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Facultad de Medicina
Nutrición Área Madre
Se ha demostrado que existe una relación entre las variaciones del peso materno
generalmente un aumento; alrededor de las diversas etapas del embarazo y el crecimiento
lineal del feto (longitud de la corona al talón para la edad gestacional). Es así que se ha
evidenciado que el mal estado nutricional de la madre por un consumo de micronutrientes
que no satisfacen las demandas, genera graves repercusiones en la talla y peso del recién
nacido, lo que luego se agravará meses o años posteriores al nacimiento predisponiendo al
bebé a enfermedades en la edad adulta. Si esto se detecta tempranamente se puede controlar
con la supervisión de la madre durante los 2 primeros trimestres del embarazo e incluso
luego del parto en los primeros meses de vida.
Una de las maneras para evaluar el estado nutricional de la gestantes es mediante el cálculo
del IMC; por lo tanto una mujer que comience un embarazo con un IMC menor a 18.5 es
decir con bajo peso, presentaran una ganancia de peso de 12.5 a 18 kg durante su embarazo,
en comparación a una mujer que inicie su embarazo con un IMC mayor a 30 donde su
ganancia de peso será de 6 a 6,5 kg. Por lo tanto se podría interpretar que mientras más sea
el peso de la mujer menor será su ganancia de peso durante el embarazo.
Pontificia Universidad Católica del Ecuador
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Nutrición Área Madre
Se estima que por cada kilogramo de incremento de peso materno, el feto incrementará 55
gramos. En cuanto a la ganancia de peso materno este es mayor durante el segundo y tercer
trimestre del embarazo, ya que son los periodos en los que existe un mayor desarrollo y
crecimiento fetal. Por tanto la mujer embarazada debe llevar una adecuada alimentación, ya
que si la ganancia de peso rebasa los límites establecidos (6-18 kg), podría resultar en una
macrosomía fetal (peso al nacer mayor de 4500g) causando esta problemas en el parto y
problemas futuros en la salud del recién nacido.
También hay que tomar en cuenta el estado nutricional después del embarazo donde incluso
la mujer tendrá requerimientos nutricionales más exigentes ya que debe cubrir una cuota
energética mucho más alta que sería de 700 kcal en el primer semestre y 500kcal en el
segundo semestre adicionales a su gasto energético diario; esto debido a la lactancia.
No solo la historia nutricional materna afecta el peso del recién nacido, sino un conjunto
integrador de factores que van a modificar el crecimiento fetal como: el medio ambiente,
hormonas y factores metabólicos maternos, la presencia de otros fetos, factores genéticos,
estructura y funcionamiento placentario y sexo del feto; pues el varón en el momento del
nacimiento pesa entre 150 y 200 gramos más que la mujer.