pinturas. Ideé un ejercicio que abarcaba la estructura básica del color, combinando la percepción correcta de los colores y la manipulación del color tomando en cuenta sus tres atribu- tos: color o matiz, valor e intensidad. El ejercicio era difícil pero interesante, y comprobé que los alumnos comenzaban a comprender de verdad cómo ver y hacer las mezclas para obtener los colores. Pero la principal sorpresa llegó cuando los alumnos ter- minaron el ejercicio, que había sido ideado únicamente como instrumento didáctico. Los cuadros resultantes eran asombro- samente bellos, un despliegue de colores de una armonía mara- villosa y satisfactoria a la vista. Obtuve el permiso para exhi- bir esos cuadros en la sala de exposición pública de la escuela de arte, y dos de los cuadros fueron comprados de inmediato, acontecimiento extraordinario con obras de estudiantes. Analizando los cuadros llegué a comprender que su belleza venía de mezclar colores en una relación armoniosa que excluía la posibilidad de añadir cualquier color inoportuno o chocante. Además, el método había obligado a los alumnos a incluir colores de baja intensidad, colores que los novatos sue- len evitar, por considerarlos turbios o apagados. Sin embargo, mezclados adecuadamente en relación con los colores vivos o limpios, son justamente esos tonos los que ofrecen apoyos ricos, resonantes, en una composición de color. Después de esto, los informes de los alumnos que ya habían comenzado a pintar fueron uniformemente positivos. Me quedó claro que el método que había ideado daba resul- tado, al dar libertad a los alumnos para explorar el color, incluso el color discordante, a partir de una firme base de com- prensión del color armonioso. En los capítulos siguientes, por lo tanto, vamos a usar las teorías del color existentes, tal como han sido incorporadas en el conocimiento práctico de los pin- tores, avalado por el tiempo, pero en lo que se refiere al uso del color el énfasis estará en «lo que da resultado». El siguiente paso es adquirir un vocabulario efectivo del color, vocabulario que es esencial para ver, identificar y mezclar los colores de forma que representen lo que se percibe.