personas estaban muy
apropiadas de su identidad con la nación.

La Iglesia en Filipos es fundada en el segundo viaje misionero de


Pablo. Esta fue la primera iglesia que Pablo fundó en Europa; el evangelio se
estaba extendiendo a ‘todo el mundo’ (Hch. 1.8). La ciudad era muy
importante por la fluctuación comercial que había allí. Recordemos que la
dirección soberana del Espíritu Santo estuvo tomando el control del viaje
(Hch. 16.6-10) Luego llegan a Filipos, la escirutra nos dice que estuvieron
varios días en la ciudad. Esto se debe probablemente a la extensión de la
ciudad y a que pudieron estar perdidos. El Apóstol siempre tenía la intención
de acercarse a las sinagogas a enseñar puesto que, al ser judío, tendría la
posibilidad de comentar dentro de la reunión. Es muy probable que la
formación de las sinagogas se haya producido durante el exilio de Jerusalén a
Babilonia. (alrededor de los años 400 a.C); durante el año 50 d.C, el
emperador Claudio (41-54 d.C) ordendó la expulsión de los Judíos de Roma,

3
[CITATION Wil06 \p 13 \l 3082 ]
es claro que la decisión también la tomarían sus colonias. Es por esto que
Lucas relata que salieron de la ciudad para ubicarse en el lugar donde solían
encontrarse los judíos (Hch. 16.13) La mujer que recibe la palabra de Dios no
era una judía de nacionalidad, sino una mujer de Sardis que había adoptado la
religión Judía. Esta mujer probablemente era viuda, aunque comerciante muy
importante, en la región de Tiatira se comercializaba el purpura, esta era una
tela muy costosa, los moluscos que daban tinte a la ropa se tenían que exprimir
para dar el color y por cada ejemplar sólo salía una gota de tinta. ‘Lidia vino
de Asia con sus tesoros terrenales para descubrir en Europa tesoros
espirituales.

Continuación del Estudio del Libro de Filipenses

Contexto Histórico

Como mencionamos anteriormente, Pablo y sus acompañantes habían


llegado a Filipos y encontraron una excelente recepción por parte de algunas
personas, entre ellas Lidia. La Escritura nos muestra el cambio tan drástico de
esta mujer, esto sucedió por obra únicamente de Dios. (Hch. 16. 14) la
respuesta de la mujer fue la hospitalidad, este fruto es característico de la
iglesia primitiva (Ro. 12.13; Heb.13.2) , dio gran testimonio para los
incrédulos (Hch. 2. 43-47); El testimonio de la mujer se extendió a otros
integrantes de su familia, la convicción de un cambio en la vida de Lidia
motivó a sus familiares a acercarse al evangelio. Recuerde que sus acciones no
van a hacer que una persona cambie, pero Dios sí puede utilizar su testimonio
para llamar a arrepentimiento a otras personas a través del evangelio (1 Ti.
4.16; 2 Ti. 2.25), hemos tenido una mala interpretación acerca de guardar el
evangelio y nos responsabilizamos de forma equivocada de la ssalvación de
otras personas. Nuestro mandato es predicar el evangelio, no me malentiendan,
pero recuerden siempre que la salvación viene de Dios (Sal. 62.1), hemos
tomado de muy mala forma las palabras de Cristo (Jn. 15. 20), no pretendo
enfocarme en este texto; sin embargo en lo que vamos a ver en cuanto a la
iglesia de Filipos, es necesario resaltar este punto.

Recordemos que el Señor en el cap. 15 hace mención de la vid y la


importancia de ser consientes de nuestra dependencia absoluta de Él (Jn. 15.4)
Ahora bien, después de la analogía de Cristo con la vid y los pámpanos,
muestra que los que le sigan van a tener las mismas situaciones que Él tuvo
(Jn. 15. 18-20) Cristo está hablando acerca de las situaciones difíciles que
como creyentes vamos a tener. ¿No ha considerado que somos aborrecidos por
el mundo? Si su respuesta es afirmativa ¿por qué entonces continuamos con
temor a la hora de exponer el evangelio? Nuestra comunidad está promoviendo
diariamente que pequemos contra Dios, cuando somos lapsos, cuando
admitimos el pecado de los hombres (y muchas veces lo practicamos con
ellos), eso no es ser aborrecidos por el mundo. A Dios gracias que, aunque el
Señor nos muestra una situación difícil, también muestra esos vestigios de luz
que sólo Él puede darnos y es decir que así como muchas personas guardaron
la palabra que Él dio, también ellos guardarán la palabra de Dios que nosotros
enseñemos (Jn. 15.20) no hay nada más allá del texto.

Sin embargo (continuando con nuestro estudio), ante toda prosperidad


espiritual, también es necesario que existan pruebas. Las pruebas en el
creyente debieran ser motivo de gozo (Ro. 8.28). Quisiera hacerme entender
en este punto: Cuando menciono que debiera ser causa de gozo, no me estoy
refiriendo a que las personas no pasarán por desánimo o por situaciones que
sean de tristeza, o que si sienten ese tipo de emociones están pecando. El
pecado llega a la vida de un creyente cuando se empeña en seguir mirando su
problema y no a Cristo y lo que ha ordenado para nosotros en cuanto a la
seguridad que tenemos en Él (Heb. 12. 1-2).

Esta advertencia viene, considerando la obra de Pablo y su siguiente


problema, al aparecer una mujer que estaba influenciada por Satanás (Hch.
16.16). Una de las cosas que me llama la atención del comportamiento de esta
mujer es que ella promueve la enseñanza de Pablo y Silas. Esto nos puede dar
un claro llamamiento a los falsos maestros que se apoyan en enseñanzas de
hombres de Dios y las tuercen para el beneficio propio; Sin embargo, los
comentaristas hacen hincapié en que esta situación molestó a Pablo porque
quien estaba dando testimonio no eran creyentes, sino una servidora de
Satanás. El Señor le permite ser liberada de esa situación, pero trae
persecución para Pablo y Silas. ¿Por qué sólo a ellos si sus acompañantes eran
Timoteo y Lucas también? Porque eran judíos directos, Timoteo hijo de madre
Judía pero no era directamente judío por su padre, Lucas era griego. El
pretexto de los hombres que les prendieron era que enseñaban la religión judía
a ciudadanos romanos (recuerden que los filipenses tenía una conexión muy
fuerte con Roma), al ser encarcelados, esto trajo una gran bendición a un
soldado. (Hch. 16.19-34). Aún en medio de los azotes (Hch. 16.22-23) Pablo
y Silas bendijeron a la iglesia de Filipos que se reunía en casa de Lidia (Hch.
16.40).

¡Cuán importante es entender el contexto! Para ver la autoridad que


tiene Pablo en su ministerio, al inicio de la carta menciona que es Esclavo de
Cristo (Fil. 1.1) Filipenses es una de las cartas que Pablo escribe en la cárcel
en el año 62 d.C . Se considera esta carta como la última en ser escrita en la
prisión en Roma.4 Al enterarse de esta situación, los filipenses deciden

4
Un buen libro que concede una pequeña introducción a las cartas desde la prisión la
pueden encontrar en [CITATION Pau93 \p "208- 210" \l 3082 ]
enviarles una ofrenda de ayuda (de amor) a Pablo y la razón de esta carta es
muestra del agradecimiento de Pablo frente al deseo de los filipenses por suplir
la necesidad del Apóstol (Fil. 4.10).

En la actualidad (aunque es poco habitual escribir cartas) tendemos a


escribir de últimas nuestro nombre y a quién va dirigido. En la época de Pablo,
era común escribir como encabezado quiénes son los escritores del texto.
Pablo se menciona a sí mismo y a Timoteo bajo el título de ‘Siervos’ doulov 5.
Aunque existen diferentes definiciones acerca de este texto, al momento
de usarlo Pablo, siempre se está refiriendo a una condición de
esclavitud, Vine menciona lo siguiente: ‘Sin embargo, al llamarse a sí
mismo «siervo de Jesucristo» (Ro. 1.1), el apóstol Pablo implica: (1)
que había sido anteriormente esclavo de Satanás, y (2) que, habiendo
sido comprado por Cristo, era ahora, un esclavo voluntario, ligado a su
nuevo dueño.’

Permítame tomarme el atrevimiento de compartirle dos perfiles


de “grandes” siervos de la actualidad:

‘Activo en el ministerio por más de veinte años, el Apóstol


Guillermo Maldonado es el fundador del Ministerio Internacional El
Rey Jesús —una de las Iglesias multiculturales de más rápido
crecimiento en los Estados Unidos—, la cual es reconocida por sus
visibles manifestaciones del poder sobrenatural de Dios. Es padre
espiritual de más de 330 iglesias en 50 países, las cuales forman la Red
del Movimiento Sobrenatural (antes llamada Red Apostólica Vino
Nuevo). Además, es fundador de la Universidad del Ministerio
5
[CITATION WEV07 \p 339,837s \l 3082 ]
Sobrenatural (USM). El Apóstol Maldonado tiene un doctorado en
consejería cristiana y una maestría en teología práctica. Vive en Miami,
Florida.’

‘La profeta Ana Maldonado es una mujer de oración usada por Dios
poderosamente en la intercesión profética, la sanidad interior, guerra espiritual
y liberación. Es co-fundadora del Ministerio Internacional El Rey Jesús.
Durante años, la profeta Ana Maldonado ha venido orando por Israel. Su
pasión es llevar el poder sobrenatural de Dios a todas las naciones para sanar al
enfermo, liberar al pueblo y abrir la cárcel de los cautivos espirituales. Ella
activa adoradores e intercesores para que se paren en la brecha por su familia,
ciudad y nación. Su corazón es ver a cada creyente cumplir el llamado y el
propósito de Dios para su vida.’6

Desde el principio de su ministerio, Pablo se identificó a sí mismo


como un ‘Abortivo’ (1 Co. 15. 7-11). Para mi posición, no hay mayor fruto del
Espíritu en la vida de un creyente que la humillación de lo que somos delante
de aquel que lo llena todo. Imagino cómo Pablo reconocía su estado anterior al
ministerio con tristeza y humillación, entendiendo que era lo que era gracias a
la gracia de Dios que fue puesta sobre Él para creer. (1 Ti. 1.12-17). ¿Cuál
cabida tenemos nosotros con nuestras capacidades, dones o talentos que el
Señor nos ha concedido?. En nuestro corazón siempre tenemos que recordar
que nuestras justicias eran delante de Dios como trapos de inmundicias (Is.
64.6) y que es gracias a la gracia de Cristo que podemos ser personas
redimidas. Con agradecimiento nos acercamos y nos humillamos ante el
Señorío de Cristo:

6
[ CITATION Min19 \l 3082 ]
‘Cada creyente debe mostrar una devoción semejante, en especial si
está llamado al ministerio. Aun si la devoción primordial de un pastor o
maestro es hacia la iglesia, esto acarreará cierto grado de frustración,
transigencia y fracaso espiritual. En cambio, la devoción a Jesucristo nunca
será vana ni acarreará desilusión. Si el ministerio de un pastor se rige por las
normas y opiniones de otros creyentes, sin duda se distanciará del evangelio y
caerá en algún tipo de transigencia. Por el contrario, la devoción y la
obediencia al Señor y a su Palabra siempre lo mantendrán en un andar fiel y
piadoso.’7

¿Reconocemos el Señorío de Cristo en nuestras vidas? Es fácil


jactarnos de nuestras capacidades, muchas veces creemos que es necesario
hablar de lo que somos. Lo primero que se me viene a la mente cuando alguien
me pregunta que hago es mencionar mi profesión. Muchas veces, me he
sentido ridiculizado por ver que cuando intento mencionar mi profesión, cerca
hay otros que tienen las mismas (a veces mejores) habilidades que yo y en
ningún momento tuvieron que hacer alarde de sus facultades. ¿No es así con
usted? Aún así, Pablo reconoce el señorío de Cristo con amor y alegría,
comparte la dicha que siente al ser un esclavo de Cristo y le escribe con ese
mismo ímpetu a otras iglesias (Ro. 1.1; Tit. 1.1) otros siervos se unen a este
mensaje (Stg. 1.1; 2 P. 1.1; Jud. 1).

¿Por qué la carta se dirige a nosotros en la actualidad? Porque Pablo la


escribió para los Santos.

¿A quién fue dirigida la carta?

Si bien, ya hemos realizado un trazo acerca de quiénes


geográficamente son las personas que se encontraban en Filipos, Pablo está
7
[CITATION Joh12 \p 16 \l 3082 ]
remitiendo la carta a todos los Santos (Fil. 1.1). Lo primero que se nos viene a
la cabeza cuando observamos la palabra ‘santos’ la referimos al Antiguo
Testamento. Nuestro Dios es Santo (Is. 6.3) y era común en la época del
Antiguo Testamento que se santificaran los objetos que iban a ser dedicados
Dios. La palabra hebrea es ‘Qadôsh’, en los idiomas semíticos tiene dos
significados importantes: (1) es un adjetivo que describe algo o a alguien, esa
primera definición puede definirse como ‘Puro’ o ‘consagrado’. (2) menciona
la santidad como una circunstancia o algo abstracto. en Hebreo, el uso del
verbo Qadôsh y Quadesh juntan los dos significados.8

En el griego ‘jagios’ Significa separado del pecado y consagrados a


Dios. En tanto que estén dedicados a Dios, esta separación «involucra
demandas divinas sobre la conducta de los creyentes» 9 El mismo autor que dio
la anterior definición dice lo siguiente:

«Así, esta santidad no es un logro, sino un estado al que Dios en gracia


llama a los hombres; pero los creyentes son llamados a santificarse (en
consecuencia a su llamamiento, 2Ti. 1.9), purificándose de toda
contaminación, abandonando el pecado, viviendo una vida santa (1 P. 1.15; 2
p 3.11), y experimentando comunión con Dios en su santidad.»10

Para comprender mejor el mensaje, permítame contarles


ejemplificarla: Imagine usted que existe un artefacto que sólo puede entender y
utilizar una familia en particular, dicho artefacto ha pasado de generación a
generación entendiendo su utilidad; sin embargo, en algún momento de la
historia, dicho artefacto cae en manos de una familia ajena a la tradición y
entonces es utilizado de forma inconsciente y hasta peligrosa. Esto es lo

8
[CITATION WEV07 \p H309 \l 3082 ]
9
[CITATION WEV07 \p G812 \l 3082 ]
10
[CITATION WEV07 \p 812-813 \l 3082 ]
mismo que Pablo quiere hacer entender desde el principio de la carta, este
mensaje va dirigido para un linaje particular, para los Santos ‘en’ Cristo,
cualquiera que no esté dentro del marco no va a comprender realmente el fin
de la carta.

En el párrafo anterior enfaticé sobre la preposición ‘En’ y es muy


importante tenerlo en cuenta para comprender que nuestra santidad no es de
nosotros (a pesar de que la ejecutamos) sino que proviene de Dios:

‘El apóstol es muy aficionado a emplear esta frase (“en Cristo”, “en
él”, etc.) con mucha frecuencia. Y lo mismo gustaba de [p 59] hacer nuestro
Señor (“en mí”) según nos cuenta el discípulo amado (véase Jn. 15:1–7). Esta
frase, que Pablo usa repetidamente a lo largo de sus epístolas, no se refiere a
“una unión física real” como algunos han creído. Tampoco es cierto que en sus
escritos haya dos “caminos de salvación” contradictorios, el uno forense o
legal (Jesús pagó por mis pecados, librándome de la culpa y de la
condenación), y el otro experimental, místico, o práctico (yo vivo en él, porque
he muerto con él y he resucitado con él). Por el contrario, tanto el forense
como el experimental son dos elementos esenciales en la gran obra de la
salvación. La muerte de Cristo por el creyente jamás ha de separarse de la fe
ejercida por éste. Es más, hay una estrecha relación entre estos dos factores, a
saber, la acción regeneradora y santificadora del Espíritu Santo en el creyente.

El Espíritu aplica los méritos de la muerte de Cristo al corazón del


creyente, y, al plantar en él la semilla de la fe, le capacita para abrazar a su
Señor mediante una fe viva. Así pues, por (a favor), en y por (medio de),
forman una cadena de oro tal que cualquiera que menosprecia uno solo de sus
eslabones estará errado en teoría y en práctica. Pablo, en algunos de los
muchos pasajes en que aparece la expresión en Cristo (Jesús), combina ambas
ideas (lo que Cristo hizo por el creyente, y lo que después es hecho por éste) y
muestra también que el lazo de unión entre ambas es el Espíritu Santo obrando
en el corazón.’11

Comprender correctamente esta unión nos ayudará a recibir con un


corazón sincero las bendiciones que hemos recibido de Cristo y su sacrificio
perfecto. Nuestra primera reflexión debe ser ¿Vivimos vidas santas por medio
de nuestra conducta? ¿Recibimos la palabra como los santos que están en
Cristo? Si creemos que somos santos por lo que hacemos, debemos entender
que somos, más bien, santos a pesar de lo que somos, «Por medio de la fe en
Cristo, la misma justicia de Cristo se atribuye al creyente, haciéndolo así justo
a los ojos de Dios (coram Deo). El juicio de Dios es un juicio de perdón
misericordioso, ya que lo que reina en la vida del fiel es la santidad (justicia)
de Cristo.»[ CITATION KMa \l 3082 ]

Sin ahondar tanto a los demás dirigentes, Pablo está abarcando a toda
la Iglesia que se encuentra en ese lugar, aún a los líderes de estas iglesias, a los
obispos (Supervisores) y a los diáconos (Servidores) (1 Tim. 3. 1-13). El
saludo de Pablo termina con una bendición que todos los días debemos
recordar como hijos de Dios:

Así pues, sobre todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos,
con los obispos y diáconos, la gracia y su efecto, la paz, son pronunciadas: la
gracia, es decir, el espontáneo e inmerecido favor de Dios en acción, el don de
su soberana, gratuita e infinita bondad en operación; y la paz, o sea la
convicción de la reconciliación mediante la sangre de la cruz, una verdadera
abundancia y plenitud espiritual. Estas dos bendiciones (la gracia y la paz)
provienen de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.

11
[CITATION Wil06 \p 58,59 \l 3082 ]
Esta salutación es igual que la de Ro. 1:7; 1 Co. 1:3; 2 Co. 1:2; Gá.
1:3; Ef. 1:2; Flm. 1–3; y substancialmente la misma que 2 Ts. 1:1. 12

Pablo anhela que en la vida de los creyentes esté presente en todo


momento el agradecimiento por la gracia que trae paz al corazón del creyente.
Esto es una cualidad que debe encontrarse en la actualidad, así como en la
iglesia primitiva. El mensaje efectivo trajo arrepentimiento en el corazón de las
personas (Hch. 2.37-41) y el fruto de ello fue la generosidad y la comunión
(Hch. 2.42) el reconocimiento que todo proviene de Dios, tanto lo espiritual
como lo material (1 Tim. 6.7-8) y que por todo debemos estar alegres (Fil 4. 4-
7). ¿Reflejamos el conocimiento que tenemos de Dios con nuestras acciones?
Tengo que reconocer que es algo que me cuesta aún, pero que tenemos que
acercarnos con arrepentimiento al Señor y con agradecimiento que es por Él y
para Él que hacemos todo. ¿Somos conscientes de ello?

Participantes de la Gracia (Fil. 1. 3-11)

Como estudiamos anteriormente, tenemos la bendición de ser llamados


Hijos de Dios (Jn. 1.12). Pablo especificó que su carta iba dirigida a personas
transformadas por Dios. No podemos entender las verdades reveladas en la
Escritura si no somos verdaderos creyentes, mucho menos podemos practicar
una vida de verdadera piedad si no guardamos lo que la Escritura enseña.

Los pasajes que continúan después del saludo fraternal de Pablo hacen
referencia a las conductas que nos hacen partícipes de la gracia (Fil. 1.7).
Quiero hacer hincapié en que muchas personas pueden simular este tipo de
conductas; sin embargo, a pesar de aparentarlas, El Señor conoce realmente los

12
[CITATION Wil06 \p 62 \l 3082 ]
corazones, no podemos pretender engañar a Dios con nuestra falsa conducta.
Es por esto que, al examinar estas características, es necesario que nos
autoexaminemos y reconozcamos cuáles son aquellas actitudes que como
participantes de la gracia debiéramos tener pero que, no obstante, algunas
situaciones nos han hecho perder el rumbo de una vida de piedad como nuestro
Señor lo demanda.

El texto central de la participación de los creyentes en la gracia no se


encuentra en el v.7 sino en el v.6, para poder hacer parte de la gracia tuvimos
que haber sido salvados de la ira de Dios a través del reconocimiento de la
obra de Cristo, la confesión de nuestros pecados, el reconocimiento de su
Señorío sobre nosotros y la dependencia continua que tenemos en Él.

Esta sección de la carta comienza con un agradecimiento de parte de


Pablo por los creyentes a Dios. Este agradecimiento contiene tres
características que son oportunas mencionar (1) Agradecimiento a Dios (2)
Por los creyentes (3) Continuo.

Es evidente que las tres características están explícitamente ligadas, no


obstante cada una de ellas hace que la frase que abarca los versos 3 y 4 tengan
un propósito claro en el mensaje que Pablo quiere darles a los Filipenses.

Los Filipenses, como cualquier otra congregación del mundo antiguo


(y moderno), tiene necesidades espirituales específicas. Estas necesidades
dentro del pueblo cristiano traen angustia. Existe una necesidad clara por que
El Señor actúe providencialmente en aquellas situaciones. La oración de un
creyente es importante, el pueblo judío era consciente de ello (Jn. 9.31) El Rey
David reconocía plenamente el poder de Dios (Sal. 60-63). El Señor Jesús
enseñó a los discípulos a orar teniendo plena confianza en Dios (Mt. 6. 10,13),
aún en la mis carta que estamos estudiando, Pablo enfatiza en la importancia
de confiar en Dios por medio de la oración (Fil. 4.6).

Cuando Pablo hace este saludo de gran gozo al leer, se estaba


refiriendo no solamente a una oración de agradecimiento, sino más bien a una
oración que involucraba peticiones; sin embargo, lo hacía en agradecimiento.
En la época en que fue escrita la carta, era muy común que las personas
agradecieran a los dioses paganos, el escrito de Pablo hace referencia al Dios
verdadero, Pablo está apropiándose de Dios, no lo está haciendo de forma
extraña, oculta o materialista, sino relacionalmente. Pablo se siente de Dios y
lo menciona de forma clara. El texto griego enfatiza en el pronombre personal,
es como si el texto dijera ‘mío, mío, mío’ no quiere dejar cabos sueltos, no
quiere generar duda en cuanto a la existencia de un solo Dios verdadero y
quiere resaltar que es suyo y él es de Dios. ¡Imagine usted el grado de relación
que Pablo tenía con Dios! No es de extrañar que él mismo escribiera la
confianza que el Espíritu Santo trae al corazón para tener esa relación cercana
con el Padre (Ro. 8.15; Gá. 4.6) Cristo mismo utilizó esta palabra para
evidenciar la cercanía que tenía con el Padre (Mr. 14.36).

Mi intención no es que usted cambie la palabra ‘padre’ por ‘papi’ o


‘papito’, recuerde que muchas cosas podemos decir con la boca, pero estar
lejos de nuestro Señor (Mt. 15.8). Note también que Pablo en los versos
anteriores muestra que es el Espíritu Santo quien nos convence:

‘No es en principio una referencia a la transacción por la cual nos


adopta Dios (…), sino una noción consciente que el Espíritu produce en
relación con la realidad significativa de que Dios nos ha convertido en hijos
suyos, y que por lo tanto, podemos venir delante de él sin temor o vacilación,
como nuestro Padre amado. También supone la confianza de que en verdad
somos hijos de Dios’13

El agradecimiento de Pablo por los Filipenses tiene como resultado la


oración (v. 4) Notemos que Pablo agradece a Dios por los hermanos, ora a
Dios por sus hermanos, es decir, los hermanos son una bendición pero no por
sí solos, sino porque el Señor ha hecho una gran obra en los creyentes.
Recuerde que nosotros por sí solos seríamos una carga, aún hay hermanos que
son cargas, pero que, al final, el Señor los usa para bendición de nuestras
vidas, para formar nuestro carácter (1 Co. 11. 19).

Permítame realizar otro contraste acerca de lo que quiero decir:

En muchas ocasiones hemos visto cómo personas que hacen parte del
ámbito cristiano han cumplido carreras exitosas y, como muestra de ello
buscan hacer algún evento que conmemore las hazañas que durante los años
han podido lograr. Ejemplo de esto pueden ser los 25 años de Marcos Witt, los
30 años de los voceros de Cristo entre otros; Sin embargo, he podido reconocer
que en la mayoría de estos eventos, aunque se mencione al Señor, no existe
realmente una conciencia acerca de lo que Dios ha hecho en la vida de una
persona. La conclusión sería que siempre este tipo de actividades terminan
dándole un reconocimiento inflado al hombre con el pretexto de ser usado por
Dios, más que agradecer a Dios por lo que ha hecho en la vida de ese
personaje.

Para comparar la situación con un evento contemporáneo, mencionaré


el evento que conmemoró los 50 años de ministerio del Pastor John
MacArthur. Usted puede encontrar el evento pre-grabado en youtube; un
momento especial, sin duda alguna llena de celebraciones muy hermosas,
13
[CITATION Joh153 \p 1556 \l 3082 ]
himnos cantados para la gloria de Dios y hasta un regalo peculiar, el escritorio
del Pastor británico Martyn Lloyd Jones. Ovaciones y bitores se encontraron
durante el evento. Llega el momento en el que John MacArthur sube al púlpito
de profiere unas palabras honestas para la ocasión que buscaré parafrasear: ‘sé
que estamos reunidos para reconocer la obra de Dios durante estos 50 años
de ministerio; sin embargo, venimos a escuchar la palabra de Dios, que es el
centro verdadero de esta celebración’14

Este mismo enfoque tenía Pablo al rotular su agradecimiento para


Dios.

‘También en Filipos había necesidades espirituales definidas: las


imperfecciones (Fil. 1. 9-11; 2. 2, 4, 14, 15; 4. 2) y los peligros (Fil. 3. 2, 18,
19). Por eso Pablo implora al Señor muchas veces (siempre… en todas mis
oraciones) para que estas necesidades sean suplidas’ 15

Para nosotros los cristianos no es suficiente con pensar en el otro, es


importante acercarse a Dios en oración por las demás personas, siempre con la
misma conciencia con la que Pablo se acerca a Dios por sus hermanos en
Cristo. Recuerde bien que la oración estaba dedicada a los creyentes. Otro
punto especial son las palabras del v.4 Pablo rogaba por ellos, en el texto
original aparece dos veces la misma palabra cuando menciona ‘rogar’ y
‘oración’, el primero hace referencia a la acción de Pablo y el segundo hace
referencia hacia por quienes oraba Pablo. La oración también involucra
intercesión por los hermanos. El Apóstol suplicaba por ellos. Curiosamente,
aparece la palabra ‘gozo’, el texto griego muestra que es algo que sale de lo
más profundo de Pablo, esto quiere decir ‘deleite’. Podríamos parafrasear el

14
[ CITATION Jai19 \l 3082 ]
15
[CITATION Wil06 \p 63 \l 3082 ]
texto de la siguiente manera: ‘Cuando oro, tengo la oportunidad de rogar por
ustedes, para mí es un deleite hacerlo.’

No basta con pensar en las personas. En muchas ocasiones, hemos


escuchado que las personas piensan en otras como pensar en una canción,
luego, mientras pasa el tiempo, las personas olvidan el tema y siguen hacia
adelante. Pablo está mencionando en este texto que la importancia de pensar
en los demás se encuentra en orar por los demás.

Hoy pudimos observar varios puntos a favor de quienes hemos sido


redimidos: 1. Los redimidos reconocen la obra transformadora del
Espíritu Santo, glorificando a Dios por el uso que ha hecho de una
comunidad de personas (Gá. 1. 3-5).

2. El nuevo nacimiento trajo a nosotros una relación nueva con


Dios, ésta nos permite acercarnos confiadamente a Dios (Heb. 4.16).

3. Nuestra vida refleja una comunión correcta con Dios cuando


tenemos el privilegio de orar los unos por los otros.

El crecimiento del creyente (Filipenses 1. 5-11)

A modo de introducción, quisiera ser enfático en la intención de Pablo


por escribir esta carta. Filipenses es una iglesia (como todas) con errores, pero
que siempre había tenido el deseo por servir a los demás en el aspecto
económico (Fil. 4.16); sin embargo, Pablo quiere ser claro en que la comunión
que tiene esta congregación no se enfoca únicamente en el dinero, sino en
muchos otros aspectos.

Primero, quisiera enfocarme en la forma en la que Pablo menciona la


constancia de su comunión ‘Desde el primer día hasta ahora’ (V. 5), los
filipenses tenían profundo amor (1 Co. 13. 4-6) recordemos cómo fueron los
inicios de esta congregación. En los dos episodios que el libro de los hechos
registra en cuanto a la apertura de esta iglesia, hubo adversidad (recordemos
que los judíos se encontraban perseguidos) tanto de la comunidad como del
gobierno local (recordemos la prisión que sufrieron Pablo y Silas) (Hch. 16.
22,23); no obstante, el evangelio fue compartido y, quienes recibieron las
buenas nuevas, desde el mismo momento de la convicción de sus pecados,
produjeron frutos que fueron de bendición para los misioneros y para la
iglesia, estos casos son los de Lidia (Hch. 16. 14, 15) junto con su familia, y el
carcelero con su familia (Hch. 16. 30-34). En mi opinión, no hay escena más
conmovedora y hermosa que ver un hombre sumido en el pecado arrepentido,
haciendo lo que nuestro Señor hizo con sus discípulos, servir (compárese con
Jn. 13. 1-5). Quiero aclara que mi comparación no está basada en la
personalidad del carcelero y de Cristo, sino en la disposición de servir, esta fue
una muestra clara del servicio que Cristo enseñó (Jn. 13. 12-15), otra pregunta
ronda en mi mente ¿Quién le había enseñado esto al carcelero? La respuesta es
simple, la nueva naturaleza del hombre regenerado, le permite tener
comportamientos que van acordes al nuevo hombre (2 Co. 5.17). Sin embargo,
durante nuestro estudio, vamos a profundizar en algunos aspectos más.

Continuando con el v. 5 de Filipenses, Pablo ora por la comunión en el


evangelio. Dentro de los comentarios consultados, los dos concuerdan con la
complejidad de la palabra Koinônia, su significado es amplio pero podríamos
condensarlo en ‘compañerismo, participación’. Al parecer, es evidente que
Pablo está hablando de un compañerismo en la fe, no podemos tener comunión
con las tinieblas (2 Co. 6. 14-18), esto involucra muchas áreas de nuestra vida,
aunque aquí estamos refiriéndonos al compañerismo que debe tener una
congregación. De forma simplificada, William Hendriksen (cuya bibliografía
para condensar el término koinônia es muy amplia) detalla 8 aspectos en los
que podemos considerar la comunión entre los hermanos; John MacArthur los
expone de esta manera:

‘Primero y ante todo está la comunión de la gracia. No se trata de un


compañerismo humano y natural, sino de uno que es planeado y movido por
Dios a través de su Espíritu Santo. “Porque por gracia sois salvos por medio de
la fe”, declaró Pablo; “y esto no de vosotros, pues es don de Dios” (Ef. 2:8; cp.
Hch. 15:11; Ro. 4:5). Todos los creyentes han sido escogidos por Dios por la
gracia, para salvación. Si Él no los hubiera escogido, ellos no lo habrían
escogido a Él. (…) (Jn 6:44; Ro.8:29-30; cp. Jn. 15:16).

Aquellos a quienes Dios escoge para salvación son unidos al Padre, al


Hijo, y al Espíritu Santo, así como a sus hermanos en la fe. Refiriéndose a sí
mismo, Jesús oró al Padre (Jn. 17:2-3). Pablo resumió esa verdad en estas
palabras:(1 Co. 6:17).

Segundo está la comunión de la fe. A nivel humano, solo la fe trae a


los pecadores a la salvación. (Hch. 16:31; cp. Ro. 10:9-10).Con todo, como ya
se citó, aun la fe humana tiene origen divino(Ef. 2:8).

Tercero está la comunión de la oración y de la acción de gracias. Nada


une más a los creyentes que la adoración a Dios en alabanza y acciones de
gracias. Los cristianos deben estar “dando siempre gracias por todo al Dios y
Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo” (Ef. 5:20; Col. 3:17). Deben
también estar “siempre gozosos… [orar] sin cesar… [dar] gracias en todo,
porque esta es la voluntad de Dios para con [ellos] en Cristo Jesús” (1Ts. 5:16-
18).
Cuarto está la comunión del amor, la virtud suprema que encierra
todas las demás. Es más importante que hablar en lenguas, profetizar, tener
conocimiento teológico; más que la fe, la generosidad sacrificada e incluso el
martirio (1 Co.13:4-8, 13). El apóstol Juan enseñó que el amor es la señal
terminante de la comunión cristiana (1 Jn. 4:7-8).

Quinto está la comunión de la ayuda a los necesitados (Gá. 6:10).


Incluso bajo el antiguo pacto, a los creyentes se les ordenaba (Pr. 3:27).

Sexto está la comunión que promueve el evangelio, como ya se


mencionó. Esto se lleva a cabo mediante la predicación, la enseñanza, el
testimonio, y el apoyo a quienes el Señor ha llamado de manera específica a
esos ministerios. Esta comunión es claramente el cumplimiento de la Gran
Comisión de Jesús (Mt. 28:19-20).

Séptimo está la comunión de la separación del mundo (Jn. 15:19). Un


aspecto restrictivo pero vital de la comunión es “guardarse sin mancha del
mundo” (Stg. 1:27), lo cual jamás ha sido tan difícil como en nuestra era. Juan
exhorta a los creyentes (1 Jn. 2:15-16).

Octavo está la comunión de la guerra espiritual. En gran parte esto es


una extensión del punto anterior. Si un creyente está realmente separado del
mundo, se convertirá en el blanco de los ataques del mundo. “Si fuerais del
mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os
elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece (Jn. 15:19-20). En esta gran
lucha espiritual el conflicto no es de la carne (2 Co. 10:4). En esta guerra los
creyentes son soldados del mismo ejército (2 Ti. 2:3). 16’

Esta no es una cita textual. Muchas de las palabras que estaban mencionadas fueron
16

omitidas, el documento completo se encuentra en: [CITATION Joh12 \p 21-22 \l 3082 ]


Lo más hermoso de la vida de Pablo como Apóstol fue su vida práctica
acorde con su enseñanza. Muchas veces, tendemos a volvernos repetitivos en
la enseñanza, queremos ser personas doctas y que se nos reconozca por las
buenas maneras en las que abordamos un texto (espero hacerlo así),
desafortunadamente, muchas veces dejamos que nuestra vida cristiana sea algo
totalmente ajeno a nuestra enseñanza, ¡esto es un error grave!, para bendición
de nuestras vidas, Pablo tiene en mente desde el verso 6 lo que va a decir en el
Cap. 4.6. La oración de Pablo incluye agradecimiento por la salvación de sus
hermanos en Filipos (estoy seguro también que, al igual que nuestro Señor
Jesucristo (Jn. 17.20) Pablo oró también por las otras congregaciones sobre
estas mismas cosas) y también está considerando la seguridad de la salvación
de Dios (Jud. 24), esta es una verdad dentro de la doctrina de la soteriología
(la doctrina de la salvación). Dios no sólo nos da libertad del pecado, sino
también nos preserva para continuar una vida de santidad hasta el final. El
Teólogo Louis Berkhof define la doctrina de la perseverancia de la siguiente
manera: ‘Es, hablando en forma estricta, no el hombre sino Dios el que
persevera. La perseverancia puede definirse como aquella continua operación
del Espíritu Santo en el creyente, mediante la cual la obra de la gracia divina
que ha empezado en el corazón se continúa hasta llegar a ser completa.’ 17

Podemos definirla a través de la Escritura: (Jn. 10. 27-29; Ro. 11.29;


2 Tes. 3.3; 2 Tim. 1.12; 4.18; Ro. 8. 38,39)18

Esta doctrina es muy importante para el Apóstol Pablo y debiera ser


importante para nosotros, ya que nuestra comunión es perfecta cuando
entendemos el privilegio de haber sido salvados y que esta salvación tiene una
repercusión eterna. Hemos escuchado muchas veces que pensar de esta manera

17
[CITATION Lou161 \p 654 \l 3082 ]
18
[CITATION Lou161 \p 655 \l 3082 ]
es negativo, ya que puede hacernos “confiar” de nuestra salvación y vivir vidas
inmorales; no obstante (como hemos visto y, en otra ocasión observaremos),
quien viva una vida inmoral siendo consciente de su salvación nunca fue salvo.
Concuímos este estudio con las siguientes palabras:

‘La negación de la doctrina de la perseverancia prácticamente hace


que la salvación del hombre dependa de la voluntad humana más bien que de
la gracia de Dios. Esta consideración no tendrá efecto sobre quienes
participan del concepto pelagiano de la salvación como autosotérico – y es
grande su número- pero ciertamente lo tendrá sobre aquellos que se glorían
en una salvación por gracia. La idea es que, aunque el hombre sea traído al
estado de gracia mediante la operación del Espíritu Santo nada más, o por la
operación conjunta del Espíritu Santo y la voluntad del hombre, queda
solamente sobre el hombre continuar en la fe, o dejarla, según le parezca
mejor. Esto hace que la causa del hombre resulte muy precaria y hace
imposible para él alcanzar la seguridad bienaventurada de la fe. En
consecuencia, es de importancia definitiva sostener la doctrina de la
perseverancia. En las palabras de Hovey: “Será una fuente de gran consuelo
y poder, - un incentivo a la gratitud, un motivo para el sacrificio propio y una
columna de fuego en la hora de peligro.”19

Cuando se refiere al día de Jesucristo, MacArthur menciona:

‘Por otro lado, la expresión escatológica el día de Jesucristo también


se refiere claramente al tiempo en el cual los creyentes serán glorificados,
una vez que su salvación se complete y perfeccione (1 Co. 3:10-15; 2 Co.
5:10). Es el mismo “día de Cristo” que menciona Pablo varias veces en
Filipenses, el día para el cual los cristianos deben prepararse con una vida

19
[CITATION Lou161 \p 658 \l 3082 ]
sincera e irreprensible (1:10) y “asidos de la palabra de vida” (2:16). En su
primera carta a la iglesia en Corinto, el apóstol se refirió a él como “el día de
nuestro Señor Jesucristo” (1 Co. 1:8), y en su segunda carta lo llamó “el día
del Señor Jesús” (2 Co. 1:14). En cada caso, aparecen los nombres Jesús o
Cristo (en lugar de Señor), y se refiere al tiempo en el cual los creyentes
participarán plenamente de la justicia perfecta del Señor, cuando “Cristo sea
formado en [ellos]” (Gá. 4:19), y “[ellos sean] manifestados con él en
gloria” (Col. 3:4).’20

Es entonces, la gratitud por nuestra salvación una actividad que


debemos compartir en cada ocasión con aquellos que comparten nuestra fe,
para que conozcamos cuál es nuestra vocación (1. Co. 1. 26-27).

El equilibrio que perfecciona a los Santos.

Tengo que confesar que no soy completamente fan de las películas en


3D, ni siquiera los anteojos de realidad virtual me llaman mucho la atención.
Considero que son maneras en las que el hombre se aparta cada vez más de la
sociedad. Para ver una película en 2D es únicamente necesario tener buena
visión, si carecemos de ella podemos tener anteojos que nos ayuden a mirarlas
sin perder el contacto visual con las personas que comparten ese momento con
nosotros: ‘Las gafas activas son la solución. Este tipo de gafas incorpora un
sensor infrarrojo que sincroniza las imágenes que se alternan en la pantalla
de modo que el ojo izquierdo solo ve la perspectiva izquierda y el derecho la
derecha. En realidad el sensor infrarrojo simplemente sincroniza la imagen
que debe visualizarse para cada ojo, los verdaderos causante de la
visualización o no de la imagen son los cristales LCD que contienen las gafas
y el obturador activo que alterna rápidamente las imágenes en la pantalla. El

20
[CITATION Joh12 \p 23 \l 3082 ]
parpadeo y cambio de imagen de uno a otro ojo se produce a tal velocidad
que el cerebro no consigue darse cuenta del cambio y lo interpreta como una
única imagen tridimensional.’21

Mi objetivo no es hablar de la evolución que ha tenido la industria con


estos objetos, es una analogía. Si nos hemos quitado las gafas en medio de la
película, podemos ver la película, pero de forma distorsionada, al igual que si
unas gafas de realidad virtual no están bien colocadas, carecemos de tener una
buena experiencia.

V. 9. Ya hemos mencionado anteriormente que la vida de Pablo era


magníficamente ejemplar en cuanto a una vida piadosa. Era un hombre que
comprendió su llamado. Tenía una gran necesidad por orar, por cumplir el
mandato divino de Dios. MacArthur menciona:

‘Las más hondas aspiraciones de un corazón lleno del Espíritu por la honra a
Dios y la bendición de los hombres, encuentran su expresión natural en la
oración’ 22

Pablo expone el cometido de su oración en los siguientes versos y cuál será el


resultado de su oración. La oración por los creyentes no es simplemente un
requerimiento de parte de nuestro Señor Jesús (Lc. 18.1) Sino es un deseo
genuino del corazón que se encuentra en muchos imperativos expuestos en la
Escritura (Ro. 12.12; Fil. 4.6; 1 P. 4.7) Estas oraciones incluyen personas no
creyentes (1 Ti. 2. 1-2; Ro. 13. 1-7; 1 P. 2. 13-17). La primer motivo de su
oración es El Amor.

¿Cómo podríamos caracterizar el Amor?

21
[ CITATION Flo \l 3082 ]
22
(MacArthur, Comentario MacArthur del Nuevo Testamento 'Filipenses', 2012)
El Amor, como se define en el texto griego es ‘la palabra característica del
cristianismo’23. En este caso, podremos considerar primeramente que el
verdadero amor proviene únicamente de Dios (Ef. 4.32-5.2; 5.25-33). El Amor
del que pablo habla no es un amor que excluye a Dios de su ecuación, ya que
Él es el proveedor y sustentador de ese amor. Volviendo a la analogía que
hicimos anteriormente, imagines que el Amor son las gafas con las que
necesitamos ver la película. Esa película la podemos comparar con los
mandamientos, con el conocimiento que podemos tener de la palabra.

Si relacionamos el amor con las gafas, es innecesario que se utilicen


por fuera de una sala de cine, son inútiles. No quiero decir con esto que el
amor es inútil, siempre es útil, pero muchas veces confundimos el amor con
las emociones. Debemos tener un equilibrio perfecto (que sólo puedo
ayudarnos Dios a obtenerlo) entre el Amor y el conocimiento. Recordemos que
el conocimiento sin amor no es útil (1 Co. 13.2; 8.1). Pero tener sólo amor es
también contraproducente, Hendriksen menciona: ‘Una persona que posee
amor pero que carece de discernimiento, puede mostrar mucho ardor y
entusiasmo y entregarse a toda clase de empresas. Sus motivos pueden ser
dignos y sus intenciones honorables, y sin embargo podría estar haciendo más
daño que bien, y corre el riesgo de ser extraviado doctrinalmente.’ 24

Si el conocimiento doctrinal no fuera importante, no habría la


necesidad de que Pablo escribiera tan excelente teología compactada teórica y
prácticamente que encontramos en la carta a los Romanos, ni la aplicación del
conocimiento de iglesia en el libro de Efesios, ni la conducta correcta a cerca
de la gracia de Dios en Gálatas. Es claro que el cristiano tiene que ejercitarse
en el estudio de las Escrituras, pero con Amor: ‘Con la bendición de Dios, tal

23
[CITATION WEV07 \p 48 \l 3082 ]
24
[CITATION Wil06 \p 74 \l 3082 ]
discernimiento agudo de la maravillosa revelación redentora de Dios
producirá gratitud siempre en aumento, la cual, a su vez, acrecentará la
provisión y el valor de la calidad del amor a Dios y a la hermandad’ 25

Tenemos que abrazar estas dos verdades con amor y compasión. Con
agradecimiento y siempre orando por los demás y por nosotros mismos. Para
que sea el Señor abriendo nuestro entendimiento siempre de la mano del Amor
que sólo Él puede proveer.

25
[CITATION Wil06 \p 73 \l 3082 ]

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