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2.
El
interés
del
lugar
de
origen
de
destino
y
los
diferentes
caminos
Todos
tenemos
nuestras
preferencias
cuando
se
trata
de
elegir
una
ruta
para
ir
a
un
sitio.
El
atractivo
del
paisaje
es
una
razón,
otra
es
el
estado
de
la
carretera,
o
lo
que
podamos
ganar
en
tiempo
si
elegimos
ir
por
un
sitio.
3.
Conocimiento
de
los
caminos
El
ir
por
un
sitio
que
conocemos
produce
seguridad.
Un
delincuente
se
siente
más
confiado
si
elige
una
zona
que
conoce
bien
para
vigilar
a
sus
posibles
víctimas,
y
donde,
eventualmente,
pueda
esconderse
para
agredirlas
y
luego
abandonar
el
cadáver
en
caso
de
un
asesinato.
4.
Número
y
tipo
de
obstáculos
Las
barreras
geográficas
influyen
sobre
el
camino
a
elegir,
así
como
los
puntos
donde
alguien
puede
esperar
que
haya
controles
Carabineros
o
de
la
Policía
civil.
5.
Rutas
alternativas
Si
sólo
existen
unas
pocas
rutas
importantes
en
una
ciudad
o
comunidad,
un
delincuente
aprenderá
rápidamente
a
valorar
las
diferentes
opciones
que
cada
una
le
ofrece
para
sus
actividades
criminales.
Si
este
número
aumenta,
la
investigación
se
complica,
porque
intervienen
otros
factores
en
su
elección,
como
el
riesgo
de
ser
detectado
o
la
rapidez
con
la
que
es
posible
huir.
6.
Mapas
mentales
Todos
tenemos
un
“mapa
mental”,
es
decir,
una
imagen
cognitiva
de
los
lugares
de
nuestro
ambiente
que
hemos
ido
elaborando
mediante
nuestras
actividades
diarias
y
otras
experiencias,
junto
a
nuestra
casa,
el
lugar
de
trabajo,
zonas
de
comercio
y
ocio,
etcétera.
La
idea
central
de
estos
mapas
cognitivos
es
que
los
delincuentes
también
generan
sus
imágenes
mentales
de
acuerdo
a
sus
actividades
rutinarias.
Las
características
de
la
escena
del
crimen
son
los
elementos
distintivos
de
un
escenario
criminal,
puestos
en
evidencia
por
las
decisiones
de
comportamiento
del
delincuente
con
respecto
a
la
ubicación
de
la
víctima
y
del
delito,
y
su
subsiguiente
significado
para
el
delincuente.
La
investigación
de
la
escena
del
crimen
es
el
corazón
del
método
de
trabajo
del
profiling.
Se
basa
en
el
mismo
principio
de
toda
investigación
criminal:
cuando
un
criminal
interacciona
con
una
víctima,
hay
algo
de
él
que
se
transfiere
a
ella
o
al
resto
del
escenario,
así
como
del
escenario
o
la
víctima
hacia
él.
Es
el
famoso
principio
de
Locard,
uno
de
los
grandes
nombres
de
la
ciencia
forense.
Sólo
que
nosotros,
como
ya
sabemos,
tenemos
como
objeto
de
análisis
primario
las
huellas
psicológicas
o
de
comportamiento.
Proteger
la
identidad
del
delincuente:
Ello
se
logra
llevando
un
pasamontañas
en
la
cabeza,
guantes,
matando
a
un
posible
testigo
del
crimen,
cubriendo
los
ojos
de
una
víctima
de
violación,
etcétera.
Consumar
con
éxito
la
agresión:
(Estrategias
varias)
llevando
una
cuerdas
para
inmovilizar
a
la
víctima,
portando
un
arma
para
intimidarla,
buscando
un
lugar
donde
nadie
pueda
ver
el
“asalto”,
etcétera.
Facilitar
la
huida
tras
la
agresión:
Por
ejemplo,
mediante
el
uso
y
selección
de
un
vehículo,
inmovilizando
a
la
víctima
para
que
no
pida
ayuda
hasta
pasado
un
cierto
tiempo,
etcétera.
La
víctima
es
la
última
persona
en
“presenciar”
el
crimen.
Si
logra
sobrevivir,
la
información
que
puede
proporcionar
es
muy
relevante;
si
fallece,
son
los
hechos
de
la
escena
del
crimen
los
que
deben
de
narrar
la
historia.
En
cualquier
caso,
el
perfilador
debe
averiguar
todo
lo
que
pueda
acerca
de
las
personas
agredidas,
porque
se
trata
de
una
parte
esencial
dentro
del
proceso
de
profiling
Existen
dos
partes
separadas
pero
interdependientes
en
esta
definición.
En
primer
lugar,
está
el
aspecto
general
de
la
firma.
Este
aspecto
general
representa
los
temas
emocionales
o
psicológicos
que
el
delincuente
satisface
cuando
comete
el
delito.
Estos
incluyen,
entre
otros,
los
siguientes
tipos
de
motivos:
lucro;
ira,
venganza;
ganar
confianza,
experimentación;
deseo
de
afirmarse,
de
arrogarse
el
derecho
de
algo;
y
el
sadismo.
El
tema
general
de
la
firma
se
refiere,
por
consiguiente,
al
motivo
del
crimen.
La
segunda
parte
de
la
firma
del
delincuente
la
comprenden
los
aspectos
que
son
manifestados
por
las
conductas
de
esa
firma.
Las
conductas
de
la
firma
son
esos
actos
cometidos
por
un
delincuente
que
no
son
necesarios
para
cometer
el
delito
pero
que
denotan
las
necesidades
emocionales
o
psicológicas
del
delincuente,
es
decir,
denotan
esa
motivación
(aspecto
general)
antes
reseñado.
Definición
de
Motivo:
Para
Turvey,
un
motivo
es
un
conjunto
de
necesidades
emocionales,
psicológicas
y
materiales
que
impelen
a
una
conducta
a
realizarse
con
objeto
de
satisfacer
tales
necesidades.
Si
bien
no
es
necesario
establecer
la
motivación
del
delincuente
para
que
resulte
condenado
por
los
tribunales,
esa
falta
es
un
error
de
la
investigación
criminal,
o
al
menos
un
aspecto
de
la
misma
que
permanece
incompleto.
Establecer
la
motivación
del
delincuente
presenta
una
serie
de
ventajas
para
el
equipo
de
investigación:
1.
Reduce
el
grupo
de
sospechosos
a
aquellos
sujetos
con
un
motivo
concreto.
2.
Ayuda
a
vincular
diferentes
delitos
con
un
motivo
semejante.
3.
Junto
con
otra
evidencia
de
la
investigación,
establecer
el
motivo
puede
proporcionar
una
orientación
sobre
la
identidad
del
delincuente.
4.
Junto
con
otra
evidencia
de
la
investigación,
establecer
el
motivo
puede
proporcionar
una
orientación
sobre
el
estado
mental
del
delincuente.
5.
En
otros
casos,
el
motivo
puede
ayudar
a
determinar
si
de
hecho
un
crimen
determinado
ha
ocurrido
realmente
(por
ejemplo,
cuando
no
aparece
el
cuerpo
de
alguien
que
puede
haber
sido
asesinado,
o
—en
otro
ejemplo—
establecer
la
posibilidad
de
un
suicidio).
1. Perfil
Geográfico.
2. Escena
del
Crimen.
3. Modus
Operandi.
4. Victimología.
5. Modalidades
de
Muerte.
6. Firma
del
o
los
Agresores.
7. Motivación
del
o
los
Agresores.
8. Conclusión
(Tipo
de
crimen
y
de
Agresores)
Jorge
Matute
Johns,
Universitario
visto
con
vida
por
última
vez
el
20
de
noviembre
de
1999
en
la
discoteca
La
Cucaracha
situada
para
efectos
legales
en
la
Jurisdicción
de
la
comuna
de
Talcahuano,
ciudad
de
Concepción,
Región
del
Bio
Bio,
Chile.
el
12
de
febrero
de
2004-‐
tras
el
“accidental”
hallazgo
de
las
osamentas
en
el
kilómetro
22,6
de
la
Ruta
de
la
Madera.
Nunca
fue
incinerado
en
el
Hospital
Clínico
Regional
ni
enterrado
bajo
toneladas
de
cemento,
como
dijo
el
párroco
Andrés
San
Martín,
el
26
de
febrero
de
2003
en
su
homilía.
El
agustino
colgaría
después
los
hábitos.
4
Gobiernos
Democráticos.
(Frei,
Lagos,
Bachelet),
actulamente
en
pleno
gobierno
del
presidente
Piñera.
final
del
año
2000:
La
viuda
de
Martínez,
varios
meses
más
tarde
y
entre
las
ropas
institucionales
de
su
marido
asesinado
que
fueron
devueltas
por
sus
colegas,
encontró
casualmente
una
abertura
entre
el
forro
externo
e
interno
de
su
chaqueta
de
servicio,
que
en
su
interior
contenía
una
libreta
con
los
nombres
de
los
3
sicarios
del
bombero
asesinado
y
un
mapa
con
la
ubicación
casi
exacta
donde
aparecería
Jorge
Matute
Johns
4
años
Más
tarde
en
el
camino
a
Santa
Juana.
Mismo
lugar
que
señalo
el
bombero
asesinado
por
“sicarios
inimputables”.
Noviembre
de
2000:
Familia
de
Jorge
Matute
Johns
acude
a
la
Comisión
Interamericana
de
Derechos
Humanos
(CIDH)
y
amenaza
con
demandar
al
Estado
ante
la
Corte
Interamericana
de
derechos
humanos
por
considerar
que
en
el
trágico
destino
de
Jorge
habían
participado
de
agentes
del
Estado
Chile.
18
de
mayo
2007:
Psicólogo
forense,
Cristián
Araos
Diaz,
luego
de
NO
ser
recibido
por
el
juez
titular
de
la
causa,
hace
entrega
los
resultados
de
una
auditoria
forense
a
la
Presidenta
de
la
republica
de
Chile,
Michelle
Bachelet.
En
ella
se
acusa
el
accionar
corrupto
(drogas)
de
policías
en
la
escena
del
crimen,
los
nombres
de
algunas
autoridades
y
una
coartada
que
se
acredita
con
la
simple
comparación
entre
las
declaraciones
de
un
grupo
de
funcionarios
de
la
Cucaracha
en
las
que
describen
con
lujo
de
detalles
2
agresiones
(sangramiento
incluido)
entre
uno
de
los
guardias
y
un
supuesto
joven,
que
en
el
mismo
proceso
declara
nunca
haber
sido
golpeado
por
nada,
ni
por
nadie.
(Sujeto
suplantado;
Jorge
Matute
Johns)
4
junio
de
2007:
La
oficina
de
la
presidencia
de
la
República
a
través
de
la
asesora
de
Gestión
del
Gabinete
Presidencial
contesta
el
acuso
de
recibo
por
parte
de
la
Presidenta.
25
de
septiembre
de
2009:
El
psicólogo
Forense
Cristián
Araos
Diaz,
luego
de
ser
emplazado
públicamente
por
los
familiares
del
occiso
JMJ,
revela
públicamente
los
nombres
de
las
autoridades
poderosas
que
figuran
en
la
lista
para
el
narcotráfico
que
aparece
en
dos
procesos
distintos
(Matute
y
cartel
del
carbón),
la
misma
que
el
ingeniero
(QEPD)
le
quitó
a
la
pareja
del
narcotraficante,
hoy
con
cambio
legal
de
identidad.
Nadie
de
los
nombres
y
apellidos
que
ahí
se
mencionan,
a
la
fecha,
han
sido
siquiera
citados
a
declarar
en
circunstancias
que
existe
prueba
y
mérito
para
que
así
sea.
(Obsérvese
la
diferencia
de
trato
mediático,
policial
y
jurídico
entre
este
grupo
y
los
7
jóvenes
ex
procesados,
y
sus
familiares)
1
de
octubre
de
2009:
El
ex
intendente
de
la
región
del
Bio
Bio
demanda
por
injurias
graves
con
publicidad
al
Psicólogo
forense,
Cristián
Araos
Diaz.
El
19
de
agosto
del
2010
y
a
solicitud
del
QUERELLANTE,
Araos
acepta
acuerdo,
por
una
cuestión
de
estrategia
Jurídica,
de
pedir
disculpas
ante
el
Juez
por
la
INTERPRETACIÓN
de
sus
palabras.
17
de
octubre
de
2009
(20:16
hrs.)
se
establece
a
través
de
la
red
social
de
Facebook
el
primer
contacto
de
varios
(inclusive
en
terreno)
entre
el
psicólogo
forense
Cristián
Araos
Diaz
y
oficiales
de
Carabineros
en
servicio
activo.
Textual
“Puedo
ratificar
todo
lo
que
tu
has
dicho,
pero
necesito
saber
cuales
serian
mis
garantías,
somos
varios
los
que
estuvimos
ahí.
Ayúdame
a
ayudarte,
yo
arriesgo
mucho
y
mis
colegas
también,
tenemos
grados
y
cargos
los
que
quedamos…”
5
de
febrero
de
2010:
El
actual
Secretario
General
de
la
Organización
de
los
Estados
Americanos
demanda
por
injurias
graves
y
calumnias
con
publicidad
al
Psicólogo
Forense
Cristián
Araos
Diaz.
El
22
de
octubre
de
2010,
Araos
RECHAZA
propuesta
de
acuerdo
solicitada
por
el
QUERELLANTE
y
se
continua
el
juicio
en
su
contra
fijado
para
el
mes
de
Enero
de
2011.
Talcahuano.
Discoteca
La
Cucaracha.
Coronel.
3ra.
Comisaria
de
Coronel.
Camino
a
Santa
Juana.
Lugar
hallazgo
de
JMJ,
Parcela
Juan
León.
Concepción.
1ra.
Comisaria
de
Concepción.
Oficinas
de
OS-‐7.
Experto,
profesional,
propio
de
especialistas
en
ciencias
jurídicas,
policiales
y
sobre
manejo
comunicacional.
Utilización
de
operaciones
psicológicas
de
inteligencia
militar
(“OPSIS”
negras)
en
contra
de
la
masa
crítica
civil.
Se
amañan
las
pruebas.
Se
anula
al
verdadero
investigador,
Mayor
“Andrés
Ovalle”.
Se
desintegran
y
aislan
comunicacionalmente
los
hechos.
Se
selecciona
una
Historia
pricipal
para
el
mensaje
público
“Los
Araos
v/s
los
Matute”
“Los
ricos
contra
los
pobres”
“Los
poderosos
contra
los
débiles”
Se
anula
la
investigación,
indeterminando
materialmente
el
objeto
de
análisis,
la
escena
del
crimen,
el
empadronamiento
de
adultos,
etc..
Se
genera
caos
en
la
Información
(mediante
pistas
falsas)
para
generar
un
seudo
leyenda
urbana
tendiente
a
la
elaboración
masiva
de
falsas
teorías
e
hipótesis
populares.
Persecución
de
los
familiares
de
los
ex
jóvenes
procesados
e
invención
de
delitos
falsos
para
reforzar
un
arquetipo
de
“mafia
familiar
local”.
Selección
de
Chivos
expiatorios
(7
jóvenes
procesados
de
entre
17
y
19
años).
Manejo
comunicacional,
para
proyectarlos
socialmente
junto
a
sus
familias,
cómo
matones,
pandilleros
con
recursos
y
organizados
.
Se
presenta
una
“ teoría
a
Pedido”
por
un
funcionario
policial
enviado
directamente
por
su
jefe
que
también
figura
en
la
lista
del
narcotráfico.
Utilización
mediática
de
los
“desmentidos”
se
anulan
hechos
con
dichos.
(Sesgo
de
credibilidad
por
investidura)
***
Tanto
las
cortes
de
Apelaciones
de
Concepción,
Suprema
de
Chile
y
ministros
que
sustanciaron
la
causa,
por
unanimidad
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